Clase Dominical 02-22-09 Tema: Oración por Liberación Texto: Salmo 40 1:17 Intro: La clase anterior mencionamos que la oración es el fundamento para el éxito en la vida de cada creyente, todos los hombre de Dios de todos los tiempos le han dado un gran énfasis a la oración, sin oración, ellos nunca hubiesen podido lograr aquellos tremendos resultados, es a través de este ministerio, el de la oración, que se libran las grandes batallas teniendo por cierto la victoria segura. El salmista David fue un hombre que desarrollo una profunda relación a través de la comunión con Dios, a través de los salmos nos describe los momentos de oración que desarrollo en diferentes circunstancias de su vida, declarando siempre en ellos, las victorias obtenidas a través de este maravilloso privilegio que el Señor nos ha dado, el de tener comunicación directa con el por medio de la oración. Salmo 40:1-2 1 Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. 2Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. La clase anterior mencionamos algunos aspectos importantes sobre la oración, como la libertad que tenemos para acercarnos a la presencia de Dios por medio de Cristo, otro aspecto es la claridad que debemos de tener al presentar nuestras peticiones delante de Dios, ser específicos en nuestras peticiones, otro aspecto importante de la oración es la intercesión, buscando el favor de Dios para otros, y por ultimo mencionamos sobre la perseverancia, el ser constantes es parte fundamental de nuestra victoria, la falta de perseverancia nos conduce a la derrota. La paciencia es característica del creyente, la Biblia nos enseña que el cristiano tiene la paciencia como fruto del Espíritu, y se nos exhorta a practicarla no solamente los unos para con los otros sino también en los momentos de tribulación y prueba; Santiago 1:2-4 2 Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, 3sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. 4Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna. La paciencia esta relacionada con las pruebas y las pruebas con nuestra fe, cuado nuestra fe es probada a través de las diferentes pruebas estas tienen como objetivo que desarrollemos el fruto de la paciencia, y cuando la paciencia llega a su hecho completo, es decir a completar su obra, esta nos lleva a la perfección en el sentido de alcanzar madurez e integridad. El termino “jupomone” que se traduce por paciencia tiene varios significados, entre ellos, resistencia o aguante (esperanzado), constancia, paciencia, perseverancia, perseverar, (fig) tener entereza, soportar. El salmista David se encuentra en uno de esos momentos difíciles de su vida donde pone toda su esperanza en Dios, (así lo traduce la NVI) “1 Puse en el SEÑOR toda mi esperanza” la mención que hace al pozo de la desesperación, y al lodo cenagoso, no da a entender que esta pasando por circunstancias difíciles, y es una clara referencia a las cisternas que se utilizaban como prisiones; Jeremías 38:6 6 Entonces tomaron ellos a Jeremías y lo hicieron echar en la cisterna de Malquías hijo de Hamelec, que estaba en el patio de la cárcel; y metieron a Jeremías con sogas. Y en la cisterna no había agua, sino cieno, y se hundió Jeremías en el cieno. El historiador Flavio Josefo menciona que el profeta se hundió hasta el cuello, cuando le pusieron en esta cisterna, ahí estaba condenado a la muerte, el sabia que moriría de hambre y de frío por lo cual ante esta experiencia clama a Dios; este clamor esta descrito en; Lamentaciones 3:57-57 53 Ataron mi vida en cisterna, pusieron piedra sobre mí; 54Aguas cubrieron mi cabeza; yo dije: Muerto soy. 55Invoqué tu nombre, oh Jehová, desde la cárcel profunda; 56Oíste mi voz; no escondas tu oído al clamor de mis suspiros. 57 Te acercaste el día que te invoqué; dijiste: No temas. Lo maravilloso de poder tener este contacto con Dios mediante la oración y elevar nuestro clamor en el día de la aflicción, teniendo la certeza de que seremos escuchados y que el Señor responderá a nuestra oración. De la misma manera que le ha respondido a todos aquellos que han puesto su esperanza en Dios; nos dirá: no temas que yo estoy contigo todos los días de tu vida.
En nuestra vida nos enfrentaremos a diferentes pozos de la desesperación, habrá momentos en nuestro caminar que nuestros pies estarán hundidos en el lodo cenagoso, que puede ser una prueba, o puede ser las tentaciones que nos quieren atar, o aun el pecado que detiene nuestro crecimiento y estorba en nuestra comunión con Dios. Una prueba que tiene como objetivo producir en nuestra vida el fruto de la paciencia puede verse truncada su obra completa si intentamos pasarla en nuestro propio esfuerzo, dependemos de la provisión divina para poder soportar las diferentes pruebas en nuestro caminar con Cristo. Santiago 1:12 12 Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman. Todos los días nos confrontamos a diferentes tentaciones a las cuales nos es necesario soportar, pues en ello hay bienaventuranza, el termino soportar “jupomeno” que significa resistir por implicación soportar (pruebas) significa tener entereza, es perseverar bajo esa situación para que cuando haya resistido la prueba reciba la recompensa, el termino resistir la prueba significa ser aprobado, el termino “dokimos” que se traduce como resistido, significa aceptable y por implicación aprobado o aprobar la prueba. Es el amor que nosotras tenemos a Dios lo que nos mueve a soportar las diferentes tentaciones en nuestro caminar con el Señor, por lo cual Dios promete recompensa a los que le aman. En nuestro caminar con el Señor no estamos exentos de cometer pecado, en algunas ocasiones caeremos en el pecado, la desventaja de caer en esta situación es que el pecado es como el lodo cenagoso al que se refiere el salmista David y el profeta Jeremías que atasca tus pies de modo que no te permite avanzar, el pecado estorba nuestra comunión con el Señor. Isaías 59:1-2 1 He aquí que no se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni se ha agravado su oído para oír; 2pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír. Dios siempre esta dispuesto a bendecir a su pueblo su misericordia y su bondad nunca se acortan, sus oídos siempre están atentos nunca se hacen pesados para no escuchar, sin embargo se nos dice que lo que impide esta comunión con Dios es el pecado que causa una separación entre Dios y el hombre, y no solo rompe la comunión con Dios sino que cierra las ventanas de la bendición. Jeremías 5:23-25 23 No obstante, este pueblo tiene corazón falso y rebelde; se apartaron y se fueron. 24Y no dijeron en su corazón: Temamos ahora a Jehová Dios nuestro, que da lluvia temprana y tardía en su tiempo, y nos guarda los tiempos establecidos de la siega. 25Vuestras iniquidades han estorbado estas cosas, y vuestros pecados apartaron de vosotros el bien. Perder el temor de Dios fue el problema del pueblo de Israel, la rebeldía y la falsedad les llevo a apartarse de Dios, y como resultado se trunco la bendición de Dios, no permitamos que el pecado haga una separación entre nosotros y nuestro Dios, no permitamos que el pecado aparte de nosotros las bendiciones de Dios para nuestra vida, por el contrario ejercitémonos en el temor de Dios a través de vivir una vida de santidad. 2 Corintios 7:1 1 Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios. La Biblia nos exhorta a vivir una vida temerosa de Dios y la única manera es madurar en la santidad, para lo cual es necesario limpiarnos de todo aquello que nos contamina y contamina nuestra relación con Dios, Dios nos delega la responsabilidad a nosotros. 1 Pedro 1:14 14 como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia; 15sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir; 16porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo
Nos es necesario desechar todos aquellos patrones de conducta que moldearon nuestra vida en el pasado, Dios nos llama a vivir vidas de santidad, Santiago 4:7-8 7 Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros. 8Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones La Palabra de Dios nos manda a ponernos bajo la autoridad de Dios, alinearnos a su voluntad, para que bajo su autoridad y poder podamos resistir al Diablo, el término resistir denote “pararse en contra”, significa oponerse o resistir. El resultado de esto es que Satanás tiene que huir de nosotros, es necesario acercarnos a Dios si queremos que el se acerque a nosotros. Todo aquel que esta practicando el pecado es necesario dejar de pecar, limpiar nuestras manos que representan nuestras acciones, los que tienen doble ánimo, sirven a Dios y al mundo es necesario santificar el corazón. Hebreos 12:1-4 1 Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, 2puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.3Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar. 4Porque aún no habéis resistido hasta la sangre, combatiendo contra el pecado; Es necesario despojarnos de todo aquello que nos causa que no podamos correr con libertad y ligereza esta carrera, el pecado nos asedia o nos rodea, y corramos con perseverancia. Con nuestra mirada en cristo Jesús, considerando su sufrimiento para que no desmayemos, porque aun no hemos resistido este término denota cuando, un ejercito enfilar tropas en contra del pecado, y luchando contra el hasta la sangre. Salmo 40:2 2 Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos La respuesta de Dios a nuestro clamor y paciencia es que el nos libertara de cualquiera que sea nuestra situación, saldremos de aquella situación que nos impide movernos, del lodo cenagoso y afirmara nuestros pies sobre lugar firme y seguro, y nuestro caminar será ordenado delante de El. Salmo 40:3 3 Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, Y confiarán en Jehová. Parte del resultado de esta vida de confianza en Dios, de esperar en el y ver el poder de su salvación, no solamente bendecirá grandemente a nuestra vida sino que aquellos que nos vean pasar por el proceso de esta prueba y que vean la respuesta de Dios, muchos de ellos temerán a Dios y confiaran en el, el testimonio de vivir una vida cristiana conforme a la voluntad de Dios es nuestra responsabilidad.