Clase Dominical 01-11-09 Tema: Confianza en Dios Subtema: Buscando la presencia de Dios Texto: Salmo 27 Intro: La clase pasada estudiamos sobre la protección divina, de como el salmista David en este salmo declara que Dios le libra de sus enemigos protegiéndole de ellos y dándole la victoria sobre sus adversarios, de la misma manera nosotros tenemos nuestra confianza en el Señor porque nos ha librado del poder del pecado porque Cristo murió por nuestros pecados, nos ha librado del poder de Satanás cuando despojo a los principados y potestades triunfando sobre ellos en la cruz, y del poder de la muerte cuando Cristo resucito de entre los muertos. Ahora estudiaremos dos características que el salmista David declara y que son la base de la vida del creyente, la consagración y la santificación. Salmo 27: 4, 7, 8 4 Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo. 7Oye, oh Jehová, mi voz con que a ti clamo; Ten misericordia de mí, y respóndeme. 8Mi corazón ha dicho de ti: Buscad mi rostro. Tu rostro buscaré, oh Jehová; David tenia una petición delante de Dios, el termino demandar significa pedir o requerir algo, y cada uno de nosotros tenemos peticiones y deseos que le hacemos a Dios, podemos tener diferentes tipos de peticiones, sin embargo la Biblia nos enseña que nuestras peticiones deben ser; primeramente conforme a la voluntad de Dios; 1 Juan 5:14-15 4 Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye. 15Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho. Cuando nuestras peticiones están alineadas a la voluntad de Dios podemos tener la confianza de que Dios nos escucha y que tendremos la respuesta a esas peticiones, porque los pensamientos de Dios son pensamientos de paz y no de mal para darnos el fin que esperamos (Jeremías 29:11). La otra característica de nuestras peticiones es que deben tener un orden de prioridad, toda petición por grande o pequeña que sea, delante de Dios es importante, sin embargo la búsqueda de Dios es el fundamento para recibir respuesta a cada una de ellas. Mateo 6:31-33 31 No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos? 32Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. 33Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. La Palabra de Dios nos enseña que no debemos permitir que las preocupaciones nos causen una distracción, el afán causa una división en nuestro pensamiento de modo que nos aleja del objetivo primordial en nuestra vida que es el Señor, notemos la referencia que el Señor hace acerca de los gentiles, es decir aquellos que no tienen puesta su confianza en Dios por no conocerle, que están preocupados mas por sus necesidades que por buscar y depender de Dios. Por el contrario nuestro pensamiento debe estar enfocado en la búsqueda de Dios, y en su justicia, la referencia a su justicia es a hacer su voluntad, sabiendo que el Señor sabe cuales son nuestras necesidades. La petición de David era estar en la presencia de Dios, la expresión de David de estar en la casa de Jehová significa el desear estar en su presencia, la prioridad de un hijo(a) de Dios es buscar su presencia. Notemos que David no solo se queda en el deseo de buscar a Dios sino que toma la determinación de lograr aquello que ha puesto como petición delante de Dios, es decir la petición de David era estar todos los días en la presencia de Dios y el estaba determinado a estarlo. Esto nos enseña que nuestra petición primordial delante de Dios es permanecer todo el tiempo en su presencia, David deseaba estar todos los días de su vida en su presencia, así que debemos esforzarnos por lograrlo, el termino hebreo “bacash” que se traduce por buscar en la expresión de David, significa buscar por cualquier medio, especialmente por medio de la alabanza y la adoración, el termino denota esforzarse por aquello que se busca.
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Salmo 27: 4, 7, 8 4 Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo. 7Oye, oh Jehová, mi voz con que a ti clamo; Ten misericordia de mí, y respóndeme. 8Mi corazón ha dicho de ti: Buscad mi rostro. Tu rostro buscaré, oh Jehová; El objetivo principal del salmista era poder contemplar la hermosura de Dios, el termino contemplar en hebreo, denota “mirar fijamente”, “percibir con placer” o deleite aquello que se contempla, deseaba contemplar la hermosura de Dios, o la gloria de Dios, en otros salmos David describe esta maravillosa experiencia; Salmo 63.1-2 1 Dios, Dios mío eres tú; De madrugada te buscaré; Mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, en tierra seca y árida donde no hay aguas, 2Para ver tu poder y tu gloria, Así como te he mirado en el santuario. A través de este salmo David expresa que aun en medio de toda circunstancia lo primero que haría seria buscar a Dios, la expresión de madrugada denota la importancia de ocuparse temprano a alguna tarea, y por implicación una búsqueda con intensidad y diligencia, la motivación de esta búsqueda, de esta comunión con el Señor, es por la necesidad y el anhelo de nuestro ser, es decir algunas veces alguna necesidad nos mueve a la búsqueda de Dios, sin embargo el anhelo debe también ser un motivo a buscarle. Al igual que el salmo 27 David declara que el anhelo de su búsqueda era ver o contemplar el poder de Dios y su gloria de la misma manera como anteriormente lo había experimentado. Este salmo David lo escribe cuando huía de su hijo Absalon, hacia el desierto de Judea. Es decir las condiciones no eran las mas apropiadas en ese momento, sin embargo David le buscaba con todo su ser, con todo su corazón. Jeremías 29:11-13 11 Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis. 12Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré; 13y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. La oración es uno de los medios que usamos para buscar a Dios, cuando nosotros vamos hacia Dios a través de la oración y lo hacemos con todo nuestro corazón tenemos la garantía de que el nos oye, y de la misma manera cuando le buscamos de todo nuestro corazón, igual tenemos la certeza de que le hallaremos. Salmo 65:1-4 1 Tuya es la alabanza en Sion, oh Dios, Y a ti se pagarán los votos. 2Tú oyes la oración; A ti vendrá toda carne. 3Las iniquidades prevalecen contra mí; Mas nuestras rebeliones tú las perdonarás. 4Bienaventurado el que tú escogieres y atrajeres a ti, Para que habite en tus atrios; Seremos saciados del bien de tu casa, de tu santo templo. La bienaventuranza que David menciona en este salmo es para aquellos que Dios ha escogido y atraído para el mismo, para experimente su presencia, primeramente debemos reconocer que Dios no hace acepción de personas, David declara que Dios escucha la oración de aquel que quiere acercarse a Dios, pues dice que a Dios vendrá toda carne, la Palabra de Dios declara que todo aquel que viene a Jesús el no le echa fuera (Juan 6:37), La Palabra de Dios dice que “los sacrificios a Dios son el espíritu quebrantado, y que al corazón contrito y humillado Dios no lo desprecia” (Salmo 51:17) el salmo 34:18 dice: “cercano esta Jehová a los quebrantados de corazón y salva a los contritos de espíritu” . El perdón de nuestros pecados y nuestras iniquidades, son por medio del sacrificio de Cristo en la cruz del Calvario, es Dos el que perdona nuestras tr4angresiones por medio de la fe en Jesucristo, de otra manera no podríamos acercarnos a Dios, el acceso estaría cerrado, mas Dios muestra su amor para con nosotros en que Cristo murió por nuestros pecados, resucitando al tercer día. La invitación de parte de Dios para vivir en su presencia sigue vigente, Dios desea saciarnos de bien, derramando bendiciones abundantes, el Señor esta atrayendo a las personas para consagrarlas para el, desde tiempos antiguos Dios ha escogido personas para que estén consagradas a el, por ejemplo los primogénitos, o los sacerdotes para que ministraran, también para aquellos que deseaban tomar el nazarenito o consagrarse voluntariamente al servicio de Dios. 2
Números 6:1-3 1 Habló Jehová a Moisés, diciendo: 2Habla a los hijos de Israel y diles: El hombre o la mujer que se apartare haciendo voto de nazareo, para dedicarse a Jehová, 3se abstendrá de vino y de sidra; no beberá vinagre de vino, ni vinagre de sidra, ni beberá ningún licor de uvas, ni tampoco comerá uvas frescas ni secas. Todas aquellas personas que voluntariamente se consagraban a Dios por medio de hacer voto de nazareo, tenían que guardarse de no estar contaminados, y el apartarse de todo aquello que pusiera en riesgo su nazareato. Así de la misma manera cada uno de nosotros somos llamados a la consagración para servir al Señor; los nazarenos tenia que abstenerse de ciertas cosas para no contaminarse, y eran conocidos como personas que profesaban una moral mas estricta y un mayor celo por las cosas de Dios. 1Pedro 1:13-16 13 Por tanto, ceñid los lomos de vuestro entendimiento, sed sobrios, y esperad por completo en la gracia que se os traerá cuando Jesucristo sea manifestado; 14como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia; 15sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir; 16porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo. El termino ceñirse los lomos era una practica entre los hombres de recogerse la tunica en preparación de tomar una acción, cuando la Biblia nos dice que nos ciñamos los lomos con la verdad; esta haciendo referencia a la Palabra de Dios que es la única que tiene poder para transformarnos. “14Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia” (Efesios 6:14) La Biblia nos exhorta a ser sobrios, es decir a estar alertas y vigilantes, y esperando en la venida del Señor, es decir en la gracia que se manifestara cuando el Señor venga, mientras esto sucede no debemos amoldarnos a los esquemas del mundo, ni a los deseos que teníamos y gobernaban nuestra vida antes de conocer al Señor, por el contrario la Biblia nos exhorta a vivir una vida de santidad, a ser santos porque Dios es santo, Romanos 12:2 2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta. Cuando hablamos de estos términos como el de transformación, que denota un cambio de una forma a otra, esta se da por la renovación de nuestra manera de pensar, o de nuestro entendimiento, con el objetivo de poder comprobar cual es la buena voluntad de Dios, hay algunas áreas que aun todavía tienen un arraigo en nuestra vida, y a veces nos impiden llegar a entender la voluntad de Dios para nuestra vida. Tito 3:4 4 Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres, 5nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo, 6el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo nuestro Salvador La búsqueda de Dios es nuestra determinación, la invitación esta abierta para cada uno de nosotros, somos llamados a la consagración, a dedicar nuestra vida al servicio de Dios, somos llamados a vivir en santidad, apartados para el Señor, el otro aspecto que estaremos analizando la próxima semana es la santificación, la cual es el trabajo del Espíritu Santo. Cuando permitimos que el comience a tratar con las áreas que en nuestras propias fuerzas no es posible que sean renovadas y regeneradas, sino que por el poder de Dios, por medio del Espíritu Santo es que podremos arrancar esas arreas que por años están estancando nuestros crecimiento.
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