ÉTICA DE LA TIERRA Y ÉTICA PLANETARIA La ética de la tierra se caracteriza por tener como base la relación entre la sociedad contemporánea y la naturaleza, abarcando la consideración ética hacia “los suelos, las aguas, las plantas, los animales o colectivamente: la tierra”; proponiendo Leopold, un giro ético que cambia el papel de la especie humana de conquistador de la comunidad de la tierra al simple miembro y ciudadano de ella. La ética es la parte razonable de los homo sapiens, contamos con una parte racional, la cual nos ha impulsado a crear ciencia y tecnología, pero también tenemos otra parte racional donde todavía nuestro razonamiento es cavernícola con las decisiones. Esta conciencia razonable debe de ser marcada por obligaciones, cambiar la actual filosofía de valores. El problema con el que nos enfrentamos es extender la conciencia social desde los individuos a la tierra. La humanidad ha desarrollado diversas formas de relacionarse entre sí y con la naturaleza, de modo que existen varias estrategias para apropiarse de ella (González 2011). Al paso de los años ha predominado la mirada antropocéntrica que han tenido sobre la naturaleza, esto viene a través de un sistemas de relaciones sociales especifico, considerando que la tierra como suelo tiene como única función el producir mercancías. Una relación de producción que se establecen los hombres en tanto a la producción, la distribución, el intercambio y el consumismo que es un proceso de relación que conecta a la humanidad como apropiada y a la humanidad como productora. Por otro lado se viene considerando la tierra como una biocenosis y su función como algo más completo preocupándose por no modificar el medio natural; gestionar la fauna, tendiendo a recuperar especies autóctonas amenazadas.
Comprendiendo así que el egocentrismo despierta una conciencia ecológica amigable con el medio ambiente y una forma de cambio de estilo de vida, mientras que
el
antropocentrismo
predomina
que
la
naturaleza
es
construida
simbólicamente como recurso, como único motivo de economía. Yo considero que es muy importante tener presente cada uno de los tipos de éticas. en especial la del cuidado, ya que a partir de esta naturaleza humana que se traduce en el estar pendiente de los demás, así como el procurar que todos se encuentren bien, nacen lo que son las demás éticas. También en el caso de la ética de la responsabilidad se requiere del cuidado y la responsabilidad del destino de la humanidad y de la tierra, ya que se busca que las acciones siempre sean benéficas para con el medio ambiente y para con los demás, tomando en cuenta la responsabilidad que tienen los humanos de atender los asuntos que se presentan en la realidad. Se requiere que las personas tomen en cuenta a los excluidos, para poder incluirlos a la sociedad y que sean tomados en cuenta al momento de proponer soluciones a los problemas que nos rodean. También, el que se cuide el planeta para que las generaciones futuras puedan tener un ambiente favorable para la vida, cuidando también los derechos que tienen todos los seres vivos que la habitan. En el caso de la ética de la liberación, trata de lo mismo, de tomar en cuenta a aquellos que no juegan un rol aparentemente importante, al no jugar un rol activo en la sociedad. Sin embargo, para poder garantizar la justicia, se debe de tratar de ayudar a que los excluidos se liberen y reintegren en la sociedad. Al considerar la ética holística, se puede comprender que todo lo que hacemos está conectado de alguna manera, y que así mismo, todos debemos de unirnos para poder trabajar en conjunto y así seguir avanzando en la sociedad para garantizar un futuro estable, cuidando de los demás para que todos formen parte de esta.
Si reflexionamos de acuerdo a estos dos lecturas vemos que tienen en relación la perspectiva de las éticas y como cada una de ellas ayuda a un bien colectivo, tanto para coexistir entre ser humanos y entre la naturaleza, con cada una de sus niveles de importancia y que cada uno hacemos un papel muy importante para un bien tanto para el ahora como para el futuro. Si se tiene en cuenta que la tierra está viva y no solo en lo espiritual, religioso o en la ética, la misma ciencia nos dice que la tierra es un súper organismo vivo que da vida, y como todo ser vivo tiene derechos y debemos de realizar acuerdos internacionales para proteger los derechos de la tierra, como ya lo han implementado en algunos países de Latinoamérica, Bolivia y ecuador teniendo un apartado para los derechos de la madre tierra. No basta con implementar más educación, sino que el contenido de la educación debe ir dirigido por este camino. Obteniendo como único remedio a la vista para esta situación del neoliberalismo la obligación ética por parte de cada uno de los “propietarios privados”.