¿Qué son?
Son un conjunto de conductas que nos permiten comunicarnos y por lo tanto relacionarnos con los demás de manera satisfactoria. Se pueden aprender e ir desarrollándolas día a día con la práctica.
Tipos 1. Habilidades básicas
Escuchar. Iniciar una conversación Formular una pregunta Dar las gracias. Presentarse y presentar a otras personas.
2. Habilidades complejas
Empatía. Capacidad de ponerse en el lugar de la otra persona. Inteligencia emocional. Habilidad para manejar las emociones
Asertividad. Expresar deseos sin herir los sentimientos de los demás. Negociación. Búsqueda de una solución que resulte satisfactoria para todas las partes. Capacidad de disculparse Pedir ayuda. Convencer a los demás.
¿Para qué sirven?
Mejorar la comunicación Mejoran las relaciones sociales Ayudan a obtener más amistades Impiden la presión social. Mantienen la autoestima Disminuyen el estrés Mejores chances de avanzar profesionalmente
¿Tengo dificultades con las habilidades sociales? Si te cuesta relacionarte con los demás y mantener tus relaciones sociales, si sientes que tu relación de pareja o con tus hijos no es la adecuada, si te cuesta hacer valer tu opinión o negarte a las peticiones de los demás... es posible que tengas un déficit de Habilidades sociales.
¿Cómo mejorar mis habilidades sociales? Reconoce en voz alta tus emociones negativas para sentirte más cómodo con la situación Centra la conversación en la persona con la que hablas Mantén contacto visual Conoce su nombre lo antes posible y nómbralo de vez en cuando
Pregúntate los motivos de los demás para aumentar tu empatía Parafrasea lo que te dicen para demostrar que escuchas No esperes a sentirte confiado antes de actuar, ¡actúa! La práctica hace al maestro
¿Cómo mejorar las habilidades sociales de los niños?
Darles un ejemplo con nuestros buenos hábitos de convivencia. Reforzar la autoestima Enseñarles a respetar y tolerar a los demás. Apoya sus iniciativas. Fomentar el diálogo dónde se sientan escuchados y útiles. Que tengan un ambiente rico en relaciones, ya que las habilidades sociales se aprenden practicándolas. Es importante que estemos para apoyarles, pero no para solucionar sus problemas.