BIOMETRIA HEMATICA. La Biometria hemática se lleva a cabo mejor con un contador automático capaz de hacer mediciones simultáneas de hemoglobina, número de eritrocitos, volúmen de éstos, cuenta plaquetaria, cuenta de leucocitos y cuenta diferencial de los leucocitos en 3 o 5 partes. Se fabrican en la actualidad excelentes instrumentos de Technicon, TOA y Coulter Electronics. Estos contadores usan un campo electrónico, ondas de radiofrecuencia o fuente de luz de alta afinidad para detectar la presencia y características de células individuales en soluciones. El aparato en forma automática pipetea, diluye y después pasa la solución diluida de células sanguíneas a través de una apertura pasando por un campo eléctrico a una velocidad fija para contar las células individuales. Debido a que los eritrocitos son poco conductores de electricidad, producen una caída momentánea en la conducción, la magnitud de la cual es una medida de tamtaño celular relativo. Por tanto, la técnica de impedancia eléctrica hace posible tanto la rapidez como la precisión en la cuenta de un gran número de eritrocitos y en forma simultánea da el volúmen celular. La hemoglobina y hematócrito son mediciones de uso muy común en la clínica. Debido a que hay un acuerdo general (hemoglobina X 3 = hematócrito), es en mucho la que el médico prefiere para la interpretación uno u otro dato. En términos de precisión relativa, la concentración de hemoglobina se mide en forma directa por los contadores automáticos y ofrece la medición precisa sobre la capacidad de trasporte de oxigeno de la sangre. El hematócrito no es un valor medido, sino calculado a partir de las mediciones del contador de eritrocitos y el volumen corpuscular medio. Esto hace que el hematócrito sea menos preciso. La cuenta de eritrocitos puede alterarse por un incremento en la cuenta de leucocitos mayor de 100 x 103 por microlitro. Además, el volúmen corpuscular medio de la población de eritrocitos se modifica por la aglutinación celular y los cambios osmóticos secundarios a hiperglucemia e hipernatremia. En estas situaciónes, una hinchazón repentina de los eritrocitos puede elevar de manera falsa el hematócrito calculado como producto de la cuenta de eritrocitos y el volumen corpuscular medio. Para identificar concentraciones bajas anormales de hemoglobina o hematócrito, es necesario establecer un dato normal promedio y los límites de la normalidad. Esto depende no sólo del error aparente de medición sino también de las variaciones esperadas en los individuos. Hay factores que pueden afectar cualquier medición de hemoglobina dada. Las condiciones bajo las cuales la sangre es tomada puede alterar el valor obtenido. Por ejemplo, si el paciente está en posición erecta, la concentración de hemoglobina es de cerca de 0.7 g/dL más alta que si está en posición supina. Con ansiedad o dolor excesivo que se relacionan con la venopunción pueden ocasionarse descarga de catecolaminas y vasoconstricción, lo que causa una reacción inmediata en el volumen plasmatico y aumenta la concentración de hemoglobina tanto como de 1 g/dL.
De mayor importancia es la variación normal debido a edad y sexo. Hay varias razones que se han propuesto para estas diferencias. Se sugiere que en la infancia, las altas concentraciones de fosfato inorgánico son el resultado del incremento en el 2,3-DPG del eritrocito y por tanto de las concentraciones más bajas de hemoglobina. Los varones pospuberales tienen altas concentraciones de hemoglobina secundaria al efecto estimulador de andrógenos sobre los precursores eritroides. Las hormonas placentarias también pueden causar la disminución de la hemoglobina hasta cerca de 1 g/dL durante el segundo y tercer trimestres del embarazo y presentar amplias oscilaciones en el volumen de líquido extracelular que pueden hacer la caída incluso más pronunciada. Las diferencias raciales también están relacionadas con diferentes concentraciones de hemoglobina; los datos normales en individuos negros en Estados Unidos están cerca de 0.5 g/dL por debajo de aquellos en blancos. Por último, hay un número de factores ambientales que tienen funciones importantes, en particular aquéllos que afectan el aporte de oxígeno. La altura tiene un efecto predecible, hay aumento de hemoglobina de 1 g/dL por cada 3 a 4% de disminución en la saturación de oxígeno arterial. Fumar produce suficiente monóxido de carbono para disminuir la saturación de hemoglobina con oxígeno y aumenta la concentración de hemoglobina. Los que fuman en gran cantidad pueden aumentar su hemoglobina hasta en 0.5 a 1 g/dL.