Frente Nacional: Lleras Restrepo y Pastrana
Carlos Lleras Restrepo l Óleo de Blanca Sinisterra J de Carreño.
¡ Museo Nacional,
(1966-1974) Jaime Humberto Borja
Carlos Lleras y el Frente de Transformación Nacional El tercer gobierno del Frente Nacional (1966-1970), presidido por Carlos Lleras Restrepo, significó u n cambio con respecto a los dos gobiernos anteriores. Alberto Lleras Camargo y Guillermo León Valencia, en buena medida, se habían dedicado a la pacificación del país. El nuevo gobierno trató de crear las condiciones para modernizar el Estado y proyectarlo más allá del Frente Nacional: se comenzaba a pensar en el desmonte del acuerdo bipartidista. Al llegar a la presidencia, Carlos Lleras era ya una figura prominente en la política nacional. Fue dirigente estudiantil en 1927; llegó al Congreso en 1935; fue ministro en el gobierno de Eduardo Santos y jefe del partido liberal en 1941. Se convirtió en el más activo conductor del liberalismo después del 9 de abril de 1948. En el exilio después de u n atentado en 1952, regresó al país tras la caída de Rojas Pinilla; desde entonces comenzó la carrera de ascenso a la presidencia, que se inició con su nombramiento como designado en el gobierno de Alberto Lleras Camargo.
Bogotá
Su campaña presidencial se lanzó con el n o m -
100 millones de dólares y la caída de la tasa de creci-
bre de Frente de Transformación Nacional, lo que
miento industrial (4,7% en 1965 contra 5,9% entre
ya anunciaba las reformas al Estado. Lleras Restre-
1961 y 1964). La segunda, en tanto que las conse-
po, candidato oficial del acuerdo bipartidista, se
cuencias de la amenaza de huelga general de 1965
enfrentó principalmente al M o v i m i e n t o Revolu-
habían debilitado la credibilidad en el gobierno.
cionario Liberal (MRL) liderado por Alfonso López
En este contexto, y siguiendo la línea política
Michelsen, que en esta oportunidad salió debilita-
fundamental del Frente Nacional, el gobierno de
do al recibir sólo 360.000 votos; y en las últimas
Lleras Restrepo intentó manejar u n esquema po-
semanas, antes de las elecciones, apareció el can-
lítico democrático sumado a la búsqueda de con-
didato de la Alianza Nacional Popular (ANAPO) José
cretar una estructura económica capitalista. S i
Jaramillo Giraldo, quien tras una rápida campaña
propuesta política buscaba ser coherente con las
obtuvo una cuarta parte de los votos, 750.000.
expectativas de los años sesenta, años que se deba-
Lleras Restrepo sumó 1.900.000. La abstención,
tían, en el contexto internacional latinoamericano,
por encima del 65%, reflejaba u n descontento ge-
entre los alcances de la «guerra fría» reflejada en la
neral hacia el Frente Nacional. El ambiente en que
política norteamericana de la Alianza para el Pro-
iniciaba su gobierno no era el más afortunado.
greso, respuesta a la disminución de la influencia
A l asumir la presidencia, Lleras se encontró con
de la Revolución Cubana, y las teorías del Conseje
u n país en situación inestable. El Frente Nacional
Económico para América Latina (Cepal). C o n este
atravesaba por u n difícil momento; lo mantenían en
gobierno, de tendencias modernizantes, Colombia
pie el acuerdo bipartidista y la ausencia de una real
se integraba a la «década del desarrollo».
carecían
El programa que esbozó en su discurso de pose-
de una estructurada organización interna que per-
sión el 7 de agosto de 1966, daba por entendido que
mitiera enfrentarse a los dos partidos tradicionales.
buscaba corregir el Frente Nacional para salvarlo de
Pero también era evidente el estancamiento en los
la crisis en la que se encontraba, al mismo tiempe
dos partidos que componían el Frente Nacional, tan-
que buscaba darle perspectiva hacia el futuro. La re-
fuerza de oposición, pues la
ANAPO
y el
MRL
to en lo político como en sus figuras. Por otro lado, la
forma constitucional, j u n t o con el desarrollo econó-
crisis la agravaba la complicada situación económica
mico y social, globalizaban las propuestas de reforma
y social: la primera, marcada por el estancamiento
y de integración social que proponía especialmente
en la producción agrícola desde 1965, u n déficit de
a los sectores campesinos y marginados de las gran-
des ciudades: la tecnificación, una reforma agraria,
les como la designatura, las gobernaciones y mesas
la reorganización de la administración pública, u n
directivas de Senado y Cámara de Representantes,
nuevo orden económico y el estímulo a la inversión
generó enfrentamientos entre el poder presidencial
extranjera, fueron las principales expectativas. A l fi-
y los dos partidos tradicionales, que se reflejaron en
nal de su gobierno, otros eran los beneficiados.
oposiciones de la Cámara a peticiones de facultades
Para la ejecución de su programa a lo largo de
extraordinarias (diciembre de 1966); rechazo a la
los cuatro años siguientes, fue necesaria una serie
reforma constitucional (julio de 1967) y aprobación
de ajustes y consensos que medianamente allana-
de presupuestos que iban en contra de los proyectos
r o n el camino para las reformas que planeaba; al-
de Lleras. Por su parte, el partido conservador asu-
gunos llevaron tiempo.
mió una posición cuidadosa, pues el problema era
El estado de sitio fue uno de aquellos ajustes
no arriesgar las posiciones adquiridas y más ante la
importantes. El recurso a este estado de excepción
gran división que lo aquejaba por la competencia
había sido frecuente desde 1944. El Acto Legislativo
entre los candidatos a la próxima elección.
No. 21 de 1960, con el que se modificaba el Artícu-
Aunque la autoridad que tenía este presidente,
lo 121 de la Constitución, afirmaba que el presiden-
especialmente
te podía ejercer las funciones extraordinarias bajo
dudable, las negociaciones con varios sectores no
dentro del partido liberal, era i n -
la previa convocación del Congreso en «el mismo
fueron fáciles. La posibilidad de unificar el partido
decreto en que declare turbado el orden público y
liberal llegó cuando el MRL y su mesa directiva logra-
en estado de sitio toda la República o parte de ella,
ron concertar una alianza con el Frente Nacional y
ya sea por causa de guerra exterior o de conmoción
con Lleras, en 1967. El MRL había sido la principal
interna». Por otra parte, era necesaria la mayoría de
fuerza de oposición al Frente Nacional. Su princi-
las dos terceras partes en el Senado y la Cámara de
pal dirigente, López Michelsen, rechazaba la alter-
Representantes para la aprobación de las leyes que
nación bipartidista en tanto que era una forma de
allí cursaban. Por esta razón, al recurrir al procedi-
negar una auténtica democracia. De igual manera,
miento de excepción, el estado de sitio, el presiden-
condenaba el reparto burocrático.
te podía gobernar con u n discreto autoritarismo por medio de los decretos legislativos.
En las elecciones de 1962 había ganado 600.000 votos, pero la sensible merma en las elecciones de
El estado de sitio había regido casi permanen-
1966 favoreció los paulatinos acercamientos. Según
temente durante los gobiernos anteriores: Alberto
López, el Frente de Transformación Nacional esta-
Lleras lo mantuvo en algunas zonas del país durante
ba cerca a los planteamientos del MRL en cuanto a la
26 meses y en todo el territorio durante seis; Gui-
necesidad de la reforma agraria y el arreglo con el
llermo León Valencia, durante siete meses de manera
Fondo Monetario Internacional. El acuerdo de Lleras
parcial y quince totalmente. Paradójicamente, si se
y el MRL dirimió muchas dificultades para la estabili-
considera la constante preocupación que manifestó
zación del régimen, en tanto que la unificación del
Lleras Restrepo por el uso y abuso del estado de
partido liberal alrededor de las reformas del gobierno
sitio-, fue el presidente del Frente Nacional que más
permitió que este alcanzara la mayoría en el Sena-
lo utilizó, ocho meses parcial y treinta totalmente,
do y la Cámara. Pronto, Alfonso López Michelsen
convirtiéndose en u n aspecto importante del siste-
fue nombrado gobernador del Cesar, y en agosto de
ma político del Frente Nacional. El país estuvo en
1968 ministro de Relaciones Exteriores. Una fracción
estado de sitio desde mayo de 1965 hasta noviem-
de izquierda de este movimiento de oposición no se
bre de 1968, cuando se levantó de acuerdo con la
acogió al pacto político y organizó el MRL del Pueblo.
reforma constitucional. Durante estos dos primeros
Desde el gobierno de Alberto Lleras Camargo, la
años de la administración Lleras, el rígido manejo
política del Frente Nacional había contemplado el
que se le dio a la agitación laboral y el movimiento
papel de las Fuerzas Armadas en relación con el po-
estudiantil, apoyándose en u n acuerdo parlamen-
der que manejaban después de la dictadura de Rojas
tario, favoreció el manejo de la crisis y estabilizó la
Pinilla. El gobierno, al hacer uso del estado de sitio
situación sociopolítica.
Fuerzas políticas y militares
que caracterizó al Frente Nacional, suspendió las leyes e introdujo, j u n t o con los decretos extraordinarios, la autoridad militar que reemplazaba a la civil
Los consensos con el mismo partido de gobierno y
en lo que concernía al orden público. Los delitos
el conservador fueron igualmente importantes. Lle-
contra el orden público fueron entonces juzgados
ras, con respecto a sus antecesores, había sostenido
por u n tribunal militar según el procedimiento de
una actitud de no negociación con sectores políticos
los consejos verbales de guerra. Con el tiempo, esta
regionales o nacionales, que conformaban el Frente
cuota de poder en el orden público fue invadiendo
Nacional. La actitud autoritaria que sostuvo fren-
el terreno de la justicia efectiva, mediante la u t i l i -
te a los nombramientos políticos importantes, ta-
zación de sistemas de operación «cívico-militares»
212 Gran Enciclopedia de Colombia
en zonas afectadas, que le permitían al Ejército el
esta inclinación, el gobierno trató de demostrar 1
control especial sobre el campesinado.
improductividad de este sector debido al estrangu-
Para reducir los excesos de la presencia militar en
lamiento del mercado tanto interno como extern;
el Estado, el gobierno buscó soslayar algunos pro-
lo que no hacía rentable la inversión en este sector, y
blemas sociales y económicos, especialmente en las
menos aún daba una remuneración satisfactoria. Así.
zonas más afectadas p o r la violencia, en donde el
el programa de modernización del Estado se orien::
Ejército actuaba con mayor holgura, y que eran los
en primera medida hacia el control de las inversiones
detonantes que favorecían su poder. Frenar la i n m i -
extranjeras y el uso de los créditos internacionales.
gración del campo a la ciudad y solucionar la mala
En segundo lugar, consideró que las inversiones pú-
distribución de la tierra, fueron dos factores funda-
blicas debían reemplazar a las privadas en donde fue-
mentales. La reforma agraria tenía, además, esa i n -
se necesario. Se buscaba u n Estado intervencionista.
tención. Pero en este sentido los resultados fueron
Uno de los aspectos económicos más importan-
dudosos. La persistencia del movimiento guerrillero
tes de esta administración fue la expedición del Es-
y la formación de nuevos grupos como el Ejército
tatuto Cambiario en 1967. Estaba inserto dentro de.
Popular de Liberación (EPL), de línea maoísta, endu-
proyecto capitalista y tecnocrático de Lleras y abrió una nueva perspectiva en el futuro de la economía colombiana. Fue el resultado de una serie de medidas
El presidente Carlos Lleras anunciando el toque de queda, el día en que fue elegido Misael Pastrana.
de emergencia que adoptó Lleras Restrepo mese; después de su posesión, y que iban encaminadas :. frenar el desequilibrio de la balanza de pagos. Er_ 1965
La moneda habí.:
sido devaluada en u n 50% y habían sido liberadas las importaciones come condición de los acreedores internacionales para nuevos préstamos; por lo cual, en 1966 las importaciones aumentaron en u n 4 9 % y los ingresos por exportaciones se redujeron en u n 6%. Las reservas del Banco de la República para financiar las exportaciones eran exiguas. La expedición de este estatuto estuvo contextualizada p o r u n antecedente: el enfrenta-
recieron la posición de las Fuerzas Armadas. Lleras debió hacer algunas concesiones, especialmente en
miento del gobierno con el Fondo Monetario Inter-
1969, cuando pidió la renuncia al general Guiller-
nacional.
mo Pinzón, jefe de las Fuerzas Armadas, quien pro-
El gobierno de Lleras solicitó al FMI u n préstamo,
testó ante la iniciativa presidencial de introducir u n
que sería otorgado si el gobierno accedía a una serie
control civil sobre los gastos militares.
Política económica
de condiciones, con las cuales prácticamente la política económica quedaba a merced del FMI y violentaba la soberanía del país. El fondo solicitaba, entre
La política económica de Lleras ya era conocida al
otras cosas, otra devaluación inmediata de la mone-
tomar posesión de la presidencia. Se inclinaba hacia
da (20 pesos por dólar, en vez de 16) y u n aumento
lo que ciertos autores han llamado u n idealismo tec-
de la tercera parte en el impuesto a la gasolina, con
nocrático. Esto se traducía en la necesidad de moder-
lo cual buscaba el equilibrio cambiario. El gobierno
nizar el Estado, buscando el desarrollo de la industria
rechazó esta propuesta rompiendo las negociaciones
y la actividad urbana, lo que le restaba importancia
con el FMI en noviembre de 1966, y a cambio de ello
a la producción agrícola y ganadera. Para justificar
suspendió la política de liberación de importaciones
y asumió una serie de actitudes dirigidas a frenar
en posibilidad de competir en el mercado exterior,
la caída de las reservas internacionales. Entre ellas,
al tiempo que la acción del Estado se dirigía a la pe-
se generalizó el sistema de licencias para las impor-
netración y ampliación de mercados y al estímulo a
taciones; se bloquearon las cuentas en dólares; to-
la exportación y su diversificación. Se privilegiaba la
das las transacciones se debían hacer por medio del
exportación, ajustando el manejo de la importación.
Banco de la República, y se estableció una moratoria
Los resultados inmediatos de la Ley 444 no fue-
en los pagos internacionales, de acuerdo con las d i -
ron los mejores: la industria entró en crisis ante la
visas disponibles en el Banco de la República. Estas
falta de materia prima importada; los precios en los
medidas se tomaron mientras se concretaban en el
productos, el transporte y los servicios públicos au-
nuevo Estatuto Cambiario mediante la Ley 444, que
mentaron y en consecuencia las exportaciones no
se hizo efectiva en marzo de 1967.
alcanzaron el nivel deseado. Los años siguientes
Con este estatuto cambiario se suprimió el mer-
mostrarían alguna mejoría: a finales de 1968 la ba-
cado libre de divisas. En adelante, las transacciones
lanza de pagos se encontraba u n poco más estable
debían utilizar dos mercados canalizados a través
y las reservas de dólares superaban el total de los
del Banco de la República: el mercado de capitales
compromisos contraídos. Pronto el gobierno volvió
y el de certificados de cambio; el precio en el p r i -
a recurrir a las entidades internacionales para nue-
mero era fijo, mientras que en el segundo cambiaba
vos préstamos. Para finales de 1967, Colombia ha-
según la oferta y la demanda. Con estas medidas se
bía recibido u n total de 152.400.000 dólares.
buscaba aliviar la insuficiencia del mercado interno,
La mayor parte de las exportaciones hasta 1967
enfocando la capacidad productiva del país hacia el
fueron de café. La nueva política económica buscó
mercado mundial. Así mismo se pretendía que la i n -
diversificar y promocionar otros productos. A pesar
dustria se ganara en el exterior la disponibilidad de
del significativo crecimiento de esta diversificación
las divisas que fueran necesarias para su crecimien-
entre 1966 y 1969, no representó más del 28% del
to y expansión: se sustituían importaciones en pos
total de las exportaciones, las cuales estaban sujetas
de una promoción de las exportaciones. El proyecto
más a la oferta interna que a la demanda mundial.
económico del Estatuto buscó crear condiciones i n -
En este sentido, el Estatuto Cambiario más que pro-
ternas de manera que la industria nacional estuviera
mover la exportación, intentó dirigir las condicio-
Gran Enciclopedia de Colombia
nes productivas hacia las exportaciones mediante el
recursos para Colombia. Esta actitud crítica nunca
desplazamiento de capital desde la sustitución de
cuestionó la dependencia existente. Paralelamente,
importaciones hacia los sectores exportadores, de
se crearon nexos económicos con Europa del Este,
modo que "estos acumularan. Para esto se creó el
restableciendo las relaciones de intercambio fractu-
Certificado de Abono Tributario (CAT) que incen-
radas desde años atrás. Se incrementó, asimismo, el
tivaba fiscalmente a la exportación y se amplió el
comercio con España, Alemania, Japón y Francia.
«plan Vallejo», creado durante el gobierno de la
Dentro de esta perspectiva, u n hecho importante
Junta Militar, que reducía las importaciones y favo-
en las relaciones internacionales entabladas bajo la
recía las exportaciones. Por otra parte, si la actividad
administración Lleras, fue la necesidad de fortalecer
exportadora debía utilizar en buena medida la pe-
el mercado regional. La integración económica con
netración de capital extranjero, el Estatuto intentó
Venezuela, Chile, Perú, Ecuador y más tarde Bolivia,
ajustar las condiciones para que esto fuera efectivo
tenía como aspiración la formación de u n mercado
teniendo en cuenta dos aspectos: la incorporación
andino. Después de varias negociaciones, se firmó el
de tecnología y la repatriación de utilidades sobre la
protocolo que creaba la Corporación Andina de Desa-
disponibilidad de divisas.
rrollo. Estos pactos de integración latinoamericanos
Para que esta política que cobijó el gobierno de
convenían en gran medida a la política económica
Lleras fuera efectiva, se necesitó también crear o con-
de esta administración, pues el potencial industrial
solidar una infraestructura institucional que posibili-
del país en aquel momento era alto, en comparación
tara la anhelada modernización del Estado. Para ello
con los otros países de la región. Las limitaciones del
se creó el Fondo de Promoción de Exportaciones y
mercado interno favorecían la expansión regional.
se dispuso u n seguro para las mismas; se establecie-
Finalmente, la política económica de este gobier-
ron puertos libres y se aseguró el ingreso al Pacto
no prestó una especial atención a la recuperación de
Andino. Total, se crearon las condiciones para que
las iniciativas de planeación económica. En 1966 se
fuera posible una intervención del Estado en la nue-
reorganizó el Departamento de Planeación Nacional
va actividad económica basada en la exportación.
con este fin. Pero estos criterios cambiaron con la
Pero dentro de esta nueva perspectiva económica, había otros problemas que tenían que ver
presentación del Plan Trienal, que fue pensado para el período 1969-1972, y fue más u n punto de re-
con la política laboral y la inversión. Esta estuvo
ferencia, pues n o fue aplicado. De esta manera, el
orientada por la necesidad de reducir costos labo-
proyecto económico se realizó en el marco de una
rales para que la industria ganara competitividad
política monetaria estricta. El crecimiento fue me-
internacional. La generación de empleo fue m u y
dianamente amplio durante el cuatrienio con excep-
reducida dentro del marco de la modernización
ción de 1967: el Producto Interno Bruto (PIB) para
del Estado. A ello n i siquiera contribuyeron las n u -
1970 aumentó 7%; el ingreso per cápita estaba sobre
merosas corporaciones financieras que se crearon
los 300 dólares; el costo de vida se mantuvo sobre
para facilitar las inversiones, las cuales sólo inver-
7,3%, mientras que en 1965 estaba sobre el 15%.
tían prudentemente en sectores m u y capitalizados.
De las reformas iniciadas por el gobierno de Car-
Para afianzar la inversión, Lleras reforzó la estruc-
los Lleras Restrepo, son dos las que merecen mayor
tura d e l Instituto de Fomento Industrial (IFI). El
atención: la reforma agraria y la reforma constitu-
proyecto más importante en el cual participó este
cional de 1968.
organismo fue la instalación de la empresa de ensamblaje de la Renault, pensada para que produje-
Reforma agraria
ra 20.000 vehículos anuales. Lo cierto fue que sus
Lleras era conocido en el ámbito político por sus
resultados a la postre n o fueron los esperados: no
inclinaciones hacia el sector agrícola. E n 1933 par-
generó el empleo calculado n i integró las partes de
ticipó activamente y fue central su labor en la adop-
producción doméstica que se esperaba.
ción de medidas para solucionar los problemas
Dentro de esta expectativa que generó el gobierno
agrarios que aquejaban a Cundinamarca en aquel
de Carlos Lleras, los cambios internos se reflejaron
entonces. Además, en 1961 había sido cabeza de la
en la política exterior, la cual estuvo enfocada hacia
comisión que creó las bases para la Ley 135 sobre
varios planos. El enfrentamiento con las exigencias
reforma agraria. Por otra parte, el contexto en el
del FMI, la necesidad de controlar las inversiones nor-
que había surgido el Frente Nacional exigía una
teamericanas y la política adoptada por el gobierno
modificación en la distribución de la tenencia de
frente a la guerra de Vietnam, dejaron entrever una
la tierra para hacerla accesible a la gran población
actitud de tenue independencia con respecto a los
campesina que había sido desplazada del campo
Estados Unidos. Lo que también se reflejó en las acé-
durante los años 1948 a 1957.
rrimas críticas que surgieron después de 1968 contra la Alianza para el Progreso, cuando esta redujo sus
Desde la promulgación de la Ley 135, los dos primeros gobiernos habían sido poco efectivos en la
Frente Nacional: Lleras Restrepo y Pastrana
funcionalidad de esta reforma. Estos se habían de-
1970 y, sin dejar de recurrir a la represión, se busca-
dicado a adquirir algunos latifundios y a desarrollar
ron mecanismos estatales para restarles poder.
programas de colonización. El problema era claro: una
Además de la creación de la A N U C , el gobierno de
de las maneras de aliviar "el pesado lastre que
Lleras buscó fortalecer la débil redistribución de tie-
había dejado la Violencia era fortalecer la economía
rras. La inestabilidad económica y la necesidad de
campesina para restarles fuerza a los enfrentan-tien-
ampliar el mercado interno para la industria, lleva-
tos sociales que generaba la mala distribución de
ron a que se buscaran algunas medidas para forzar
la tierra y al mismo tiempo frenar las corrientes de
la tecnificación del campo, pero desde la gran pro-
migración del campo a la ciudad. Esta política del
piedad. Por esto, j u n t o a la política de expropiación
Frente Nacional fue concretada por Lleras Restrepo,
de tierras, paralelamente el gobierno creó mecanis-
quien intentó i m p r i m i r una dinámica a la reforma
mos para que se hicieran acuerdos entre el Incora
agraria y a la supresión del latifundio improductivo.
y los grandes propietarios, con el f i n de adelantar
El ambiente era propicio para que Lleras iniciara su
programas de estímulo a la producción, garantizan-
proceso: el 40,7% de los votos que recibió en 1966
do el gobierno que esas tierras no se expropiarían
provenían del sector rural. Desde los comienzos del Frente Nacional, las luchas y organizaciones campesinas fueron debili-
mientras se cumplieran las obligaciones pactadas. La mayor parte de los créditos fue puesta en función de las grandes y medianas propiedades.
tadas y fracturadas por el Estado. Los latifundistas
Los resultados estarían expresados en estas pala-
ganaron la mejor parte, pues habían fortalecido sus
bras del ministro de Agricultura, Armando Samper:
posiciones, ayudados, además, por la pacificación
«Es necesario resaltar el hecho de que los cambios
que caracterizó aquellos años. Esta fue una de las
y realizaciones logrados durante el presente período
razones por las cuales el campo se convirtió en te-
(1966-1970) en materia de parcelaciones y titula-
rreno abonado para la influencia de la guerrilla que
ción de tierras, resultan modestos ante la magnitud
comenzaba a surgir. E n este contexto, uno de los
del problema». En el período 1962-1970 se habían
más importantes impulsos que recibió la reforma
expropiado 3.263 hectáreas en 27 procesos, 18 de
agraria de Lleras fue posibilitar la organización del
ellos en el gobierno de Lleras. En estas proporciones
movimiento campesino para agilizar y multiplicar
la reforma agraria había sido tenue; el Incora había
los servicios del Estado en lo que tenía que ver con
cuantificado 935.000 familias con necesidades de
la reforma, y a su vez se convirtió en instrumento
adjudicación, y sólo 5.000 salieron beneficiadas. Te-
del gobierno para frenar las exigencias de los terra-
óricamente la reforma había buscado el incremento
tenientes descontentos por el planteamiento de su-
de la producción y la redistribución del ingreso, en
primir los latifundios improductivos. Para el efecto, el Decreto 755 de 1967 legalizó la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos (ANUC) y las Asociaciones Locales de Usuarios. La primera fue
u n eficaz instrumento de organización campe-
sina que ejerció presión sobre la tierra, constituyén-
donde también los logros fueran modestos. A l final, más que reforma agraria hubo titulación de baldíos, cerca de tres millones de hectáreas.
Reforma constitucional La
reforma constitucional de 1968 creó las con-
dose durante este gobierno en una importante fuer-
diciones para que se diera u n «Estado para el de-
za social. Por su parte, las Asociaciones Locales de
sarrollo», al reforzar la autoridad presidencial. El
Usuarios buscaban que el trabajador del campo par-
proceso político para concertar esta reforma estuvo
ticipara en los diferentes organismos administrativos
lleno de vicisitudes, pues contó con una enconada
agrícolas, como el Incora. En 1970, cuando se reunió
resistencia por parte de algunos sectores políticos.
el primer congreso de la ANUC, existían cerca de 500
Fue aprobada en 1968 por el Congreso, tras reitera-
de estas organizaciones. El problema para el gobier-
das amenazas de renuncia por parte del presidente.
no se hizo evidente cuando estas organizaciones se
Pero definitivamente era el resultado del acuerdo
salieron de su control al politizarse, pero no dentro
bipartidista en u n propósito de modernizar las ins-
de los parámetros del liberalismo, que también había
tituciones para que trascendieran las ventajas logra-
pensado en tener u n eventual ejército de votantes
das con los pactos de 1957.
al organizar estas asociaciones. Estas comenzaron
La reforma creaba las condiciones para el desmon-
a presionar al Incora para que iniciara la expropia-
te de la alternación y de la paridad, pero conservan-
ción de tierras cultivadas y abandonara la tradicional
do al mismo tiempo el monopolio bipartidista y el
negociación. Además, pedían que se expropiara los
presidencialismo. El plan de desmonte gradual que
latifundios sin indemnización. Esto dio pie para que
proponía Lleras, para evitar el desenfreno después
la reforma agraria pasara a ser u n problema político.
de 1974, era de esta manera: desde 1970, la reforma
Hacia finales del gobierno se convirtió en el caballo
de paridad dejaría de aplicarse en las elecciones para
de batalla de las candidaturas para las elecciones de
consejos municipales y asambleas departamentales;
(1966-1974)
215
216 | Gran Enciclopedia de Colombia
terminaron debilitando los entes regionales, abogando por una centralización de la gestión estatal. De igual manera, esta reforma revaluó la disposición constitucional según la cual era indisponible la aprobación de los proyectos de ley por las dos terceras partes del Congreso. También entraron en proceso de reforma algunas normas de organización administrativa, como fueron: la elección de representantes, asambleas departamentales y concejos municipales por cuatro años y no por dos; la l i m i tación de senadores y representantes; la abolición de la «ley de arrastre» o sistema de escrutinio de las listas mayoritarias en los departamentos pequeños. U n aspecto que suscitó discordia e interés en tanto que también fortalecía el poder presidencial, fue la separación del estado de sitio para situaciones políticas, del estado de emergencia para coyunturas económicas. Los Artículos 121 y 122 lo contenían. En los mismos términos, se establecía también que el Congreso continuaría reuniéndose aun en estado de sitio, pudiéndose convocar ante cualquier eventualidad. Además, se abolió la atribución del parlamento de demandar decretos de estado de sitio ante la Corte Suprema.
Los problemas sociales Uno de los sectores sociales más afectados por la política económica y las reformas de la administración de Carlos Lleras Restrepo fue la clase obrera. La situación se tornó difícil por cuenta del estancamiento de los salarios bajo el argumento de atacar Misael Eduardo Pastrana Borrero. Óleo de Rafael Salas Casa de Naríño,
Bogotá.
con esa medida la inflación. El descenso del poder en 1974, se haría lo mismo con el Senado y la Cá-
adquisitivo produjo protestas masivas que fueron
mara de Representantes, y sólo en 1978 se acabaría
reprimidas de diversas formas. El ministerio de Tra-
la alternación en la presidencia de la República.
bajo, por ejemplo, propuso una ley que reducía el
El fortalecimiento del poder ejecutivo se convir-
derecho de huelga a 43 días; después de este tiempo
tió en una jefatura de mano fuerte y se basó en la
debía pasar obligatoriamente a u n tribunal de arbi-
restricción al poder legislativo en sus funciones y
tramento compuesto por u n miembro de la empre-
prerrogativas burocráticas, especialmente en lo refe-
sa, uno del gobierno y u n tercero del sindicato: era
rente a la repartición ilegal del presupuesto nacional
claro el perdedor. Esta reforma laboral aprobada,
entre caciques regionales, por parte de los senadores
introducía también la figura del contrapliego patro-
y representantes. En adelante, el Ejecutivo llevaría la
nal, con la que se controlaba a los trabajadores, que
iniciativa en materia de presupuesto y gasto públi-
retiraban su pliego en el momento en que entraba a
co, sin que se interpusieran otras instancias del Es-
funcionar el tribunal de arbitramento. Además, les
tado. De esta manera, el Estado hacía el tránsito del
quedaba prohibido el derecho de asociación y huel-
proteccionismo al intervencionismo. Esta reforma
ga a los trabajadores del Estado.
ahondó aún más la pobreza municipal y regional,
A esta difícil situación del sector obrero, se suma-
en tanto que se crearon fórmulas centralizadoras
ban las migraciones campesinas hacia la ciudad. Es-
y una cantidad de entes nacionales encargados de
tas aumentaron en gran proporción durante el cua-
organizar los servicios públicos, la salud y la edu-
trienio, lo que aceleraba la difícil situación social.
cación, llamados institutos descentralizados. Son
El fortalecimiento del poder y la consolidación de
fruto de esta época el Instituto Colombiano de Co-
los grupos dominantes de la gran industria fueron
mercio Exterior (Incomex), el Instituto Colombiano
condiciones que tuvieron una amplia influencia en
de Cultura (Colcultura) y el Fondo Colombiano de
la represión, que terminó desorganizando a los m o -
Investigaciones Científicas y Proyectos Especiales
vimientos obreros y estudiantiles, y más tarde a los
«Francisco José de Caldas» (Colciencias), los que
campesinos. El papel del Ejército y la justicia militar
se incrementó progresivamente dentro de esta pers-
puestas de Lleras de recomponer u n Estado fuerte,
pectiva, para d i r i m i r los conflictos y movimientos
Rojas proponía u n sistema paternalista que no m o -
sociales, gremiales y políticos de oposición. De esta
dificara sustancialmente nada. Los resultados elec-
manera, se sentaban las bases-institucionales para
torales durante su apogeo le permitieron el manejo
debilitar a los sectores de oposición al gobierno, ce-
de algunas empresas municipales,
rrando los canales de expresión política.
servicios públicos. Esto aceleró su integración defi-
Esta situación generó en buena medida u n mayor
especialmente
nitiva al gobierno y sentó las bases de lo que sería la
acercamiento de algunos movimientos populares a
siguiente contienda electoral, la de 1970, que generó
la lucha armada, que a comienzos del gobierno de
buena parte de los problemas que tuvo que afrontar
Lleras parecía haber entrado en una etapa de receso.
el siguiente gobierno, el de Misael Pastrana Borrero.
Pero a partir de 1967 la guerrilla arreció de manera inesperada con la aparición de tres nuevos grupos: uno en la zona del Vichada, liderado por el médico Tulio Bayer; el segundo en el Alto Sinú, y el Ejército
Misael Pastrana Borrero y el Frente Social (1970-1974)
Popular de Liberación (EPL). Los dos primeros no t u -
La situación social, política y económica al final
vieron fuerza y terminaron exterminados ante la fal-
del Frente de Transformación Nacional de Lleras
ta de estructuración. Pero el EPL se configuró como
Restrepo, había sido particularmente difícil. Desde
u n grupo eminentemente rural que había asimilado
1969 se venían dando situaciones que complicaban
las líneas de la revolución popular china. Se le con-
el ambiente: los escándalos por corrupción admi-
sideró como una respuesta a la llamada «línea revi-
nistrativa en el Incora, el principal instrumento de
sionista» del partido comunista. Era, a su vez, reflejo
la reforma agraria, habían tenido hondas repercu-
de la crisis de la izquierda en cuanto a ideología, me-
siones políticas que dejaban la sensación de la i n -
dios de lucha y resistencia. También, en tanto que se
eficacia de la reforma bandera. Por otro lado, las
intensificaba la lucha guerrillera, grupos como las
amenazas de paro, la agitación sindical, el crítico
afrontaron varias crisis internas, a veces
movimiento universitario y el recrudecimiento de
por diferencias ideológicas y a veces por la captura
la acción guerrillera con la aparición de nuevos fo-
FARC
y el
ELN
de varios de sus más importantes componentes. Otro sector importante que manifestó su incon-
cos como las FAL (Fuerzas Armadas de Liberación) y el FUL (Frente U n i d o de Liberación), reflejaban u n
formidad hacia las políticas del Frente Nacional,
descontento general con el pacto bipartidista. El
fueron los estudiantes. Los enfrentamientos fueron
crecimiento de la tasa de desempleo por encima del
constantes desde 1966 y muchos de ellos termina-
9,5% hacia más intolerable la situación. Todo esto
ron violentamente o con la ocupación de la U n i -
condicionó las elecciones para el último período
versidad Nacional. Lleras Restrepo había tomado
presidencial del Frente Nacional, que se realizaron
una actitud particularmente represiva ante las orga-
el 19 de abril de 1970: entre grandes dificultades y
nizaciones políticas estudiantiles; ya en 1966 había
descontento aparecía el gobierno de Misael Pastrana
disuelto la Federación Universitaria Nacional ( F U N ) .
Borrero, llamado Frente Social.
Pero 1969 fue u n año especialmente crítico: los i n cidentes en Montería, Cali, Bogotá, Pereira, Medellín y Bucaramanga deterioraron las relaciones del
Misael Pastrana Borrero presta el juramento constitucional como presidente de la República ante
Estado con los estudiantes al reprimir las manifes-
Eduardo Abuchalbe, presidente del Congreso, el 7 de agosto de 1970.
taciones de manera violenta. Estos acontecimientos afectaron no sólo a la universidad pública, pues también la privada participó: La Gran Colombia, la Bolivariana, la de los Andes y la Javeriana. La política de Lleras en materia educativa fue claramente conservadora, así parece confirmarlo el tipo de m i nistro que normalmente escogió para este cargo. En medio de este contexto de inconformidad generalizada, que afectaba a los sectores obreros y medios, estudiantiles, políticos y sindicales, por las medidas represivas y los desfases administrativos, el escenario de la oposición fue invadido por la Alianza Nacional Popular (ANAPO). Este movimiento político, liderado por Gustavo Rojas Pinilla, capturó el vacío de oposición que había dejado eí MRL y aglutinó descontentos de toda clase y partido. Frente a las pro-
lopedia de Colombia
Las elecciones de 1970 y sus consecuencias
debidamente controladas, que al final arrojaron
De acuerdo con la reforma constitucional de 1968
los siguientes resultados: Pastrana, 1.625.288 vo-
sobre el desmonte gradual del Frente Nacional, los partidos de oposición podían inscribir a sus candidatos a nombre de su movimiento político, lo que aún no ocurría con las elecciones para el Congreso Los dos partidos tradicionales y firmantes del acuerdo frentenacionalista habían entrado en proceso de negociación desde 1969 para elegir al candidato o f i cial de este último período. La situación se complicó cuando asomaron las divisiones en las colectividades políticas. El partido conservador se dividió para la escogencia del candidato: Mariano Ospina, jefe
tos; Rojas, 1.561.468; Betancur, 4 7 1 . 3 5 0 ; Sourdís, 336.288. La sensación que se creó fue de fraude electoral. Las reacciones no se hicieron esperar y la legitimidad del nuevo presidente fue puesta en duda. El levantamiento popular se hizo inminente, pero fue controlado por el llamamiento a la desmovilización, la implantación del toque de queda y el establecimiento del estado de sitio. Sin embargo, esta situación tuvo consecuencias a largo plazo: tiempo más tarde surgiría el Movimiento 19 de A b r i l (M-19), como expresión de esta frustración.
del partido, apoyó a Misael Pastrana Borrero, mien-
Las elecciones evidenciaron la crisis del Fren-
tras que el ex presidente Guillermo León Valencia
te Nacional. Pastrana no había ganado claramente
era partidario de Belisario Betancur. El problema
frente a u n personaje que años atrás había sido de-
estaba en elegir u n candidato conservador que tam-
rrocado, exiliado y enjuiciado. Así como se había
bién estuviera cerca a los intereses liberales:
subestimado su figura política, el pacto bipartidis-
Pastrana había sido ministro de Gobierno de Lleras Restrepo, y se le consideraba una figura aceptable. Los liberales apoyaron esta opción y acordaron con el oficialismo conservador que Pastrana sería el candidato oficial del Frente Nacional. A u n así, Betancur fue candidato p o r el ala disidente del conservatismo. Los otros candidatos fueron: Evaristo Sourdís, candidato prácticamente regional por la costa Atlántica, y el general Rojas Pinilla, candidato por la
ANAPO.
La ANAPO, partido fundado por el mismo Rojas Pinilla, había captado aceleradamente a las masas descontentas en los últimos años. La incorporación de Alfonso López Michelsen al oficialismo liberal en 1967 y la consecuente disolución del MRL, había creado u n sentimiento de frustración entre los inconformes con el Frente. La ANAPO se fortaleció en la medida en que recogió esta masa. Para 1970 y al margen del bipartidismo, la Alianza aglutinaba sectores liberales y conservadores disidentes, clase media, obreros, campesinos y marginados urbanos. El movimiento no tenía una clara definición ideológica, pero hizo buen uso del lenguaje demostrando la ineficacia de las realizaciones frentenacionalistas y propugnando por la necesidad de u n «socialismo a la colombiana». También le favoreció la manera como el bipartidismo subvaloró la imagen de Rojas Pinilla al oponerle u n candidato como Pastrana: una figura poco clara y más bien desconocida en el ámbito político, si se le compara con los tres presidentes anteriores. En este contexto, el día de las elecciones tuvo u n desenlace oscuro. Los resultados de la contienda electoral favorecieron a Pastrana, con una diferencia mínima de 63.557 votos sobre su inmediato seguidor, Rojas Pinilla. Los primeros informes arrojaron
ta también había subestimado el descontento p o pular frente a la crisis que había antecedido a las elecciones, descontento que se identificaba con la historia del general Rojas, que en la colectividad era algo así como el símbolo de la marginalidad. Lo cierto fue que este resultado precipitó también la crisis de la
ANAPO.
El m o v i m i e n t o fue perdiendo
paulatinamente, tanto su capacidad de mantenerse en la oposición como su participación política dentro de las nuevas condiciones. Quienes habían rodeado y apoyado al general, poco a poco fueron retornando a las filas liberales y conservadoras de donde se habían desprendido. Pronto, este fenómeno precipitó la división dentro del anapismo y el resultado fue la formación de la
ANAPO
Socialis-
ta que buscó apoyo entre obreros y trabajadores públicos. Esta nueva tendencia necesitaba rápidamente acabar con la demagogia de Rojas y crear nuevos escenarios políticos. Los meses que siguieron a este conflicto fueron tensos. Se intensificaron las negociaciones
políti-
cas entre los sectores que habían participado en las elecciones, para buscar acuerdos de repartición b u rocrática, dada la reticente posición de la A N A P O en la defensa de sus intereses. Comenzó a correr el rumor de una posible intervención de militares leales a Rojas, situación que no del todo era extraña, si se tiene en cuenta que hacia finales de 1969 ya se habían producido ciertos roces entre las Fuerzas Armadas y el gobierno de Lleras Restrepo por el caso del general Guillermo Pinzón. En estas circunstancias, Pastrana Borrero recibió las credenciales que lo convertían en el cuarto presidente del Frente Nacional.
una pequeña ventaja de Rojas; el gobierno p r o h i -
La política del Frente Social
bió, entonces, a las emisoras la transmisión de da-
Desde su campaña presidencial, Misael Pastrana
tos, hasta que la Registraduría comunicara las cifras
Borrero había anunciado la necesidad de dar u n
Frente Nacional: Lleras Restrepo y Pastrana
sentido social a las transformaciones y reformas em-
partidos tradicionales afrontaban crisis y reorganiza-
prendidas por Lleras Restrepo, tendientes a la m o -
ciones: el partido liberal se dividió entre una fracción
dernización del Estado. Por esta razón llamó a su
que seguía al jefe de la colectividad, Julio César Tur-
administración Frente Social. Electo, le dirigió una
bay Ayala, y otra que seguía al ex presidente Lleras
carta a Lleras, en la cual le decía: «La pobreza y el
Restrepo, lo que tendría amplias repercusiones en las
atraso no son hechos individuales, sino males que
elecciones de 1974. Por su parte, el partido conser-
comprometen a todo el cuerpo social. Ello requiere
vador se debatía entre alvaristas, belisaristas y unio-
la continua participación y presencia de las múlti-
nistas (fracción liderada por J. Emilio Valderrama).
ples fuerzas que integran nuestra vida colectiva». En
Estas divisiones tuvieron dos consecuencias i m -
este sentido, su gobierno no llevó a cabo reformas
portantes. E n primer lugar, no permitieron conso-
importantes para buscar la modernización del Esta-
lidar una política estatal de acuerdos sobre puntos
do. Su interés se restringió, más bien, a la necesidad
fundamentales como la reforma agraria. En segundo
de solventar el equilibrio y la credibilidad que había
lugar, colocó en posición endeble el andamiaje ad-
perdido el Frente Nacional, para asegurar el sistema
ministrativo. Esto tenía que ver con el cuestiona-
bipartidista y permitir que continuara el desmonte
miento de la eficiencia del aparato gubernamental
gradual del acuerdo frentenacionalista.
y la consecuente necesidad de desmontar el Estado
Las propuestas iniciales de Pastrana dejaban
intervencionista, lo que no logró ser efectivo en to-
entrever su continuidad con los programas de m o -
dos los campos. Antes bien, el proteccionismo, que
dernización económica y política de Lleras. El go-
en buena medida había sido auspiciado por Lleras
bierno del Frente Social auspició durante los cuatro
Restrepo, tendió a acentuarse en algunos sectores
años siguientes el reacomodo de las hegemonías, de
como el energético, el minero y en la infraestructura
acuerdo con el crecimiento del poder de los grupos
de los servicios sociales. La renuncia de los direc-
financieros e industriales. Por esta razón, su política
tores de Impuestos Nacionales, Planeación Nacio-
privilegió ambiciosos proyectos de reforma urbana,
nal y el Incora aceleraron esta crisis administrativa
y depuró las relaciones con el sector privado.
y dejaron entrever las contradicciones por las que
Para dar curso a estos proyectos, el nuevo gobier-
atravesaba el Frente Nacional.
no debía contar con una estabilidad política general
También resultado de las divisiones y las crisis,
que no se tenía. Por u n lado, no contaban con una
fueron los obstáculos políticos que debió sortear esta
mayoría de apoyo en el Congreso; por el otro, los
administración en sus dos primeros años, en los cua-
(1966-1974) 1219
Misael Pastrana y sus ministros: Argelino Duran Quintero (Obras), Luis Carlos Galán (Educación), Hernando Currea Cubides (Defensa), Jorge Mario Eastman (Trabajo), Jorge Valencia Jaramillo (Desarrollo), Alfonso Patino (Hacienda).
220 j Gran Enciclopedia de Colombia
les jugó u n papel importante de resistencia el mismo
tear u n modelo de desarrollo y de intervención esta-
Congreso. Los proyectos presentados sobre reforma
tal en la misma dirección de las leyes que fortalecían
urbana, reforma agraria y educación fueron demora-
la urbanización y la centralización en las capitales.
dos y casi hasta mediados del gobierno de Pastrana
En cuanto a la primera estrategia, se buscó res-
la gestión legislativa habia sido mínima. A este desor-
tringir la mano de obra campesina al servicio de los
den político se agregaban otros obstáculos: críticas a
objetivos del sistema financiero de la construcción.
la ausencia de autoridad, por parte de los liberales; la
La migración campesina se volcó sobre los princi-
desgastada A N A P O , que ejercía una política de obstacu-
pales centros urbanos del país y fue empleada como
lización con el apoyo de algunos sectores liberales y
mano de obra. Se buscaba con esta estrategia elevar
conservadores; los gremios, que proclamaban la inefi-
los niveles de empleo y consumo dentro de la ciu-
ciencia del gobierno por su improvisación; los milita-
dad. La ventaja económica para el sistema la repre-
res, como el general Guillermo Pinzón, que invitaban
sentaba la poca inversión, pues la construcción era
públicamente a u n golpe militar ante el fracaso civil
u n campo en donde las importaciones necesarias
en la gestión del país. Entre tanto el presidente llama-
eran mínimas. Teóricamente, la expansión de la i n -
ba al orden y la disciplina a los partidos políticos.
dustria de la construcción implicaba el aumento en
Sólo el buen manejo que dio el gobierno a las elec-
la demanda de los productos agrícolas e industria-
ciones de 1972, favoreció la restitución de su imagen
les, el transporte y los servicios. Pero en la realidad,
política. La sensible baja en la votación de la
ANA-
la desventaja social fue el extremo empobrecimiento
PO, cerca de una tercera parte en comparación con
de la nueva capa social urbana, que terminó hacina-
la recibida en 1970, hizo que casi desapareciera el
da en tugurios en m u y malas condiciones sociales.
fantasma del fraude. Este hecho, unido a u n relati-
En una primera fase, esta estrategia buscaba reducir
vo fortalecimiento de los sectores: políticos aliados al
de u n 4 9 % a u n 3 8 % el porcentaje de trabajadores
pacto frentenacionalista, reforzó la autoridad de Pas-
rurales; esto significaba anualmente la migración de
trana que ya venía ganando terreno con las últimas
medio millón de potenciales obreros con sus fami-
propuestas económicas con las que ganaba el apoyo
lias a los centros urbanos, lo que acercaba el tota-
de los sectores industriales y financieros. De esta ma-
de inmigración a 2,5 millones de personas. Para es-
nera, hubo una relativa estabilidad en el gobierno de
tas el Plan Currie había pensado la construcción de
Pastrana hasta el final de su mandato, la cual fue po-
300.000 viviendas, que nunca fueron una realidad.
sible por la cohesión de la clase empresarial, satisfe-
La expectativa de esta estrategia era la de u n con-
cha por el crecimiento de la acumulación. Ese poder
sumo masivo de bienes, demanda originada en e_
se vio igualmente fortalecido por la recia represión
poder de compra de los trabajadores de la construc-
que se adelantó especialmente sobre los pujantes
ción. Debía producirse u n auge en el consumo de
movimientos estudiantiles, sindicales y campesinos.
productos populares, para que los obreros de la cons-
Proyecto económico
trucción pasaran luego a la industria, al ser requeridos por la expansión de este sector. Lo cierto fue que
La base del proyecto económico del Frente Social de
no se creó la dinámica esperada y, una vez pasado el
Pastrana se llamó «Las cuatro estrategias para el desa-
auge, el desempleo creció. El éxodo campesino fue
rrollo» y fue lanzado en diciembre de 1971. Este pro-
promovido por la política gubernamental de apoyo a
yecto recogía las ideas de Lauchlin Currie, y se inspi-
los grandes agricultores. Una vez que llegaba a la ciu-
raba en u n texto suyo lanzado en 1950, cuando era
dad, el campesino era vinculado a la construcción,
técnico consejero del Banco Mundial, llamado «La
pero cuando comenzó a decaer el crecimiento del
Operación Colombia». La idea fundamental giraba
sector, el que no estaba calificado para otras labores
alrededor de la necesidad de incentivar la migración
caía en el desempleo. Además, la presión de una ofer-
campesina a las grandes ciudades o a los polos de de-
ta de trabajo desorganizada y enorme permitía a les
sarrollo. Según este teórico, la mano de obra campe-
empresarios contratar mano de obra barata: en 1974,
sina era excesiva y barata, y al no estar calificada para
mientras el costo total de los factores de construcción
ser empleada en otras actividades se podía utilizar en
se elevó en u n 2 2 , 1 % , los trabajadores recibieron a_-
pos del deseado desarrollo. Las cuatro estrategias fue-
zas de u n 8,4% en sus salarios y el costo de la vida
ron entonces: la industria de la construcción urbana
subió en u n 15%. La disminución del desempleo por
como sector prioritario del plan, las exportaciones, la
este mecanismo fue u n logro efímero.
reforma agraria y una redistribución del ingreso. Estas cuatro estrategias se presentaron como u n cambio de enfoque respecto a las proposiciones an-
Esta estrategia contó, además, con una serie de modificaciones al sistema
financiero
del país, a.
introducirse las Unidades de Poder Adquisitivo
teriores, superando principalmente la influencia de
Constante
la
Este programa echaba atrás en su esencia
Nacional, las inversiones entre 1959 y 1969 estabar.
los pocos adelantos de la reforma agraria, al plan-
prácticamente estancadas, lo mismo que el emplee
CEPAL.
(UPAC).
Según el informe de Planeación
Frente Nacional: Lleras Restrepo y Pastrana
desde 1964: era necesaria la creación de condicio-
una reforma a la distribución de la tierra. Pero la
nes para atraer el ahorro al sector de la construc-
primera se impuso sobre la segunda. Esta política
ción. Creado el
también se derivaba de las preocupaciones de la
UPAC
en 1972, se reajustaba su valor
cada tres meses, de acuerdo con el costo de la vida
administración anterior. Pastrana heredó una difícil
y con u n interés del 5,5% anual. Este ahorro fue ca-
situación agraria, que trató de matizar dentro del
nalizado a través de la creación de corporaciones de
plan integral de las cuatro estrategias, pues el au-
ahorro y vivienda y de los intermediarios financie-
mento de la productividad llevaba implícita la idea
ros. N o faltaron las críticas de los gremios industria-
de incentivar el éxodo campesino en la medida en
les y agricultores a este sistema, por los peligros que
que se fuera produciendo excedente agrícola. En
representaba en la acumulación y en la inflación,
1970, se constituyó una Comisión de Evaluación de
que efectivamente se produjeron. Las proyecciones
la Reforma Agraria con representación de las asocia-
de esta estrategia terminaron beneficiando y conso-
ciones de agricultores. La idea de estos era la expro-
lidando a las firmas constructoras.
piación de tierras débiles y de baja productividad,
La segunda estrategia, el incremento en las exportaciones, tenía por objeto conseguir las divisas
y m u y excepcionalmente de tierras bien cultivadas. El gobierno de Pastrana privilegió el incremento de
necesarias para financiar las importaciones requeri-
la productividad agrícola a través de varios meca-
das por otros sectores y servir la deuda resultante de
nismos, como por ejemplo el aumento de la carga
la financiación externa. Esta política de exportación
fiscal mediante u n impuesto fijo sobre el valor ca-
había sido adoptada por Lleras Restrepo; Pastrana
tastral de la tierra. Este tipo de actitudes estatales
quiso ampliarla mediante el estímulo, tanto a la
tuvo muchas resistencias y, para encontrar salidas
creación de nuevas empresas exportadoras como a
negociadas con los grandes agricultores, el gobierno
los cultivos de exportación. Dentro del plan de las
convocó en 1972 una reunión con los representan-
cuatro estrategias, esta sí obtuvo u n balance positi-
tes de las sociedades de agricultores, excluyendo a
vo: según el Incomex el incremento de las expor-
la
taciones fue de 29,2% entre 1971 y 1972, 4 4 , 3 %
ron conocidos como el Acuerdo de Chicoral, con el
entre 1972 y 1973; y de 34,1 % para 1974.
cual se inició el desmonte de la reforma agraria y la
Este último año fue especialmente importante, porque el crecimiento de las exportaciones sobrepasó
ANUC
y pequeños agricultores. Sus resultados fue-
creación de una política alternativa para el sector. Por medio de este acuerdo se establecieron las
el de las importaciones, dando una situación favora-
barreras proteccionistas necesarias en contra de la
ble al comercio exterior. Asimismo, el precio del café
reforma y se introdujeron complejos criterios para
se elevó a 77,9 centavos por libra con respecto a los
clasificar la tierra de acuerdo con su explotación; así
49,3 de 1971. Las exportaciones menores lograron
se hacía casi imposible su expropiación. Se llegó a u n
superar al café, siendo las primeras el 56% del total,
acuerdo sobre el impuesto que había propiciado la re-
en comparación con el 36% de 1971. Los textiles, el
unión, el cual a largo plazo no fue efectivo porque no
banano, el azúcar y el algodón fueron privilegiados
existían los mecanismos que garantizaran el reajuste
por el alza de los precios internacionales, especial-
de los valores catastrales de acuerdo con la inflación.
mente para las materias primas. Estos alcances de la
El último aspecto importante de este acuerdo, fue
política exportadora denotaban cierto éxito de la se-
la creación del Fondo Financiero Agropecuario que
gunda estrategia: Colombia podía ser u n país expor-
centralizó los recursos crediticios para el sector, que
tador aprovechándose de la debilidad de los costos
antes canalizaba el Fondo Financiero Agrario. De esta
salariales. Estos aspectos favorecieron la capacidad de
manera, el Acuerdo de Chicoral fue una victoria de
reserva, que en la década anterior habla sido deficita-
los grandes propietarios al negociar los mecanismos
ria y en 1974 alcanzaba 430 millones de dólares. Es importante mencionar que el Certificado de
para capitalizar el campo. Las consecuencias se vieron en la variación de los patrones ocupacionales, en el
Abono Tributario (CAT), que había sido instaurado
decrecimiento de la población rural y en los cambios
por Lleras en 1967 y que proveía de u n subsidio del
demográficos y productivos de los pequeños sectores
15% a los exportadores, fue ampliado por Pastrana a
agrícolas, que fueron sacrificados.
otros sectores a manera de estímulo. Pero, a la postre,
Teóricamente, la reforma agraria no había sido
resultó u n arma de doble filo, pues además de resultar
abandonada. Pero el poder que habían tomado los
costoso para el tesoro público (860 millones de pesos
terratenientes llevó a declarar prácticamente ilega-
solamente en 1972) y repercutir en la inflación, es-
les las expropiaciones. En consecuencia, a comien-
timuló a exportadores ficticios que la utilizaron para
zos de 1974, el Incora estaba en crisis y la reforma
aprovechar el subsidio: este fraude continuado le sig-
agraria no era más que u n resultado de la política
nificó al Estado 3.000 millones de pesos. La tercera estrategia buscaba el aumento de la productividad agrícola y teóricamente no excluía
de estímulo a las alzas en la productividad. Esta estrategia favoreció principalmente a la agricultura comercial -arroz, algodón, azúcar y banano-, pues
(1966-19/4)
121
222 I Gran Enciclopedia de Colombia
hacia ella hubo una afluencia intensiva de capital y
distribución de las mismas, proceso estancado por
las ganancias generadas por la nueva producción
la inmovilidad estatal frente a la reforma agraria y
revirtieron directamente en los grandes propieta-
por
rios, en detrimento de los sectores tradicionales de
pecialmente con el Acuerdo de Chicoral.
la acción de los terratenientes, favorecidos es-
pequeños campesinos, que producían maíz, trigo, papa, fríjol, cacao, yuca, y que prácticamente no
Pero el acontecimiento más sobresaliente l o constituyó la aparición del M - 19, el 16 de enero de 1973.
crecieron. E l auge de la agricultura comercial se vio
Con
reflejado en el crecimiento del costo de vida, que
con las armas al poder», inició una serie de acciones
el lema «Con el pueblo, con María Eugenia,
llegó al 30,8%, límite impensable en aquel enton-
audaces que eran la respuesta al supuesto fraude
ces. De esta forma, la estrategia agrícola no logró
electoral de 1970. Había surgido de la ANAPO Socia-
producir el excedente necesario para la población
lista, heredando de ella el sabor populista, la acción
que estaba dejando el campo. Como creció el em-
urbana y la autodefinición como una alternativa de
pleo, los precios de los alimentos básicos se enca-
gobierno a corto o mediano plazo. Su aparición se
recieron ante la insuficiencia de la oferta, ocasio-
constituyó en u n acontecimiento novedoso dentro
nándose el efecto inflacionario que ya se preveía.
del contexto de las tradicionales guerrillas colombia-
La cuarta estrategia, «Una mejor distribución del
nas, pues estaba formado por elementos provenien-
ingreso», debía ser el resultado de la primera es-
tes de diferentes estratos: además de los militantes
trategia y de la anulación de las exenciones t r i b u -
de la ANAPO, participaba una especie de burguesía
tarias. Se buscaba elevar los ingresos reales de los
nacionalista, miembros de la izquierda tradicional y
sectores populares. Durante el auge de la industria
algunos retirados de las FARC. Además, el enfoque y
de la construcción el empleo aumentó, lo mismo
el lenguaje que comenzó a utilizar fueron efectistas
que el gasto social dentro del contexto del total de
y nacionalistas. Por esto, por sus jefes, por el teatro
la inversión pública, pero los subsidios a los expor-
de operaciones y por el discurso, el M-19
tadores, las exenciones fiscales a los industriales y
tió en la primera guerrilla urbana.
se convir-
la orientación del crédito a sectores privilegiados,
La acción con la que anunció su aparición, el
colaboraron en buena medida a que fuese mayor
robo de la espada de Bolívar, y la toma del Concejo
la inflación sobre la redistribución del ingreso. La
de Bogotá, preanunciaban su orientación ideológica,
mano de obra barata, empleada según las propues-
que retomaba elementos bolivaristas, populismo e
tas de las cuatro estrategias, terminó p o r fortale-
izquierda. La recuperación del ideal bolivarista es-
cer y enriquecer a los industriales y comerciantes,
taba basada en la concepción de que los símbolos
mientras que el alza real del salario era inferior a
patrios eran u n patrimonio nacional y no simples
cualquier otro de los insumos de la construcción.
valores burgueses, p o r esto la guerrilla debía res-
Cuando decreció la industria de la construcción,
catar tanto las raíces como las tradiciones históri-
creció el desempleo y afectó los ingresos popula-
cas nacionales. Estas razones permitieron que su
res. Algo similar ocurrió c o n la estrategia agrícola
orientación fuera más estratégica que doctrinaria
y la actividad exportadora, que empobrecieron al
y marcó su preferencia p o r las acciones especta-
campesino y a los sectores medios, empeorando su
culares con las cuales se caracterizaría durante los
situación relativa. Los salarios tendieron a retrasar-
próximos años: el primer secuestro de u n avión a
se con respecto a los precios.
Conflictos sociales La administración Pastrana, que se había iniciado
Cuba, el juicio y asesinato de José Raquel Mercado, el robo de armas del Cantón Norte del Ejército, la toma de la Embajada de la República Dominicana, de Florencia y del Palacio de Justicia, entre otras.
con el conflicto suscitado por las elecciones de 1970,
Su objetivo, por esta razón, no eran las Fuerzas Ar-
enfrentó graves conflictos sociales en todos los cam-
madas sino la opinión pública.
pos. Ante la fragilidad del Frente Nacional, este últi-
Dentro de u n ambiente económico y social deli-
mo gobierno vio resurgir con fuerza los embates de
cado, se inició en 1973 la campaña para el siguien-
la oposición que adquirieron diversos matices.
te período presidencial. El liberalismo, d i v i d i d o
Dentro del contexto del proyecto económico, el
entre lleristas y turbayistas, buscó la unificación.
movimiento campesino se fortaleció adquiriendo
Carlos Lleras había propuesto su nombre para las
nuevas formas de lucha. Liderado por la ANUC, llevó
elecciones, pero sus enfrentamientos con Alfonso
a cabo cerca de 2.000 invasiones a l o largo de todo
López Michelsen y Turbay Ayala, el temor de cier-
el territorio nacional. Solamente en el mes de oc-
tos sectores a su autoritarismo y la sospecha de
tubre de 1971 los usuarios campesinos se tomaron
que pensaba dar excesivo poder al Estado, llevaron
cerca de 150.000 hectáreas de tierras movilizando
a que la Convención Liberal escogiera a Alfonso
cerca de 30.000 personas. Esta actitud era el resul-
López como candidato único. Por su parte, el par-
tado de la necesidad de tierras y de una adecuada
tido conservador eligió a Alvaro Gómez Hurtado;
Frente Nacional: Lleras Restrepo y Pastrana
la ANAPO, que después del desastroso resultado de
Social fue una economía restringida: l o anunciado
las elecciones de 1972 estaba en crisis, alimentada
en 1970 nunca fue realidad.
además por la disidencia de muchos de sus m i e m bros, lanzó el nombre de María Eugenia Rojas. La izquierda, representada principalmente por el Movimiento Obrero de Izquierda Revolucionaria (MOIR),
y el partido comunista no habla logrado
llegar a acuerdos de ningún tipo. El partido comunista se preocupó desde 1972 por buscar alianzas con la A N A P O , y
finalmente
las estableció
con
el M o v i m i e n t o A m p l i o Colombiano (MAC), u n ala
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en Colombia: Bogotá,
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1 , 7, 9, 10, 1 3 - 1 6 , 2 2 , 3 0 ,
disidente de aquella. Para las elecciones, estos tres
DEPARTAMENTO NACIONAL DE PLANEACIÓN, Las
movimientos conformaron la Unión Nacional de
gias: Bogotá, 1 9 7 2 .
Oposición ( U N O ) , lanzando por candidato a Her-
EASTMAN, JORGE M A R I O , Radiografía
nando Echeverry Mejia. Con
todo este gran m o v i m i e n t o social, políti-
co y económico terminaba el Frente Social, último gobierno del Frente Nacional. A lo largo de estos cuatro años las clases dominantes habían demostrado su capacidad de recuperación. A l final del período, podían exhibir u n panorama temporalmente convincente: tasas de crecimiento elevadas, prosperidad en empresas capitalistas, como las industriales, agrícolas y financieras, y buenas reservas de divisas. Esto había sido posible gracias a varias condiciones: la situación internacional que las favoreció y una estratégica vigilancia sobre las
32,
(1972-1975). cuatro
estrate-
de un indoctrinado.
rradores para un juicio histórico de la obra de Lleras
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Restrepo,
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de política
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1989.
humanos. Pero el costo social fue alto: los pocos
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avances de la reforma agraria desaparecieron, el
Borrero»,
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poder adquisitivo del trabajador bajó y se acen-
do de la República, 1 9 8 7 .
tuó una creciente inflación que hacía las veces de
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detonante de conflictos sociales. Si el Frente Na-
lombia. Del Erente Nacional a la Apertura
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