Ensayo_comunicacion_efectiva_y_redes_soc.docx

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REDES SOCIALES: COMUNICACIÓN EFECTIVA O COMUNICACIÓN IMPERSONAL Desde el inicio de los tiempos, el hombre siempre ha tenido la necesidad natural de comunicarse con los demás, expresar ideas, emociones, pensamientos, saber y obtener información. Por eso se dice que somos seres sociales y tendemos a formar comunidades y organizaciones. En la actualidad las posibilidades de relacionarse con otras personas son mayores si se comparan con el pasado, esto se da gracias a la tecnología y al surgimiento de las redes sociales que ha logrado acortar distancias y está permitiendo establecer diversos tipos de vínculos (amistosos, profesionales, científicos, etc), sin embargo es necesario preguntarse como están afectando estas nuevas formas de comunicación a la interacción personal, ya que al tener un nuevo mecanismo de comunicación tan directo y sin barreras, este podría desencadenar alteraciones en el modelo tradicional emisor – receptor, ya que es bastante común ver ahora a las personas comunicándose a través de mensajes en la red en lugar de hacerlo cara a cara e incluso empiezan a surgir variantes en la misma comunicación escrita adoptando nuevos estilos gramaticales, ocasionando que los mensajes no sean del todo claros y que las interferencias sean mayores, de esa manera se empieza a generar distorsión en la comunicación. El avance acelerado de la tecnología ha dado paso a nuevas formas de comunicación en el mundo, rompiendo las barreras de tiempo y espacio, formándose así las tan famosas redes sociales a las que casi la población entera se ha adherido, según Tapia (2011) hoy en día se empieza a reflejar como estas herramientas han ido dando paso a la generación de nuevos canales de comunicación, nuevos espacios de intercambio de información lo cual también ha empezado a influir en la manera en que manejamos nuestras relaciones personales, ya que a pesar que este nuevo entorno nos ofrece una serie de oportunidades impensadas años atrás, también está creando una generación de dependientes tecnológicos con una necesidad imperiosa de estar conectados en todo momento. Como concepto de redes sociales se menciona que son “servicios basados en la web que permiten a sus usuarios relacionarse, compartir información, coordinar acciones y en general, mantenerse en contacto” (Orihuela, 2008, p.2) y según Del Moral (2005) las personas emplean las redes sociales por los siguientes 4 motivos:1)Mantenimiento de amistades: seguir en contacto con amigos, colegas, ex compañeros de trabajo, etc., quienes de no ser por estos servicios irían perdiendo relación, 2) Nueva creación de amistades: cada una de las personas que participa en las redes, relaciona de una u otra forma, a sus contactos con segundas o terceras personas, que pueden a su vez interactuar y conocerse, 3) Entretenimiento: existe un perfil de usuarios que las usa como portal del entretenimiento (juegos, explorar las actualizaciones del estado de otros usuarios, mirar las vidas ajenas, etc); utilizando en muchos casos el recurso de observar al otro sin ser visto, y 4) Gestión interna de organizaciones empresariales: uso circunscripto a empresas dentro de cuya estructura se crean redes privadas para la realización de trámites, comunicaciones, contactos con otros profesionales, etc. Básicamente las redes sociales nos permiten

establecer diversos tipos de contacto con otras personas que pueden tener tus mismos intereses o no. Dentro del ranking de las redes sociales más usadas tenemos encabezando la lista a Facebook, seguido de Youtube, Twitter, Google+, LinkedIn, Instagram y por ultimo Pinterest, cada una de ellas permiten conectarse con miles de personas, rompiendo las barreras físicas, sociales, geográficas o por temas de discapacidades. En este sentido cada uno de estos nuevos entornos permiten a los individuos compartir y acceder a todo tipo de información de manera instantánea, establecer lazos de amistad a partir de intereses comunes logrando así que se genere una gran cantidad de comunidades virtuales, y tal como indica Pérez (2010) esto se ha convertido en todo un fenómeno que incluso ha contribuido con campañas electorales como en las elecciones estadounidenses del 2008, en especial durante la campaña de Barack Obama, ya que ha sido considerado como un punto de inflexión en el uso de redes sociales dentro de las estrategias de comunicación. De igual forma el mundo de las comunicaciones ha encontrado en las redes sociales un aliado estratégico tal como indica Flores (2009), de tal manera que ahora prensa, radio y televisión se apoyan de esta nueva herramienta para poder transmitir mensajes en tiempo real a toda la población, logrando que cada persona conectada a la red sea un nexo informativo, logrando que millones de personas compartan noticias, información y opiniones en la red. Como se puede apreciar el poder de las redes sociales es cada vez más fuerte, es parte del día a día de cada una de las personas de este planeta y es tanta la influencia que ha generado en el ser humano que hoy en día muchas personas no logran imaginarse un mundo sin redes sociales, necesitan tener acceso a la información y también compartirla para sentirse dentro de la “comunidad”. A pesar de que este nuevo ámbito tecnológico presenta muchas ventajas y contribuye de gran manera con el establecimiento de nuevas formas de comunicación e interacción personal, también se ha empezado a notar cambios en el modo en como las personas socializan con su alrededor, las formas tradicionales de comunicación están empezando a verse afectadas por la tecnología. Con relación a las relaciones interpersonales Walther (2007) presenta tres categorías de relaciones que se pueden establecer en la comunicación mediada por ordenador, estas son: 1) impersonales: la presencia del ordenador como factor de despersonalización, 2) interpersonales: existen situaciones en donde se da una verdadera comunicación interpersonal, semejante a la de las comunicaciones cara a cara, de modo que no necesariamente puede afirmarse que la mediación del ordenador genera comunicación impersonal; 3) hiperpersonales: la comunicación mediada por ordenador puede facilitar las condiciones para que la comunicación fluya con mayor calidad o intimidad, debido a que la mediación de tecnología puede facilitar, por ejemplo la remoción de algunos obstáculos que impiden una comunicación interpersonal de calidad, finalmente Walther (2007) señala que

la mediación tecnológica hace que la tipología de relaciones personales se amplíe en comparación con las limitaciones asociadas a las relaciones cara a cara. Dentro del marco que envuelve a la interacción de las personas con este nuevo contexto virtual el autor Díaz(2011) empieza a notar ciertas características en las personas, por ejemplo las redes sociales permiten a cada individuo adoptar identidades diferentes, cada uno moldea la imagen a mostrar, generalmente se busca proyectar una imagen perfecta de sí mismo y se trata de no mostrar las cosas que en la vida real se complica ocultarlas, todo este hecho conlleva al punto de que ahora cuando se establece un vínculo con una persona por la red, se necesita realizar una decodificación del individuo y la única herramienta que se tiene para diferenciar la verdadera información de la falsa será el escepticismo. De igual manera el lenguaje empleado en estas redes empieza a ser distorsionado, ya que debido a la velocidad con la que fluye la información los individuos no cuentan con el tiempo necesario para validar o corroborar la información, pero sobre todo para profundizar lo que se está consumiendo. Otra de las dificultades asociadas con el lenguaje es la interpretación de los mensajes, ya que por su naturaleza son rápidos, breves y carecen de contexto, llevando a confusiones y poniendo en duda lo que leemos incluso se llega a dudar del mensaje y del mensajero, todo esto por influencia de la comunicación no presencial y asíncrona. La forma en la que construimos y presentamos la información también está cambiando, el lenguaje en la redes tiende a usar mensajes cortos y a ser más simbólico, la velocidad de las comunicaciones virtuales ha empezado a afectar la escritura de estudiantes y profesionales. Ahora la norma de la sociedad virtual indica que se escribe como se habla y “la gramática y sus estructuras, así como la ortografía pierden importancia” (Imaña, 2011, p. 5), sin duda esto afecta al tipo de información que se emite y se consume puesto que ya no es lo que se dice sino lo que se muestra. Las imágenes lo cambian todo, simplifican los mensajes pero al mismo tiempo pueden complicarlos llevándolo a malas interpretaciones, debido a la falta de contexto y a la falta de retroalimentación inmediata. Es claro que este tipo de mal entendidos también se da en el mundo físico pero en este caso tenemos la oportunidad de poder aclarar los puntos que resulten confusos y poder alinear los mensajes. Otro punto que es importante resaltar con relación a los efectos de las redes sociales, es el comportamiento que empieza a adoptar el propio ser humano con su entorno, según Caplan (2002) se está pasando de un ambiente donde antes era necesario socializar cara a cara para poder establecer una red de amigos, a uno donde solo es necesario un click o una invitación. Hoy en día es habitual encontrar grupos de jóvenes sentados alrededor de una mesa, sin mirarse entre sí y pendientes de la pantalla del dispositivo móvil que cada cual sostiene en sus manos, un comportamiento que difiere de lo que debería ser una interrelación humana activa, esto podría llevar a situaciones de aislamiento del mundo real, sobre todo para las personas tímidas o con baja autoestima que requieren mantenerse en el

anonimato de la virtualidad, lo que resulta mucho más fácil para ellos que afrontarse a una relación real. Este nuevo entorno virtual generado por las redes sociales, está llevando al ser humano a invertir su tiempo en mantenerse conectado, según Díaz (2011) las personas están pendientes de las publicaciones de su red de amigos, de las novedades o incluso están al pendiente de lo que ellos mismos van a publicar, se cuida al milímetro lo que se expondrá de cada uno, dejando de lado la espontaneidad e incluso cambiando hábitos o costumbres. Esta necesidad de conectividad hace que se empiecen a dejar de lado actividades que implican contacto físico con las personas, como entablar una conversación con un amigo, salir a caminar en compañía de alguien, tomar unas cervezas con los compañeros del trabajo, etc, sin darnos cuenta se está perdiendo poco a poco el contacto real y cada vez se hace más notorio como se dificulta mantener una conversación cara a cara. De acuerdo a un estudio publicado por ComScore, los latinoamericanos invierten un tiempo de 8.6 horas diarias dentro de diversas redes sociales, frente a 2.4 horas que se presenta en Asia Pacifico, este indicador refleja que estamos dejando de dedicarle tiempo a actividades de interacción personal, las redes sociales están dejando de ser un complemento de las comunicaciones tradicionales y están tomando mayor protagonismo. Finalmente, si bien es cierto que las redes sociales abre todo un mundo de oportunidades comunicativas y de información, se ha llegado a la conclusión de que estas están alterando los modelos de comunicación convirtiéndolas en más impersonales mediante las publicaciones realizadas día a día por las personas y también están generando comunicaciones inadecuadas ya sea porque se hace uso de mensajes muy encapsulados que no permiten comprender con claridad lo que se desea transmitir o porque el lenguaje empleado empieza a distorsionarse y genera ruido al momentos de comunicar una idea. Es necesario tener en cuenta que la tecnología siempre estará ahí para hacer más fáciles las cosas a la humanidad, pero es necesario tener claro que la tecnología nunca reemplazará la interacción cara a cara entre dos personas, se debe de ver a la tecnología como una ayuda o complemento pero no como la nueva forma de establecer una relación interpersonal, ya que de lo contrario con el tiempo estaremos perdiendo costumbres básicas de interacción y pasaremos a ser simplemente individuos aislados en la red.

ENSAYO SOBRE LA INFLUENCIA DE LAS REDES SOCIALES EN LA SOCIEDAD CONTEMPORÁNEA En la sociedad actual, el impacto de los medios tecnológicos ha sido tal que ha impregnado casi por completo las esferas de la vida cotidiana: el uso del internet así como el auge de las redes sociales como medio de comunicación y representación individual –es decir, como estímulo del forje de la identidad– es ya prácticamente un suceso recurrente en la vida de buena parte de la sociedad. El impacto de las redes sociales en particular ha sido de tal magnitud, que ha repercutido e influido notoriamente en el ámbito comunitario e individual, lo que ha tenido como consecuencia el advenimiento de ciertas ventajas y desventajas que no pueden soslayarse. Un estudio más o menos general de las consecuencias que ha generado la evolución de las redes sociales como motor de transformación de la sociedad contemporánea resultaría bastante amplio, por lo que sólo me limitaré a abordar algunas concepciones y consecuencias sociológicas en el marco del pensamiento del sociólogo Zygmunt Bauman. En su libro Modernidad Liquida, Zygmunt Bauman señala que el contexto social actual se sustenta sobre principios de individualidad y autosuficiencia del ser humano; en sus palabras: “la necesidad de transformarse en lo que uno es constituye la característica de la vida moderna” (Bauman, 37). La individualización, sin embargo, no descarta la necesidad de establecer vínculos y pertenecer a un grupo o comunidad, que en este caso se traduce en lo que algunos sociólogos han llamado comunidad virtual; en este sentido, se expresa Bauman citando a Jock Young: “Hombres y mujeres buscan grupos a los cuales pertenecer, con seguridad y para siempre, en un mundo en el que todo lo demás se mueve y se desplaza, donde ninguna otra cosa es segura” (Bauman, 182). En este punto, el argumento de Young cobra una vigencia relevante: el sentido de pertenencia es una necesidad constante y además un medio de reiterar la individualidad: las redes sociales, en este sentido, cobran un papel fundamental en la construcción de la identidad individual del sujeto actual. Sin embargo, en muchos casos, contrariamente al objetivo de los individuos de relacionarse dentro de una red social prometedora en términos de ventajas sociales, la comunidad generada en el marco de las mismas es más bien frágil e inestable: “es un hogar aparente…una clase de hogar que, para la mayoría de las personas, parece más de cuento de hadas que fruto de la experiencia personal… El hecho de quedar fuera del terreno de la experiencia ayuda: es imposible poner a prueba la benévola calidez del hogar, y sus atractivos, en tanto imaginarios, no se contaminan con los aspectos menos simpáticos de la pertenencia forzosa y las obligaciones no negociables….Ser un hogar ampliado también ayuda”. (Bauman, 183) Así, puede concluirse que las redes sociales buscan estimular la satisfacción de necesidades de comunicación e información de los individuos con un carácter, cabe reiterar, de “instantaneidad”; de esta manera, Bauman lo define como “una satisfacción inmediata, en

el acto, pero también significa el agotamiento y la desaparición inmediata del interés” (Bauman, 127). Lo que se deduce de esta premisa es que la instantaneidad y el progreso tecnológico actual en materia comunicativa e informativa, tendrían que ser un beneficio; en oposición, el avance tecnológico provoca la desaparición de la comunicación directa, mientras que la “nueva instantaneidad del tiempo cambia radicalmente la modalidad de cohabitación humana – y especialmente la manera en que los humanos atienden (o no atienden, según el caso) sus asuntos colectivos, o más bien la manera en que convierten (o no convierten, según el caso) ciertos asuntos en temas colectivos-“. (Bauman, 135) Hoy en día lo que requiere explicación y comprensión es la creciente publicidad de las ideas comunitarias como cuestión social importante; las redes sociales funcionan como espacio para la explosión y popularidad de éstas y para llevar a cabo el ejercicio de comunicación y pertenencia a un grupo, estableciendo el individuo, como se ha dicho, una identidad propia dentro de las comunidades. Empero, cabe destacar que dentro de la libertad de estas redes surge la necesidad de crear identidades lo más parecidas al ideal individual –y en algunos casos colectivo cuando se atiende a estereotipos–, causando la preproducción de personalidades falsas que distan mucho de la realidad material de cada ser humano: ser partícipe de una comunidad virtual o red social conlleva en algunos casos a usar una máscara; a este respecto Zygmunt Bauman cita las palabras de Richard Sennett: “Usar una máscara es la esencia de la civilidad. Las máscaras permiten una sociabilidad pura, ajena a las circunstancias del poder, el malestar y los sentimientos privados de todos los que la llevan”. (Bauman, 103) En otro sentido, las redes sociales son, además, un reflejo de la demanda de los individuos por visualizar las experiencias y modos de vida ajenos, como una salida a las propias o únicamente con la finalidad de obtener ejemplos a seguir; “La observación de la experiencia ajena, la posibilidad de atisbar las tribulaciones de los demás, despierta la esperanza de descubrir los problemas causantes de la propia desdicha, darles un nombre y buscar maneras de combatirlos o resolverlos” (Bauman, 172); proporcionalmente, el liderazgo ha sido cambiado por el espectáculo; quien domina y tiene bajo su control las emisiones de ondas maneja el entorno habitado, y decide su forma y contenidos. Así, la existencia de las redes sociales ejerce una influencia importante en el mundo actual pues lo transforma día con día junto con sus sociedades e ideologías. Los individuos son muy parecidos a su época y actúan en reacción a ella: son obligados a ser de una manera para poder sobrevivir y resistir a sus cambios. La sociedad contemporánea, cargada con elementos como el rápido progreso tecnológico, la instantaneidad en la comunicación, la individualidad y la ausencia, por otro lado, de comunicación directa, forja seres humanos con características muy particulares: “Cuerpos delgados y con capacidad de movimiento, ropas livianas y zapatillas, teléfonos celulares (inventados para el uso del nómade que necesita estar permanentemente en contacto), pertenencias portátiles y desechables,…símbolos principales de la época de la instantaneidad”. (Bauman, 137).

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