El clima de la Tierra es el resultado del funcionamiento de un sistema dinámico y abierto, alimentado por la energía procedente del Sol (principal motor del sistema climático) y constituido por cinco componentes básicos, estrechamente relacionados e interdependientes: la atmósfera, la hidrosfera, la criosfera, la litosfera y la biosfera. En la estructura del sistema climático, factores como la radiación solar, la forma y movimientos de la Tierra, el reparto de tierras y mares, el relieve, o la composición de la atmósfera son las entradas (los mecanismos o agentes que condicionan el funcionamiento del sistema); la atmósfera y sus movimientos forman la parte central y el mosaico climático del globo constituye la salida. Todas las variables del sistema climático mantienen estrechos vínculos entre sí, articulados a través de diferentes procesos físicos que podríamos sintetizar en tres fundamentales: la radiación, el movimiento del aire y la precipitación El planeta Tierra sólo puede intercambiar energía con el resto del universo mediante flujos de radiación. Estos son básicamente de dos tipos. Por una parte, la radiación solar (de onda corta) que llega a la Tierra, y que es la única fuente significativa de energía para el planeta; una fracción de ésta (cuantificada por el albedo terrestre) es reflejada al espacio. Por otra parte, la radiación infrarroja, emitida por el propio planeta hacia el espacio1 La energía del Sol es muy importante para la Tierra. El Sol calienta nuestro planeta, calentando la superficie y la atmósfera. Esta energía dicta nuestros estados del tiempo. Nuestro clima es afectado en gran medida por la radiación solar que recibe la Tierra. Esta cantidad cambia dependiendo del albedo de la Tierra, que es la cantidad de radiación que reflejan la superficie de la Tierra y las nubes de vuelta al espacio2 La energía solar permite que se ocurran reacciones químicas en la litósfera, de tal manera que, se desarrolla una regeneración de la composición superficial de la tierra, el sol es la fuente principal de energía de la flora del planeta, gracias a ésta, se puede llevar a cabo la fotosíntesis, sin la energía del sol, los cambios graduales en la superficie terrestre no se llevarían a cabo, provocando la degradación de la litósfera y la muerte de los seres vivos Por otra parte, las radiaciones solares interactúan con las capas de la atmósfera ionizándolas, es decir, induciéndoles electromagnetismo, que está relacionado con los diversos fenómenos atmosféricos: formación de tormentas eléctricas, entre otros. Para el clima general de la Tierra hay la comprobación científica de que, en la fase de mayor actividad del Sol durante cada ciclo de 11 años, existe una época de mucho calor (inviernos cálidos) en muchas regiones planetarias. Sucede lo contrario cuando el Sol atraviesa la fase de menor actividad. El clima frío invade gran parte de los continentes de la Tierra3
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«Vocabulario
climático». AEC|ACOMET. Disponible en Consultado 23 de marzo de 2019.
web.com/vocabulario_climatico.pdf 2 3
https://www.windows2universe.org/sun/effect_on_earth.html&lang=sp https://www.voltairenet.org/article124320.html
http://www.acomet-