Comentario Textos Literarios

EL COMENTARIO DE TEXTOS LITERARIOS (CONSIDERACIONES GENERALES Y ESQUEMA BÁSICO)

A. OBJETIVOS

1. Comprender y saber explicar un texto literario. Se trata de entender qué expresa una obra y cómo lo expresa; es decir, hay que analizar los medios por los que el autor comunica una idea o una emoción. Para ello, será necesario atender a la relación mutua entre el plano del contenido y el plano formal o de la expresión. 2. Conseguir un comentario coherente y unitario. El comentario debe organizarse alrededor de la idea básica y central del texto literario. 3. Centrarse en los aspectos fundamentales. Hay que seleccionar lo importante y desechar los aspectos que no sean centrales. Asimismo habrá que evitar: - La paráfrasis. - Usar el texto como pretexto.

B. PASOS PARA REALIZAR EL COMENTARIO

I. ANTES DE INICIAR EL COMENTARIO 1. Leer y comprender el texto. 2. Manchar el texto: subrayar o marcar las partes esenciales. 3. Numerar las líneas o los versos. II. INTRODUCCIÓN Brevemente, hay que ofrecer datos sobre el autor, la obra a la que pertenece el texto, el género y la localización del autor en una etapa o movimiento de la historia de la literatura (cuatro o cinco líneas). III. EL TEMA Debe determinarse la idea central alrededor de la cual se organiza el significado de un texto. Es importante recordar que puede haber dos o tres elementos temáticos fundamentales y relacionados entre sí. En este apartado se determinará, siempre que resulte relevante, la vinculación del tema de la obra a los tópicos literarios de la época. Además, en caso de que exista textura narrativa o dramática, será necesario explicar de forma breve el argumento (la historia que se cuenta).

IV. LA ESTRUCTURA DEL TEXTO Con la intención de revelar cómo se organizan las ideas en un texto, se tienen que analizar las partes del texto y la relación que se establece entre ellas. Hay que distinguir dos tipos de estructuras: 1. Estructura externa. Son las partes visibles: párrafos y capítulos en la prosa, actos y escenas en los textos dramáticos, y estrofas y versos en los textos versificados. 2. Estructura interna. Es la distribución del contenido a lo largo del texto. En este apartado se analizan diversos elementos. En los textos narrativos y dramáticos, deberá atenderse a la trama (los hechos y los motivos que empujan a la acción), al análisis del planteamiento, el nudo y el desenlace, al estudio del tiempo y del espacio y al desarrollo de los personajes. En los textos líricos, se analizarán los subtemas y el desarrollo de la expresión sentimental. En todos los casos, será fundamental clarificar la función de estos elementos en la estructura y en la significación del texto. V. ANÁLISIS FORMAL En este apartado, se deben poner en claro no sólo los recursos expresivos del texto sino también y sobre todo el significado que generan y el efecto estético que producen. Puede ser útil el trabajo por niveles lingüísticos, aunque es importante remarcar que todos ellos actúan simultáneamente en el texto. Niveles lingüísticos: 1. Plano fónico a) Elementos propios de la sonoridad de las palabras y de las oraciones: elementos entonativos (oraciones exclamativas, interrogativas, exhortativas), el ritmo, la métrica y la rima. b) Efectos sonoros del uso de fonemas (recursos como la aliteración, la paronomasia, etc.) 2. Plano morfosintáctico - Morfología a) Uso de sustantivos, adjetivos, verbos, conjunciones ( ver el uso de recursos como el epíteto, la anáfora, la anadiplosis, la enumeración, etc.) b) Uso de la persona gramatical, a través del pronombre personal y de la persona de las formas verbales: el yo poético, la voz del narrador (primera o tercera persona).

- Sintaxis Ordenación de las palabras (atender a la existencia de hipérbatos, paralelismos, etc.). 3. Plano léxico-semántico Uso de términos con la intención de crear una nueva significación (analizar figuras literarias como la metáfora, el símbolo, la sinestesia, la metonimia, etc.) VI. CONCLUSIÓN Finalizar un comentario requiere dos actividades: 1. Sintetizar los elementos estudiados (resumir la esencia del análisis). 2. Realizar una breve valoración personal.