Instituto Universitario Del Centro de México Psicología Clínica 401 Psicología Diferencial Tema 10. Cultura y comportamiento Lic Íngrid Estephanie Pacheco López Iliana Cecilia Maldonado Rodríguez
Cultura y Comportamiento Los individuos manifiestan su conducta dentro de un medio lleno de relaciones interpersonales, en el seno de grupos y sociedades. Los sentimientos, las ideas y los comportamientos de los seres humanos no son exclusivamente el producto "determinado" de su naturaleza biológica, sino el resultado de un permanente episodio que se repite en cada generación, y por el cual la sociedad se garantiza a sí misma la supervivencia.
El yoga y la tradición hindú
Las raíces de yoga son muy antiguas pues se remontan hasta la cultura pre hindú. Es parte integral de la rica y compleja tradición de la india, que abraza cientos de tradiciones y textos sagrados, todos relacionados con los vedas. Es un conjunto de creencias metafísicas, cultos y rituales, no tiene fundador ni dogma único. Conceptos principales: Analizaremos los conceptos metafísicos y psicológicos fundamentales del yoga: espíritu, naturaleza, los tres principios de la creación, conciencia, karma y tendencias subconscientes. Espíritu: En el yoga clásico se encuentra un dualismo estricto entre espíritu y naturaleza. Todo ser humano es una combinación de estos principios, el cuerpo y la mente tienen su origen en la naturaleza, en tanto que el ser trascendental surge del espíritu, que es la consciencia pura. El espíritu no conoce limitaciones ni calificaciones e incluye la consciencia interior y de más allá del universo; su manifestación en el individuo es el ser, que es inmutable y no lo afectan la actividad física ni la mental. La mente distorsiona la conciencia del ser.
Los tres principios de la creación: La naturaleza se compone de tres principios primarios, conocidos como los tres gunas:
Tamas (inercia)
Rajas (actividad)
Sattva (luz o claridad)
Estos tres principios operan en conjunto para generar todo movimiento. Todas las manifestaciones de la naturaleza (materia, pensamiento, etc.) se forman por diferentes combinaciones de los tres gunas.
Conciencia: En terminología yoga, la mente o conciencia abarca todos los procesos de razonamiento. El control detiene el incesante parloteo de la actividad mental y genera un estado de calma profunda y paz interior. El objetivo final es dirijir la atención al ser. Todas las prácticas yoga en conjunto tienen como meta aquietar y tranquilizar la mente. Karma: El concepto se basa en el principio de que toda acción trae consigo ciertas consecuencias y de que los hechos influyen en la vida de toda persona. Esta influencia se debe en parte a la formación de tendencias subconscientes. Para evitar la formación de nuevas tendencias o el reforzamiento de las antiguas, el yogi refrena su expresión. El ideal del yoga no es la supresión de las tendencias inaceptables, sino la transmutación de los pensamientos y actos negativos en positivos. El yogi aprende a sustituir las viejas costumbres destructivas con acciones constructivas.
Estructura: El cuerpo: Las escuelas del yoga consideran el cuerpo de distintas maneras, que varían desde el rechazo absoluto, porque se le considera fuente de deseos y apego, hasta su aprecio como el principal vehículo para el crecimiento espiritual. Relaciones sociales: Tradicionalmente se ha relacionado al yoga con el aislamiento del mundo y la meditación, sin embargo el yoga enseña que cada persona tiene responsabilidades en este mundo y que debe cumplirlas cabalmente, sea que implique renunciación o servicio a los demás en la sociedad. Voluntad: La austeridad consiste en disciplinar la mente y el cuerpo para rebasar los límites de la comunidad y superar las tendencias hacia la indulgencia personal y a la inquietud. El ejercicio de la voluntad también brinda al aprendiz de yoga la experiencia directa de afrontar la pereza, la resistencia a la disciplina y otros rasgos de la personalidad. Emociones: El manejo de las emociones consiste en dirigir su energía hacia el crecimiento espiritual. Patanjali distingue entre ondas de conciencias dolorosas y no dolorosas. Las que causan dolor con pensamientos y emociones que incrementan la ignorancia, la confusión o el apego. Las ondas no dolorosas aumentan la libertad y el conocimiento.
El zen y la tradición budista
Conceptos principales: El centro del pensamiento budista es el concepto de que la existencia se caracteriza por la transitoriedad, la falta de un yo o un alma imperecedera y la insatisfacción o sufrimiento como atributo esencial de este mundo. Se basa en la práctica de la meditación como un medio para lograr la experiencia directa de los principios y verdades del budismo, es decir, tener la experiencia de la iluminación.
Las tres características de la existencia: Transitoriedad: El concepto de transitoriedad implica que no puede haber cosas tales como la autoridad final ni la verdad eterna. Únicamente se comprende para cierto tiempo y lugar. Como las circunstancias cambian, lo que arece verdad en un momento, inevitablemente se convertirá en falso en otro. Para los budistas la principal característica del universo es el cambio.
Inexistencia del self: Este concepto sostiene que no hay alma inmortal p self eterno en cada persona, se considera que cada individuo es un conjunto de elementos, todos transitorios y en constante cambio. La persona se compone de cinco factores básicos: cuerpo, percepción, sensación, conciencia y actividades mentales. Cuando las partes mueren, también la persona perece. Insatisfacción: También conocida como sufrimiento, este no se deriva del mundo que rodea a la persona, sino de ella misma. Radica en el yo limitado de cada individuo. Buda enseño que la fuente del sufrimiento se halla dentro de uno mismo y concluyo con optimismo que es posible hacer algo para resolver la insatisfacción de los seres humanos. Estructura: Cuerpo: El concepto budista de camino medio es de importancia central en la actitud de la persona hacia su cuerpo. Implica qie no se tenga plena indulgencia con todos los deseos ni se entregue al ascetismo extremo o a la mortificación. “Tanto tu vida como tu cuerpo merecen amor y respeto, pues son el medio por el que se practica la verdad y se manifiesta el poder de buda”. Relaciones sociales: Las enseñanzas budistas hacen hincapié a la responsabilidad, que es lo opuesto al alejamiento, hay que entender la necesidad de trabajar y ayudar a otros. El buda no se encuentra fuera de este mundo de sufrimiento, ni más allá de la necesidad de auxilio y compasión. Las relaciones sociales brindan oportunidades cruciales para poner en práctica los ideales y principios budistas.
Voluntad: Se desarrolla al ejercitarla, se debe establecer un compromiso real con la preparación personal y aceptar la responsabilidad de los aspectos propios, con la conciencia de que esta preparación nadie más la podrá llevar acabo en su lugar. Emociones: Una importante meta es aprender a controlar las emociones, por medio de su preparación, el estudiante zen alcanza un estado de alerta meditativa de todas las actividades cotidianas. El estado emocional ideal del budismo es la compasión, a la que se le puede considerar una emoción trascendente, un sentimiento de unión con todos los demás seres.