La lepra es una enfermedad infecciosa de nula transmisibilidad, producida por la bacteria Mycobacterium leprae, descubierta como agente causal del mal por el médico noruego Gerhard Armauer Hansen, debido a lo cual se los denomina, respectivamente, enfermedad de Hansen a una, y bacilo de Hansen a la otra. La lepra fue históricamente incurable, mutilante y vergonzante, al punto de que, entre otras medidas, se decretó en 1909, por demanda de la "Sociedad de Patologías Exóticas, «la exclusión sistemática de los leprosos» y su reagrupamiento en Leproserías como medida esencial de profilaxis. Se sabe que la lepra afecta a la humanidad desde al menos el 600 a. C., y fue bien diagnosticada en las civilizaciones de la Antigua China, Antiguo Egipto e India.1 En 1995, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estimaba que entre dos y tres millones de habitantes seguían permanentemente discapacitados por lepra.2 Aunque las forzadas cuarentenas o segregación de pacientes es infundada e innecesaria —y es considerada no ética— aún se mantienen leprosarios en países como India, Japón, Egipto, Vietnam y República Dominicana. Actualmente se sabe fehacientemente que muchas de esas personas que fueron segregadas en esas comunidades, y presumidos de tener lepra, en realidad acusaban sífilis, que sí es altamente contagiosa. La lepra, que no es contagiosa, tiene a aproximadamente al 95% de la población con inmunidad, y luego de sólo unos días de tratamiento no se sufre más la infección. El estigma social-religioso que se asoció con las formas avanzadas de lepra continúa en muchas regiones, y sigue siendo el mayor obstáculo a la autodenuncia y tratamientos tempranos. Esos tratamientos efectivos recién aparecen a fines de 1930 con la introducción de la sulfona dapsona y derivados. Sin embargo, aparecieron cepas del bacilo de la lepra resistentes a la dapsona, hasta la aparición de la terapia multidroga (MDT) en los 80. Su difusión es muy vasta, pero es más frecuente en los países tropicales o templados. Presenta dos tipos principales: la lepra tuberculoide, que produce grandes manchas hiperestésicas y más tarde anestésicas, y la lepra lepromatosa, que origina grandes nódulos en la piel (lepromas). La progresión de las lesiones es causa de grandes deformaciones. Durante la Edad Media fue una enfermedad muy difundida. El tratamiento de la enfermedad, hoy en día, varía entre seis meses y dos años, según las formas, y se basa en la administración de sulfonas. La última leprosería de Europa se encuentra en Vall de Laguart, en la provincia de Alicante, es el Sanatorio de San Francisco de Borja, más conocido como el Sanatorio de Fontilles. CONTAGIO Por contacto La lepra es una enfermedad poco contagiosa producida por el bacilo Mycobacterium leprae), descubierto por Gerhard Armauer Hansen; en honor a éste, se la denomina técnicamente enfermedad de Hansen. Su difusión es muy vasta, pero es más frecuente en los países tropicales o templados. Presenta dos tipos principales: la lepra tuberculoide, que produce grandes manchas hiperestésicas y más tarde anestésicas, y la lepra lepromatosa, que origina grandes nódulos en la piel (lepromas). La progresión de las lesiones es causa de grandes deformaciones. Durante la Edad Media fue una enfermedad muy difundida. El tratamiento
de la enfermedad, hoy en día, varia entre seis meses y dos años, según las formas, y se basa en la administración de sulfonas. Jacinto Convit desarrolló una vacuna contra esta enfermedad. La última leprosería de Europa se encuentra en Vall de Laguart, en la provincia de Alicante, es el Sanatorio de San Francisco de Borja, más conocido como el Sanatorio de Fontilles. Contagio De persona a persona. Es directo cuando se transmite por las gotitas de Flügge, por las secreciones y por el contacto con las deyecciones o con las ulceraciones de los leprosos. El indirecto cuando se realiza por ropa u objetos que hayan estado en contacto con los enfermos, o por alimentos contaminados por moscas que llevan en sus patas los bacilos de Hansen hansen.
Por contacto continuo y permanente con una persona enferma.
haciendolo sin condom; o eso era el sida?; pues la verdad es que ya no lo sé. Ahora se lo pregunto a mi médico y te respondo en five minutes, please!. My God!
Contacto cercano con personas que la padecen. Es dificil de contagiar y se da mas que todo en sitios en que hay hacinamiento y malas condiciones de higiene
estando en contacto con el portador o con la bacteria.
por contacto
Se contagia con el simple contacto con la otra persona, es por eso que antes se aislaban a las personas que tenian esta enfermedad.
Hola: Saludos desde la isla de encanto, Puerto Rico!
La lepra es causada por el organismo Mycobacterium leprae. No es una enfermedad muy contagiosa (de difícil transmisión) y tiene un largo período de incubación (tiempo antes de que aparezcan los síntomas), lo cual dificulta determinar el momento y el lugar donde se contrajo la enfermedad. Los niños son más susceptibles que los adultos para contraerla.
La lepra tiene dos formas comunes de manifestación: la tuberculoide y la lepromatosa, las cuales tienen subdivisiones adicionales. Ambas formas ocasionan lesiones en la piel, pero la forma lepromatosa es la más severa y produce grandes nódulos desfigurantes (protuberancias e hinchazones).
Todas las formas de esta enfermedad causan finalmente daño neurológico periférico (daño nervioso en brazos y piernas) que ocasiona pérdida de la sensibilidad cutánea y debilidad muscular. Las personas con lepra de duración prolongada pueden perder el uso de las manos o los pies debido a las lesiones repetitivas ocasionadas por la ausencia de sensibilidad.
La lepra es una enfermedad común en muchos países del mundo y en los climas templados, tropicales y subtropicales. En los Estados Unidos, se diagnostican aproximadamente 100 casos cada año, la mayoría circunscritos al sur, California, Hawaii y las posesiones insulares.
Existen medicamentos efectivos que hacen innecesario el aislamiento de las víctimas en "colonias de leprosos". Sin embargo, el surgimiento de Mycobacterium leprae resistente a los medicamentos, al igual que el aumento en el número de casos en todo el mundo, han originado una preocupación global acerca de esta enfermedad.
http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spani. http://www.geocities.com/ralv7/lepra/lep. http://www.health.state.ny.us/es/disease.
¿Cómo se contagia la lepra? No resulta claro cómo se contagia el germen de la lepra, sin embargo, el contacto cercano prolongado y el contacto casero son significativos. Es probable que los gérmenes ingresen al organismo a través de la nariz y posiblemente, a través de heridas en la piel. Los
gérmenes llegan al aire a través de las secreciones nasales de pacientes lepromatosos sin tratar.
¿Cuáles son los síntomas de la lepra? Los síntomas de la lepra tuberculoide son la presencia de algunas lesiones bien definidas en la piel, con tumefacción. Los síntomas de la lepra lepromatosa son la nariz crónicamente tapada y muchas lesiones y nódulos en la piel de ambos lados del cuerpo.
Espero que esta info te ayude y te deseo que pases un muy buen dia!
Juntate con un leproso y listo...
Creo que contrariamente a lo que se creía antiguamente, la lepra no es contagiosa. O por lo menos es muy difícil el contagio
No es contagiosa..
por contacto directo con la persona contagiada
La verdad es que el contagio de la lepra es muy difícil, se produce por contacto, pero hace falta un contagio muy prolongado (de muchos años) y muy íntimo, y aún así es dificilísimo su contagio
Historia de la Lepra Ayer, hoy y mañana La Lepra es una enfermedad muy enigmática" I. Generalidades La Lepra fue una de las primeras enfermedades descritas en el mundo antiguo; y caracterizada por cambios muy severos en el aspecto físico de los enfermos: las manchas, los tubérculos y los lepromas daban a la cara un aspecto de león por lo que la enfermedad se llamó leonina. Como también producía hipertrofia de las capas dérmicas y subdérmicas, semejaba la piel de un elefante, y también se llamó elefantiasis. La enfermedad se caracterizaba por su evolución crónica y progresiva y habitualmente por su incurabilidad. Por la gravedad de sus manifestaciones, en los
primeros tiempos de la historia se explicó como un terrible castigo enviado por Dios. Las medidas preventivas adoptadas por el pueblo judío, con los enfermos, su aislamiento y retiro de la sociedad permiten suponer que la consideraban contagiosa y posiblemente el aislamiento de los leprosos fue una de las primeras medidas de Salud Pública, que persistieron hasta mediados del siglo XX. Los primeros médicos griegos y romanos se preguntaron si la enfermedad era comunicable o hereditaria y durante muchos siglos se especuló sobre las dos teorías. El año de 1874, Armauer Hansen, natural de Bergen (Noruega), país donde la lepra era epidémica descubrió el bacilo productor de la enfermedad y demostró como lo había sospechado que la enfermedad era de carácter infeccioso[1]. Sin embargo la manera como se trasmitía estaba aún muy oscura. ¿Por qué razón, se preguntaban los investigadores, la lepra se trasmite a unas pocas personas y la mayoría permanecen indemnes a ella? Solo hasta el año de 1923 el investigador japonés Mitsuda encontró la explicación que dio la respuesta a un problema que no había podido ser resuelto. Mitsuda empezó a trabajar con pacientes que presentaban las formas más graves de la enfermedad, (lepromatosas) y los que cursaban con las más benignas (tuberculoides ) y tomó como controles los sujetos normales y los enfermeros que habían permanecido en los leprocomios, sin que se hubieran contagiado con la enfermedad. Para el efecto preparó una suspensión de bacilos de Hansen obtenida de lepromas y esterilizada por el calor a la que se añadía ácido fénico. Luego inyectaba 0,05 ml de la preparación por vía intradérmica. A los 21 días observó que en los pacientes de forma lepromatosa la reacción era negativa y solo se producía un pequeño edema, pero sin eritema o papula. En los sujetos normales y los enfermeros que no se contagiaban y en los que padecían de la forma tuberculoide, la reacción fue de mayor intensidad. El descubrimiento aclaró en gran parte la manera como algunos pacientes adquirían la enfermedad y otros no. Había sujetos con muy pocas defensas inmunológicas contra el bacilo de Hansen, que se contagiaban con gran facilidad y desarrollaban las formas graves y los que tenían mejores defensas desarrollaban las formas más benignas. El resto de la población tenía excelentes defensas y no se contagiaba. Entre los que se contagiaban había un 20 % de formas malignas y 80% de formas benignas. Posteriormente aparecieron, ya bien entrado el siglo XX los medicamentos. Con acción bactericida logró controlarse la enfermedad. Las lesiones dermatológicas que voy a presentarles más adelante, no se encuentran en la actualidad y pertenecen a la historia de la enfermedad http://www.pdfcoke.com/doc/6915757/LEPRA-e-INICIO-DE-ENFERMEDADES-POR-VIRUS31207-Dra-SanchezPedreno?autodown=doc