INSTITUTO UNIVERSITARIO DE OPTOMETRIA MICROBIOLOGIA PROF. Marielba Velandia
Infecciones Oculares Las infecciones oculares que se atienden en la consulta de Atención Primaria son las que afectan a las estructuras externas del ojo como conjuntivitis, queratitis o infecciones externas (piel, glándulas,…). Su diagnóstico suele ser fácil y la respuesta al tratamiento es buena. Hay que tener presente una regla importante que es evitar el uso de colirios con esteroides y fármacos que dilaten la pupila salvo que exista prescripción por un especialista. Podemos dividir estas infecciones en: Infecciones de anexos (párpado y sistema lagrimal) y tejidos blandos periorbitarios: Chalazion, orzuelo, dacrioadenitis y dacriocistitis, blefaritis y celulitis. Conjuntivitis. Queratitis. Infecciones profundas (uveitis, endoftalmitis, retinnitis): No se tratarán aquí, ya que deben ser evaluadas por un especialista en oftalmología.
CONJUNTIVITIS Concepto: No es más que la inflamación aguda de la conjuntiva, por un periodo menor de 4 semanas. El “ojo rojo” es uno de los síntomas más frecuentes visto en la consulta de atención primaria. La etiología más frecuente es infecciosa, bacteriana o vírica.
La conjuntiva Se trata de un tejido más o menos transparente, situado en “lo blanco del ojo”, lo que rodea a la parte de color (el iris). Realmente, la conjuntiva no es blanca, lo blanco es el tejido que está detrás, la esclera. Lo que es visible a simple vista de la conjuntiva son sus vasos sanguíneos, esas “venillas” que vemos más o menos serpenteantes en el globo ocular.
Siendo estrictos, la conjuntiva no pertenece al globo ocular en sí : las cubiertas externas del ojo son la córnea y la esclera. La conjuntiva está por encima de la esclera; digamos que es más externa todavía. Por tanto, los procesos que afectan a la conjuntiva pueden alterar la superficie ocular, pero no el ojo en sí. Habitualmente no cursan con la misma gravedad que un proceso interno del globo ocular (como uveítis, glaucoma, desprendimiento de retina) o de las auténticas cubiertas externas (queratitis, etc). La conjuntiva es un tejido blando, bastante delgado, con buen aporte de sangre, cuya misión principal es dar soporte a la superficie ocular, manteniendo activamente la lágrima y ofreciendo una superficie homogénea entre el ojo y los párpados, de manera que se minimice la fricción entre ambas superficies cuando parpadeamos o movemos el globo ocular. Porque una cosa que muchos no saben es que la conjuntiva no está sólo tapizando el ojo: se continúa en la parte interior de los párpados, de manera que al parpadear, se desliza conjuntiva sobre conjuntiva, o conjuntiva sobre córnea. Esa es la causa de que en la exploración ocular, a veces tenemos que dar la vuelta al párpado superior, de manera que la conjuntiva de ese párpado queda expuesta para que la veamos. En algunas conjuntivitis la conjuntiva del párpado superior conforma unas lesiones características que nos indican la causa del problema.
Función de la conjuntiva Además de la función estructural, la conjuntiva es primera línea defensiva. La superficie del ojo está expuesta al ambiente, agentes químicos, alergias, polvo, pequeños cuerpos extraños, etc. La córnea, el otro tejido que está en la superficie, no tiene vasos sanguíneos ni células encargadas de producir lágrima, de forma que está muy limitada para responder ante una agresión. Es la conjuntiva la que responde a los peligros, modificando la producción de lágrima, aportando células defensivas contra las infecciones, etc. A veces el aumento de volumen no es difuso, sino que forma estructuras separadas con una forma peculiar. En esta fotografía vemos la conjuntiva del interior del párpado superior (o sea, hemos dado la vuelta al párpado para obtener la imagen). Vemos unos engrosamientos en forma de “empedrado”:
Ya que la conjuntiva produce una parte de la lágrima, cuando se inflama modifica esa lágrima de forma que pueda defendernos. En vez de ser básicamente agua y proteínas de pequeño tamaño, la conjuntiva vierte a la lágrima células defensivas y grandes proteínas defensivas. Por tanto, ya no tenemos una lágrima “limpia” que circula como si fuera agua. Se forman residuos más viscosos, que todos conocemos: las legañas.
Realmente no es nada nuevo: cuando tenemos un catarro, se producen “mocos” en la nariz. Las fosas nasales están recubiertas por una mucosa, al igual que el ojo, que está produciendo una secreción limpia, una mucosidad que no notamos porque circula inadvertidamente hacia la garganta. Sólo cuando esta mucosidad aumenta y se hace más densa es cuando notamos los “mocos” y se deslizan por la nariz. Las legañas serían algo parecido, una forma de responder de la conjuntiva ante las agresiones. Aparte de los signos objetivos de la conjuntivitis: ojo enrojecido, legañas, etc, también hay unos síntomas más o menos característicos. Hemos hablado de esa sensación de cuerpo extraño o de roce, por el propio engrosamiento de la conjuntiva. Pero hay más: sensación de “calor”, porque llega más sangre y aumenta la temperatura en esa zona. Puede haber picor, escozor, pesadez, dependiendo de la causa e intensidad de la conjuntivitis.
Etiología Conjuntivitis Infecciosa : -Bacteriana aguda Staphilococcus aureus ,S. epidermidis, Streptococcus pneumoniae , Haemophilus influenzae -Bacteriana hiperaguda ( Neisseria gonorrhoeae y meningitidis ) -Infección por Chlamydia -Viral: Adenovirus. Picornavirus (enterovirus y coxsackie) Herpes simples Tipo I Molluscum contagiosum No infecciosas : Alérgica Tóxica Otras
Conjuntivitis bacteriana aguda También conocida como bacteriana simple, catarral ó mucopurulenta. Es provocada principalmente por el Sthaphilococcus aureus, Streptococcus pneumoniae y Haemophilus influenzae. Representa el 5% del total de las conjuntivitis. Puede ser trasmitida por contacto directo a través de objetos de uso personal, microgotas ambientales ó insectos portadores de gérmenes. Está asociada a la inflamación de las vías respiratorias superiores (coriza, gripe) o con enfermedades exantemáticas como el Sarampión y la Escarlatina.
Cuadro clínico Sensación de arenilla o cuerpo extraño, escozor, fotofobia y enturbiamiento de la visión por las secreciones, puede existir edema intenso. Al principio existe secreción acuosa, más tarde se hace mucoide y en los casos más graves mucopurulenta La secreción por las noches se seca en los párpados e impide abrirlos al despertar . Staphylococcus aureus: Coco Gram (+) en forma de racimos, producen conjuntivitis agudas y crónicas más frecuentes en personas con bases alérgicas..
Streptoccocus pneumoniae: Diplococo gram (+), se caracteriza por provocar conjuntivitis agudas purulentas (principal responsable en los niños ) y en poblaciones cerradas, brotes epidémicos en invierno , suele relacionarse con afecciones del sistema lagrimal.
Haemophilus influenzae Son cocobacilos gram (-) ,es poco común detectarlo como causa de conjuntivitis en niños mayores de 5 años, suele aparecer junto con Otitis e Infección del tracto respiratorio superior. En los niños se sugiere tratamiento antibiótico vía oral . Se aisla en la flora conjuntival entre un 1-4% de los adultos sanos.
Tratamiento: Realizando un exudado conjuntival se puede aislar el germen causal. Higiene extrema, lavados oculares de agua hervida. Colirios antibióticos de amplio espectro Eritromicina, Polimixina B (que asociada a Neomicina presenta acción sinérgica), Sulfas , Gentamicina, Tobramicina. En portadores de lentes de contacto sospecharemos la existencia de Pseudomonas, por lo que son de elección los aminoglucósidos (sobre todo gentamicina o tobramicina) o las quinolonas (ciprofloxacino, norfloxacino, lomefloxacino). Se debe abandonar el uso de los lentes de contacto durante al menos dos semanas tras la desaparición de la inflamación. La solución oftálmica al 1.25% de yodo-povidona es segura y efectiva para tratar en niños, la conjuntivitis bacteriana aguda. Se debe llamar al médico si : Se presenta disminución en la visión Hay dolor ocular excesivo o sensibilidad ante la luz La secreción es espesa, verdosa o similar al pus Conjuntivitis por la bacteria Clamydia trachomatis Es una enfermedad de transmisión sexual asociada a uretritis o cervicitis en el paciente o en contactos sexuales.
También se le llama Tracoma, conjuntivitis granular o Oftalmia egipcia. Esta enfermedad está asociada a la pobreza y falta de medidas higiénicas. Afecta aproximadamente 400 millones de personas en los países subdesarrollados. Puede producir ceguera irreversible.
Síntomas Suele presentarse con exudado acuoso importante, en ocasiones mucopurulento, con folículos en la conjuntiva tarsal. Se inflama el párpado Se produce sensibilidad a la luz. Si no es tratada se daña la conjuntiva o la córnea. Transmisión Es contagiosa y se transmite por contacto directo con la persona infectada o por ciertas moscas que llegan a alimentarse de secreciones de personas infectadas. También por contacto con objetos contaminados, o por contacto con secreciones de nariz o garganta. Los síntomas comienzan de 5 a 12 días después de haber estado expuesto a la bacteria. La afección comienza lentamente como una inflamación del tejido que recubre los párpados (conjuntivitis u "ojo rojo") que, sin tratamiento, puede conducir a cicatrización. Tratamiento Los antibióticos pueden prevenir las complicaciones a largo plazo si se usan al comienzo de la infección y pueden abarcar Eritromicina y Doxiciclina. En ciertos casos, puede ser necesaria la cirugía del párpado para prevenir la cicatrización crónica que, si no se corrige, puede conducir a ceguera. CONJUNTIVITIS VIRAL Adenovirus
La más frecuente es la conjuntivitis virósica causada por el adenovirus, muy contagioso a través de la vía respiratoria o a partir de secreciones oculares. Tiene un periodo de inoculación de 5 a 10 días y la infección dura entre 7 y 14 días. La complicación que puede presentar es una queratitis (inflamación corneal) y a veces suele dejar secuelas.
Síntomas Clínicamente inicia con lagrimeo, enrojecimiento, malestar ocular, fotofobia, primero en un ojo y luego el otro o ambos ojos al mismo tiempo. Tratamiento El tratamiento es sintomático y respecto a la prevención la misma consiste en: lavado meticuloso de las manos, no compartir toallas con el enfermo y desinfección de instrumentos oftálmicos, ya que es muy contagiosa. Su curso es autolimitado. Se puede aliviar con paños fríos, gotas de lágrimas artificiales y ciclopléjico.
QUERATITIS La queratitis es una inflamación o infección de la córnea del ojo. La córnea es la superficie transparente, de forma convexa, que cubre la parte anterior del ojo. La queratitis es un caso de emergencia médica, debido a que el compromiso de una superficie amplia puede producir ceguera.
Causas Existen diversas causas de la queratitis. A continuación se enumeran algunas de las causas más comunes: Bacterias Deficiencia de vitamina A Virus Traumatismos (producidos, generalmente, luego de la inserción de un objeto en el ojo) Hongos Parásitos Síntomas
Dolor y enrojecimiento del ojo Molestias al mirar la luz (fotofobia) Lagrimeo, ojos llorosos o supuración Visión borrosa Sensación de que se ha introducido algún elemento en el ojo
La Queratitis o úlcera corneal es rara a menos que exista algún factor predisponente como: Exógenos: lentes de contacto, trauma. Endógenos: alteraciones del sistema lagrimal, malformaciones, diábetes mellitus, enfermedades del colágeno o tratamiento inmunosupresor o esteroideo Lentes de contacto Es el mayor riesgo, en especial si son blandas y se duerme con ellas o no se quitan en varios días.
Queratitis por microorganismos
Los más frecuentes son: S. aureus P.aeruginosa E. coli K. pneumoniae Serratia sp.
Diagnóstico El diagnóstico se basa en la tinción de Gram y el cultivo del raspado corneal. El tratamiento puede hacerse con antibióticos tópicos como en el caso de la conjuntivitis. Si se sospecha queratitis debe referirse la persona a un médico. Queratitis Herpética Se trata de una queratitis recurrente unilateral que produce una úlcera corneal “dendrítica” con fotofobia y disminución de la visión.
Queratitis herpética El agente causante es el virus Herpes simplex.
El virus del herpes simple es un agente infeccioso común de piel, genitales y la mucosa oral y faringea en humanos, pero también puede causar úlceras corneales y queratitis.
El dolor depende de la profundidad de la úlcera, siendo mayor cuanto más profunda es la úlcera.
Tratamiento
Aplicación tópica de trifluridina al 10% Viradabina o Aciclovir 3% Suele recomendarse el tratamiento tópico con esteroides.
Queratitis por Acanthamoeba La Acanthamoeba es un protozoo ubicuo que se encuentra en el agua y el suelo.
El 70% de las queratitis que produce están relacionadas con el uso de lentes de contacto en personas, en general con mala higiene o se bañan en aguas contaminadas.
Síntomas La clínica que produce es indistinguible de las anteriores y en la mayoría de los casos suelen ser pacientes a los que se ha prescrito tratamiento para una queratitis bacteriana o herpética y no han mejorado Diagnóstico El diagnóstico se basa en la visualización del parásito en el raspado corneal, en la lente de contacto o en el líquido en que está sumergida ésta. Tratamiento El tratamiento es difícil debido a la pobre respuesta. Se realiza con la aplicación tópica de Propamidina al 0,1 % y Neomicina al 5% durante 6 a 12 meses. A veces hay que llegar al transplante corneal para erradicar la infección. Prevención
Es muy importante no usar agua de chorro para lavar las lentes de contacto o su estuche. Se ha aislado Acanthamoeba en casi todas las fuentes de agua, desde duchas hasta baños de agua caliente. No nadar en ríos, lagos, piscinas, etc., con lentes de contacto puestas. Seguir cuidadosamente las instrucciones para el cuidado de las lentes de contacto.