F
undamentos conceptuales que soportan la formación en Cultura Ciudadana y Convivencia Social
UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DE PEREIRA BIENESTAR UNIVERSITARIO
F
undamentos conceptuales que soportan la formación en Cultura Ciudadana y Convivencia Social
Fundamentos conceptuales que soportan la formación en Cultura Ciudadana y Convivencia Social
UNIVERSIDAD TECNOLOGICA DE PEREIRA BIENESTAR UNIVERSITARIO SISTEMATIZACION
Sandra Lorena Yepes Chisco Trabajadora Social
EQUIPO COORDINADOR
Luzvian Saray Rubio Jefe Bienestar Universitario UTP Fabián Morales Quiceno Jefe Bienestar Universitario UCPR Gloria Lucia López Velásquez Psicóloga, Coordinadora Educación y Formación UTP Luz Amparo Orozco Amaya Trabajadora Social, Coordinadora Promoción Social y Apoyo Socioeconómico Cruz Elena Henao Fernández Psicóloga, Servicio de Psicología UTP Luís Alberto Rojas Franco Profesional en Ciencias del Deporte y la Recreación, Coordinador Club de la Salud UTP Carolina Robledo Estudiante Facultad de Psicología UCPR Martha Lucia Triana Psicóloga, Docente Universitaria y Facilitadora UTP Sonia Valencia Yepes Medica, Servicios Médicos UTP Luís Alfonso Ospina Pulgarín Coordinador Cultura y Divulgación Diego Jaramillo Giraldo Coordinador Servicios Médicos UTP Sandra Lorena Yepes Chisco Trabajadora Social
CORRECCIONES Y OBSERVACIONES
Angela Henao Fernández Licenciada en Filosofía - Docente Depto. de Humanidades U.T.P. CORRECCIÓN DE ESTILO: Edwin Orlando Franco L. Estudiante VI Semestre. Español y Literatura UTP.
DISEÑO
Centro de Recursos Informáticos y Educativos U.T.P.
Para que yo pueda ser, he de ser otro. Salir de mí, buscarme entre los otros. Los otros que no son si no existo. Los otros que me dan plena existencia. Octavio Paz
PRESENTACIÓN
L
as Instituciones no se encuentran aisladas de la realidad que afronta el país, son un microsistema donde se refleja la dinámica de la sociedad. Partiendo de esta premisa se genera la necesidad de crear espacios permanentes para
educar en CULTURA CIUDADANA Y CONVIVENCIA SOCIAL, definiendo la necesidad de emprender acciones frente a fenómenos cotidianos generadores de patrones comportamentales violentos.
Este proceso formativo proporciona las herramientas pedagógicas necesarias para dar lectura a la realidad social, identificar generadores de violencia y/o situaciones problemáticas en cada una de las instituciones, a la vez permite trabajar posibles alternativas de solución, sistemas de regulación del comportamiento humano individual y social, imaginarios sociales y el sueño de institución y país que queremos, permite elaborar el concepto de cultura ciudadana y convivencia social en grupo, refuerza la fundamentación en valores, facilita el asumir compromisos y responsabilidades individuales y grupales para posesionar e interiorizar cambios de actitud y comportamiento, abriendo el camino en cuanto a la creación de ambientes propicios de convivencia institucional; facilita la reflexión, sensibilización, concientización y multiplicación del reconocimiento de sí mismo y del otro con el fin de lograr que el individuo autorregule sus comportamientos, cuide de su entorno, de todo aquello que lo conforma y constituye un bien común, fundamentado en principios de equidad, solidaridad, respeto y tolerancia, desarrollando destrezas y habilidades para poner todo el conocimiento y servicio al beneficio de la humanidad.
NUESTROS OBJETIVOS! Mediar desde el conocimiento, para que el individuo comprenda la importancia de autorregular su comportamiento, cuidar de su entorno y de todo aquello que lo conforma y constituye el bien común. Facilitar procesos de convivencia que permitan desarrollar en la comunidad habilidades y destrezas sociales con el fin de que las acciones que se generen desde esta; se orienten al servicio y hacia el beneficio de la humanidad.
¿QUÉ SE ENTIENDE POR CULTURA CIUDADANA Y CONVIVENCIA SOCIAL? El reto de las Instituciones es fortalecer la cultura ciudadana teniendo en cuenta el desarrollo de cada individuo como ser humano en el ámbito individual y a nivel colectivo. No obstante el sentido de pertenencia de cada actor institucional debe estar referenciado en un querer hacer parte del conjunto de comportamientos, valores y actitudes espirituales, materiales, intelectuales, emocionales que caracterizan nuestras comunidades, convirtiéndolas en espacios o escenarios que permiten un constante dialogo con grupos humanos diversos y plurales, tal como lo menciona el Padre Pedro Ricardo Orozco Orozco en el Foro Pensar Ciudad: Un Encuentro Para Construir.
CULTURA: Según el antropólogo ingles E.B Taylor (1874): la cultura es el complejo de conocimientos, creencias, arte, moral, derecho, costumbres y cualesquiera otras aptitudes y hábitos que el hombre adquiere como miembro de la sociedad. La cultura consiste en patrones explícitos e implícitos de comportamiento y todo aquello que lo rige, adquiridos y transmitidos mediante símbolos, que constituyen los logros distintivos de los grupos humanos, incluyendo su plasmación con utensilios; el núcleo esencial de la cultura se compone de ideas tradicionales y, de sus valores asociados: los sistemas culturales pueden ser considerados como producto de la actuación o como elementos condicionales de las actuaciones sucesivas. Se aprende, aprehende y transforma socialmente.
Para Antonio Elizalde y Patricio Donoso «cultura tiene sus orígenes en el latín, viene de ‘colere’, cuidar, cultivar y ello es relacionado con dos ideas, permanencia y cambio. La primera cuidar la permanencia de la especie humana, el patrimonio genético cultural de la humanidad, asumiendo un compromiso ético o bioético; lo ya acumulado a lo largo de la historia para compartirlo con las nuevas generaciones. La segunda cuidar y cultivar las formas de vida, transformar y modificar lo natural para hacerlo más útil a la existencia humana, se trata de cambiar para mejorar lo que ya se tiene, lo que ya se ha logrado, propendiendo por su sostenibilidad en el tiempo. Cultura ciudadana es entonces, aquella que surge del ejercicio, de operar de la existencia colectiva, de existir con otros, de convivir, de vivir con, de participar, de hacerse parte de, que es la única forma posible de existencia humana. Es en ella donde se hace posible la condición ciudadana, la satisfacción de las necesidades humanas fundamentales, el despliegue y ejercicio de los derechos inherentes a las personas y también de los deberes que surgen del existir
social, del reconocimiento de la alteridad u otredad que enriquece la individualidad y a la vez hace posible y singulariza a cada ser humano, a cada persona»1 , por tal motivo la cultura ciudadana contribuye a mejorar no solo los espacios físicos y públicos donde nos movemos, sino también los entornos, la calidad de vida, el desarrollo humano integral y la convivencia, hacia el progreso social. En el texto TRANSFORMAR LA CIUDAD CON LA CIUDADANIA del exalcalde mayor de Bogotá Antanas Mokus se plantea que «donde hay cultura ciudadana hay reglas de juego y limites respetados entre desconocidos. Hay reconocimiento de los deberes del ciudadano. Hay sentido de pertenencia por la ciudad y, por lo tanto, se respeta el patrimonio común y se adhiere al proceso de mejorar la ciudad»2 La cultura ciudadana se convierte en una prioridad para lograr bienestar; siendo adquirida principalmente en la familia, la escuela, y el trabajo como espacios primarios de interacción social, posteriormente es reproducida en los lugares públicos donde la cultura ciudadana se convierte en una experiencia de vida cotidiana.
CULTURA CIUDADANA: La cultura ciudadana como eje de convivencia social en espacios comunes (casa, barrio, ciudad, universidad y trabajo) se constituye en un patrimonio social y humano inalienable; por dicha razón la Cultura Ciudadana o Urbana no ha sido considerada como una escuela de pensamiento o una doctrina, es el resultado de un conjunto de programas y acciones de un gobierno o una gestión orientada a la convivencia. La cultura ciudadana esta dada a lograr cambios desde la pedagogía, transformaciones sociales y culturales manifiestas en el comportamiento humano individual y social expresado en hábitos. Y estos últimos son soportados desde las creencias. «La convivencia es el resultado de diferentes interacciones cotidianas entre las personas que se mueven en distintos ámbitos y cuyas percepciones y acciones se fundamentan en los hábitos y las costumbres que contribuyen a formar y expresar una determinada cultura e identificación de comportamientos y hábitos claves en convivencia ciudadana». 3 Desde la perspectiva de trabajo con la comunidad de la Universidad Tecnologica de Pereira, cultura ciudadana ha sido entendida como el proceso de formar hombres y mujeres para la vida en la ciudad y sociedad, con criterios para tomar decisiones, desarrollar carácter, conciencia, asumir responsabilidades, identidad, democracia, valores, normas, política, costumbres y etnicidad, es un insumo social que se adquiere, no nace con uno, se transforma o modifica dependiendo del circulo social en el cual se interactúa. Esta regida por normas, reglas, derechos y deberes que la estructuran y definen. Su principal fin es lograr que el individuo autorregule sus compartimentos, cuide de su entorno, de todo aquello que conforma y constituye el bien común.
COSTUMBRE: Desde cultura ciudadana se entiende como la integración de hábito y comportamiento que enlaza un conjunto de reglas, las cuales presentan tres consideraciones: la autorregulación, la anomia y los demás. Pretende a través del autocontrol promover la autonomía de los derechos y deberes con plena conciencia
1 2 3
ELIZALDE, Antonio. DONOSO, Patricio. Formación en Cultura Ciudadana. MOCKUS, Antanas. Transformar la Ciudad con la Ciudadanía. GUZMÁN, Fernando. Asesor del programa de Cultura Ciudadana en Bogotá. Taller de Cultura Ciudadana y Mecanismos de Regulación. Universidad Tecnológica de Pereira. 2002.
y responsabilidad sobre la manifestación de los mismos, con la anomia interiorizar la norma y con el reconocimiento de la existencia del otro asumir responsabilidad civil. Las instituciones soportan y reproducen costumbres, los canales de comunicación son buen ejemplo de ello, por tanto es fundamental que en estos exista honradez y que esta a la vez pueda ser asumida como costumbre porque facilita la construcción de acuerdos de convivencia. Hay costumbres que dificultan más la convivencia que otras y hay costumbres que facilitan más la convivencia que otras.
AUTORREGULACIÓN Yo mismo(a) sin policía y sin sanción puedo acatar la regla. Hay que marcar una diferencia entre quien cumple la regla y quien no la cumple, lo primero que hay que hacer frente a las reglas es dar ejemplo con mi comportamiento (autorregulación) y poder ser coherente con lo que se piensa, se dice, se siente y se hace. Lo mas cercano a la convivencia es la conducta propia, esta debe ser autorregulada, y para ello hay que observar el propio comportamiento; realizar discernimientos entre lo que esta mal o bien para cada uno, con plena conciencia del contexto social en el cual se interactúa. Orientamos los cambios a través de los comportamientos cuando las personas tienen la capacidad de observarse y autorregularse.
HÁBITO Repetición continua de un mismo comportamiento; como la coherencia, que es refuerzo positivo de actitudes y conductas, validación masiva de un comportamiento positivo.
LA NORMA Y SU ORÍGEN Según la corriente filosófica del positivismo, la norma es entendida como un juicio lógico, por lo tanto todo juicio es un proceso mental que afirma la realidad de una cosa y se expresa mediante una relación jurídica, permitiendo al derecho a actuar de manera coherente. El concepto de derecho supone un orden jurídico entendido como un medio para el logro de fines, por lo cual la noción del derecho puede ser comprendida y concebida sólo mediante una referencia a los fines humanos y a sus medios adecuados; Stammler (1853-1938) lo supone como una noción de armonía. Por otra parte Hans Kelsen (1881-1973), plantea la norma como un sistema que regula la conducta humana facilitando el orden social; desde un punto de vista dinámico. Las normas son creadas y aplicadas por actos humanos, se aceptan más fácilmente si hay posibilidad de participar en su elaboración; nace de la necesidad humana de generar equilibrio en la interrelación con el otro.
LO PÚBLICO Y EL BIEN COMÚN
Según el texto Acuerdo Programático Para Construir La Paz, de La Confederación Colombiana de ONGS plantea que «Lo público es todo aquello que conviene a todos(as), de la misma manera, para la dignidad de todos(as). El andén es público o el parque es público, porque siempre están allí, para que todos transiten y se diviertan, sin exclusiones por razón de clase, edad, sexo, partido o religión. Todos los bienes o servicios destinados
a la satisfacción de necesidades comunes e indispensables, que hacen posible la vida digna de todos y todas, son los bienes públicos o bienes colectivos por excelencia: La justicia, la vigilancia de las calles, los servicios domiciliarios, la educación, la salud preventiva, la vivienda mínima, las telecomunicaciones, entre otros. Cuando la disponibilidad o el goce de estos bienes o servicios excluye a una parte de la población o son de una calidad para unos y de otra calidad para otros, se dice que hay inequidad o corporativismo. Así entonces la educación no es pública porque se pague con recursos del estado. Es pública cuando es de igual calidad para todos, estudie donde estudie el educando. Cuando los bienes o servicios públicos se construyen en función de intereses particulares (de grupos o sectores sociales) y las decisiones sobre el acceso o el uso del bien o servicio están determinadas por motivos distintos del bien común, ese bien público es excluyente o inequitativo. Apropiarse para beneficio privado de un bien que debe existir para todos es corrupción así se llama a la apropiación de lo publico».4 El espacio público en las instituciones es el conjunto de lugares e inmuebles destinados a la satisfacción de necesidades colectivas. Estos incluyen escenarios deportivos biblioteca, cafeterías, parqueaderos, teatros, aulas de clase, zonas verdes, pasillos, andenes entre otros, a lo cual se suma todos los muebles o locaciones que en ellos se encuentra. Por tanto es responsabilidad de cada individuo que haga uso de estos sitios el procurar un buen manejo, apropiación y mantenimiento de los mismos. Los espacios públicos de las instituciones invitan a cada persona a comportarse como ciudadanos, capaces de vivir en sociedad, de autorregularse, y cooperar con otros para construir un orden social justo, participativo y democrático, un orden social que a la vez posea autonomía, y por ende que tenga la capacidad de auto controlarse y darse un orden a si mismo, que plantee derechos y deberes, normas y leyes que conlleve a la dignidad humana. De esta manera se da inicio a una sociedad libre, justa y democrática en la cual puedan vivir y convivir todos como ciudadanos, actores y constructores de ciudad. Lo público es responsabilidad de todos, pero pocos son los que en teoría y en acciones logran construirlo. Lo público es construido por actores humanos y sociales que se interesan por un beneficio común dejando de lado sus intereses particulares y contribuyendo a través de sus actitudes, decisiones y acciones a modificar y transformar modos de pensar, sentir y actuar de una colectividad; este referente expresa un nuevo orden social que traspasa las barreras de lo privado, para convertirse en entornos de uso público y de bien común. Su principal perspectiva es producir bienes y servicios que garanticen la satisfacción de necesidades reales y sentidas de las personas, cuya contribución promueva el desarrollo humano integral, y el desarrollo social de un estado nación, con cultura democrática. Lo publico genera procesos de cuidado y mantenimiento de los espacios, con el fin de garantizar una sostenibiliad de los mismos en el tiempo, para asegurar una convivencia social digna, igualitaria y en paz, donde se tenga presente que lo público no
4
Acuerdo Programatico para Construir la Paz. Confederación Colombiana de ONG‘s. Bogotá. Marzo de 2001.
es responsabilidad solo del estado, es una responsabilidad compartida, de la cual todos y cada uno hace parte a través de la participación que tenga en los procesos planteados para lograr dicho fin.
SISTEMAS DE REGULACIÓN DEL COMPORTAMIENTO HUMANO: LEY MORAL Y CULTURA Estos son los tres sistemas tradicionales de regulación del comportamiento humano: * La ley o lo legalmente permitido: es un conjunto de normas jurídicas expresas, con mecanismos de cumplimiento y se apoyado en premisas claramente definidas. * Lo culturalmente válido: son los comportamientos aceptables o deseables vinculados a un contexto social. * Lo moralmente válido: son los juicios y argumentos que la persona formula ante sí o ante los otros, haciendo uso de sus derechos y deberes y de su propia conciencia (autonomía moral). En el contexto de la cultura ciudadana, que deviene del concepto de reproducción cultural, estos tres sistemas experimentan una escisión particularmente cuando los códigos culturales no son compatibles con la ley, o cuando ésta se ve en contra de las tradiciones culturales. El hecho de que las barreras culturales no sean más exigentes que las jurídicas facilita la coexistencia de comportamientos ilegales culturalmente aceptados y reproducidos. Intensificar la comunicación y reforzar la interacción expresiva y estratégica se proponen como mecanismos para minimizar la escisión cultura, ley y moral. «Existe una regulación cultural o lo que los antropólogos exploran como el sistema de creencias y costumbres. Existe un conjunto de reglas organizadas con diferentes niveles de profundidad que ponen límites y se transmiten de manera implícita de una generación a otra. No hay un orden social sin este tipo de reproducción cultural y es posible que muchos problemas de convivencia tengan su origen en ella. Por tanto la cultura ciudadana se entiende como un trasfondo de sentido que regula los comportamientos de los ciudadanos, en la medida en que establece las reglas mínimas comunes que hacen posible las relaciones entre ellos y su entorno, así como las formas de producción, circulación, reconocimiento, apropiación y recepción de ese universo de sentido».5 La cultura ciudadana busca establecer significados y reglas de juego ligados a la producción de sentido, que permitan que cada ciudadano(a) además de apropiarse de los diferentes elementos urbanos desarrolle estrategias para reconocer los diversos entornos y adecuar su comportamiento.
10
Como seres humanos a diario actuamos movidos por la ley, la moral y la cultura, siendo estos los sistemas de regulación que rigen nuestras vidas; sin embargo en determinados momentos rige más un sistema de regulación en nuestro comportamiento que otro, 5
MOCKUS, Antanas. Opus Cit.
REGULACIÓN
LEGAL
MORAL
CULTURAL Explicita, incorporada en actitudes y comportamientos. Vigencia: de acuerdo con el contexto o grupo
Explicita, escrita, Vigencia: Claramente definida (donde y cuándo)
Implicita o reflexionada. Alcance: vida propia.
FUENTE DE AUTORIDAD
Voluntad, popular, constitución, ley, actos administrativos.
Propia persona. Fuente: padres, maestros, artes, etc.
Pasado o comunidad. Condición o signo de pertenencia.
SANCIÓN
Castigo previsto expresamente. (multa, carcel)
Culpa, malestar interno, tensión sobre la identidad personal.
Verguenza, exclusión, mancha sobre imagen social.
SUJETO DE APLICACIÓN
Autoridad expresamente facultada
Propia conciencia (figuras de autoridad interiorizadas)
Comunidad, sus voceros, sus miembros.
FORMA DE REPARACIÓN
Cumplimiento de la sanción
Arrepentimiento, propósito de cambio, logros en tal propósito.
Disculpas, perdón, cambio de comportamiento visible.
GRATIFICACIÓN
Estímulos Tributarios, distinciones
Satisfacción moral. Ampliación del sentido de la reflexión y comunicación.
Atención, felicitación, tener en cuenta , ampliación del sentido de la comunicación.
Derechos
Deberes
Hábitos que presumen derechos, deberes.
FORMA
INVOCACIÓN CENTRAL
Fuente Pablo Franky Méndez. Cultura Cidadana: La experiencia de Santa Fe de Bogotá 1995 - 1997. Estudio de caso. Magister en Gestión y Políticas Públicas. Universidad de Chile. Julio de 1999.
LEY
MORAL
RESPETO O ADMIRACIÓN A LA LEY
Tranquilidad con la propia conciencia
TEMOR A LA SANCIÓN O A LA CARCEL
Temor a la culpa
CULTURAL Reconocimiento social
Temor al rechazo social.
11
debido al discernimiento que cada persona hace entre lo que esta bien o mal, de acuerdo al entorno social en el cual se encuentra y las normas culturales, naturales y legales que allí lo rigen; la pregunta clave es entonces ¿Qué sistema impera más en nuestro comportamiento? La convivencia es un supuesto que genera confianza. Esta determinada por el comportamiento de las personas. Cuando desarrollamos un comportamiento debemos saber porque lo asumimos en vez de otro. Esto es lo que se llama Sistemas de regulación del comportamiento humano. En él vemos las reacciones de la gente de acuerdo a tres parámetros: 1. La ley: Uno atiende la ley por admiración o satisfacción o, por temor a la sanción o a ir a la cárcel. 2. La moral: Nuestras sociedades tienen convicciones de valores inculcadas desde la familia y la iglesia. Desarrollamos dos tipos de comportamiento, por tranquilidad frente a la propia conciencia o por culpa, lo que se llama guayabo moral. Por eso en ocasiones la persona se abstiene de asumir determinado comportamiento. 3. La cultura: Nos lleva a reaccionar en busca de la satisfacción del reconocimiento social o por temor a la sanción o rechazo social El ex-alcalde mayor de Bogotá, Antanas Mockus plantea que: «en Colombia somos muy dados a pensar que en nosotros se puede trabajar a las buenas y con los demás a las malas.» Es importante para lograr una buena convivencia reconocer al otro, antes que juzgarlo. Un valor importante es ser congruente entre lo que pienso y lo que hago. La sanción debe tener una correlación con el estímulo y la cultura. Hay más disposición a cumplir las normas cuando hay mayor señalización. Una norma que exige exceso de control estimula el no cumplimiento ante las pocas personas dispuestas para vigilar el comportamiento de ésta. La ley es el primer dique al que echamos mano para el cumplimiento de las normas. Hegel plantea ley-delito-sanción, cuando este dique no es cumplido por un gran porcentaje de las personas apelamos a la moral; cuando los hechos sociales desbordan la moral pasamos a la cultura (la sociedad), cuando esta deja de ser una prioridad se aplica la sanción. La cultura juega un papel vital en los sistemas de regulación, ya que esta permite conocer ciertos comportamientos individuales y reconocer formas de comportamiento colectivo; cada región tiene sus propias ventajas para fortalecer el tema de la cultura, interiorizando el concepto de ley y moral dentro de su propio marco contextual, (Costa Rica es un País donde se logra encontrar altos niveles de correlación entre ley, cultura y moral).
12
Para los sistemas de regulación en Colombia hay un divorcio entre ley, moral y cultura. Lo normal es que lo que acordemos entre dos personas lo hagamos y que la sociedad lo acepte y lo asuma. Debemos crear modelos de cultura ciudadana donde busquemos reconciliar los tres diques, ser congruentes entre lo que decimos y hacemos y que la sociedad lo acepte, no sin antes haber llegado a consensos por medio de la negociación, ésta nos permite interactuar con otros, nos permite vivir socialmente. La convivencia está basada en la confianza y en los acuerdos, y para hacer acuerdos
deben establecerse reglas. Un acuerdo sin reglas difícilmente se puede defender o cumplir. En Colombia tendemos a hacer acuerdos que difícilmente se pueden cumplir. El cumplimiento de los acuerdos depende del acuerdo mismo, es decir de la calidad de éste y de la capacidad de las partes para dialogar. Los malos acuerdos y la falta de consensos afectan la convivencia. La mayoría de los conflictos de la gente se presentan con sus familiares o con sus vecinos. Los conflictos por lo general ocasionan un mayor costo emocional que material. En la mayoría de los casos el conflicto con el otro es de control externo, es decir la culpa es de él o ella. Él o ella debe dar el primer paso para resolverlo; esta situación es el resultado de la incapacidad que tenemos los seres humanos para dialogar y comunicarnos adecuadamente.
¿Qué genera confianza?
- El cumplimiento de los acuerdos - La equidad - El lenguaje y la comunicación - La existencia de reglas - El conocimiento de la persona sobre el tema - El saber quienes somos y poder reconocer nuestra historia
DISCREPANCIAS O DIVORCIO ENTRE LA LEY, LA MORAL Y LA CULTURA En una sociedad democrática ideal, la ley, la moral y la cultura tienden a ser congruentes. Los comportamientos que son válidos a la luz de la moral individual suelen gozar de aprobación cultural, aunque lo inverso no siempre es verdad. A su vez, lo permitido culturalmente suele estar permitido legalmente, aunque algunos comportamientos jurídicamente admisibles son rechazados por razones culturales. En una sociedad ideal, la cultura es más exigente que la ley, y la moral lo es más que la cultura. El divorcio entre las tres ha llevado en Colombia a una intensificación de la violencia, de la delincuencia y de la corrupción; al desprestigio de las instituciones, al debilitamiento de muchas de las tradiciones culturales, y a una crisis de la moral individual. El ejercicio sistemático de la violencia y de la corrupción crece y se consolida precisamente porque llega a ser culturalmente aceptado en ciertos contextos. Se toleran así comportamientos claramente ilegales y con frecuencia moralmente censurables. En síntesis, el divorcio entre los tres sistemas que regulan el comportamiento humano se expresa en acciones muchas veces ilegales pero aprobadas moral y culturalmente, o desaprobadas culturalmente pero aceptables moralmente, o moralmente inadmisibles pero toleradas o aceptadas en lo cultural. Así mismo, algunas obligaciones legales no son reconocidas como obligaciones morales, o carecen de aprobación cultural en ciertos medios sociales. El reconocimiento de las discrepancias entre la regulación jurídica (legal), la regulación cultural (colectiva y variable según el contexto) y la regulación moral (individual) llevó a formular la hipótesis del divorcio entre ley, moral y cultura para explicar de manera precisa las dificultades claves de la convivencia. Tales discrepancias se pueden subsanar, a su vez, mediante una interacción intensificada, y esta hipótesis (desarrollada en Carrillo, 1991) orientó la vía de acción de algunos programas de gobierno a nivel nacional.
13
LA INTERACCIÓN INTENSIFICADA CÓMO CAMINO PARA ARMONIZAR LA LEY, LA MORAL Y LA CULTURA. «¿Por qué la comunicación, o lo que hemos de llamar la interacción intensificada, ayuda a subsanar el divorcio entre la ley, la moral y la cultura? Se parte de dos premisas: que los conflictos surgen o se agravan por limitaciones de la comunicación y que la relación directa, cara a cara, puede disuadir la violencia»6
CONFLICTO «Una incompatibilidad entre conductas, percepciones, objetivos y/o afectos entre individuos y grupos, que definen estas metas como mutuamente incompatibles. Puede existir o no una expresión agresiva de esta incompatibilidad social. Dos o más partes perciben que en todo o en parte tienen intereses divergentes y así lo expresan.
Conflicto como: * * * * *
un proceso interaccional y que como tal nace, crece, se desarrolla y puede a veces transformarse, desaparecer, y/o disolverse, y otras veces permanecer estacionario, que se construye recíprocamente entre dos o más partes, entendiendo por partes a personas, grupos grandes o pequeños, en cualquier combinación, en el que predominan las interacciones antagónicas sobre las cooperativas. Algunas veces el antagonismo lleva a la agresión mutua, donde las personas que intervienen lo hacen con sus acciones, pensamientos, afectos y discursos. diferencia en las opiniones. Por ejemplo durante un proyecto puntual pueden surgir diversas situaciones. Puede involucrar a los miembros del equipo que esté llevando a cabo el proyecto, el gerente del proyecto e incluso al cliente».7
«Proceso situación en el que dos o más seres o grupos humanos tratan activamente de frustrar sus respectivos propósitos, de impedir la satisfacción de sus intereses recíprocos, llegando a lesionar o a destrozar al adversario. Puede ser organizado o no, transitorio o permanente, físico, intelectual o espiritual».8 «Conflicto en psicología social se refiere al amplio espectro que en la interacción e interrelación humana va desde situaciones y cuestiones que se elaboran con cierta rapidez, casi sin «problema» (aun cuando toda satisfacción de necesidades es búsqueda, mediatez, y por lo tanto es problema), hasta situaciones complejas que derivan en complicaciones, antagonismos, llegando a veces a estereotipos, rigideces o cristalizaciones, cuya posibilidad de resolución requiere la consulta o intervención de operadores (terceros) que aporten elementos o instrumentos eficaces para la superación del conflicto. En este último caso nos estamos refiriendo a situaciones enmarcadas en lo que Pichón Rivière señalaría como adaptación pasiva a la realidad». «Situación que opone uno o varios estados con otro u otros, o con grupos de individuos o también con individuos aislados protegidos por el derecho de gerentes, respecto de la satisfacción de un interés simple o por la existencia, extensión o ejercicio de un derecho».9
14 6 7 8 9 10
Cultura Ciudadana. Programa Contra la Violencia en Sta Fe de Bogotá. Colombia. 1995 - 1997. Alcaldía mayor de Bogotá. GIEO - Administración de Proyectos. PRATT, Henry Diccionario de sociología:. Fairchild, editor. Año: 1949 MORENO, Rodríguez. Vocabulario Derecho y Ciencias Sociales. Ed.: De Palma Diccionario Enciclopédico Ilustrado (Océano Uno)
«Colisión u oposición de intereses, derechos, pretensiones. Apuro, situación desgraciada y de difícil salida».10 La erradicación de los conflictos y su disolución en una cálida convivencia es más que una meta deseable y alcanzable; puesto que es preciso tanto en la vida individual como colectiva construir un espacio social y legal en el cual los conflictos puedan manifestarse y desarrollarse sin que la oposición al otro conduzca a la opresión, a la impotencia o al silenciamiento. En las sociedades modernas se da por sentado que el Estado garantiza el cumplimiento de un único sistema congruente de leyes que favorece dentro de ciertos límites la coexistencia de distintas actitudes morales y tradiciones culturales, cada una con reglas específicas. Esto permite el pluralismo moral y cultural, sin que ello implique la ausencia de reglas morales o culturales (o una indiferencia hacia ellas). Por otra parte, hoy en día las reglas deben ser compatibles con los dos pluralismos, el moral y el cultural. En una democracia hay reglas comunes que son acatadas por personas con diferentes actitudes morales y tradiciones culturales, y este pluralismo es posible cuando hay congruencia entre la ley, la cultura y la moral.
GENERADORES DE VIOLENCIA: «Los generadores de violencia son todas aquellas situaciones, comportamientos o condiciones que en un momento dado provocan o motivan reacciones de carácter negativo, agresivo y violento en un individuo o colectividad porque se llegan a sentir vulnerados y afectados en su persona y estima, provocándoles ira, dolor y/o sentimientos de difícil manejo por la inexistencia de condiciones, o debilidad de la mismas.» 11 Las situaciones, comportamientos o condiciones que inciden para generar violencia se derivan básicamente del medio. Estos medios los podemos clasificar en:
Económico o Economicista: condiciones de vida, status y estabilidad laboral, reformas laborales y pensiónales, crisis económicas de los países, deuda externa, privatización de las entidades públicas, descentralización y autosostenimiento institucional, apertura económica, globalización del mercado, libre competencia, mercantilismo, venta, consumo y ganancia, dominio de grandes potencias, status de países subdesarrollados y/o tercermundista, austeridad y recesión, aumentos en los costos de vida y la canasta familiar. Georg Simmel, (filósofo alemán 1858-1918), decía, en relación con el peligro que supone el mercado para las libertades individuales: «el mercado creado para ofrecer un amplio margen de posibilidades al individuo se convierte en un freno, un límite, en cuanto se constituye en una institución separada de las complejidades de la individualidad».
Cultural: hibridación de culturas, globalización de la cultura del consumo a través
de la televisión y medios de comunicación, la trasgresión hacia grupos autóctonos, mercantilización de las culturas, adaptación a nuevos espacios, contextos y regímenes de vida, desarraigo, ausencia de identidad y sentido de pertenencia por lo que es propio, por lo que se nos reconoce, por lo que se nos identifica en otros espacios, por los valores humanos, individuales, familiares, instituciones, étnicos, regionales, nacionales 11
Guía Taller Cultura Ciudadana y Convivencia Social. Universidad Católica Popular de Risaralda y Universidad Tecnológica de Pereira. 2002.
15
y universales; por el choque de costumbres, ritos y creencias, por la corrosión del carácter humano y social, la poca tolerancia para aceptar la diferencia, la adaptación a un nuevo medio, a un nuevo contexto, adaptación a un nuevo mundo, un mundo impuesto por otros, un mundo manipulado por intereses particulares de dominio y poder, un mundo donde no se alcanza a tener conciencia de la pluridiversidad étnica y multiculturalidad de nuestro país y otros países; características y reconocimiento de la formación biológica, histórica y sociocultural del individuo y el entorno grupal en el cual interactúa, idiosincrasia de un pueblo, encuentro entre culturas y adaptabilidad a nuevas dinámicas de vida.
Político: Estados de depresión, clientelismo, estados de dominio y manipulación,
ausencia del paternalismo y protección gubernamental, carencia de políticas sociales, grado de participación de la comunidad educativa en la vida política, violencia social, grupos armados al margen de la ley, delincuencia común, prevalecía de intereses particulares sobre los grupales, inadecuado manejo y dirección de políticas estatales, debilidad en los planes de gobierno, leyes y normatividad en nuestro país, gobernantes que no son coherentes con lo que piensan, dicen y hacen en el manejo de un gobierno, discrepancia entre grupos políticos y manejo del poder, ausencia o falta de control y autoridad para el cumplimiento de normas, falta de una verdadera conciencia política y gubernamental, manejo e imposición de políticas exteriores que son adaptadas al gobierno nacional para el desarrollo del país, sin tomar en cuenta las características particulares del mismo ante su propio crecimiento y desarrollo.
Social: Influencia del contexto, para el caso hablamos de las problemáticas que se
generan en la zona cafetera; marginalidad, cinturones de miseria y/o condiciones de extrema pobreza, desigualdad, inequidad, inseguridad, desprotección social a nivel de salud, educación, subsidios, seguridad, entre otros. Carencia de servicios domiciliarios, desplazamiento forzoso, conflicto interno del país, depresión y represión social, discriminación racial, de género, de creencia, de condición social, de estrato; la desagregación cultural, falta de presencia estatal, descomposición del tejido social, ausencia de cooperativismo y sensibilidad por el otro y por lo otro, la sobrepoblación. Los 4 generadores de violencia social más reconocidos son: la desigualdad social y la inequidad, la injusticia, la ausencia de formación en valores con carácter social, la falta de ejemplo de quienes detentan el poder.
Institucional: Abuso del poder y autoridad, limitación del espacio participativo, ausencia del ejercicio de la democracia, desconocimiento y escasa difusión de los valores ciudadanos, inexistencia de canales comunicacionales para la solución y/o resolución de problemas o contiendas, estricta o poca normatización como determinante de control, abuso del saber como subordinación, clima laboral o escolar tenso y/o inapropiado, cupos u oportunidades de acceso a un empleo o escuela limitadas, el asumir los oficios no como una misión sino como un puesto donde simplemente se va a ganar dinero o adquirir un titulo, falta de estimulo a la investigación, carencia o debilidad en procesos eficaces de planeación, poco impacto de la institución en cuanto a sus propósitos, misión y visión a nivel local, regional y nacional.
Familiar: Influencia del medio externo en el vinculo familiar, económico, político, social
16
e institucional; y a nivel interno, pautas de crianza, violencia paterna y materna que es transmitida y heredada de una generación a otra, falta de afecto, insuficiente madurez psicológica en algún miembro de la familia, considerar a algún miembro de la familia desagradable o indigno de ser amado y respetado, miembros de la familia que ven
en los otros percepciones generacionales que no se ajustan a su realidad, padres que no se adaptan a la vida adulta o hijos que creen tener el rol de padres, manipulación de intereses a través de los sentimientos, poco dialogo, comprensión y tolerancia, canales de comunicación débiles, diferencias generacionales, negligencia, alcoholismo, drogadicción, hacinamiento, autoritarismo, segregación del poder y/o desautorización del mismo de un miembro de la familia hacia otro, manifestación de patologías físicas y psicológicas en algún miembro de la familia, ruptura de lazos afectivos conyugales, maternales, paternales o fraternales, adaptación al circulo familiar.
Ambiental: Desastres o catástrofes naturales, el sobrecalentamiento global, destrucción de reservas naturales, primacía del ambiente construido en concreto sobre el ambiente natural (selva, bosques), destrucción de fauna y flora, ausencia de políticas ambientales, falta de conciencia ante la protección del ambiente natural, ausencia de valores ambientales, prevalecía del consumismo sobre la razón de un mundo sostenible y sustentable, contaminación ambiental, entre otros.
Individuo en si mismo: Influencia de la herencia genética, el instinto, estados
mentales, estado biológico y psicosocial, contextual, histórico, reconocimiento o rechazo del medio grupal donde el individuo interactúa y se desarrolla a la vez que desarrolla sus repertorios comportamentales de autoestima, nivel de autocontrol, carácter, asertividad y agresividad. Hoy día no se puede desconocer la incidencia de todo tipo de situaciones en las reacciones o comportamientos violentos de los individuos, sean estos actores pasivos o activos de una determinada problemática; ya que el individuo se encuentra en un alto estado de vulnerabilidad ante una sociedad con múltiples problemáticas, inmerso en un mundo donde los intereses materiales sobrepasaron los intereses humanos; generando inconformidad e incomodidad que aflora en el actuar. Por lo tanto no es coherente solo atacar la reacción violenta en si misma, sino que se debe trabajar para transformar las causas o motivos que la generan. Lo lógico no es poner pañitos de agua tibia al problema, es ir a su raíz y transformar lo que allí este haciendo daño, para de este modo obtener resultados positivos en la solución del mismo.
FAMILIA
ESCUELA O TRABAJO
SER HUMANO
CIUDAD
BARRIO Incidencia de estímulos externos: sociales, políticos, culturales, ambientales, económicos, familiares e institucionales y estímulos internos: biológicos, psíquico y químicos en el comportamiento del ser humano y su interacción social.
17
El ser humano dentro de su actuar cotidiano adquiere patrones de comportamiento social en cada uno de los espacios en los cuales interactúa, los adapta a su propia vida, moldea y reproduce en otros escenarios sociales, así estructura el carácter comportamental que se vuelve reciproco entre la movilización que hace de un espacio de socialización a otro.
DIMENSIÓN HUMANA Y SOCIAL La dimensión humana permite que tanto hombres como mujeres reconozcan el papel que desempeñan en los espacios públicos y comunes, siendo este el fundamento que permite que cada uno a través de su potencialidad promueva el desarrollo humano, rescate la inversión social, política y económica, que dota al pueblo de un capital social; el cual hace referencia a la construcción y expansión de valores cívicos integrando esfuerzos en pro del bien común, rescata la identidad ante lo publico y promueve el trabajo colectivo, democrático, tolerante ante la diferencia, participativo, solidario, de confianza mutua, con compromiso, respeto, integración, dialogo, intercambio de información, cuyo fin es establecer relaciones que generen metas administrativas, normas y políticas estatales colectivamente valoradas. Según Ricardo H. Cobo Lloreda exalcalde de Santiago de Cali, en el Manual de Participación Ciudadana y Gestión Comunitaria, «La participación democrática que ordena la constitución ha de concretarse, además, en el robustecimiento de la sociedad civil que no es otra cosa que la comunidad organizada, mirando, el horizonte del bienestar general como responsabilidad de todos. Si se logra vincular a todos los sectores en el logro del bien común se logran los bienes propios sociales». 12 Por tanto la principal dimensión de lo social es la integración de lo político, cultural y biológico.
DIMENSION FISICA: (todo aquello elaborado por los humanos): recursos tecnológicos, culturales, científicos e investigativos, tales como fábricas, equipos, infraestructura.
DIMENSION HUMANA: dotaciones en educación, salud y nutrición de la población. Reconstrucción de la historia biológica, ideales y creencias.
DIMENSION NATURAL: recursos proporcionados por el entorno (suelo, atmósfera,
bosques, minerales, aguas y humedales). Los cuales representan el desarrollo ambiental de una nación.13
18
«Es posible hablar entonces de dimensión social si se logra cooperación coordinada, si se restaura la confianza, si se consolida el civismo (conciencia, cultura, educación, participación y acciones ciudadanas), si se refuerza el sentido de identidad y de pertenencia, si se recobra la esperanza, si se accede a la reconciliación, la solidaridad, la convivencia y si entre todos se integran el liderazgo y se construyen consensos, se logra una sociedad apta para la paz, en donde la textura social estará solidamente integrada y articulada. Por tanto la dimensión social, es fundamental para el desarrollo humano, es creado por ciudadanos interactuando mutuamente para alcanzar metas comunes. Se basa en el fortalecimiento de redes organizacionales, en la confianza, en rescribir y recrear la historia ante lo local; en la transparencia, normas de convivencia, redes de apoyo, solidaridad, mejoramiento de eficiencia y eficacia de la sociedad como un todo facilitando asociaciones voluntarias con propósitos de interés público, puesto que el capital social solo puede ser creado a través de un intercambio continuo en las relaciones entre las personas, para facilitar la acción conjunta».14 12 13 14
COBO Ricardo H. Manualñ de Participación Ciudadana y Gestión Comunitaria. Apoyo a la reconstrucción del tejido Social para el Desarrollo Humano de Santiago de Cali. Proyecto, Colombia 1999. MOSER, E.B. 1999. QUINTERO, Rodrigo, Marín. El Concepto de Capital Social. Documento de Trabajo Fundación Social. Marzo 3 de 2000.
De la anterior cita podemos rescatar entonces la importancia de que el estado, que somos todos, rescate el dominio ante la dimensión social, el planteamiento y la apropiación de políticas sociales con predominio en asuntos públicos; y que los objetivos individuales y comunes a nivel social sean decisiones colectivas que cimienten los intereses colectivos concadenados con una cultura cívica-social manifestada en el desarrollo integral (biológico, político, ambiental, cultural, económico, científico, tecnológico e investigativo). El Banco Mundial ve la dimensión social como un capital integrado «por un conjunto de instituciones, relaciones, redes y normas que especifica la calidad y cantidad de las interacciones sociales en una sociedad determinada, permite a los actores movilizar recursos adicionales y alcanzar metas comunes». La dimensión social es entonces una fuente que promueve la cultura y la convivencia como procesos de desarrollo, cuyos responsables son los ciudadanos por medio de la participación, la representación y su capacidad de trabajo asociativo y cooperativo.
DESARROLLO HUMANO INTEGRAL MEDIADO POR EL MARCO COMUNITARIO «Un desarrollo se concentra y sustenta en la satisfacción de necesidades humanas fundamentales, en la generación de niveles crecientes de autodependencia y en la articulación orgánica de los seres humanos con la naturaleza y la tecnología, de los procesos globales con los comportamientos locales, de lo personal con lo social, de la planificación con la autonomía y de la sociedad civil con el estado».15 El desarrollo consiste en la libertad del ser, el construirse a si mismo como persona, pero sin dejar de pensar en la colectividad, de esta manera se aprovecha al máximo el potencial humano, logrando obtener conciencia a través de la interacción, razón por la cual se crea sentido socializador en donde se presenta en un plano individual la autorresponsabilidad, respeto, conciencia de los propios actos, ideales, compromisos, los cuales son expresados posteriormente ante los demás y viceversa, esta es una de las razones que nos define como seres humanos producto del colectivo. El desarrollo humano por tanto es un proceso social que estructura al individuo en todos los aspectos, físico, emocional, material y psicológico, por medio de diversos fenómenos, hechos y situaciones que configuran la integralidad del mismo, entre estos se plantea la cultura, los procesos históricos, el contexto, la época, la realidad social, la política, la economía, entre otras situaciones por las que atraviesa no solo el país sino cada núcleo social en el cual el individuo coacciona y habita, que de cierta manera tendrán una influencia directa sobre el individuo, generando en el una singularidad basada en la mismidad, la identidad y el autorreconocimiento de sí mismo, es construir por consiguiente la libertad de ser un individuo pensante y actuante, con capacidad de opinar, expresarse, comunicarse, participar, elegir, crear, generar, construirse como individuo autónomo coaccionado por la sociedad (así lo expresa Kant en la respuesta a la pregunta ¿Qué es la Ilustración?). Lo humano se construye a partir de los demás, de ahí la importancia de que «cada ser humano acepte con profunda convicción su responsabilidad, frente a sí mismo y frente al mundo, pues ello genera igualdad de oportunidades para la expresión de la individualidad y del potencial de cada persona en todas las formas de interacción humana».16
19 15 16 17
MANFRED, Max-Neef. GONZÁLEZ, Luís. Desarrollo Humano y Trabajo Social. FUNDACIÓN, Para la educación Superior. Modelo de Desarrollo Integral Comunitario Urbano. Serie Ingreso y Bienestar.
Por tanto el desarrollo humano integral, concebido desde el espacio comunitario y urbano debe atender a «procesos dinámicos de cambio armónico y equilibrado, tendiente a satisfacer íntegramente las necesidades humanas fundamentales, el fortalecimiento de la identidad, la autoestima y el autorreconocimiento a través de la participación consciente en dicho proceso, integrando a los pobladores para que lo vayan viviendo desde un principio, dando origen así a un desarrollo autocontrolado y participativo que genere simultáneamente crecimiento económico, solidaridad social, y el crecimiento de la persona y de todas las personas».17 Es vivir en y para la sociedad; cuando se habla de un desarrollo libre y autorresponsable del individuo a nivel social, se debe tener presente como son regulados dichos comportamientos y conductas a nivel social; ante el tema y retomando los planteamientos expresados en el texto Colombia Una Casa Para Todos, la ÉTICA CIUDADANA «Hace referencia a las costumbres a las normas que surgen de las misma, nos permite reflexionar para transformar; caracterizando lo bueno y lo malo, lo diferente y lo común». La ética ciudadana es vista en este texto, desde el horizonte de lo civil y lo público, lo cual establece parámetros de autonomía en donde la decisión que se tome debe conducirnos a la consolidación de la libertad, que de cuenta de un testimonio propio y a la vez común, es asumir el autocontrol bajo parámetros normativos que conlleven a una beneficencia socio-colectiva. La ética ciudadana o civil, empieza a construirse en los espacios familiares y escolares, desde allí se aprende a discernir entre lo bueno y lo malo y es en ellos donde descubrimos que toda causa tiene un efecto, o que cada acto que realizamos repercute en una consecuencia ya sea esta buena o mala, permitiendo comprender fenómenos y hechos de origen social. Para el sacerdote Carlos Alberto Calderón, en el libro Ética Para Tiempos Mejores «Al hablar de ética ciudadana o ética civil no se hace referencia a la creación de una ética o de una moral nuevas. No es la pérdida de valor o de vigencia de la estructura interna de la ética lo que exige hablar de una ética, lo que realmente se da es la necesidad de crear un lenguaje adecuado, acorde con la sensibilidad y la pluralidad religiosa y civil de nuestra cultura contemporánea, lenguaje que acerque a los hombres y a las mujeres de hoy la riqueza perenne de ese patrimonio ético de la humanidad, encerrado en una propuesta moral.» Esta necesidad de elaborar un nuevo lenguaje moral que acerque el imperativo ético a una sociedad civil y pluralista, que garantice la calidad de vida y la dignidad humana se hace urgente al mirar la realidad actual de nuestro país. El sacerdote Calderón también nos indica que:
«Frente a la situación de violencia que vive Colombia es común oír que el problema fundamental es la crisis de valores, la pérdida de la moral, es decir, que hay un desbordamiento de los controles morales y éticos. ¿Qué ha pasado?, aun no se ha reflexionado sobre ello. Podría decirse que se ha presentado un vacío en lo ético, en el aporte moral; hay un vacío en las instituciones para activar y hacer significativo el patrimonio ético acumulado en nuestra sociedad y en nuestra cultura. Es este colapso moral lo que exige una nueva incursión en el mundo de la ética en la perspectiva de buscar una ética civil o ciudadana»
20
Para hablar de ética civil primero se debe haber tenido como referencia el espacio familiar y escolar, puesto que son estos lugares donde se construyen rituales, modus vivendu que posteriormente serán exteriorizados en otros espacios colectivos, como lo son, la escuela, la universidad, el barrio, los parques u otros espacios que demandan una interacción social más abierta y compleja. La ética civil por ende debe soportarse en los valores ciudadanos, para evitar correr el riesgo de que se pierda la individualización (derechos y deberes individuales y colectivos) y que al tiempo se legitime una ética democrática, permitiendo tanto a hombres como a mujeres vivir y convivir con dignidad, donde lo humano y lo civil se funden en el respeto por si mismo, por toda la comunidad y por el entorno. Regular las acciones no es algo caprichoso es un sentido de vida ante lo natural, lo cultural, lo social, lo político, donde los derechos y deberes no son solo particulares, sino colectivos, es aquí donde aplicamos los valores. Frente al tema, el profesor de filosofía de la Universidad Nacional de Colombia, Guillermo Hoyos en el texto Educación y Ética Para Ciudadanos, plantea que «Hoy en día los valores se mueven en relación con lo simbólico, lo cultural, con los deseos cotidianos y es así como el reconocimiento de esta primacía de la sensibilidad sobre la razón nos permite comprender más fácilmente la diversidad de culturas y de formas de vida, no sólo toleradas, sino asumidas positivamente como posibles y llenas de sentido. Lo que constituye lo social, la solidaridad, la reciprocidad, y de una nueva forma lo político se articula para el joven de hoy en el mundo de lo simbólico: en él se producen, circulan y se intercambian los más diversos imaginarios». El pensar en ética ciudadana según Jesús Martín Barbero, profesor universitario es plantear: «la necesidad de pensar las transformaciones culturales que vive nuestra sociedad». Convivir con diversidad cultural, con cambios de contexto y situaciones que alteran la dinámica social, económica, política, religiosa, cultural y ambiental del país, con la multiplicidad de identidades, avances tecnológicos, pensamientos plurales, nuevas conceptualizaciones científicas y artísticas, con romper costumbres arraigadas, develarlas y asumir otras, un etnocentrismo alterado por pautas globalizantes, un mundo hostil que manipula lo propio, lo innato, lo idéntico, lo particularmente cultural, la identidad frente al resto del mundo, la expresión de sí mismo, universalizando las leyes de lo común, entrando en un conflicto que fluctúa entre convivir e interactuar en un mundo y espacio propio y en un mundo moldeado por entes externos con parámetros comunes y generalizados. Dos modos de vida que generan pertenencia o desarraigo por las costumbres de sí mismo, de un pueblo, una región, un país, una nación o un continente, en zonas colectivas en donde poder vivir en comunidad con respeto a las diferencias, a la independencia y a lo colectivo se convierte en un imaginario.
IMAGINARIOS SOCIALES «El imaginario esta constituido por las múltiples relaciones del hombre con su mundo circundante y esta inmerso en las diversas representaciones y prácticas sociales. Lo imaginario lo constituyen las complejas fuerzas del espíritu que se apoderan de las cosas (fenómenos físicos, sociales o psíquicos) para darles sentid, vitalidad , valor en el contexto de su vida sociocultural. Por consiguiente, este no es un espacio que se opone al mundo de lo real, sino que lo constituye».18
21 18
RODRÍGUEZ, Héctor E. Rosales. Introducción a la Teoría de los Imaginarios Sociales.
Los imaginarios sociales son para el docente de la Universidad Tecnológica de Pereira Alberto Verón son «Aquellas representaciones colectivas que rigen los sistemas de identificación y de integración social y que hacen visible la invisibilidad social». El imaginario produce toda una cultura que posteriormente se despliega; ejemplo de ello es la democracia, pues ésta es un constructo social y colectivo que se va heredando; es una imagen colectiva que se ha reproducido desde su nacimiento hasta nuestros días. Se puede decir entonces que lo que determina las dinámicas sociales, políticas, culturales y económicas son producto de un mundo movido por símbolos, que a través de la manifestación del inconsciente y las representaciones del conciente por medio de la reproducción cultural, influyen sobre los grupos demarcándoles pautas de vida a seguir. Existen también imaginarios que influyen de manera negativa sobre los grupos sociales, pues el mundo ya no se concibe como un mundo lingüístico sino como un mundo icónico, imágenes que en muchas ocasiones se pueden llegar a interpretar de manera irracional. Por estas razones se puede decir que muchos de los problemas de nuestra sociedad, hoy existentes se deben a una inadecuada interpretación y reproducción social de imaginarios colectivos. Tal es el caso del imaginario social de consumo, lo que implica que la gente sea menos participativa en los procesos sociales, pero más activa en procesos de consumo, haciendo al ser humano unidimensional. La ciudad de hoy se encuentra atravesada por un mundo político participativo que es a la vez discursivo y argumentativo y por un mundo de consumo que es icónico, es una ciudad política determinada por imágenes de publicidad. Es un mundo «post-moderno» (este concepto de mundo es otro icono), en el que se venden productos procesados visualmente, cambiando el concepto del por qué y el para qué se es ciudadano. Se cambio el concepto de sociabilidad, ejemplo de ello es que en las bibliotecas ya no se discute o se habla de conceptos, temas o autores, ahora se habla de las imágenes y programas proyectados por la pantalla, trayendo como consecuencia un mundo consumista, donde el ser humano ya no se reconoce como tal en espacios de desarrollo integral, se pierde el sentido y el reconocimiento por la residencia y el lugar de estudio como espacios de desarrollo. En las instituciones se están gestando diversos tipos de imaginarios que son positivos para el avance de las mismas, estos son la construcción democrática de gobiernos o grupos que velan por la libertad, la igualdad, mediante la justicia solidaria. Las instituciones empiezan a referenciar la ciudad como un «aula» urbana de conocimiento y aprendizaje que permite preparar no solo mejores legisladores y ciudadanos, sino también desarrollar estructuras cognitivas necesarias para el comportamiento moral y democrático, planteado por Guillermo Hoyos como el «sustantivo y material que se identifica con principios pilares de la convivencia entre estos es importante la educación para la libertad, para la mayoría de edad el ejercicio de los derechos y deberes».
22
La revista la alegría de enseñar frente al tema plantea que «los imaginarios de las urbanidades en la formación cívica, ha sido una inquietud que abrió por primera vez el horizonte de la educación como una clave central en los modelos de desarrollo, se involucra al ethos y la polis como cimientos del nuevo conocimiento ético, civil y urbano. Pues la educación ya no puede ser solo un ingrediente de lo social (donde estaba confinada como un sector entre otros), sino que ahora es crucial en la configuración del orden político, educación para la democracia, el crecimiento económico, la dimensión 19
Alegría de Enseñar. Revista para Maestros y Padres. Tomo 37. Convivencia y Democracia en la Escuela.
humana, la educación, la cultura; lo que conlleva a una formación académica, creativa, ideológica, cívica, de urbanidad, y en valores para la democracia, aprendiendo a vivir en ella y a coexistir con el otro en un espacio social».19 Un claro ejemplo de imaginario social, se evidencia en el escrito del poeta y ensayista William Ospina, el cual manifiesta el deseo, anhelo, visión y esperanza del País que sueña para vivir y convivir mejor, donde la democracia e igualdad sean principios con sentido para todos.
YO SUEÑO UN PAÍS................ «Yo sueño un país que esté unido física y espiritualmente con los demás países de la América del sur. Que un grupo de jóvenes Venezolanos o Colombianos puedan tomar el tren en Caracas o en Bogotá y viajar, si así lo quieren, hasta los confines de Buenos Aires. En un mundo donde se hacen autopistas de isla a isla, no ha de ser imposible tender ese camino de unidad entre las naciones hermanas. Yo sueño con un país que cuando hable de desarrollo hable de desarrollo para todos, y no a expensas del planeta sino pensando también en el mundo que habitaran las generaciones futuras; que cuando hable de industria nacional sepa recordar, como Gaitán, que industria son por igual los empresarios, trabajadores y los consumidores. Yo sueño con un país consciente de sus tierras, de sus árboles, de sus mares y de sus criaturas, donde hablar de economía sea hablar de cómo vive el último de los hijos de la República. Yo sueño un país donde sea imposible que haya gentes durmiendo bajo los puentes o comiendo basuras en las calles. Yo sueño un país cuya moneda pueda mostrarse y negociarse en cualquier lugar del planeta. Yo sueño un país que gane medallas de Juegos Olímpicos. Yo sueño un país de pueblos y ciudades hermosos, dignos, donde los que tengan más sientan el orgullo y la tranquilidad de saber que los otros viven dignamente. Yo sueño un país inteligente, es decir, un país donde cada quién sepa que todos necesitamos de todos, que la noche nos puede sorprender en cualquier parte, que el carro se nos puede varar en las altas carreteras solitarias, y que por ello es bueno que nos esforcemos por sembrar amistad y no resentimiento. Yo sueño un país donde un Indio pueda no sólo ser Indio con orgullo, sino que superando esta época en que se lo quiere educar en los errores de la civilización europea aprendamos con respeto su saber profundo de armonía con el cosmos y de la conservación de la naturaleza. Yo sueño un país donde tantos talentosos artistas, músicos y danzantes, actores y poetas, pintores y contadores de historias, dejen de ser pinturas pintorescas y marginales, y se conviertan en voceros orgullosos de una nación, en los creadores de sus tradiciones. Todo eso sólo requiere la apasionada y festiva construcción de vínculos sinceros y valerosos. Y hay una pregunta que nos está haciendo la historia: ahora que el rojo y el azul han dejado de ser un camino, ¿dónde está la franja amarilla? En el escrito se reflejan pensamientos, ideales y acciones concretas que nos motivan continuar en la lucha por alcanzar una Colombia libre, democrática y en paz, ello como resultado de una adecuada dinámica y convivencia social.»20
20 21 2ª
OSPINA, William. ¿Y Donde Está la Franja Amarilla? Norma. 1996. CARRO, Luciano de la Fuente. Educación en la Participación y la Convivencia Ciudadana. Edición. Fundación Social.
23
PARTICIPACION CIUDADANA PARA LA CONVIVENCIA Luciano Carro de la Fuente define la participación como: «El ser yo mismo y el otro mismo, valorarse y valorar al otro; es oír, escuchar, opinar, aportar, disentir, criticar, asumir responsabilidades individuales y colectivas, transformar mi realidad, la realidad grupal y el entorno familiar y social. Participar es ejercer el pleno derecho de la persona a ser actor protagonista de su historia y de la historia»21. La importancia de participar radica en que la participación es un mecanismo real de convivencia. Si no hay participación no hay autonomía; por tanto, a mayor participación, mayor autonomía; la ausencia de participación produce, entre otras cosas, subdesarrollo político. «La participación es importante porque significa una posibilidad no satisfecha, no explorada, no consciente, pero inherente a su condición y realidad humana. La participación aporta desde la identidad propia a la identidad del otro, de tal manera que se vaya desarrollando una participación creciente que favorezca la construcción colectiva, además genera mayores niveles de autoestima, reconocimiento de la diferencia y enriquece el trabajo organizado. La participación ciudadana hace a los ciudadanos poseedores de derechos y deberes, que actúan en función de unos intereses sociales generales (como vivienda, salud, educación, cultura, medio ambiente, etc) o colectivos (asociación de consumidores, gremios, sindicatos, etc).También cabe aquí las acciones más particulares de las comunidades sobre asuntos de las personas que las conforman. Este tipo de participación aunque no tenga vinculación directa con los partidos políticos, si tiene mucho que ver con el estado, cuando se trata de una intervención en el campo de lo público, es decir, en asuntos de interés general y de bien común».22
CONVIVENCIA SOCIAL La convivencia establece diversas relaciones en el entorno físico (natural o construido) y en el entorno humano o al cohabitar con otros en la vida cotidiana, es vivir y convivir en sociedad. Para Antonio Elizalde y Patricio Donoso la Convivencia es la existencia con sí mismo y con el otro, para que lo humano pueda constituirse. Es en ella donde nos liberamos de nuestra condición instintiva, de nuestras pasiones o pulsiones incontrolables; aprendiendo con otros y de otros a autolimitarnos, para poder así alcanzar mayores grados de libertad tanto personal como colectiva. Vale decir que convivencia es la existencia del limite que nos acota, que nos define, que nos restringe, es el elemento esencial para poder desarrollar el control sobre nosotros mismos; el cual nos permite y hace posible operacionalizar nuestro existir, transformar nuestro operar en algo que tiene un propósito, que nos conduce hacia alguna dirección. Y es justamente este elemento restrictivo, acotante pero a la vez liberador, el que nos hace posible comenzar a ejercer nuestra voluntad y libertad, es decir nuestro albedrío.
La Fundación Social, en el folleto La Ruta de la Democracia: Apoyando un Nuevo Orden de Convivencia Social entiende la Convivencia como: «la relación con el mundo, donde el actuar o no actuar de cada uno contribuye a la formación del nuevo
24 orden en el que vivimos». La convivencia esta predeterminada por normas sociales, las 22 23
CARRO, Luciano de la Fuente. Ibíd. ELIZALDE, Antonio y DONOSO, Patricio. Opus Cit.
cuales aseguran el poder vivir en espacios comunes, el respeto por el propio espacio y el de otros, determinando pautas de comportamiento que conducen las dinámicas sociales de interacción e interrelación con los otros.
FORMACIÓN EN CULTURA CIUDADANA PARA LA CONVIVENCIA SOCIAL En una definición general la Formación y la Educación se entiende como:
FORMACIÓN: proceso que permite transmitir e impartir de manera reiterativa,
continua y ordenada instrucción y conocimiento; promoviendo de este modo el desarrollo integral de los individuos.
EDUCACIÓN: proceso que permite desarrollar y/o potenciar la sensibilidad, las
actitudes, aptitudes, capacidades y habilidades del ser humano para que estas sean multiplicadas, desarrolladas y perfeccionadas en su entorno. La formación en cultura ciudadana hace referencia a la educación de ciudadanos para vivir en la ciudad, departiendo el diario acontecer con otros, es este proceso el que constituye la razón de ser de todo y todos aquellos seres y elementos con los que se coexiste. Es permitirnos conocer otros medios, pensamientos, ideas, opiniones, argumentos, entornos, contextos y situaciones, para actuar con significado, procurando el bien común. Para Antonio Elizalde y Patricio Donoso «La formación para una cultura ciudadana se funda en el reconocimiento, aceptación y promoción de los derechos universales, ya que estos promueven y protegen el desarrollo cívico y económico de las personas y de las comunidades, constituyen un elemento de las tendencias extremadamente economicistas y pragmáticas que se introducen a la educación como resultado de los procesos de modernización de la sociedad. Promueve en la sociedad el desarrollo de las tendencias humanistas que están en su seno, la ciencia y la tecnología las pone al servicio de la humanidad (filosofía de la ciencia). Es una formación valorica, que se manifiesta en la calidad de las relaciones interpersonales, con la calidad del ambiente social y del clima emocional que es capaz de generar. Es formar ciudadanos con capacidad de resolver sus conflictos no violentamente, sino partiendo del reconocimiento de su existencia y asumirlo constructivamente. Tener capacidad de negociar y llegar a consensos». 23 Otra visión de formación en cultura ciudadana se plantea en el texto Repensando a Colombia24: «La educación y cultura para la ciudadanía. La formación de ciudadanía -ciudadanos protagonistas- exige educación en todos los niveles, educación no sólo para capacitarse para un empleo o una profesión, sino como formación durante toda la vida. Hay conciencia y sensibilidad en la sociedad civil por el significado primordial de la educación y la cultura para la sociedad y para la realización de las personas: en ellas encuentran sentido de la vida, competencias para relacionarse con los demás, posibilidades de movilidad y preparación para el trabajo; de aquí se sigue que es responsabilidad prioritaria del Estado garantizar educación básica de calidad a todos sin discriminación. Resulta prioritario reivindicar el carácter estrictamente público del 24 25 Sta 26
Talleres del Milenio. Repensando a Colombia. Hacia una Visión Programática 2001. Programa por la Paz. Compañía de Jesús. Colombia una Casa para Todos. Debate Ético fe de Bogotá. 1991. Editorial Antropos LTDA. Acuerdo Programático Para Construir la Paz. Opus Cit.
25
acceso a la educación de calidad en condiciones de igualdad para todos los miembros de una sociedad; éste es uno de los requisitos para avanzar hacia la inclusión social y la vida laboral. Es necesario implantar el sentido de educación y cultura como eje fundamental de lo público, de la formación y de la conducta ciudadana; y erigir como esencia misma de la cultura y de la educación ciudadana al debate público, la crítica, la propuesta de alternativas, la deliberación y al discurso». José Bernardo Toro A. Plantea siete aprendizajes para la educación en la Cultura Ciudadana 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. y
Aprender a no agredir al congénere: base de todo modelo de convivencia. Aprender a comunicarse: base de la autoafirmación personal y grupal. Aprender a interactuar: base de los modelos de relación social. Aprender a decidir en grupo: base de la economía y la política. Aprender a cuidarse: base de los modelos de salud y seguridad social. Aprender a cuidar el entorno: base de la supervivencia. Aprender a valorar el saber cultural y académico: base de la educación social cultural.25
La formación en CULTURA CIUDADANA y CONVIVENCIA SOCIAL desde cualquier institución debe abocar por la educación, por la conformación y el fortalecimiento de Redes Sociales que den cuenta del desarrollo y crecimiento social a escala humana de una nación.
¿QUÉ ES UNA RED SOCIAL QUE CONSTRUYE TEJIDO Y GENERA ACUERDOS? Una red es el grupo de personas y organizaciones que asocian e intercambian conocimientos, aportes o experiencias, se brindan apoyo y cooperan para trabajar en conjunto en pro de un objetivo común. «Las redes juegan un papel esencial en la aplicación de diversos canales de participación y por ende democratización de las relaciones entre los ciudadanos y el estado. La creación y el desarrollo de las organizaciones sociales, son, al mismo tiempo, factor pedagógico para la formación de ciudadanía y el fortalecimiento de la democracia, porque aumentan el tejido social. A través de las organizaciones las personas pueden negociar y establecer su futuro... Y poder definir el futuro es la máxima expresión de autonomía, es decir, de ciudadanía»26 «Colombia, hoy más que nunca, se ve enfrentada a la necesidad de construir colectivamente una visión de futuro de País. Para ello se requiere la implantación de un contrato social animado por un nuevo espíritu de compromiso, cooperación y coordinación entre los agentes, las organizaciones y el entorno»
26
«La construcción colectiva del orden social requiere revalorar el reconocimiento moral del individuo y el deber de la civilidad —de la responsabilidad del individuo consigo mismo y con los otros en pié de igualdad— como base para la configuración de una ciudadanía deliberante y protagonista del desarrollo de la sociedad en el marco de una 27 28
GARAY, Luís Jorge. Expositor Central en Antioquia Compite II. FLORES Rafael, Ochoa. Hacia Una Pedagogía del Conocimiento. Mc Graw Hill.
civilidad moderna regida por la solidaridad, la tolerancia, el respeto a las diferencias y la observancia de valores sociales propios de un Estado Social de Derecho, como lo plantea la Constitución de 1991. De ahí la necesidad de promover el análisis y la deliberación cada vez más colectivos en torno a los propósitos y acciones transformadoras socialmente que han de desarrollarse en las diversas instancias y espacios de la sociedad, abarcando a la misma familia, a la escuela, al trabajo, al barrio y la comunidad, a la región y a la nación en su conjunto. El desarrollo de una democracia moderna exige el compromiso y responsabilidad de amplios grupos representativos de la sociedad para la transformación del ordenamiento social: partidos políticos, movimientos y organizaciones sociales, líderes empresariales, laborales y comunitarios, iglesias y movimientos religiosos, académicos y medios de comunicación, fuerza pública y al Estado en su carácter de institución social. Para avanzar en ese propósito colectivo han de implantarse un verdadero contrato social para la transformación de la sociedad y una agenda programática integral y comprensiva en muy diversos ámbitos de la sociedad. Entre los elementos estratégicos de la agenda, íntimamente relacionados entre sí, para el caso de la sociedad colombiana sobresalen: construcción y legitimación de lo público, institucionalización del Estado, vindicación de la política, desarrollo de una cultura de la civilidad, formación y educación de ciudadanos como protagonistas para una sociedad pluralista y participativa, modernización de la justicia para la convivencia, instauración de la seguridad democrática para la paz y generación de riqueza para la inclusión social».27 Acuerdo social es entonces, el ordenamiento de un grupo humano en torno a unos principios de interacción y desarrollo que social y participativamente se construyen y se ponen en ejercicio. Bajo esta filosofía se valora y legitima el estado social de derecho del que todos los Colombianos hacemos parte .
ESTRATÉGIAS PEDAGÓGICAS PARA LA CONSTRUCCIÓN DE LA CULTURA CIUDADANA En la convivencia se debe tener en cuenta mis prejuicios y los prejuicios de los demás, así como el proceso histórico del país o el contexto en el cual interactuamos, además de los factores externos que afectan la convivencia. La convivencia tiene límites y está fundada en los comportamientos que cada cual acepta o no en una convivencia específica; la convivencia es un arte de vivir juntos en medio de ambientes tolerantes con la diferencia, es poner al servicio de la humanidad cada una de nuestras habilidades para vivir de una manera mas positiva, es el resultado de algo, es expresión de algo. Lo que nos permite ver si hay buena o no muy buena convivencia son los grados de confianza, tolerancia y respeto. La convivencia de una ciudad se mide por: 1.
La sensación de seguridad y confianza que tiene la gente de vivir en esta ciudad (percepción).
27 29 ?
Bogotá. Técnicas Participativas Para la Educación Popular, Tomo II. Editorial Dimensión Educativa
2.
Por la transformación de los comportamientos negativos por positivos; y se valida cuando muchas más personas repiten el comportamiento positivo de manera reiterativa.
ESTRATÉGIA OPERATIVA O METODOLÓGICA Estructurando y fomentando el desarrollo formativo a toda la población institucional, por medio de un trabajo educativo y pedagógico entendido este como «la disciplina que orienta el saber o discurso sobre la educación como proceso de socialización y adaptación. Esta disciplina se vale de objetos y metodologías propias explícitas en procesos formativos, siendo este último, el principio fundador de la pedagogía. La formación es el proceso de humanización que va caracterizando el desarrollo individual aquí y ahora, es facilitar la realización personal, cualificar lo que cada uno tiene de humano y personal, potenciarse como ser racional, autónomo y solidario, y ello se puede alcanzar a través de metodologías y técnicas que permiten enseñar con eficacia; es el caso de la didáctica, siendo esta el capitulo más instrumental de la pedagogía, es uno de los parámetros claves de la misma ya que ofrece métodos claros y específicos de trabajo. Cabe anotar que cada modelo pedagógico define de manera diferente su propia didáctica, de acuerdo al fin que se desee lograr».28 Que induzca un cambio de actitud y genere identidad y sentido de pertenencia por los espacios públicos como escenarios de interacción y convivencia social; para ello se deberá hace uso de pedagogías lúdicas y simbólicas que estimulen la participación de la comunidad institucional.
Estrategias lúdicas y simbólicas: son aquellos referentes metodológicos que
motivan a un determinado numero de personas a participar activamente de los procesos educativos y formativos (Educación-Participación-Acción), generando en el individuo la necesidad de hacer parte de, conocer el por qué y el para qué de las actividades, convertirse de este modo en actores directos del cambio y la transformación de una determinada situación. Así «La acción, reflexión, acción que se logra con la educación participativa, conduce a una práctica transformadora consciente y permanente»29. El Direccionamiento apropiado de estas estrategias lúdico-pedagógicas permite facilitar el efecto multiplicador de Cultura Ciudadana y Convivencia Social deseado, fortaleciendo los procesos que hacen tangible el resultado.
LUDICA En la actualidad se presentan nuevas formas y modelos educativos desde
las ciencias del deporte y la recreación que fundamentan su accionar por medio de la premisa de aprender jugando. El juego se toma como una técnica lúdica que permite el aprendizaje por medio de la movilización de grupos, provee la participación como metodología activa que promueve la iniciativa y la creatividad, logrando con ello generar cambios de actitud y comportamiento, ya que, permite desarrollar placer, desenvolvimiento mental y corporal de los individuos por medio de la liberación de energía que posteriormente se trasmite, se siente y se reconoce en la alegría de las personas. Este tipo de procesos integra grupos, genera cohesión, estructura dinámicas de interacción y convivencia armónica, tiende a mejorar las condiciones en el clima laboral, familiar y académico; proporciona y facilita medios de comunicación tendientes a fortalecer los diversos núcleos sociales en los cuales el individuo permanentemente se mueve.
28
SIMBOLICA Si concebimos los símbolos como una estrategia lúdico-pedagógica podríamos decir que estas representaciones iconográficas son un método didáctico que llama la atención visual, creativa e interpretativa de las personas ante una situación planteada. Se pueden utilizar los medios de comunicación audiovisual como una manera didáctica para llamar la atención ante determinadas situaciones presentes en el ámbito institucional, promoviendo la difusión de mensajes de reflexión y concientización a través de medios virtuales o medios mediáticos. La aplicación de esta metodología permite hacer conciente lo inconsciente, generando y motivando cambios comportamentales tendientes a mejorar la convivencia con los otros. Se llama la atención colocando los elementos que se quieren dar a conocer de manera desordenada o en secuencias, combinando tonalidades, colores o formas, determinando una comunicación visual o verbal que se vale de la razón, la creatividad y la inteligencia para referenciar palabras, frases y mensajes escritos hablados y representados. Helen Coppen plantea que «La imagen visual o símbolo visual es la representación
de determinados sonidos, sentimientos o acciones y a su vez esos sonidos sentimientos o acciones quieren decir o trasmitir un mensaje...»
«Lo que la imagen nos trasmite o representa es que se encuentra triste, melancólico, se golpeo, fue violentado entre muchas otras interpretaciones» ello nos conduce a caracterizar una situación, describirla, interpretarla y plantear juicios u opiniones con respecto a lo que se plantea por medio de la imagen en cuanto a Cultura Ciudadana y Convivencia Social se refiere. El video, los talleres, las carteleras y el teatro en Cultura Ciudadana y Convivencia Social y en los espacios públicos de las instituciones permiten manejar, trabajar, representar e interpretar situaciones, mensajes, pensamientos, necesidades y sentimientos de la comunidad, entendiendo por comunidad a todos aquello actores directa o indirectamente ligados con la institución, de esta manera se pueden emitir códigos culturales, normativos y de comportamiento. La utilización de esta estrategia debe ser constante y reiterativa para facilitar la percepción y recepción del mensaje permitiendo que la población entienda de manera didáctica el mismo y lo ponga en práctica, ejemplo de ello son las señalizaciones en las zonas comunes, oficinas, cafeterías, biblioteca, una de ellas es:
29
El signo nos representa «prohibido fumar», zona de encuentro con otros, hace daño a la salud, etc, lo que se espera es que al interpretarse se asuma un cambio en el comportamiento al no fumar en estos espacios y así con cada uno de los signos existentes. Lo anterior con el fin de asegurar que el proceso de aprendizaje en Cultura Ciudadana y Convivencia Social sea comprobado mediante las respuestas emitidas por los actores al momento de reaccionar o responder a la norma, la orden o el código que se les indica, este efecto visual tiende a optimizarse cuando existe un mayor número de personas cumpliendo la norma que personas que no la cumplen, por tanto dicho aprendizaje indica un cambio de actitud en la conducta de los individuos, este cambio debe ser percibido por el ojo humano e impactar las conductas y dinámicas socio-grupales; el cambio debe ser descrito de manera precisa para validar los comportamientos nuevos y positivos que se estén dando al interior de la institución en sus espacios públicos y comunes. Por otra parte la percepción auditiva permite reconocer y transmitir información directa, representando situaciones diversas que la mente humana transforma en imágenes, posteriormente los interpreta y analiza, esta situación permite a los facilitadores o multiplicadores de Cultura Ciudadana y Convivencia Social generar campañas para la formación ciudadana las cuales se valen directamente del procesamiento de la voz para difundir mensajes que en términos comunicativos que permiten desarrollar actitudes nuevas y cambiar las que ya existen y son inconsistentes.
COMUNICACION: Es un medio y un fin para intercambiar códigos de información o
mensajes, debe estar integrada por un emisor, un canal y un receptor los cuales permiten establecer un proceso de flujo. Cuando comunicamos algo es importante tener claro y conocer qué es lo que se va a comunicar, cómo se va a comunicar, saber cómo y por qué medios se va hacer y transmitir, analizar cómo lo puede recibir las otras personas, propiciar en secuencia la cultura que se desea transmitir, modificar, transformar y/o implementar. La comunicación permite establecer diferencias entre las condiciones iniciales al emitir el mensaje, las condiciones presentes al momento de transmitir el mensaje y las condiciones finales después de haberse transmitido el mensaje. La comunicación permite generar cambios en el orden y tipos de pensamiento, renovar la manera de hacer las cosas, dialogar y llegar a consensos, cambiar la tensión por la atención, produce una interacción entre expectativas personales y grupales u organizacionales, permite establecer alianzas y conduce el desarrollo de actitudes nuevas para lograr el cambio ante determinadas situaciones ya existentes. La comunicación orienta la misión y la visión de los procesos educativos, institucionales y formativos en el campo académico, social y humano. La comunicación permite educar de manera individual y personalizada, o por el contrario de manera colectiva a toda una comunidad, a través de medios directos o indirectos, a la vez permite reconocer por qué la gente hace lo que hace, permitiendo identificar las cosas que masivamente se creen y adoptan para actuar en la forma en que lo hacen.
30
Por otra parte moviliza masas al lograr que toda una sociedad trabaje y discuta sobre un mismo tema, los medios pueden generar acciones colectivas en pro del bienestar común.
IMPLEMENTACIÓN DE RECURSOS TECNOLÓGICOS La implementación de estos recursos tecnológicos permiten difundir una formación en conciencia ciudadana en aras de obtener una mejor calidad de vida. Cuando se imparte una formación ciudadana y política es necesario la importancia que juegan los recursos tecnológicos flexibles, que integren las nuevas tecnologías para difundir mensajes que recalquen permanentemente los sistemas de regulación del comportamiento humano a nivel social como lo es la ley, la moral y la cultura, y todo el bagaje normativo que las determina, con ello no se corre el riesgo de que estos pierdan su direccionalidad y sin que puedan ser manipulados en forma manual y traslapados por otras preferencias. Cuando se cuenta con un sistema flexible y de alta tecnología para el procesamiento de voz y de transmisión de mensajes es posible vincular la empresa publica, privada y las instituciones educativas en las campañas de formación y educación ciudadana ya que el soporte tecnológico para una buena campaña de formación ciudadana es el mismo que se necesita para trasmitir mensajes simbólicos y de publicidad en cuanto a formación de normas de convivencia se refiere. Una de estos recursos lo constituye el proyecto «Procesadores Digitales De Voz Para Emitir Mensajes En Tiempo Real». Esta es una propuesta alternativa y pionera en el campo de la educación y formación ciudadana, planteada por el ingeniero electrónico Sigifredo Arregocies, docente de la Universidad Tecnológica de Pereira, conciente de la necesidad de establecer mejores parámetros de convivencia, comportamiento y cultura ciudadana en los espacios comunes de la institución y el departamento. El proyecto pretende integrar nuevas tecnologías como los procesadores digitales de voz, los sistemas de computo digital, los sistemas de posicionamiento global o GPS y los sistemas modernos de comunicación a los programas de formación ciudadana para la disminución de riesgos, prevención y seguimiento de accidentes en el transporte público y otras actividades de la vida cotidiana. El nuevo sistema esta constituido por un software y un hardware, este a su vez se encuentra constituido por un microcontrolador procesador de voz que digitaliza, almacena y reproduce la voz o cualquier señal de audio de salida de un sistema de grabación o del sistema de multimedia de un microcomputador; por un microcontrolador central o unidad central de procesamiento (CPU) que controla la grabación, el almacenamiento y la reproducción de la voz o cualquier otra señal de audio proveniente de un sistema de grabación o multimedia. La unidad central de procesamiento integra el procesador digital de voz con otras señales, interfases o sistemas periféricos, lo que permite interconectar al procesador de voz eventos externos y trabajar en tiempo real, ósea en el memento inmediato que acontece determinada acción o comportamiento, en el control de trafico o difusión de normas de transito o en los usuarios del trasporte publico; el sistema educa en el momento en el que se quebranta la norma, a demás la recalca frecuentemente a través de mensajes en periodos regulares fuera de línea (off line).
31
PARTICIPACIÓN Como proceso formativo permite fortalecer y generar procedimientos en torno a la motivación cultural para propiciar Cultura Ciudadana y Convivencia Social en espacios públicos, entendiendo por motivación aquella causa para realizar algo, inducir la movilidad de un apersona o un grupo, con el fin de que trabajen en conjunto y en favor de la institución, del entorno humano, físico y natural en el que a diario interactúan, concientes del desarrollo integral y del comportamiento autorresponsable, cuyo fin ultimo es generar cambios de actitud y comportamiento, promover el trabajo en equipo hacia el logro de objetivos comunes propiciando de este modo sentido de pertenencia e identidad por los espacios de convivencia social (casa, barrio, instituciones, ciudad...) La participación ciudadana desde este espacio hace a los ciudadanos poseedores concientes de derechos y deberes, con fundamentación en ética ciudadana y valores, promotores del trabajo en red y generadores del progreso cívico y social del país. El proceso educativo y formativo en Cultura Ciudadana y Convivencia Social orienta desde el sentido teórico, practico y metodológico la formación y educación en cultura ciudadana y convivencia social y establece parámetros académicos para la implementación de esta nueva rama del saber ciudadano en todos los ámbitos institucionales; por otra parte proporciona los medios necesarios para el proceso de multiplicación y sensibilización en Cultura Ciudadana y Convivencia Social no solo al interior de cada institución sino al exterior de la misma, puesto que este trabajo debe ser proyectado y globalizado de manera activa para ser correspondientes con la misión, visión y políticas institucionales. La anterior descripción metodológica cumple un papel fundamental en todo este proceso ya que permite sensibilizar masivamente, es decir, hacer perceptible, apreciable y manifiesto un sin número de situaciones, actitudes, comportamientos y normas que regulan la dinámica social, pretendiendo de este modo trasformar positivamente las actitudes y comportamientos a nivel individual y grupal. En este orden de ideas se genera multiplicación no solo de los procesos sino también de los cambios adquiridos y adoptados por la colectividad.
ROL DEL MULTIPLICADOR (A) DE CULTURA CIUDADANA Y CONVIVENCIA SOCIAL PREGUNTA GUIA: -
¿Cuál es el Rol del MULTIPLICADOR para implementar, llevar acabo y desarrollar procesos de Cultura Ciudadana y Convivencia Social en espacios institucionales?
DINAMIZADOR DE PROCESOS:
32
Ya que orienta acciones concretas, para trabajar una problemática especifica, anima y promueve procesos de motivación, sensibilización y conscientización ante determinados temas y situaciones que convocan a trabajar por la Cultura Ciudadana y a hacer parte de una Convivencia Social.
EDUCADOR: Se divulgan procesos de enseñanza, métodos, técnicas y pedagogías sociales que de manera creativa e innovadora rescata las potencialidades de un individuo o colectividad, para ser trabajadas y utilizadas en beneficio propio, y a la vez en beneficio común. El fin es enseñar o indicar el camino apropiado para coexistir con otros. A lo anterior se suma que se trabaja con reglas, valores, tradiciones, ideologías, sentimientos y saberes propios, característicos de una determinada colectividad, para de esta manera reconocer y hacer que el individuo se reconozca como ente autónomo y autorresponsable, en continuo proceso de socialización y transformación.
FORMARDOR: Se forman individuos humanos y sociales con valores que refuerzan el carácter cooperativo, solidario, conduciendo de esta manera transformar comportamientos y actitudes que posibilitan el logro del desarrollo humano integral.
FACILITADOR DE DINAMICAS DE GRUPO: La acción se dirige a promover la participación ciudadana como un derecho y un deber de cada individuo; esta se orienta a convocar, conformar, y trabajar procesos participativos que faciliten la integración de la población en torno a objetivos comunes, el trabajo en conjunto, con cooperativismo, de manera asociada, para alcanzar metas y sueños compartidos.
ASESOR Y ACOMPAÑANTE: Ya que ofrece orientación y acompañamiento constante a grupos y la comunidad en torno a la estructuración teórica, metodologica y práctica de los diversos procesos, proyectos y propuestas desarrolladas en Cultura Ciudadana y Convivencia Social. Por otra parte brinda orientación personalizada en Cultura Ciudadana y Convivencia Social a los actores de la comunidad institucional con el fin de promover y generar espacios de comunicación directa para aclarar inquietudes, promover acciones, conducir a la reflexión, canalizar propuestas y difundir mensajes conducentes a transformar concientemente comportamientos y actitudes a nivel social.
PROMOTOR DEL DESARROLLO HUMANO INTEGRAL CON CALIDAD DE VIDA: Reconoce el principio del valor humano y los derechos y deberes del hombre y la mujer, los asume, difunde, trabaja, promueve y defiende; al tiempo promueve los derechos y deberes del ciudadano y su núcleo social, en función de mejorar las condiciones de vida para así potenciar el desarrollo humano integral con carácter de autorresponsabilidad.
33
¿CÓMO DEFINIR EL ROL DE LA INSTITUCIÓN DENTRO DE LOS PROCESOS DE FORMACIÓN EN CULTURA CIUDADANA Y CONVIVENCA SOCIAL? Para ello es importante realizar diversos cuestionamientos, que permitan a cada una de las instituciones reflexionar a cerca del quehacer cumplido dentro del proceso formativo en Cultura Ciudadana y Convivencia Social como esencia democrática. a) b) c) d) e) f) g) h) i) j) k) l)
¿Qué queremos? ¿Qué es lo que me gobierna para asumir determinados comportamientos? ¿Qué sistema de regulación gobierna mi institución? ¿Cómo se hace una acción de cultura ciudadana y cómo facilitarla? ¿Qué cambios buscamos generar? ¿Cómo podemos lograrlo? ¿Qué aprendizajes nos deja esta experiencia? ¿Cual es nuestra visión de una institución con alto grado de convivencia o con un buen nivel de convivencia?, ¿Cómo debe llevarse a cabo el proceso formativo y educativo en Cultura Ciudadana y Convivencia Social para sensibilizar, motivar y concientizar en la institución y poder generar cambios de comportamiento? ¿Qué influencia tienen la formación en Cultura Ciudadana en los diversos espacios de interacción, comportamientos y actitudes de los individuos en el ámbito institucional. ¿Qué papel juega la institución en el proceso de formación concientización, sensibilización y motivación en Cultura Ciudadana y Convivencia Social que permita impactar el medio social interno y externo? ¿Bajo qué parámetros de control, seguimiento y evaluación se debe estructurar la validación y la transformación de conductas y actitudes que permitan dar cuenta del desarrollo individual e institucional en Cultura Ciudadana y Convivencia Social?
34
F
undamentos conceptuales que soportan la formación en Cultura Ciudadana y Convivencia Social «Si lo oigo lo olvido, si lo veo lo recuerdo, si lo oigo y lo veo no lo olvido. Si lo oigo , lo veo y lo hago lo aprendo».
Proverbio Chino BIBLIOGRAFIA ELIZALDE Antonio, DONOSO Patricio. Formación en Cultura Ciudadana. MOCKUS, Antanas. Transformar la Ciudad con la Ciudadanía. Santafé de Bogotá. GUZMÁN, Fernando, Asesor del Programa de Cultura Ciudadana en Bogotá, Taller Cultura Ciudadana y Mecanismos de Regulación, Universidad Tecnológica de Pereira 2002. ACUERDO PROGRAMÁTICO PARA CONSTRUIR LA PAZ. Confederación Colombiana de ONGS. Bogotá Marzo de 2001. CULTURA CIUDADANA Y CONVIVENCIA SOCIAL, Taller Guía. Universidad Católica Popular de Risaralda, Universidad Tecnológica de Pereira. 2003. Pág. 4. LAUB, Claudia. Artículo, La Seguridad Ciudadana en una Sociedad Democrática. ¿Participar en estos tiempos?. crea de Seguridad Urbana de la Asociación El Ágora, Córdoba, Argentina. MÉNDEZ, Pablo Franky. Cultura Ciudadana: La Experiencia de Santafé de Bogotá. 1995- 1997. ALCALDÍA MAYOR DE BOGOTÁ. Cultura Ciudadana, Programa Contra la Violencia en Santafé de Bogotá, Colombia,1995 -1997. COBO, Ricardo H. Lloreda. Manual de Participación Ciudadana y Gestión Comunitaria, Santiago de Cali. QUINTERO, Rodrigo Marín. El Concepto de Capital Social, Documento de Trabajo Fundación Social. Marzo 3 de 2000. MANUAL DE PARTICIPACIÓN CIUDADANA Y GESTIÓN COMUNITARIA. Apoyo a la Reconstrucción del Tejido Social Para el Desarrollo Humano de Cali, Proyecto COL/99/ 010. GONZÁLEZ, Luís. Desarrollo Humano y Trabajo Social. Universidad de Caldas. COLOMBIA UNA CASA PARA TODOS. Ética Ciudadana. Pág. 134. FUNDACIÓN PARA LA EDUCACIÓN SUPERIOR. Un Modelo de Desarrollo Integral Comunitario Urbano. Serie Ingreso y Bienestar. CALDERÓN, Carlos Alberto. Ética para tiempos mejores. VERÓN, Alberto. Taller, Imaginarios Sociales. Universidad Tecnológica de Pereira. Septiembre de 2002. REVISTA, Alegría de Enseñar, Para Maestros y Padres. Convivencia y Democracia en la Escuela. Tomo 37. Pág. 14, 15,16,17,18,19. CARRO, Luciano de la Fuente. Educando en la Participación y la Convivencia Ciudadana. Segunda Edición. Fundación Social. FUNDACIÓN SOCIAL. Folleto La Ruta de la Democracia: Apoyando un Nuevo Orden de Convivencia Social. TALLERES DEL MILENIO. Repensando a Colombia, Hacia una Visión Programática. 2001. PROGRAMA POR LA PAZ. Compañía de Jesús, Colombia una Casa Para Todos, Debate Ético, Santafé de Bogotá 1991. Editorial Antropos LTDA. MEMORIAS. X Encuentro Estudiantes de Trabajo Social, Espacios Urbanos y Movimientos Sociales. Cartagena Octubre de 2002. VILLACAÑAS, L.J. Historia de la Ética. Barcelona. 1999...Manual de Participación Ciudadana y Gestión Comunitaria. Apoyo a la Reconstrucción del Tejido Social Para el Desarrollo Humano de Cali, Proyecto. CORTINA, Adela. texto No Pecado-No Culpa COL/99/010.
35
Equipo Coordinador Bienestar Universitario Universidad Tecnológica de Pereira
Equipo de Apoyo Universidad Católica Popular de Risaralda
Diagramación
Impresión Publicaciones UTP/05 36