Diseño y transformación de situaciones de resolución de problemas para propiciar comprensiones científicas tempranas Oscar Ordoñez Morales Introducción Este capítulo presenta un análisis cualitativo del proceso de elaboración
y
transformación
de
quince
situaciones
de
resolución de problemas, diseñadas por un grupo de maestras para favorecer el desarrollo de herramientas científicas en niños entre 2 y 6 años1. El propósito de este análisis es doble: por un lado se intenta mostrar el estatuto que tienen las
situaciones
como
escenarios
privilegiados
para
redimensionar la práctica y la intervención del maestro en el preescolar. Por otro, se trata de mostrar cómo ellas apoyan e impulsan
las
potencialidades
cognitivas
y
la
racionalidad
científica de los niños en esas edades.
Para realizar el análisis de la transformación, se retoman las
distintas
varias
versiones
sesiones
de
de
cada
asesoría
situación
a
personalizada.
lo Se
largo
de
procede
trazando un recorrido a través de lo que hemos llamado “un mapa
de
versiones
situaciones”; preliminares
a de
partir las
de
ahí
se
situaciones
muestran en
las
distintos
momentos hasta llegar a las propuestas definitivas. La idea es identificar los esbozos y los abandonos de las versiones preliminares, así como los medios que utiliza la maestra para
1
Las situaciones analizadas son el resultado de la participación de las maestras colombianas en el módulo “el niño como científico” que se realizó a propósito de la actividad de capacitación que contempla el proyecto Impacto de un modelo de intervención en el desarrollo de herramientas científicas espontáneas en niños entre 2 y 6 años, financiado por el CIDI-OEA.
2 realizar las transformaciones (por ejemplo los análisis que hace, los conceptos y las estrategias que utiliza). Igualmente se intenta señalar los lugares comunes por los que se tiende a transitar con más frecuencia y que no permiten ver desempeños novedosos ni resolutorios en el niño. De una u otra
forma,
realizados revelar
el
en
las
fin
la
último
búsqueda
competencias
es de
que
restituir
los
condiciones él
posee,
itinerarios
propicias
a
la
vez
para
que
se
ilustra la reconceptualización de la práctica por parte de las maestras involucradas. La utilidad de este análisis reside en la posibilidad de rastrear paso a paso la apropiación conceptual y metodológica de parte de la maestra, respecto de la situación en cada momento. Por esa razón el análisis se centra en aspectos de procedimiento y en las comprensiones individuales y sucesivas a
lo
largo
del
proceso.
La
realización
de
una
fase
de
asesorías para construir cada situación deja claro que aunque el punto de llegada parezca seguro y transparente, lo que se gana (conceptual y metodológicamente) está en el recorrido, en la experiencia de organizar y reorganizar la situación. La elaboración de cada una de ellas tiene valor por sí misma, y no tanto porque conduzcan a una situación ideal. Por esta razón no
se
ilustran
recorridos
ideales
ni
lineales,
las
situaciones en sus distintas versiones no se analizan con criterios
evaluativos,
ni
se
califican
como
correctas
o
incorrectas, o como buenas o malas. La propuesta es la de recuperar cada versión de la situación en tanto que se convierte en una posibilidad para intervenir, y
que
por
su
estructura
en
un
momento
determinado
del
3 proceso,
es
capaz
distinto
orden
en
de
revelar
el
niño.
competencias
Se
le
señala
cognitivas a
la
de
maestra,
insistentemente, que cada versión debe poder transformarse para
lograr
mejores
resultados
en
la
observación
de
la
Primero
se
actividad del niño. La organización presentan
del
algunas
capítulo
es
definiciones
y
la
siguiente.
procedimientos
necesarios
para entender en qué consiste el modo de trabajo y el proceso de transformación de las situaciones. En segundo lugar, se presenta el mapa global resultante de las situaciones analizadas, a partir del cual se identifican los
recorridos
más
comunes
en
la
construcción
de
las
situaciones (por razones de espacio, no se presentan todas las
situaciones
obtenidas
del
cursillo),
sino
que
se
recuperan algunos ejemplos paradigmáticos2. Lo fundamental de esta primera parte es ilustrar en qué aspectos se da una transformación, y cómo cada versión progresivamente da lugar a una situación de resolución de problemas propiamente dicha. Con el análisis de dos situaciones concretas se ilustra la transformación efectiva de las hipótesis de la maestra, de su comprensión exigencias
de
las
cognitivas
herramientas planteadas
al
científicas niño
con
y
cada
otras una
de
ellas. Así mismo, se señala la estrecha relación existente entre su intervención y el tipo de desempeño que el niño presenta.
2
En el CD Rom adjunto el lector encontrará una base de datos con cincuenta situaciones de resolución de problemas diseñadas por maestras de Colombia, Brasil y Argentina.
4 Por último, las conclusiones se centran en las implicaciones educativas
de
un
modelo
de
intervención
basado
en
la
de
la
utilización de situaciones de resolución de problemas.
Definiciones y procedimientos para transformación de las situaciones
el
La
defiende
propuesta
basada
en
la
de
intervención
utilización
de
que
se
análisis
situaciones
de
aquí,
está
resolución
de
problemas para favorecer el desarrollo de una racionalidad científica en la temprana infancia, y su objetivo fundamental es la recuperación y consecuente valoración de la perspectiva y el punto de vista del niño. El logro de ese objetivo empieza por la pregunta sobre el papel estructurante de los diversos diseños de intervención pedagógica.
Esta
es
una
inquietud
que
ha
sido
permanente
desde Piaget y Vygotsky hasta hoy, respecto de la función de la
institución
educativa.
Sin
embargo,
ha
sido
sistemáticamente desatendida para ser llevada a la práctica real en el aula. Tal vez por eso mismo, no sobra insistir una vez
más
en
intervención
ello,
pues
parte
educativa
de
escolar
la
efectividad
reside
en
de
buscar
una las
condiciones apropiadas para que el niño comprenda lo que para él resulta relevante. La comprensión reside en el hecho que la información no va "desde fuera" hacia el niño, como si se tratara de paquetes con los que él se topa en su recorrido por
la
escuela,
sino
como
un
conjunto
necesarias para que se lleve a cabo una efectiva
de
sus
modos
de
pensar,
de
condiciones
reestructuración a
partir
de
la
5 administración y reorganización de sus propios procedimientos de resolución de problemas. Las
situaciones
de
estratégicamente
a
artificialismo lúdico"
de
de
la
resolución ese
los
modos
mecanismos
y
comprensión
científica
problemas
propósito.
ejercicios,
didáctica
constituyen
de
por
indirectos
procesos
Sin
ni
al
responden sucumbir
"enciclopedismo
descubrimiento,
eficaces
para
las
acceder
cognitivos
involucrados
niño3.
embargo,
del
Sin
al
un
SRP
a
los
en
la
primer
obstáculo que la propuesta del modelo basado en SRP debe evitar que éstas se entiendan como pruebas de rendimiento o psicológicas para testar, medir o evaluar lo que el niño sabe. El proceso de elaboración hace hincapié entonces en las SRP como escenarios para observar y tratar de entender el funcionamiento
del
niño
y
la
manera
cómo
comprende
los
problemas que se le plantean. Se abordan no como situaciones de aprendizaje, ni ejercicios tal como se entiende en un marco o escolar evaluativo tradicional, sino fundamentalmente como "herramientas" analíticas del educador para estructurar la intervención de una manera no directiva4. A partir de las definiciones
anteriores
se
identifican
entonces
algunas
características que marcan las situaciones como de resolución 3
Existe un amplio consenso entre los autores acerca del fracaso que esas didácticas por descubrimiento han tenido en el ámbito educativo (ver por ejemplo Gil, 1998; Levinas, 1998). 4 Estas diferencias se exponen con más detalle en el libro Formación de herramientas científicas en el niño pequeño (Puche Navarro, 2000a). En otro texto, esta misma autora (Puche Navarro, 2000c, p. 9). las define como “situaciones que carecen de un sistema estático que pueda desencadenar de manera absoluta la producción de los desempeños. Esto quiere decir que son concebidas como situaciones que no–producen-larespuesta en forma mecánica e indefectible. Son consideradas como situaciones–escenarios, en las que los desempeños buscados pueden presentarse, pero no con una certeza absoluta”.
6 de problemas,5 y que señalan los límites y los alcances de cada
una
de
éstas
en
(a
veces
los
diferentes
momentos
de
su
"protocolos
de
elaboración. Las
situaciones
también
llamadas
intervención), se construyen en el marco de la realización del módulo titulado El niño como científico, y se define la figura de la asesoría como el espacio para la elaboración y transformación de cada situación. Una asesoría consiste en hacer
un
seguimiento
controlado
del
trabajo
sobre
la
situación, que las maestras elaboran en el período semanal. Cada sesión es programada conjuntamente con la maestra, y entre sesión y sesión se definen las tareas a desarrollar. Durante las asesorías, individualmente o en pequeños grupos, las maestras formulan un problema acerca de las competencias del niño y diseñan una SRP a partir de la cual se intenta poner
de
presente
un
funcionamiento
y
un
desempeño
resolutorios. En esa actividad del sujeto, se rastrean los procesos de comprensión y se analiza el uso de herramientas científicas (previamente ilustradas en el módulo a partir de sesiones teóricas) involucradas en las resoluciones de cada situación en particular. El proceso
establecido
para
hacer
un
seguimiento
de
cada
situación cubre un total de 3 o 4 sesiones de asesoría (se 5
i) Hay un problema. ii) Parte de la estructura medio-fin, y por consiguiente, de la consecución de una meta. iii) Se traduce en un conjunto de acciones que el niño despliega. No se apoya en verbalización. iv) Tiene varios modos de llegar a la solución. v) La comprensión del problema se ve favorecida por la familiarización. vi) Es propicia para la interacción grupal. No es evaluativa ni exclusivamente individual.
7 realizan requiera). propiciar
más A
sesiones partir
en
de
la
transformaciones
la
medida
primera en
que
la
sesión,
aspectos
maestra se
lo
trata
específicos
de
de
la
situación, y que han sido señalados en la asesoría anterior gracias a la utilización de una anexo
al
final
del
capítulo).
rejilla de asesoría6 (ver Esta
rejilla
muestra
los
criterios principales de una situación y ayuda a detectar en qué aspectos se deben llevar a cabo las modificaciones. Los criterios se muestran a continuación: Cuadro No.1 Criterios para identificar cambiantes y no cambiantes en la situación. Componente Asesoría No.__ (respecto de asesoría No.__ (anterior)
Aspectos que cambian
los
aspectos
Aspectos que no cambian
Escenario (maqueta, al aire libre, etc.) Tipo de artefacto Herramienta científica que explora Tipo de análisis realizado Formato de presentación (individual o grupal) Edad de los niños Tipo de encuadre previo (familiarización)
Una vez utilizado, el cuadro anterior sintetiza el estado de la situación al finalizar cada asesoría, e indica las vías
6
Los resultados en los que se apoya el mapa de situaciones resultan de la aplicación de este intrumento.
8 por las que debe dirigirse la modificación en las sesiones siguientes. Al proponer este tipo de seguimiento7 se intenta resaltar el propósito
del
proceso
de
construcción
de
situaciones,
a
saber, convertirla en una SRP propiamente dicha, y que más allá
de
ser
un
mero
ejercicio
directivo
promueva
una
actividad resolutoria en el niño. Desde la primera sesión de asesoría, se trata de orientar el proceso
de
elaboración
de
cada
situación
para
lograr
ese
objetivo, teniendo presente que se puede transitar por muchos lugares (como en el mapa y como ocurre cuando se aprende o conoce
algo
nuevo).
Pero
a
pesar
de
la
orientación,
se
insiste en que lo verdaderamente importante no es llegar por el mismo camino que se propone, sino intentar rodeos, cruces, buscar alternativas novedosas e interesantes. Se trata en síntesis de propiciar un mínimo proceso de reflexión (lo que algunos
autores
llaman
meta),
para
que
la
maestra
tome
consciencia de los obstáculos y las ventajas de su situación. La misma dinámica de las asesorías lo contempla así. Cada situación, por ejemplo, puede dar giros inesperados de una asesoría a otra cuando un desempeño no previsto del niño modifica la hipótesis de la maestra. Este compromiso con la novedad es una condición sine qua non en la construcción de las
situaciones,
porque
genera
procesos
de
búsqueda
que
impulsan la comprensión de una manera más eficaz. Eleanor Duckworth lo ha expresado claramente: "lo que hacemos cuando no
sabemos
algo
determina
lo
que
sabremos
al
final"
(Duckworth, 1997, p. 149). La maestra parece avanzar mejor 7
El diseño original de la rejilla es de Rebeca Puche Navarro y ha sido utilizado con éxito en versiones anteriores del cursillo-taller.
9 cuando incorpora esos desempeños inesperados al “modelo de niño”
que
ella
maneja,
y
como
consecuencia
de
esto
teje
nuevas relaciones y nuevas hipótesis, que a su vez le dictan el
diseño
de
nuevos
modelos
y
experimentos
dentro
de
la
situación. Teniendo
en
cuenta
los
anteriores
elementos,
mostramos
a
continuación el análisis del mapa, elaborado a partir del corpus
de
situaciones
obtenidas.
Se
identifican
algunas
tendencias generales y algunos patrones de transformación.
El mapa de las situaciones: itinerarios típicos y análisis paradigmáticos El análisis de la transformación de las situaciones se podría hacer en dos niveles: a partir de los polos conceptuales y metodológicos intervención
sobre y
que
los
cuales
delimitan
gira
las
la
propuesta
condiciones
para
de la
construcción de los escenarios (es decir, las herramientas científicas y la situación de resolución de problemas); o a partir de aspectos menos sustanciales (edad de los niños, familiarización y formato grupal o individual). El siguiente análisis se aborda desde el primer nivel, y el segundo de manera un poco más tangencial. Del análisis de las nociones a los procedimientos La primera asesoría es el momento propicio para observar cuál es
la
idea
que
queda
en
las
maestras
acerca
de
las
situaciones, luego de la fase de fundamentación teórica. En todas las situaciones, sin excepción, la primera asesoría pone
de
presente
el
uso
de
nociones,
constructos
o
concepciones de las herramientas científicas planteadas en un
10 nivel aún retórico, o por fuera de la arquitectura de la situación. Lo anterior revela, sin lugar a dudas, una enorme dificultad
para
transferir
un
conocimiento
teórico
nuevo
sobre el niño a la práctica real y concreta, por lo que parece razonable, que en ese primer momento, recurra a los esquemas
ya
consolidados
de
la
programación
escolar.
Por
ejemplo, hay tres situaciones8 (situación de la casa en la quebrada, del bulldozer, y del edificio con poleas) en las que resulta evidente el uso de una concepción en la que se espera que el niño haga algo, o sin orientar esas acciones a un fin determinado. En esta primera asesoría, las maestras tienden a la actividad a analizar en términos de una sensorialidad que supone actuar sobre objetos, o sobre una experiencia sin reflexión. No se exploran
los
procedimientos
resolutorios
orientados
a
la
solución del problema, ni en las relaciones medio-fin que él establece. Se centran en describir las acciones en función de la
consigna
finalista
(“saber
la
respuesta
correcta”,
en
términos de Duckworth), o a constatar el éxito o el fracaso de manera segmentada. Interesa que si el niño construye las cosas9 (una casa, un carro, una polea) que se le han pedido, y no tanto en cómo opera sobre los materiales de manera diferenciada
en
función
de
una
alternativa,
o
una
nueva
estrategia para hallar una solución. En este sentido, las primeras asesorías se caracterizan por revelar análisis de carácter descriptivo del desempeño del niño. 8
Se pueden consultar en el CD-Rom adjunto. No se pretende afirmar que el construir cosas sea una actividad inocua para el niño, pues seguramente él capitaliza muy bien esos momentos en disfrute o juego. Se trata, ante todo, de señalar que en estos casos, la maestra no atiende a la manera como el niño funciona sino que observa solamente un resultado parcial de la actividad. 9
11
En este punto se centró invariablemente la orientación del equipo asesor, enfatizando fuertemente en la necesidad de un análisis
más
centrado
en
las
hipótesis
del
niño
mientras
resuelve la situación. En la segunda asesoría se trata de ver la forma en que el niño opera con los materiales, y los cambios que efectúa en estos para poder resolver el problema con
hipótesis
(por
ejemplo,
evitar
que
la
casa
que
se
construye sobre una corriente de agua, se inunde o se caiga). El
énfasis
no
es,
entonces,
la
construcción
por
la
construcción o la idea de hacer por hacer, que a veces supone una concepción popular del constructivismo en la escuela.10 Con la segunda asesoría se empieza a perfilar un análisis más centrado
en
el
funcionamiento
del
niño
en
cuanto
a
las
hipótesis que prueba, y a la manera cómo procede para ello (aunque la atención sobre la manipulación en sí misma está presente como en la primera asesoría). Esta parece ser una tendencia difícil de dejar atrás, sobre todo si se piensa que en el preescolar el desarrollo psicomotríz es objeto de una atención
importante.
Tal
vez,
por
eso
mismo,
pasar
a
considerar más un desempeño que un resultado final no es lo que determina el análisis que la maestra hace en este momento del proceso.
10
La otra cuestión que se entra a revisar es si la destreza motriz del niño influye notoriamente en su desempeño ante algunas tareas que exigen manipulación. Por esa razón se sugiere diseñar materiales menos complicados, más manejables que puedan asegurar cierto nivel de éxito desde el inicio y que ante todo no impidan la aparición de estrategias nuevas para resolver el problema.
12 La alusión a los desempeños aparece como un apéndice en la reflexión de las maestras, pues éstos no necesariamente están ligados a la operacionalización de una herramienta científica en
particular
(es
como
si
se
aludiera
a
estos
solamente
porque lo sugiere el asesor). Por ejemplo, se pasa fácilmente de breves análisis de desempeños basados en hipótesis, a la planificación,
se
desechan
las
hipótesis
y
se
pasa
a
la
clasificación. La explicación que subyace a pesar del cambio de
problema
visualizan
la
es
que,
tal
pertinencia
vez, de
nominalmente
los
desempeños,
las
maestras
pero
siguen
insistiendo en el estado final. Este caso es claro en la situación de la casa construida sobre una corriente de agua. Veamos cómo aparece la situación en las diferentes asesorías: Situación de la casa sobre el arroyo Primera Asesoría: Aprovechando que por el jardín infantil pasa una pequeña quebrada, las maestras presentan una situación que consiste en pedirle al niño que construya una casa resistente sobre un terreno inundado y con una corriente de agua constante. El niño debe construir la casa siempre dentro del lecho de la quebrada, y debe evitar que se inunde o que se caiga por efecto de la corriente. Se le entregan listones, tablas pequeñas, cuerdas, palos cortados de diferente longitud, martillo, clavos, piedras. El interés de las maestras es explorar la planificación, las hipótesis y la experimentación en el niño. Se propone trabajar la situación con grupos de tres niños cada vez con edades entre 4 y 5 años. La asesoría 1 se realizó en el salón de clases del jardín y no se le presentó la situación directamente a los niños. Segunda Asesoría: Se mantiene el mismo escenario de la pequeña quebrada, las maestras presentan la misma consigna: pedirle al niño que construya una casa resistente sobre un terreno inundado y con una corriente de agua constante. Igualmente, el niño debe construir la casa siempre dentro del lecho de la quebrada evitando que se inunde o que se caiga. Se le entregan bases de madera y palos de diferentes tamaños y grosor, piedras y otros materiales que el niño pueda conseguir alrededor de la quebrada. Todas las piezas de madera son
13 encajables de manera que el niño puede encastrar unas en otras sin necesidad de clavos o cuerdas. Se introduce una familiarización demostrativa consistente en hacer un trabajo previo con los niños haciendo casas en el arenero o con bloques lógicos. Las maestras deciden concentrarse en las estrategias de planificación del niño. Se propone trabajar la situación con grupos de tres niños cada vez con edades entre 3 1/2 y 5 años. La asesoría 2 se realizó cuando ya habían presentado la situación a los niños. Tercera Asesoría: el escenario permanece igual. Ante la pequeña quebrada, las maestras le piden al niño que construya una casa resistente sobre un terreno inundado y con una corriente de agua constante. Igualmente, el niño debe construir la casa siempre dentro del lecho de la quebrada evitando que se inunde o que se caiga. Se le entregan bases de madera y palos de diferentes tamaños y grosor, piedras y otros materiales que el niño pueda conseguir alrededor de la quebrada. Todas las piezas de madera son encajables de manera que el niño puede encastrar unas en otras sin necesidad de clavos o cuerdas. Se insiste al niño en que él puede reorganizar la casa de diferentes maneras, y hacerla y deshacerla hasta lograr lo que quiere. Desaparece la familiarización demostrativa porque resulta poco importante respecto del interés que la situación de la quebrada despierta por sí misma en los niños. Las maestras deciden concentrarse en las estrategias de planificación del niño, pero dentro de los planes elaborados, ellas conciben hipótesis mediadoras, estrategias de experimentación activa y reorganizaciones recurrentes en los modelos de actuación de los niños. Se propone trabajar la situación con grupos de tres o cuatro niños cada vez con edades entre 3 1/2 y 5 años. La asesoría 3 se realizó cuando ya habían presentado la situación a los niños.
En el paso de la primera asesoría a la segunda, se observa una
disparidad
desempeños
y
la
entre
el
problema,
herramienta
el
análisis
involucrada.
En
la
de
los
segunda
asesoría hay una comprensión nominal de la herramienta que no necesariamente corresponde con los desempeños. Ante lo difuso de la herramienta (que no se aplica a la tarea que la maestra construye), ella oscila entre una y otra asesoría, por lo menos en este aspecto.
14
En relación con el cambio de los materiales, en la segunda asesoría las maestras apuestan por una situación más abierta. Resulta interesante que se aproveche un recurso natural que de
por
sí
plantea
(obstáculos
o
obstáculos
restricciones
a que
la
manipulación
la
maestra
no
del
niño
necesita
verbalizar)11, a saber, el agua, y que constituye una fuente permanente
de
inquietudes
por
parte
de
los
niños.
Además
tiene una ventaja y es que no requiere de verbalización para la
solución,
solamente
requiere
de
las
acciones
y
la
manipulación de los materiales y objetos. Curiosamente eso se contradice por la falta de operacionalización de la situación desde el inicio. A pesar de estar dado el escenario, ellas optan
por
pedirle
al
niño
una
verbalización
de
cómo
él
debería hacer la casa. La consigna es incompleta en la primera asesoría. No sólo se trata de evitar que se inunde sino de evitar que se caiga. Este segundo problema aparece en la segunda asesoría, porque es frente a esta consigna donde se observa una actividad más resolutoria.
Esta
parte
se
empieza
a
ejecutar
desde
el
momento en que las maestras observan con mayor detenimiento a los
niños.
En
la
segunda
asesoría
esto
aparece,
y
ellas
empiezan a enfocar más la atención en la construcción de estrategias nuevas, y a centrarse en la modificación de esas estrategias a medida que avanzan los intentos de resolución por parte del niño.
11
Y que recuerda las posibilidades de este tipo de situaciones para el desarrollo de destrezas en los niños, tal y como Thornton ha señalado en su libro La resolución infantil de problemas (1998).
15 En el análisis de los desempeños en la segunda asesoría es claro que se centran en la actividad resolutoria, pero aún es difícil saber en qué consiste, es decir hacer un análisis de lo
resolutorio
en
términos
de
estrategias
que
involucran
herramientas científicas. A pesar de que, desde la primera asesoría, es claro que los niños
se
enganchan
al
problema
fácilmente,
y
que
la
estructura de la situación supone el descubrimiento de varias alternativas para la construcción, las maestras insisten en que frente a la situación el niño trata de ingeniárselas para construir la casa, pero no penetrar ese “ingenio”. Otro aspecto a señalar es que la diversidad de alternativas (o estrategias que el niño podría utilizar) no corresponde con la diversidad de materiales para elaborarlas. En este aspecto
se
va
a
centrar
una
de
las
transformaciones
más
notables en la situación entre la segunda y tercera asesoría, y lo que la maestra va a entender es que no siempre se articula bien la naturaleza del problema planteado al niño con
el
escenario
que
se
le
propone.
El
análisis
de
la
situación en la tercera asesoría revela que la maestra toma consciencia de la importancia de formular adecuadamente el problema (para que esté al alcance de las posibilidades de la situación). Hay que decir que a pesar de ser un ejercicio planteado eminentemente para reorganizar la práctica directa con el niño, la metodología que se utiliza para la construcción de las situaciones, sigue una lógica similar a la que se debe buscar en el diseño de experimentos en psicología, y que pone
16 justamente
en
el
centro
del
interés
el
imperativo
del
psicólogo de propiciar mejores condiciones de funcionamiento para que el niño ofrezca lo mejor de sí. En psicología, por lo menos en los enfoques que se inscriben dentro de la línea de la racionalidad mejorante12. Se busca que los experimentos y
protocolos
desempeño
de
intervención
exitoso.
La
idea
sienten de
las
las
bases
situaciones
de es
un que
favorezcan las capacidades de los niños en el sentido de aumentar su competencia representacional (Sigel, 1997). En este
mismo
orden
de
ideas,
la
situación
de
la
tercera
asesoría empieza a mostrar algunas de estas características, a través de las soluciones que el niño busca: • • •
La construcción de la casa con un a base sólida como cuatro pilares de madera que estén sujetos al suelo dentro de la quebrada. Construir la casa sobre piedras grandes que logren aislarla del agua. Construcción de un dique fuerte antes de empezar a construir la casa.
Las
tres
soluciones
permiten
el
uso
de
las
herramientas
científicas. La situación le plantea al niño posibilidades combinatorias interesantes: por un lado, si de lo que se trata es de evitar que la casa se caiga, la atención del niño se centra en la fortaleza de los pilares, pero si la idea es que no se inunde la atención se centra en la configuración de esos pilares, o en la construcción del dique. Cuando se trata de evitar que se inunde y se caiga, el niño debe proponer una estrategia
de
cómo
combinar
los
elementos
para
lograr
el
resultado deseado. Esto pone de presente el uso de hipótesis, que está en la base de la construcción de la situación.
12
Tal y como se plantea en el primer capítulo de este libro.
17 Ahora, el análisis de esas herramientas se transforma a lo largo de las tres asesorías. En la primera, las maestras dicen que la situación explora la experimentación, y donde el niño deberá poner en acción sus teorías que según él lo llevarán a cumplir las metas propuestas, y hacer hipótesis para corregirse e idear otras estrategias. Sin embargo un análisis más detallado de los desempeños, a partir de la segunda asesoría, señala la hipótesis como la herramienta central, seguida de la experimentación desencadenada por esas hipótesis. En la segunda asesoría, luego de una primera presentación de la situación a los niños, las dificultades de la primera presentación
se
han
hecho
evidentes.
Las
expectativas
respecto de las habilidades motrices del niño incitan a las maestras
a
elaborar
resolutoria,
aunque
materiales no
que
implican
exigen
una
actividad
habilidades
motrices
sofisticadas que los niños más pequeños no manejan. En la tercera asesoría se propone dar a los niños bases y palos de diferentes tamaños y grosores (y que se puedan encastrar) para
que
ellos
así
decidan
cuál
va
a
favorecer
la
construcción de la base para la casa. El
otro
aspecto
que
se
tuvo
en
cuenta
fue
el
de
la
familiarización, ante lo cual las maestras habían pensado en trabajar con los niños haciendo casas en el arenero o con bloques lógicos, antes de presentarles la situación como tal. El problema en la segunda asesoría asume un mayor nivel de refinamiento. La idea es que el niño se centre en dominar el obstáculo, más que en ofrecer un producto final ideal, a saber,
una
casa
perfecta.
Con
ello,
las
maestras
están
18 interesadas en maniobrar sobre las estrategias del niño para controlar el líquido que resulta difícil, y es ahí donde las estrategias
son
más
interesantes
de
analizar.
La
nueva
definición del problema es el manejo y control que el niño debe de darle al agua que corre, más que en la construcción perfecta de una casa, y con ello la tercera asesoría presenta un análisis más profundo.
Un ejemplo paradigmático: la transformación de la situación llamada "La catapulta" La
maestra
diferentes
llega
a
esa
asesorías
en
situación las
que
después
ella
de
buscaba
pasar
por
"crear
un
artefacto que le posibilitara acercarse al pensamiento de los niños de su curso y que le permitiera poner a prueba las herramientas científicas que ellos tienen". Inicialmente el reto
de
la
maestra
fue
diseñar
una
situación
que
correspondiera a la operacionalización de la herramienta de clasificación
(que
a
ella
le
interesaba
particularmente
porque estaba tratando de observar si los niños “saben o no clasificar”. Como se verá, ese interés se modifica a medida que la
situación
transformarla
se
fueron
transforma.
Las
cuatro
total
en
sesiones (o
dedicadas
sea
el
a
tiempo
efectivo en el que la profesora se reunió con el equipo de trabajo
a
cargo
de
la
capacitación).
Las
reuniones
se
realizaron en el jardín donde trabaja la maestra, que en este caso se encuentra ubicado en un municipio cercano a Cali, Colombia. A continuación se describe el itinerario de esa transformación.
Momento 0 (el punto de partida): frente a un espacio amplio que representa un parque (o sea el escenario propuesto por la maestra para que el niño desarrolle una
19 actividad), el niño tiene que escoger varios tipos de basura y clasificarlos por tamaño en unos baldes. Se trata de ver las relaciones que el niño establece entre el tamaño de la basura y el tamaño de los baldes para saber cómo él clasifica. Se propone presentarla a niños de 4 y 5 años, de manera individual. Primera Asesoría: la maestra cambia a una nueva situación. Se presenta un tablero vertical con 5 orificios de diferente diámetro, separados entre sí, y cada uno con el borde pintado de un color diferente, una cauchera y 10 bolas de icopor (grandes y pequeñas) pintadas con los mismos colores de los orificios. Se trata de utilizar la cauchera para lanzar las bolas desde una distancia de 1, 50 metros. La maestra quiere trabajar dos aspectos: a) cómo clasifica el niño al hacer que el color y el tamaño de las bolas que va a lanzar coincidan con el tamaño de los orificios y el color de sus bordes, y b) cómo maneja la noción de peso, de fuerza y de velocidad de las bolas al ser lanzadas. Se propone presentarla a niños de 4 y 5 años, de manera individual.
A manera de síntesis, se ilustran en el siguiente cuadro los aspectos que cambian o no entre el punto de partida y la primera asesoría. El criterio para identificar los aspectos relevantes
se
apoya
en
los
siguientes
componentes
constitutivos de las situaciones que se ilustraron en los ejemplos
de
herramienta
las
científica
propuesto,
formato
edades
los
de
sesiones de
niños
teóricas:
involucrada, presentación
y
existencia
escenario/artefacto, tipo
de
(individual o
no
de
análisis o
grupal),
situación
de
familiarización. Aspectos que cambian Primera - Cambia el escenario Asesoría (respecto - Se incluye nuevo del artefacto (cauchera) momento 0)
Aspectos que no cambian
20 - Permanece la herramienta (clasificación) - Se analizan por primera vez las nociones - Permanece la presentación individual - Permanecen la mismas edades El paso del momento 0 a la primera asesoría revela algunas cosas interesantes.
En
primer
lugar
la
sustitución
de
la
situación inicial (que plantea una descripción muy general del desempeño del niño) por otra que está definida por el uso de
un
artefacto
(la
cauchera)
introduce
un
problema
más
concreto para plantear al niño. Además, el uso de la cauchera en una tarea de lanzamiento y precisión deja ver desde ya un interés más claro por los desempeños del niño, y de manera particular el esbozo de un diseño basado en la relación medio fin, característica de una SRP propiamente dicha. La presencia de la clasificación y el análisis centrado en el uso de nociones son dos aspectos que también resaltan en el paso del momento 0 a la primera asesoría. Por un lado, la maestra sigue adherida a la clasificación como herramienta en un
nivel
aún
retórico,
independientemente drástico
de
de
en
la
situación,
la
medida
situación la
en
que
la
concibe
(a
pesar
del
cambio
herramienta
sigue
sin
sufrir
modificación alguna). La hipótesis sobre la comprensión de la maestra en este momento, es que ella no tiene una concepción de la herramienta que revele la flexibilidad y la utilización abierta
y
transformadora
que
esta
supone.
El
análisis
a
adelantar aquí tiene que ver con la falta de interacción (interacción necesaria desde el punto de vista del cursillo-
21 taller) entre la herramienta utilizada y la tarea a resolver. La independencia o segmentación de los dos aspectos en este momento, parece indicar que la maestra no concibe aún la herramienta como tal sino como una consigna o una receta que se
repite
sin
transformaciones
posibles.
Se
interesa
en
explorar una determinada herramienta científica en el niño, sin considerar la operacionalización de un problema y una situación que la traduzca en desempeños específicos. Por otro lado está la presencia portentosa de las nociones como
objetivo
del
análisis,
y
consecuencia
de
ello,
la
exigencia de la verbalización como fuente de los datos que finalmente le permiten a la maestra afirmar el éxito o el fracaso
en
el
desempeño
del
niño.
Una
característica
adicional de la propuesta en la primera asesoría, es que en este punto no se percibe un cambio respecto del momento 0 en la medida que sigue intacto el número de maneras de llegar a la
solución:
está
sigue
siendo
única
y
verbal,
pues
los
apareamientos (que supuestamente son clasificación) entre el color de bolas con color de orificios, o entre el tamaño de las bolas y el tamaño de los orificios está predeterminada por el diseño mismo, sin dejar mucho espacio a la inspiración del niño. A pesar de la precaución que se tomó sobre el interés de la maestra
por
las
nociones
en
el
paso
del
momento
0
a
la
primera asesoría, lo cierto es que el surgimiento de ese análisis implica un avance respecto de la situación inicial, pues mientras que ahí se trata de ver en que medida el niño “pone junto lo que va junto” (la maestra le llama a esto clasificar), en la primera asesoría el análisis de nociones
22 físicas como la velocidad, el peso, la fuerza, promete ya un acercamiento mayor para asesorías posteriores al análisis de las estrategias. La introducción de la cauchera (un artefacto para lanzar) permite vislumbrar una avance en este sentido, que como se verá más en otras asesorías apoya la situación en la relación medio-fin. Sin
embargo,
la
aplicación
de
la
rejilla
a
la
situación
resultante en la primera asesoría, señala que tal vez el artefacto
mismo
(la
cauchera)
implique
obligatoriamente
retomar las nociones, pues por lo limitado del diseño, por la manera cómo el elástico oculta (no pone en evidencia o no saca a la luz) el mecanismo involucrado, no se puede entrever un funcionamiento físico que le permita a la maestra observar y
seguir
mejor
la
comprensión
del
niño.
Ante
esa
poca
posibilidad de desmenuzar el desempeño, ella permanece en el limbo
de
las
nociones,
obligada
a
permanecer
en
una
concepción escolarizada de la situación en la que se trata de ver cómo el niño aplica lo que “sabe” al fenómeno involucrado en la situación. Se
observa
aspectos
que
la
cruciales
situación (que
sufre
definen
una
transformación
cualquier
SRP
en
propiamente
dicha), por ejemplo aparece el esbozo de un problema, ausente en el primer momento, y surge una operacionalización, aún incipiente, de ese problema a partir de un artefacto preciso que
cumple
las
veces
de
un
mediador
indirecto
entre
la
maestra y el niño. Por otra parte, la reflexión sobre la función de la herramienta, y su lugar en el análisis del desempeño del niño, parece cumplir en este momento un papel secundario,
pues
a
pesar
de
intuir
las
posibilidades
que
23 ofrece la observación de un niño operando sobre la cauchera, no se da un cambio de mirada sobre la herramienta involucrada (la
clasificación
en
este
caso).
La
situación
entre
el
momento 0 y la primera asesoría muestra que hay elementos no sustanciales
como
(individual),
la
para
edad ser
y
el
formato
considerados
de como
presentación objeto
de
transformación. Igualmente, es preciso afirmar que en ningún momento aparece la familiarización como parte del diseño de la situación. En cuanto a los aspectos que definen una SRP, se muestra a continuación cumple
la
cuáles
situación
características del
momento
0
de y
las
la
identificadas
situación
de
la
primera asesoría.
Situación momento 0 Hay un problema Parte de la estructura medio-fin, y por consiguiente, de la consecución de una meta Se traduce en un conjunto de acciones que el niño despliega. No se apoya en verbalización Tiene varios modos de llegar a la solución La comprensión del problema se ve favorecida por la familiarización Es propicia para la interacción y grupal. No es evaluativa ni exclusivamente individual
Situación Asesoría 1 X Parcialmente Parcialmente
Como se ve, la situación propuesta en el momento 0 no se puede considerar una SRP propiamente dicha pues carece de todos
los
elementos
que
favorecen
la
observación
de
un
24 desempeño comprensivo del niño. La primera asesoría tiene un efecto en el diseño original y permite entrever, a manera de un esbozo
inicial,
algunos
de
los
elementos
básicos
para
convertirla en una SRP. Sin embargo, se previene para no concluir que estos elementos están definidos completamente, ya
que
el
carácter
parcial
de
esos
aspectos
indica
necesidad de las asesorías posteriores. Segunda Asesoría: se presenta el mismo tablero de la asesoría anterior, y considerando las limitaciones de la situación anterior, la maestra introduce una catapulta desarmable que el niño debe armar para poder lanzar las bolas desde la misma distancia anterior y hacer que pasen por los orificios del tablero, y las 10 bolas con las mismas características. La catapulta viene a cumplir la función de mediador para favorecer la observación de un desempeño comprensivo del niño. La maestra se concentra en trabajar en la catapulta y allí descubre o empieza a trabajar sobre la comprobación de hipótesis y la experimentación en el niño al observar cómo arma los componentes de la catapulta de manera diferenciada en función de la evidencia que obtiene de los lanzamientos. Además cómo corrige sus estrategias para que la fuerza aplicada al brazo de la catapulta se acople a la dirección, el peso, la posición y la velocidad de las bolas, de manera que supere la distancia para que éstas entren por los orificios del tablero en la menor cantidad de lanzamientos posibles. Se propone presentar la situación a niños de 4 y 5 años, de manera individual.
Aspectos que cambian Primera Asesoría (respecto de Segunda Asesoría)
- Se incluye nuevo artefacto (catapulta), desaparece cauchera - Cambian las herramientas (aparece las hipótesis y experimentación, desaparece la clasificación)
Aspectos que no cambian - Permanece el mismo escenario
la
25 - Se analizan por primera vez las estrategias y la comprensión del funcionamiento del artefacto. Desaparece el análisis de nociones - Permanece la presentación individual - Permanecen la mismas edades El paso de la primera asesoría a la segunda se puede explicar a partir de varios aspectos. En primer lugar, se introduce un artefacto que mantiene la atención sobre aspectos y acciones del niño, y que centran el análisis
de
la
maestra
sobre
aspectos
sustanciales
del
desempeño, la importancia del tamaño de los objetos lanzados, y muy posiblemente el papel que distancia y la trayectoria cumplen en el desplazamiento de las bolas. En la recuperación de
estos
elementos,
el
cambio
de
la
cauchera
por
una
catapulta se revela como fundamental, en la medida en que, como
mecanismo,
aislar
o
distancia
resulta
resaltar y
las
más
eficaz,
variables
trayectoria.
Se
y
permite
involucradas
podría
afirmar
justamente
como
son
la
que
es
la
situación la que va transformando, a partir de las acciones que suscita, un proceso de reflexión en el niño. Al aplicar la rejilla de asesoría a la situación en este momento, el análisis de los desempeños del niño da un giro significativo en comparación con la primera asesoría, pues a partir de aquí surge un análisis en términos de estrategias de resolución y comprensión del funcionamiento del artefacto, y deja de ser relevante abandona.
el
análisis
de
nociones,
que
finalmente
se
26
Una
segunda
segunda
transformación
asesoría,
consiste
por
niño.
utilizada
el
importante en
la
Él
entre
la
primera
herramienta
pasa
a
y
científica
considerar,
las
características del tamaño en función de la forma como opera la catapulta. Ante esto, la maestra deja en un segundo lugar la
clasificación,
que
como
herramienta,
ya
no
tiene
relevancia en la situación presentada, y empieza a hacerse relevante la formulación de hipótesis como condición de la resolución del problema. En la primera asesoría se hace énfasis en que la herramienta comprometida
no
corresponde
exactamente
al
diseño,
y
que
además e independientemente del diseño mismo, la definición de
clasificación
corresponde
a
lo
"vulgarizado"
en
los
contextos escolares (donde muchas veces clasificar es agrupar o aparejar) pero no a la definición trabajada en el cursillo. De esta forma el cambio en la situación para esta segunda asesoría
de
herramienta
dos
maneras:
involucrada
opera (que
sobre
el
implicaría
cambio un
de
cambio
la de
situación), o sobre el proceso inverso, que es cambiar la situación
bosquejada
como
condición
del
cambio
a
otras
herramientas que ésta pueda involucrar. En última instancia es la maestra quien toma la decisión, pero es preciso señalar claramente que esos cambios se dan en referencia a los dos vectores o polos sobre los que se construye el escenario de trabajo en el cursillo, a saber, las herramientas científicas del niño por un lado y la arquitectura de la situación por otro.
27 En la transición que va de la primera a la segunda asesoría se muestra ya un cierto nivel de comprensión en la maestra, de la articulación necesaria entre la herramienta científica y el artefacto utilizado, pues ella empieza a ser sensible al hecho que si cambia el artefacto (y probablemente el problema planteado al niño), su análisis debe cambiar igualmente. Este aspecto
no
está
presente
en
el
paso
del
momento
0
a
la
primera asesoría. Finalmente, el paso de la primera a la segunda asesoría, conserva
invariantes
la
edad
de
presentación,
el
formato
individual e igualmente la ausencia de la familiarización como
parte
del
diseño
de
la
situación.
En
cuanto
a
los
aspectos que definen una SRP, la situación de la segunda asesoría muestra lo siguiente:
Hay un problema Parte de la estructura medio-fin, y por consiguiente, de la consecución de una meta Se traduce en un conjunto de acciones que el niño despliega. No se apoya en verbalización Tiene varios modos de llegar a la solución La comprensión del problema se ve favorecida por la familiarización Es propicia para la interacción grupal. No es evaluativa ni exclusivamente individual
Situación Asesoría 2 X X X X
Como se ve, la situación cumple con 4 de los 6 aspectos propuestos para considerarla una SRP propiamente dicha. En la segunda asesoría se definen mejor los elementos que aparecían
28 sólo
parcialmente
definitivamente
en
la
empiezan
primera, a
dar
un
y
aparecen
estatuto
de
otros SRP
que a
la
situación. Tiene particular importancia la mención de otros modos de llegar a la solución y el desplazamiento del interés en la verbalización, que por la vía de la presencia de la catapulta desarmable, indican que en las sesiones anteriores el diseño del artefacto tenía un papel crucial para impedir que se llegara a una situación más elaborada. Tercera Asesoría: se presentan las mismas bolas y la catapulta desarmable de las sesiones anteriores esta vez ubicada en el extremo de una mesa grande. Se elimina el tablero con los orificios. Se le dice al niño que él es un mensajero que se ha inventado una máquina para lanzar mensajes en unas bolas y que tiene que enviarlos a unos extraterrestres que están en el espacio (ubicado a partir del borde de la mesa en el extremo opuesto al niño, fuera de su espacio visual). El interés de la maestra es estudiar la experimentación con hipótesis y las inferencias de los niños cuando usan un mecanismo para desplazar objetos. El análisis se centra en ver cómo se da la comprobación de la hipótesis mediante varios ensayos (ubicar el eje en un orificio del brazo de la catapulta, lanzar, esperar el resultado, y volver a ubicar en otro orificio si la distancia esperada no resulta). Se propone presentar la situación como un juego de competencia a un grupo de niños de 4 y 5 años.
Tercera Asesoría (respecto de Segunda Asesoría)
Aspectos que cambian - Cambia el escenario (desaparece el tablero con orificios)
Aspectos que no cambian
- Permanece el mismo artefacto (la catapulta) - Se incluye una - Permanecen las nueva herramienta (la herramientas de inferencia) comprobación de hipótesis y experimentación - Permanece el análisis de las estrategias
29 - Por primera vez se presenta como un juego grupal - Permanecen la mismas edades La
tercera
asesoría
supone
una
transformación
en
la
situación, de elementos que hasta el momento no habían sido considerados
como
sustanciales,
como
es
el
caso
de
la
presentación como un juego en el que varios niños pueden empezar
a
competir,
sin
que
eso
suponga
mayores
transformaciones en el diseño. Además de esto, algunos de los componentes sufren cambios interesantes, que señalan un mejor dominio de la situación por parte de la maestra. En primer lugar, la modificación del escenario, que pasa del lanzamiento de las bolas hacia el tablero con orificios hasta una espacio más abierto. Este cambio supone una concentración puntual en la comprensión del funcionamiento de la catapulta, y no tanto en el resultado final de lograr meter las bolas por los orificios. En esta asesoría, la transformación opera además sobre el problema planteado, que aquí es más claro para el niño, o parece serlo si se analiza sus desempeños reales frente a la situación. La
aparición
de
la
inferencia
como
otra
herramienta
involucrada surge de los análisis de las estrategias de los niños (que desde la segunda asesoría se habían señalado como importantes). En este momento, el análisis conceptual de las herramientas por parte de la maestra es mucho más fino, y hay que decir que eso lo posibilita la situación diseñada y la manera
cómo
han
operado
las
transformaciones
sugeridas
a
partir de la aplicación de la rejilla. Por ejemplo, ya no se
30 va a hablar únicamente de la formulación de hipótesis frente a esta situación (la hipótesis específica sobre la relación entre el punto de apoyo del brazo lanzador y la distancia alcanzada por la bola), sino que además se enfatiza en las relaciones que el niño establece entre sus hipótesis y la evidencia obtenida con sus lanzamientos. El niño somete a prueba la hipótesis según la cual la bola llega más lejos cuando el punto de apoyo del brazo está más alejado de la concavidad que sostiene la bola que se va a lanzar. A partir de pequeñas pruebas, él obtiene la evidencia. La relevancia de esta observación se justifica si tenemos en cuenta que este aspecto de la relación entre evidencia e hipótesis, es uno de los tópicos centrales en el estudio del desarrollo del razonamiento científico en el niño. La
tercera
asesoría
estabilización
de
las
sugiere
para
esta
transformaciones,
situación,
que
contribuye
situarla como una SRP, según los criterios utilizados.
Hay un problema Parte de la estructura medio-fin, y por consiguiente, de la consecución de una meta Se traduce en un conjunto de acciones que el niño despliega. No se apoya en verbalización Tiene varios modos de llegar a la solución La comprensión del problema se ve favorecida por la familiarización Es propicia para la interacción grupal. No es evaluativa ni exclusivamente individual
Situación Asesoría 3 X X X X
X
una a
31 La
situación
permanece
en
este
punto
muy
similar
a
la
situación de la segunda asesoría, pero es necesario recordar los énfasis y las precisiones en el análisis señalados en el párrafo anterior. En esta tercera asesoría, la maestra piensa la situación para ser presentada grupalmente, cuestión que en las
asesorías
anteriores
no
había
sido
considerada.
La
familiarización vuelve a estar ausente, y se constituye como el único aspecto del diseño que permanece invariante a lo largo de todo la fase de asesorías. ¿Qué
se
puede
situación
a
decir
lo
de
largo
la
de
transformación
las
global
diferentes
de
la
asesorías?.
El
análisis realizado mostró lo siguiente: 1. Es en el paso de la segunda a la tercera asesoría donde parecen operar los cambios más importantes, sin que suponga menos
transformaciones
segunda
asesoría.
observación indica
del
también
situación
sea
significativas
Esto
niño el
muestra
frente
hecho
a
que
transformada
el la
en
de
la
primera
efecto primera
radicalmente,
la
tiene
la
propuesta.
Lo
asesoría,
la
que
situación la
a
y
esto
se
puede
explicar porque es entre el momento 0 y la primera asesoría que
se
empieza
a
probar
la
situación
con
los
niños
directamente, y no es producto de un ejercicio "desvinculado" de la maestra en sus creencias. Entre la segunda y tercera asesoría, aspectos centrales
la
transformación
específicos, del
herramientas
que
trabajo
científicas
muestra
que
se
resultan
ser
en del
el
opera
sobre
los
dos
polos
a
saber,
cursillo,
niño
por
un
lado
(en
las lo
conceptual) y la situación por otro (en lo metodológico). Estas transformaciones señalan por una parte, la apropiación
32 de las maestras de lo que implica la propuesta metodológica y conceptual
del
cursillo,
y
por
otro
lado,
la
progresiva
apropiación de la maestra de concentrarse en el desempeño del niño y de su punto de vista. 2. La progresiva atención a la interacción que se da entre herramientas evocada y el diseño del artefacto, que pasa de una
desconexión
en
las
dos
primeras
sesiones
hasta
una
estrecha vinculación en la segunda y la tercera asesoría, que muestra
por
su
parte
la
necesidad
de
atender
a
aspectos
conceptuales y metodológicos de manera paralela. Esto señala el efecto del cursillo sobre la práctica, que por lo que se sabe, suele ser excesivamente instrumentista (el activismo característico carentes,
del
muchas
diseño veces,
de de
actividades hipótesis
pedagógicas
directrices)
o
excesivamente nocional (enseñanza de conceptos, indicadores de un modelo final y externo en el trabajo con el niño). Las transformaciones señaladas respecto de la situación de la catapulta (y por lo que resulta paradigmática), van a definir por lo demás los patrones de transformación de todas las situaciones analizadas. Salvando las especificidades de cada situación
y
de
los
modos
de
funcionamiento
de
distintas
maestras, el mapa general de las transformaciones ofrece un panorama similar.
Conclusiones El objetivo general del análisis de la transformación de las situaciones es mostrar en primer lugar el estatuto que éstas
33 tienen como escenarios privilegiados para redimensionar la práctica y la intervención del maestro en el preescolar. En segundo lugar, señalar la estrecha relación entre el diseño que
se
propone
y
el
resultado
final
en
términos
de
la
actividad resolutoria del niño. Las
siguientes
conclusiones
provisionalmente,
esos
dos
buscan
integrar,
objetivos
aunque
sea
específicos.
La
experiencia de las situaciones mostró durante el proceso de capacitación de las maestras, que es posible que el niño ponga
en
niveles
funcionamiento de
experticia,
destrezas
de
racionalidad
alto e
nivel,
mayores
iniciativa,
en
la
medida en que las situaciones presentadas se lo permitan. Hay que hacer, sin embargo, la siguiente precisión: cuando se quiere proyectar el trabajo basado en SRP a los entornos educativos corrientes, no se trata de creer es
la
causa
de
ese
desempeño.
Las
que la situación SRP
se
conciben
eminentemente como espacios de evocación de todo el potencial cognitivo que el niño posee y que por lo regular permanece invisible a los ojos del educador atrapado en el inmediatismo de la institución. La SRP es un marco para facilitar la aparición de lo que el niño tiene para ofrecer. Comparativamente, a mayor fuerza predictiva de la situación corresponde un desempeño más resolutorio y transparente de parte del niño. Esto es un corolario, pero como se vio, dado que la transformación de las situaciones en las sesiones de asesoría depende en buena medida de la actividad del niño, es necesario entender que también la intervención del maestro depende del desempeño del niño. Aunque resulte una fórmula circular habría que repetirlo: la fuerza predictiva de una
34 situación
(esto
resolutorio), estrategias
es
su
depende
capacidad de
novedosas
la
para
evocar
observación
presentes
en
el
un
de
desempeño
acciones
niño;
pero
y
esas
acciones y estrategias no aparecen si la situación no las saca a flote. Aunque lo anterior puede parecer incongruente con la lógica evaluativa que predomina en los sectores más conservadores de la pedagogía y la didáctica, el recorrido por las situaciones en
su
proceso
exigencia
de
propone.
En
de
transformación
principio las
del
mostró
modelo
actividades
de
que
esta
es
intervención
pedagógicas
una
que
se
usualmente
unidireccionales y directivas que no favorecen el punto de vista del niño, los escenarios cambian porque los proyectos educativos cambian, y el niño permanece al margen de esas decisiones. En la construcción de SRP que hemos propuesto, la idea es que las actividades de maestros y niños se armonicen, de manera tal que en ese acuerdo “a dos” se descubran las mejores niño
condiciones
da
más,
realmente
dar
desarrollo
y
si
la
más las
para
funcionar
maestra cuando
da
racionalmente.
más;
recupera
estrategias
de
y los
la
Así,
maestra
puede
itinerarios
resolución
que
el
el
de niño
utiliza en cada versión de la situación. Esto es lo que a nuestro entender implica adoptar un modelo centrado en el niño y una alternativa para la intervención en el desarrollo de herramientas científicas espontáneas en el niño pequeño. Esta
visión
alternativa
contrasta
fuertemente
con
la
tendencia predominante en la enseñanza de las ciencias de los primeros años, que está apoyada por lo general en un enfoque básicamente contemplativo. Y esto en tres sentidos: 1) se
35 tiende a pensar que involucrar al niño en la ciencia debe hacerse a partir de resaltar lo sensorial por encima de todo, la
cual
es
una
concepción
generalizada
en
la
educación
inicial, y que tiene como consecuencia que el planteamiento de
situaciones
o
actividades
estén ausentes
en
las
educadoras.
2)
lo
contemplativo
actitud
las
de
solamente
supuestamente
estrategias
maestras
pregunta le
pedagógicas
y
cuando espera
“revelen”
se
de
problematizantes
intervención
expresa
hacen
de
las
por
la
misma
preguntas
al
niño:
respuestas
del
explícitamente
sus
niño procesos
que de
resolución, de pensamiento o de comprensión al resolver esa misma pregunta. 3)cuando la práctica recurre a experimentos que no forman parte de las preguntas ni de los intereses del niño,
y
por
consiguiente
permanece
por
fuera
de
sus
posibilidades cognitivas. La propuesta basada en el diseño de situaciones de resolución de
problemas
y
de
su
progresiva
transformación
y/o
reorganización para favorecer desempeños menos contemplativos en
el
niño,
es
entonces
pertinente.
Al
centrar
la
intervención temprana en la formación de una racionalidad científica en el niño basada en las SRP, se redefine la función
de
la
maestra
como
proponente
y
diseñadora
de
condiciones apropiadas. El análisis de las transformaciones de las situaciones que se han presentado aquí muestra que esa transición de las maestras desde concepciones del niño como contemplador a una concepción del niño como resolutor pasa por un proceso, a veces lento, de elaboración de escenarios propicios. No se espera que desde un principio la maestra proponga situaciones predictivas de un mejor desempeño en los niños,
pero
si
se
requiere
un
trabajo
juicioso
de
36 reorganización
y
clarificación
de
las
hipótesis
que
ella
maneja en cada momento. Las
concepciones
de
lo
contemplativo
a
lo
resolutivo
no
cambian si antes no ha mediado un proceso de reelaboración de esas mismas propuestas de intervención. Lo que se ha mostrado en este mapa es que el cambio de concepción, de modelos o de estrategias no es posible si la maestra no “hace algo”. El proceso
de
diseño,
elaboración
y
reelaboración
de
las
situaciones muestra que esa es una condición indispensable de la comprension de nuevos acercamientos pedagógicos al niño. Tversky
y
Kahneman
afirman
que
para
acceder
a
soluciones
posibles a problemas (y acceder a la comprensión de los modos de funcionamiento de los niños que involucran herramientas científicas es un problema para la maestra) hay que construir escenarios: “Al pensar sobre estos acontecimientos a menudo construimos escenarios, esto es, historias que conducen de la situación presente al acontecimiento destino. La plausibilidad de los escenarios que vienen a la mente, o la dificultad para producirlos, sirve entonces como una pista de la probabilidad del acontecimiento. Si no viene a la mente ningún escenario razonable, el acontecimiento se considera imposible o altamente improbable. Si muchos escenarios acuden a la mente, o si el escenario que se construye es particularmente convincente, el acontecimiento en cuestión parece probable“ (Tversky & Kahneman (1973, p. 229, citado por Garnham & Oakhill 1996, p. 289, el subrayado es nuestro).
Una conclusión importante de todo el trabajo realizado con las maestras es que el componente práctico de trabajo sobre las SRP es esencial en los procesos de capacitación de los maestros,
y
iniciativas. proceso
una La
alternativa experiencia
“reeducativo”,
que
viable
para
este
tipo
de un
realizada,
constituye
todo
demuestra,
a
por
juzgar
los
37 resultados,
la
impertinencia
metodologizante
en
arraigadas
las
en
el
del
intento
maestras.
discurso
de
remover
libresco
o
concepciones
Específicamente,
en
lo
relacionado con la educación científica temprana la propuesta de las SRP es una alternativa para cambiar las maneras de trabajar las ciencias con los niños, en la medida que la propuesta está encaminada a propiciar la reflexión del niño, una reflexión genuina anclada en la situación, para que el entendimiento
de
los
dispositivos
sea
lo
más
aproximado
posible). En esta perspectiva, sería posible sentar las bases para el desarrollo de destrezas y comprensiones racionales del mundo,
esenciales
formal en esta materia.
en
el
momento
de
la
escolarización