DESARROLLO COGNITIVO SEGÚN PIAGET Probablemente la teoría más citada y conocida sobre desarrollo cognitivo en niños es la de JEAN PIAGET (1896-1980). Según esta teoría los niños pasan a través de etapas específicas conforme va madurando su intelecto y su capacidad para percibir las relaciones de todo tipo. Para Jean Piaget el desarrollo cognitivo tenía 4 etapas: sensoriomotora, preoperacional, de las operaciones concretas y de las operaciones formales. Él pensaba que, mientras los niños van pasando de un estado evolutivo a otro, experimentan cambios importantes y también pasan por momentos de estabilidad. Además, en cada etapa se da un tipo de pensamiento diferente (Myers, 2006). Estas etapas se desarrollan en un orden fijo en todos los niños, y en todos los países.
No obstante, la edad puede variar ligeramente de un niño a otro.
Etapa sensoriomotora Esta etapa tiene lugar entre el nacimiento y los dos años de edad. Durante este periodo los niños comienzan a entender la información que perciben a través de sus sentidos y se inician en el desarrollo de su capacidad de interactuar con el mundo. En esta etapa los niños aprenden a manipular objetos. Un aspecto interesante de este periodo es que no pueden entender la permanencia de estos objetos si no están dentro del alcance de sus sentidos, es decir, una vez que un objeto desaparece de su vista, el niño o niña no comprende que ese objeto o persona sigue allí. Por este motivo les resulta tan atrayente y sorprendente el juego al que muchos adultos juegan con sus hijos consistente en esconder su cara tras un objeto, como un cojín, y luego volver a “aparecer”. Es un juego que contribuye, además, a que aprendan la permanencia del objeto. Por tanto, podemos decir que uno de los mayores logros de esta etapa es la capacidad de entender que estos objetos continúan existiendo, aunque no pueda verlos. Esto incluye la capacidad para entender que cuando la madre sale de la habitación regresará, lo cual aumenta su sensación de seguridad. Esta capacidad suelen adquirirla hacia el final de esta etapa y representa la habilidad para mantener una imagen mental del objeto (o persona) sin percibirlo. En este estadio, la comprensión del mundo sucede a través de nuestras interacciones motoras y sensoriales con los objetos. Cuando el bebé es muy pequeño no tiene el sentido de permanencia del objeto (es decir, la conciencia de que los objetos continúan existiendo, aunque no los podamos ver). Por ejemplo, en una de sus pruebas Piaget le mostraba a un bebé un juguete llamativo y luego lo cubría para ver si éste lo buscaba. Sin embargo, los bebés de menos de 6 meses no lo hacían (Myers, 2006). En base a la observación de sus propios hijos, Piaget dividió esta etapa en 6 subestadios:
I. Reflejos (0-1 mes): se practican los reflejos incorporados (ej. succión) hasta que funcionan a la perfección. Estos reflejos se modifican como resultado de la experiencia.
II. Reacciones circulares primarias (1-4 meses): el infante tratará de hacer que las cosas interesantes se repitan utilizando su cuerpo (por ejemplo, meterse el dedo en la boca). Hay exploraciones visuales y táctiles más sistemáticas. Sin embargo, todavía no parecen distinguir entre sus cuerpos y los objetos o eventos de afuera. Los reflejos se extienden a nuevos objetos y los infantes son capaces de coordinar esquemas simples como agarrar y mirar
III. Reacciones circulares secundarias (4-10 meses): intenta que las cosas interesantes vuelvan a suceder (por ejemplo, intentará pegar al movible de la cuna para ver cómo se mueve). También comienza a coordinar información proveniente de los sentidos y desarrolla el concepto de objeto. Adquiere una comprensión superficial de que sus acciones pueden tener resultados externos. Un objeto parcialmente escondido puede ser encontrado IV. Coordinación de esquemas secundarios (10-12 meses): el infante combinará acciones con el objetivo de obtener algo que quiere (ej. tirar una almohada para alcanzar un juguete). Se puede observar la utilización de estrategias familiares en combinación y en situaciones novedosas. Representa objetos en su mente y comienza a demostrar conducta simbólica y memoria. Puede encontrar un objeto totalmente escondido
V. Reacciones circulares terciarias (12-18 meses): los niños comienzan a experimentar, es decir que prueban nuevas formas de jugar o manipular objetos. Sus habilidades motoras han mejorado, lo que hace posible una mayor exploración. Utilizan diferentes esquemas para conseguir sus objetivos. Un objeto escondido en una de muchas capas puede ser encontrado VI. Principio del pensamiento (18-24 meses): parecen haber representaciones internas ya que el pequeño utiliza imágenes, palabras o acciones para representar objetos. Pueden pensar en el problema antes de resolverlo y los pensamientos empiezan a dominar sobre las acciones Muchas de las observaciones de Piaget fueron hechas antes de que contemos con métodos de investigación más modernos, cuidadosos y precisos, es por eso que investigadores posteriores a Piaget creen que el subestimaba la capacidad de los niños. El creía que los niños que están en la etapa sensoriomotora pueden reconocer objetos, gatear hacia ellos y manipularlos, pero que son incapaces de tener conceptos o ideas abstractas y de pensar sobre sus vivencias (Myers, 2006). Sin embargo, investigaciones sugieren que los bebés de tan solo 5 meses pueden representar número per se, y que su alcance de números no se limita al dominio de objetos (Wynn, 2002). Otros estudios indican que cuando un adulto demuestra una nueva forma de ejecutar una tarea a un grupo de infantes de 14 meses, los mismos utilizarán esta nueva manera solo si consideran que es la alternativa más racional. Según los autores, esto sugiere que la imitación dirigida a una meta en bebés pre-verbales es un proceso selectivo e interpretativo y no una mera imitación En conclusión, acerca de la primera etapa de la teoría de Piaget. La teoría del psicólogo Jean Piaget hizo pensar que los niños y niñas en la etapa sensoriomotora solo podían reconocer y manipular algunos objetos. Sin embargo, muchos investigadores consideraban que esta investigación mitigaba las fórmulas y los nuevos métodos que tienen los niños para desarrollarse
normalmente. Todo lo ya descrito forma parte las capacidades que pueden tener los niños para un mejor desenvolvimiento durante su desarrollo.
Etapa preoperacional La etapa preoperacional es la segunda etapa en la teoría del desarrollo cognitivo de Piaget. Esta etapa comienza alrededor de los dos años y dura hasta aproximadamente hasta los siete años. Durante esta etapa, los niños comienzan a participar en el juego simbólico y aprenden a manipular los símbolos. Sin embargo, Piaget señaló que aún no entienden la lógica concreta. El desarrollo del lenguaje es otras de sus características. El pensamiento del niño durante este estadio es pre operacional. Esto significa que el niño aun es capaz de usar la lógica o transformar, combinar o separar ideas, al no entender la lógica concreta, los niños aun no son capaces de manipular la información mentalmente y de tomar el punto de vista de otras personas. El desarrollo del niño consiste básicamente en construir experiencias acerca del mundo a través de la adaptación e ir avanzando hacia el etapa (concreta) en la cual puede utilizar el pensamiento lógico.
Durante esta etapa, los niños aprenden cómo interactuar con su ambiente de una manera más compleja mediante el uso de palabras y de imágenes mentales. Esta etapa está marcada por el egocentrismo, o la creencia de que todas las personas ven el mundo de la misma manera que él o ella. También creen que los objetos inanimados tienen las mismas percepciones que ellos, y pueden ver, sentir, escuchar, etc. Un segundo factor importante en esta etapa es la conservación de la cantidad, que es la capacidad para entender que la cantidad no cambia cuando la forma cambia. Es decir, si el agua contenida en un vaso corto y ancho se vierte en un vaso alto y fino, los niños en esta etapa creerán que el vaso más alto contiene más agua debido solamente a su altura. Esto es debido a que se centran en sólo un aspecto del objeto, por ejemplo, la altura, sin tener en cuenta otros aspectos como la anchura. Al final de esta etapa los niños pueden representar mentalmente eventos y objetos (la función semiótica), y participar en el juego simbólico. Por ejemplo, un niño es capaz de emplear un objeto para representar algo más, como pretender que una escoba es un caballo. El juego de roles también es importante durante la etapa preoperacional. Los niños suelen desempeñar los papeles de “mamá”, “papá”, “médico” y muchos otros personajes. Otro logro importante de esta etapa es la reversibilidad del pensamiento, es decir, poder realizar operaciones o pensamientos de forma inversa. Por ejemplo, son capaces de resolver problemas como: “Si yo tengo un número de canicas en una caja y al añadir 3 obtengo 7 canicas ¿cuántas tenía inicialmente?”
Las principales características de la etapa preoperacional incluyen:
Contracción Esta es la tendencia a concentrarse en un solo aspecto de un objeto o situación a la vez. Cuando un niño es capaz de desplazar su atención en más de un aspecto de una situación al mismo tiempo es que ya ha alcanzado la capacidad de descentrarse.
Durante esta etapa los niños tienen dificultades para pensar en más de un aspecto de cualquier situación al mismo tiempo; además, tienen dificultades para descentrarse en situaciones sociales, a pesar que ya sean capaces de realizarlo en contextos no sociales.
Egocentrismo El pensamiento y la comunicación de los niños son típicamente egocéntricos (es decir, gira sobre sí mismos). Egocentrismo se refiere a la incapacidad del niño para ver una situación desde el punto de vista de otra persona. Según Piaget, el niño egocéntrico asume que otras personas ven, oyen y sienten exactamente lo mismo que él ve, oye y siente.
Juego Al iniciar esta etapa a menudo se observa que los niños juegan en paralelo. Es decir que a menudo juegan en la misma habitación que otros niños, pero sin interactuar, o sea, juegan junto a otros niños más no con ellos. Cada niño está absorto en su propio mundo privado y el habla es egocéntrica. Es decir, la función principal del habla en esta etapa es externalizar el pensamiento del niño en lugar de comunicarse con los demás. Hasta el momento, el niño no ha comprendido la función social del lenguaje ni de las reglas.
Representación simbólica Esta es la habilidad de realizar una acción – una palabra o un objeto – representar algo distinto de sí mismo. El lenguaje es quizás la forma más obvia de simbolismo que muestran los niños pequeños. Sin embargo, Piaget (1951) sostiene que el lenguaje no facilita el desarrollo cognoscitivo, sino que simplemente refleja lo que el niño ya conoce y contribuye poco a la adquisición de nuevos conocimientos. Él creía que el desarrollo cognitivo promueve el desarrollo del lenguaje, no al contrario.
Juego simbólico Los niños a esta edad a menudo pretenden ser personas que no son (por ejemplo, superhéroes, un bombero), y pueden representar estos roles con apoyos que simbolizan objetos de la vida real. Los niños también pueden inventarse un compañero de juegos imaginario. “En el juego simbólico, los niños pequeños avanzan en sus conocimientos sobre las personas, los objetos y las acciones y construyen así representaciones cada vez más sofisticadas del mundo”
A medida que la etapa pre-operativa se desarrolla el egocentrismo disminuye y los niños empiezan a disfrutar de la participación de otros niños en sus juegos y “dejan de fingir” el juego se torna más importante. Para que esto funcione, es necesario de algún modo que se regule las relaciones de cada niño con el otro y de dicha necesidad surge los orígenes de una orientación hacia los demás en términos de normas.
Animismo Esta es la creencia de que los objetos inanimados tales como juguetes u objetos poseen sentimientos e intenciones humanas, en otras palabras, para el niño preoperacional de Piaget (1929) el animismo significa que el mundo natural está vivo, consciente y tiene un propósito. Piaget identificó cuatro etapas del animismo: 1. Hasta la edad de 4 a 5 años, el niño cree que casi todo está vivo y tiene un propósito. 2. Durante la segunda etapa (5-7 años) sólo aquellos objetos que se mueven poseen un propósito. 3. En la siguiente etapa (7-9 años), sólo los objetos que se mueven de forma espontáneamente se les atribuye que están vivos. 4. En la última etapa (9-12 años), el niño comprende que sólo las plantas y los animales están vivos.
Artificialismo Esta es la creencia de que ciertos aspectos del entorno son fabricados por personas, por ejemplo, nubes en el cielo.
Irreversibilidad Esta es la incapacidad de invertir la direccionalidad de una secuencia de eventos a su punto de partida.
Etapa de las operaciones concretas Esta etapa tiene lugar entre los siete y doce años aproximadamente y está marcada por una disminución gradual del pensamiento egocéntrico y por la capacidad creciente descentrarse en más de un aspecto de un estímulo. Pueden entender el concepto de agrupar, sabiendo que un perro pequeño y un perro grande siguen siendo ambos perros, o que los diversos tipos de monedas y los billetes forman parte del concepto más amplio de dinero. Solo pueden aplicar esta nueva comprensión a los objetos concretos (aquellos que han experimentado con sus sentidos). Es decir, los objetos imaginados o los que no han visto, oído, o tocado, continúan siendo algo místicos para estos niños, y el pensamiento abstracto tiene todavía que desarrollarse. Piaget (1954a) consideró la etapa concreta como un importante punto de inflexión en el desarrollo cognitivo del niño, porque marca el comienzo del pensamiento lógico u operativo.
El niño está ahora lo suficientemente maduro como para utilizar el pensamiento lógico o las operaciones (es decir, las reglas), pero sólo puede aplicar la lógica a los objetos físicos (por lo tanto, concreta operacional). Los niños adquieren las habilidades de conservación (número, área, volumen, orientación) y reversibilidad. Sin embargo, aunque los niños pueden resolver los problemas de una manera lógica, normalmente no son capaces de pensar de forma abstracta o hipotética.
Conservación según PIAGET La Conservación es el entendimiento de que un objeto permanece igual en cantidad, aunque su apariencia cambie. Para ser más específicos, la conservación es la capacidad de entender que la redistribución de la materia no afecta la masa, número, volumen o longitud. Alrededor de siete años, la mayoría de los niños pueden entender la conservación de los líquidos, porque ya han comprendido que cuando el agua se vierte en un vaso con una forma diferente, la cantidad de líquido sigue siendo la misma, aunque su aspecto haya cambiado. Sin embargo, los niños de cinco años aún creen que hay una cantidad diferente ya que la apariencia ha cambiado. la conservación del número se desarrolla poco después de esto. Piaget (1954b) colocó una fila de mostradores delante del niño y le pidió que hiciera otra fila igual que la primera. Piaget extendió su fila de mostradores y preguntó al niño si todavía había el mismo número de contadores. La mayoría de los niños de siete años podría responder correctamente, y Piaget concluyó que esto demostró que a los siete años de edad los niños eran capaces de conservar el número.
Evaluación Crítica de las Tareas de Conservación Se han criticado varios aspectos acerca de las tareas de conservación, por ejemplo, que estas no tienen en cuenta el contexto social que permiten la comprensión del niño. Otros investigadores (Rose y Blank, 1974) han argumentaron que cuando un niño da una respuesta equivocada a una pregunta, repetimos la pregunta con el fin de insinuar que su primera respuesta fue incorrecta, lo cual sería un error de procedimiento. Esto fue lo que Piaget hizo, cuando realizó a los niños la misma pregunta dos veces en los experimentos sobre conservación, antes y después de la transformación. Cuando Rose y Blank replicaron esto, pero hicieron la pregunta una sola vez, después de que el líquido se hubo vertido, encontraron que muchos más niños de seis años dieron la respuesta correcta. Esto demuestra que los niños pueden conservar a una edad más temprana de la que afirmaba PIAGET. Otra característica de la tarea de conservación que puede interferir con la comprensión de los niños es que el adulto modifica intencionalmente la apariencia de algo, por lo que el niño piensa que esta alteración es importante.
Clasificación La clasificación es la capacidad de identificar las propiedades de las categorías, relacionar las categorías o las clases entre sí y utilizar información categórica para resolver problemas. Un componente importante de las habilidades de clasificación es la capacidad de agrupar objetos de acuerdo con alguna dimensión que comparten. La otra habilidad es ordenar los subgrupos jerárquicamente, de manera que cada nueva agrupación incluya todos los subgrupos anteriores.
Seriación La operación cognitiva de la seriación implica la capacidad de ordenar mentalmente los elementos a lo largo de una dimensión cuantificable, tales como la altura o el peso.
Etapa de las operaciones formales El estadio de las operaciones formales es la última de las cuatro etapa de la teoría de Piaget del desarrollo cognitivo, comienza aproximadamente a partir de los doce años y abarca hasta la adultez. Coincide con el inicio de la adolescencia y el inicio de la inserción en el mundo de la adultez. A medida que los adolescentes entran en este periodo, adquieren la capacidad de pensar de manera abstracta manipulando ideas en su mente, sin depender de la manipulación concreta del objeto Esto implica que él o ella pueden realizar cálculos matemáticos, pensar creativamente, usar el razonamiento abstracto, e imaginar el resultado de acciones particulares. Un niño que necesite realizar un dibujo o emplear objetos se encuentra aún en la etapa operativa concreta, mientras que los niños que ya son capaces de inferir la respuesta en su mente están utilizando el pensamiento operacional formal. Esta etapa se caracteriza por la capacidad para formular hipótesis y ponerlas a prueba para encontrar la solución a un problema. Otra característica del individuo en esta etapa es su capacidad para razonar en contra de los hechos. Es decir, si le dan una afirmación y le piden que la utilice como la base de una discusión, es capaz de realizar la tarea. Por ejemplo, pueden razonar sobre la siguiente pregunta: ¿Qué pasaría si el cielo fuese rojo?”.
*Pensamiento Operacional Formal 1. Razonamiento Deductivo Hipotético El razonamiento hipotético deductivo es la capacidad de pensar científicamente a través de la generación de predicciones, o hipótesis, sobre el mundo para responder preguntas. El individuo abordará los problemas de una manera sistemática y organizada, más que a través del ensayo y error.
2. Pensamiento abstracto Las operaciones concretas se llevan a cabo en objetos mientras que las operaciones formales se desarrollan a partir de ideas. El individuo puede pensar en conceptos hipotéticos y abstractos sobre
los cuales no necesariamente ha experimentado directamente. El pensamiento abstracto es importante para planificar el futuro
*¿Qué evidencia apoya el estadio de las operaciones formales según Piaget? Piaget (1970) ideó varias pruebas para comprobar el pensamiento abstracto de la etapa de las operaciones formales, uno de los más simples y conocidos fue el “problema del tercer ojo”. A los niños se les preguntó en que parte de su cuerpo pondrían un ojo extra, si pudieran tener un tercero, y por qué. Según Schaffer (1988), cuando realizó dicha pregunta, los niños de 9 años aproximadamente, sugirieron que el tercer ojo debería estar en la frente. Sin embargo, los niños de 11 años de edad, fueron más creativos, por ejemplo, sugirieron que un tercer ojo en la palma de la mano sería útil para ver al otro lado de las esquinas. Piaget concluyó que el enfoque sistemático indicaba que los niños pensaban lógicamente, en abstracto, y podían inferir las relaciones entre los objetos. Estas son las características del estadio de las operaciones formales.
1. Evaluación crítica a la etapa de las operaciones formales Aquellos psicólogos que han replicado esta investigación, o han empleado problemas similares, generalmente han encontrado que los niños no pueden completar dicha tarea con éxito hasta que son algo mayores. Al igual que Piaget, Siegler descubrió que con el tiempo los niños eran capaces de tener en cuenta la interacción entre el peso de los discos y la distancia desde el centro, y así predecir exitosamente el punto de equilibrio. Sin embargo, esto no ocurrió hasta que los participantes tenían una edad entre 13 a 17 años. Siegler al contrario que Piaget, concluyó que el desarrollo cognitivo de los niños se basa en la adquisición y el uso de reglas en situaciones cada vez más complejas, más que en etapas