La hemostasia La hemostasia en el hombre es un sistema complejo, que bajo condiciones fisiológicas mantiene la sangre en estado líquido y que reacciona ante el daño vascular de una forma rápida y potente, pero limitada sólo al sitio de la lesión vascular. De esta forma, puede evitarse la pérdida sanguínea mediante la formación de un coágulo, sin ocasionar la diseminación del trombo lejos del lugar donde es necesario para “sellar” la discontinuidad vascular. Quien actúa principalmente en la hemostasia son las plaquetas. Para que se produzca correctamente se requiere del correcto funcionamiento de la pared vascular, la función plaquetaria, la coagulación sanguínea y la fibrinólisis. Orden cronológico todos los eventos que intervienen en la hemostasia Espasmo vascular Se trata de una vasoconstricción. Cuando se produce la ruptura del vaso sanguíneo se produce el espasmo vascular mediante el cual se disminuye el diámetro del vaso retrasando así la hemorragia. Esto ayuda a reducir el flujo de sangre a través del vaso sanguíneo. Cuanto más grande sea el traumatismo producido, mayor será el espasmo que origina. La vasoconstricción favorecerá las interacciones entre las plaquetas y el subendotelio. Esta fase por sí sola no será suficiente para detener una hemorragia, sino que solo es una parte de ella por lo que a partir de aquí se producirá la hemostasia primaria. Se inicia en décimas de segundo por medio de los reflejos nerviosos locales y espinales además de las aminas vasoactivas liberadas. Es decir, está mediada por el sistema nervioso simpático, de forma inmediata y por sustancias liberadas por las plaquetas de forma tardía. Esta fase activará la fase plaquetaria o hemostasia primaria. Fase plaquetaria o hemostasia primaria Se trata del conjunto de procesos que tienen como finalidad la formación del tapón plaquetario, produciendo también vasoconstricción al liberar tromboxano A2. Contiene la hemorragia mientras que se produce la coagulación. La lesión producida en la capa endotelial del vaso activará a las plaquetas para que se adhieran formando el tapón plaquetario. Las plaquetas se adhieren al colágeno liberado del vaso y esto desencadenará la salida del ADP que aumentará la agregación. La unión al colágeno es el principio de una serie de reacciones fisiológicas que ocurren en el interior de las plaquetas. Estimula la liberación de calcio intracelular y estimula la síntesis de tromboxanos. Las proteínas se van haciendo más rugosas y aparecen con espículas para favorecer su adhesión. Se liberan las sustancias de los gránulos de las plaquetas. La hemostasia primaria ocurre en dos pasos: Adhesión plaquetaria La adhesión plaquetaria es inducida por el subendotelio que activará a las plaquetas. Para que tenga lugar son necesarios dos factores: el factor de von Willebrand y la dlucoproteína I. Las plaquetas cambiarán de forma para que se favorezca la adhesión por lo que le saldrán una especie de pseudópodos. La glicoproteína GPIb de las plaquetas se fija al colágeno del subendotelio a través del
factor de von Willebrand, mientras que la glicoproteína GPIa-IIa se fija directamente al colágeno. Además de al colágeno se pueden fijar a otras materias fibrilares del subendotelio. La adhesión está mediatizada por la presencia de calcio. Agregación plaquetaria La agregación plaquetaria se produce sobre todo gracias al ADP y se produce antes de la adhesión plaquetaria. Tiene como resultado la formación de lo que se conoce el trombo primario que estará formado por el fibrinógeno que se puede unir simultáneamente a dos plaquetas. Se asocia a la glicoproteína GPIIb-IIIa activada formándose una red de fibrinógeno y plaquetas. La agregación es reversible en un primer momento, volviéndose irreversible por lisis de sus membranas. Se podría anular la agregación añadiendo sustancias decalcificantes como el citrato y el oxalato. La hemostasia primaria es una fase muy rápida. Dura de 3 a 5 minutos. Fases de coagulación Esta fase se pone en marcha a los 15 o 20 segundos si se trata de un traumatismo intenso, mientras que si se trata de un traumatismo leve se producirá en uno o dos minutos. En esta fase es donde intervienen los factores de la coagulación que actuarán en cascada. Consiste en la transformación del fibrinógeno en fibrina. El fibrinógeno se transforma experimentando un cambio químico que lo convierte en insoluble con capacidad de unirse a otras moléculas y formar enormes agregados: la fibrina. Esto es lo que constituye el coágulo secundario. En este proceso, cuando se forma la fibrina, la sangre modifica su estado pasando a una consistencia de gel. Los factores de la coagulación viajan por el torrente sanguíneo inactivados y se activarán en cascada. La forma activa de un factor activará al siguiente. Los factores de la coagulación son proteínas que tras su activación se convierten en enzimas. En la coagulación se pueden distinguir tres estadios: Formación de la tromboplastina Formación de la trombina Transformación del fibrinógeno en fibrina Fibrinólisis La fibrinólisis es el proceso mediante el cual se destruye el trombo una vez que ha cumplido su función de la hemostasia. Se destruye el coágulo de fibrina, que es su componente mayoritario. Se realiza gracias a la plasmina, una serina que se origina a partir de su precursor inactivado: el plasminógeno. El plasminógeno se activa por la acción de los factores intrínsecos y extrínsecos.