El Monstruo De Jade

El monstruo de Jade Introduccion Esta aventura, basada en el relato “La transición de Juan Romero” de HP Lovercraft, y en el mito del laberinto del minotauro, esta pensada para que sea un interludio en alguna campaña que este dirigiendo el director de juego y de este modo que los personajes puedan mejorar, aunque no están exentos de peligros precisamente, pues en ella hay una criatura con mas poder del que los personajes pueden esperar vencer físicamente.

Inicio Los PJs llegan a una aldea cercana a unas montañas, aunque el lugar esta algo separado de los caminos imperiales mantiene unos accesos bastante bien cuidados, los campos son cultivados con esmero e incluso hay una pequeña guardia local de mercenarios que llevan un brazalete verde. La aldea en si esta bastante bien cuidada, los edificios tienen cimientos de mampostería, cosa poco común en las aldeas, y todas las casas están pintadas con vivos colores haciéndola un sitio peculiar como si de la Ciudad Prohibida se tratase. Las calles están empedradas y hay farolillos para iluminarlas en las horas nocturnas. En la plaza hay un estrado circular donde la gente puede hablar o donde se realizan combates de kungfu para arreglar discrepancias. De hecho según la legislación del pueblo todas las peleas deben de solventarse en este lugar o los alborotadores pasaran un par de horas en el calabozo y luego tres latigazos en la misma plaza. (de esto pueden enterarse los PJs por las buenas o por las malas) En esta plaza también hay varios puestos de comida y de pequeños objetos y bisutería, algo extraño en un lugar apartado de las rutas comerciales, pero no tanto como que la aldea posea, además en el centro neurálgico, dos posadas / tabernas, una de ellas “El dragón de Jade” de lujo y la otra “Las cuatro estrellas” mas humilde. Estos dos establecimientos se encuentran opuestos en la plaza pero también se pueden encontrar una herboristería, bastante bien surtida y la casa del alcalde, donde siempre hay dos mercenarios de guardia en la puerta. El resto de la aldea parece mas bien un barrio de gente rica de alguna

capital del Imperio, mas que un pueblo de las montañas. Incluso el templo que esta tras las herboristería tiene un estanque con carpas doradas y un ídolo de Buda de oro. Los habitantes de la aldea aunque llevan ropas de trabajo van todas limpias y parecen tener una buena alimentación. Mientras que los visitantes llevan kimonos de varios lugares del imperio, con colores de algunas provincias lejanas. Los PJs seguramente verán que este lugar es algo pintoresco, y no es difícil averiguar que la aldea posee unas minas de jade en propiedad y que aunque paguen unos fuertes impuestos hay riquezas para todos los que en ella viven ya que venden el resto a los comerciantes que vienen a comprarlo. Los hombres se encargan de la minería mientras que mujeres siembran y recogen las cosechas de arroz. Incluso los niños pasan el día aprendiendo para poder llevar mejor los negocios de la aldea cuando sean mayores. Los PJs deberían de hospedarse en una de las posadas, podrán comprar equipo básico, arreglar armas y armaduras... Deja que pasen un día entre las amables gentes que todo sea un remanso de paz en sus vidas de aventureros, todo hasta que llega la noche...

Un sobresalto inesperado La noche llega y el cambio de turno de los mineros, ahora los que vuelven van a las posadas a disfrutar del descanso tras una jornada de trabajo y a beberse unos tragos de vino de arroz y a contar historias. Los Pjs pueden disfrutar de este momento y el director contar cuentos que lleven a otras aventuras en el futuro, pero tras una cena y algo de beber la aldea se va quedando desierta, iluminada por los farolillos y solo custodiada por la guardia, todo esta en silencio, en paz, la brisa de las montañas hace que la noche sea agradable moviendo el olor de las flores y los quemadores de las casas. Tan solo algún grillo rompe el silencio de la noche cuando de repente un estruendo enorme rompe el silencio de la noche, un sonido como si el cielo se hubiera abierto, como si un millón de rocas cayeran justo encima de la aldea. Naturalmente todo el mundo se despierta, los perros comienzan a ladrar, y los niños lloran. Los hombres corren hacia las montañas, el ruido ha venido de allí, allí

se encuentran las minas y en ellas, sus vecinos. Si los Pjs acuden a las minas verán que en una ha habido un desprendimiento, pueden ayudar a los aldeanos a sacar a los supervivientes y pueden ver que es lo que ha ocurrido. En la mina se ha abierto un descomunal pozo que parece no tener fondo, si utilizan antorchas, cuerdas... no tocan el fondo, al menos esa noche. Si preguntan a los encargados de las minas dirán que la roca del suelo de la mina era granito y que no debería de haber pasado nada así. Sea como fuere a lo largo de la noche no sucede nada mas de mención, los encargados están viendo si hay alguna forma de bajar al fondo, pero no encuentran nada.

El cielo se cierra A la mañana siguiente en el cielo aparecen una nubes negras con retazos rojizos que van cerrando toda la bóveda celestial a lo largo de la jornada matinal, aunque en la mina siguen los trabajos en otras galerías, en el pueblo se nota la tensión y el miedo a las extrañas nubes y el abismo que ha aparecido en la explotación minera. Algunos de los comerciantes quieren irse de allí pero de forma extraña parece ser que el camino se ha cerrado por un desprendimiento la noche anterior. Y al medio día cuando el sol esta totalmente eclipsado por las nubes rojas y una luz rojiza ilumina toda la zona, una especie de lejano tambor, como si fuera un latido se escucha en el valle, de forma casi imperceptible, pero que empieza a poner nerviosos incluso a los mercenarios. Los Pjs en este tramo de la aventura pueden o bien intentar cruzar el camino que es virtualmente imposible de cruzar, aunque hay un grupo de mineros que lo esta intentando limpiar. También pueden ir a las minas donde el latido es mucho mas intenso, y parece provenir de la sima, pero siguen si poder descender, y la magia no se sabe por que no tiene poder cerca del abismo. Si se quedan en la aldea irán viendo como los lugareños hacen acopio de comida y están asustados mientras los comerciantes van y vienen de un lado a otro esperando que el camino se vuelva a abrir. Debes de hacer que esta parte de la aventura sea un poco lenta, que los personajes se sientan apresados entre las tres ubicaciones, la mina, el camino y la aldea.

Durante esta parte y la siguiente haz que el único mendigo en la aldea, un antiguo minero que de repente un día enloqueció y dejo de ir a trabajar. Este individuo vestido con harapos huele a vino y sudor pero no hace daño a nadie, pero desde que el cielo se cerro y el tambor empieza a susurrar en la lejanía esta en una esquina sollozando diciendo que el espíritu de la montaña ya viene a por ellos... si alguien se para a hablar con el lee la historia del mendigo.

Un latido desde el abismo La tarde va pasando y ya nadie va a la mina, los mercenarios se encargan de defender la entrada para que nadie entre, mientras que el antes lejano tambor se ha convertido en un latido que retumba en toda la zona, como si las propias rocas latieran y unos rayos rojos cruzan el cielo, provocando truenos que acompañan el rítmico “bum bum”, que cada vez suena mas fuerte. Todo el mundo se va volviendo mas nervioso en el pequeño valle a medida que los latidos se hacen cada vez mas fuertes. El templo esta lleno de gente rezando a los dioses para que los protejan del mal que se ha apoderado del lugar. En las tabernas las gente bebe vino en un silencio sepulcral pero la tensión puede cortarse de con un cuchillo, hasta que de repente el latido se detiene.

Aparece la Bestia Cuando el latido se detiene, si los personajes se encuentran en la entrada de la mina con un grupo de mercenarios escucharan unos pesados pasos acompañados de una fuerte respiración que se acercan a la entrada. Cuando empiezan a vislumbrar un demonio con cuerpo de humano pero con la cabeza y los cuartos traseros de toro. Mide unos dos metros y medio, y saldrá embistiendo en carga a cualquier cosa que se ponga en su camino. Se dirige a la aldea. Si los personajes se encontraban en las minas déjalos que intenten atacarlo, puede que un golpe o dos les hagan cambiar de estrategia, además de que vean como aplasta sin contemplaciones a algún mercenario. En la aldea todo esta en silencio hasta que de repente se escucha un grito que recuerda a un animal rabioso, en ese momento, comienza a atacar y destruir todo lo que se pone a su paso, mata

ancianos, mujeres, niños, mercenarios... avanza con una furia frenética, asestando golpes a un lado y a otro. Y si algún personaje tiene algún arma o encuentra alguna forma de hacerle daño, intentara dejarlo fuera de combate antes de seguir.

quedan los PJs, el alcalde les proporcionara cualquier material que pidan así como 500 taels para cada uno, el pueblo esta medio destruido y no pueden desprenderse del dinero.

La idea es que el demonio vaya corriendo golpeándolo todo durante unos 20 asaltos, momento en el cual se detendrá en seco frente al ídolo del templo, aquí tendrá lugar un Man Hu, de modo que todo el mundo quieto... “El demonio se detiene frente al ídolo del templo y saluda con el típico saludo de puño cerrado y mano abierta, inclinando la cabeza, luego se da la vuelta y se va andando como si no hubiera pasado nada.” Si algún jugador quiere atacarlo en este momento, el demonio primero lo intimidara con una mirada, AD contra AD, y si la pasa y quiere seguir su ataque entonces se defenderá. Si por el contrario lo dejan marchar subirá de nuevo las montañas hacia la sima abierta en la mina.

Este hombre llamado Wang Son, era un hombre rico como todos los de la aldea pero un día enloqueció, y dejo de trabajar, regaló todas sus pertenencias y vive de la caridad de sus antiguos vecinos pero nadie le hace el menor caso. Si los PJs le preguntan y ayudan a sus preguntas con un poco de vino el les contara su historia. “Todo ocurrió hace unos años, yo estaba en las minas y encontré un trozo de jade negro, lo lleve a mi casa y aquella noche tuve una pesadilla, en ella el protector de la aldea me dijo que el jade de la montaña no era natural, sino que se había puesto allí para cerrar un pozo al inframundo, y que junto con el jade un gran guerrero había sido elegido como guardián para que si alguna vez el pozo se abriera el luchara contra los demonios.” “Pero mientras me contaba esta historia junto a él apareció una criatura mitad humano mitad bestia, su boca expulsaba un vaho de muerte y su pútrida baba chorreaba entre sus afilados dientes macilentos, los ojos eran amarillos como la corrupción del mal. La bestia me miró y si hubiera podido sonreír lo habría hecho, me dijo que el pozo lo había sellado con su propia alma engañando a un gran demonio, pero que ahora no podía descansar debido al martilleo continuo de los picos contra el jade que lo aprisionaban ya solo a el.” “Me pidió que dejásemos de extraer el jade pues el demonio que ahora lo poseía tenia un hambre atroz y seguramente no podría contenerlo si lo liberábamos, tras esto le vi algo que si no hubiera sido imposible hubiera dicho que era una lagrima.” “Me desperté aterrorizado, y regale todo cuanto poseía, excepto el trozo de jade negro, pues se que es importante aunque no llego a entender la razón, intente que los demás dejasen de trabajar pero el dinero es un difícil rival y decidí quedarme por si llegaba este día.” Si preguntan por el trozo de jade negro dirá que lo tiene como colgante, si lo convencen de que lo usaran para acabar con la bestia este se lo dará, de ese modo liberaran el alma de aquel pobre diablo.

Reflexiones Ante lo acontecido todo el mundo esta perturbado, un demonio se ha parado ante el la representación del buda protector del pueblo, que no tiene nada de especial aparte de ser de oro. Pero en el templo hay una pequeña biblioteca histórica de la aldea, en ella pueden encontrar si convencen al abad, tiradas sociales pertinentes y de interpretación (que no todo es poner posturitas) lograran acceder a los antiguos pergaminos de la fundación de la aldea. Con tiradas de percepción irán descubriendo lo siguiente • La aldea se fundo tras encontrar un beta de jade hace ya mil años • En ocasiones se encontraron trozos de jade negro, pero muy pequeños, asi como algunas pertenencias de alguna explotación anterior • Un antiguo escrito de un cazador de demonios dice que ese jade negro puede ser un arma, pues si se introduce dentro del cuerpo de algún demonio este se volverá vulnerable a las armas ordinarias. Esto revelara que hay una forma de matar a la criatura, pero para ello hay que ir a por ella. Los mercenarios han muerto o están mal heridos de modo que solo

La historia del Mendigo

La caza Los PJs, con o sin el trozo de jade negro deben de dirigirse hasta las minas, allí verán en e suelo un rastro de sangre y ningún cuerpo de los mercenarios que protegían la entrada. El rastro de sangre desciende hasta donde se encontraba la sima, lugar en el que ahora se encuentran unas escaleras que bajan hacia la oscuridad, tras bajar durante mas de dos horas en las que los PJs deben llevar luz, y verse amedrentados por un total vacío, al fin llegan a un suelo empedrado y pulido aunque con restos de gravilla y lleno de polvo. Están en un salón de proporciones enormes, si

tras ella en un sillón de piedra a la bestia sentada mirándolos. Como si los llevase viendo desde que comenzaron a bajar las escaleras. Entonces comienza a hablar con una voz que resuena por toda la enrome cueva- salón. -Habéis venido a destruirme, y lo entiendo, yo era como vosotros, por eso estoy aquí, pero hoy la muerte vendrá a visitarnos. En este salón luche contra demonios y criaturas del averno durante mas tiempo del que pude contar, lo que soy es el castigo de los dioses por mi vanidad. Este es mi reino y de él, nadie puede escapar... La criatura se levanta y se acerca a los PJs, es hora de que comience la lucha... Para vencer a la bestia hay que poner el jade negro contra su cuerpo, entonces perderá su inmunidad a los ataques fisicos siendo tan vulnerable como cualquier humano. Una vez vencido caera al suelo agonizando, y dará las gracias a los PJs por liberarlo de su destino aciago, tras esto la gruta comenzara a temblar y a derrumbarse, si algún personaje intenta coger algo de la mesa debe de hacer una tirada de esquivar contra un ataque +60 para no quedar aplastado por una roca... La alabarda hace +2 puntos de vida y daña a criaturas mágicas como demonios, espitirus... La gruta entera se derrumba y con ella la galería donde se encontraba, haz que los PJs tengan que hacer alguna tirada de esquivar (1d4) para no llevarse algún golpe de 1d6 puntos de vida generales.

El final

avanzan por el centro encontraran que hay un pozo sellado, naturalmente no lo verán si van por las paredes. Conformen avanzan mas hay una escalinata hacia arriba, y allí verán en unos ganchos colgados los restos semidevorados de los mercenarios con el suelo lleno de sangre, una mesa llena de huesos y de cubiertos y cacharros de jade,

Los personajes llegan a la aldea y el cielo ya esta prácticamente abierto de nuevo, esa noche a pesar de los muertos les dan un festín y anuncian la decisión de vivir de la ganadería y la agricultura, pues temen que el antiguo pozo pueda abrirse si siguen extrayendo jade... La fama de todos los personajes sube en 2 puntos. Y la experiencia se da según la tabla de experiencia del manual...

La Bestia FUE CON TAM

22 24 20

INT AD REF IN

15 17 17 16

Aguante -6 Bonif. Al daño +2d6 Armadura 3 en el brazo izquierdo Puntos de vida 46 Cabeza 13 Cuello 9 Torso 36 Bajo vientre 16 Piernas 23 Brazos 18 Manos/pies 4 Alabarda: 80% 1d10+1d8 Percepcion: 60% Patada: 60% 1d6 Puñetazo: 50% 1d4+1d4 x guante Cuando la bestia sea golpeada y aun no tenga el trozo de jade negro contra su cuerpo, hará tiradas de resistencia de su AD contra los puntos de vida causados cuando se le golpee para no quedar detenida el resto del asalto, pero no le causara daño.