El enfoque hacia los stakeholders en la planeación del desarrollo de un proyecto ha evolucionado a través de la historia, con un énfasis inicial en la producción y las riquezas de los accionistas. Para ilustrar, en la segunda mitad del siglo XVIII en Gran Bretaña se inició una época de transformación económica, social y tecnológica llamada la revolución industrial, la cual se extendió unas décadas después hasta una buena parte de Europa occidental y Estados Unidos, finalizando hacia 1820 o 1840. Con el movimiento obrero, el cual se originó como respuesta a la explotación laboral durante la revolución industrial, se pretendía hacer valer los derechos de los trabajadores, por lo cual la sociedad se encargó de exigirles a las industrias que actuaran con responsabilidad social y que velaran por el bienestar de los obreros (Carpentero et al., 2002). Los cambios suscitados a partir del movimiento obrero antes mencionado no sólo originaron una transformación social, sino que generaron un impacto significativo en el mercado. Entre 1800 y 1930, la oferta, que anteriormente superaba a la demanda, se equilibró; razón por la cual, las empresas se vieron en la necesidad de estudiar el comportamiento del consumidor, ya que los clientes no estaban obligados a comprar lo que estuviera disponible, sino que tenían la opción de elegir los productos que mejor satisficieran sus necesidades. En consecuencia, hacia mediados del siglo XX la empresa comprendía la importancia de suplir las necesidades de los clientes, trabajadores y accionistas (Mora, 2012). Según lo afirma Friedman (1962) citado en Mora (2012), un stakeholder era originalmente una persona que de manera temporal tenía el control de dinero y bienes mientras se determinaba quién era su propietario legal. Al explorar los orígenes del concepto en mención en el campo gerencial, se encuentra que aquél fue utilizado por primera vez en 1962 cuando el Stanford Research Institute utilizó el término 15 stakeholders en un memorando interno, al referirse a aquellos grupos sin cuyo apoyo la organización podría dejar de existir (Mora, 2012) . Freeman (1984) popularizó el concepto de stakeholders al establecer una relación entre la teoría relacionada con éstos y la planeación estratégica, señalando que la misión o propósito de la empresa debe considerar a los stakeholders. Para el autor en mención, stakeholder es “cualquier grupo o individuo que puede afectar o ser afectado por la consecución de los objetivos de la empresa. Fue a partir de su propuesta que el pensamiento de los stakeholders comenzó a tener una dimensión en la vida organizacional; cierto número de escuelas se han fundamentado en su trabajo” (Mora, 2012).
MATERIALES DE CONSTRUCCIÓN
A partir de la popularización del concepto de stakeholders realizada por Freeman (1984), en los años ochenta surgió con fuerza una muy influyente propuesta de un punto de vista ampliado de la responsabilidad corporativa hacia los llamados stakeholders (Mora 2012). Los análisis derivados de dicho punto de vista proveyeron un sólido fundamento para el resurgimiento, en la década posterior, del concepto de Responsabilidad Social de las Empresas (RSE); ahora ya no restringido únicamente a la consideración del mundo académico, sino planteado como parte de la estrategia competitiva de las empresas (Trovar, 2009 citado en Mora, 2012). De acuerdo con este punto de vista, los directivos empresariales en su toma de decisiones no sólo deben tener en cuenta los intereses de sus accionistas, sino que deben considerar todos los grupos que también tienen algún interés en la corporación. El propósito de las herramientas de análisis de los stakeholders es identificarlos dentro un proyecto, caracterizarlos y emplear esta información para implementar iniciativas de gestión efectivas (Bourne & Weaver, 2010). “La Gestión de los Interesados del Proyecto incluye los procesos necesarios para identificar a las personas, grupos u organizaciones que pueden afectar o ser afectados por el proyecto, para analizar las expectativas de los interesados y su impacto en el proyecto, y para desarrollar estrategias de gestión adecuadas a fin de lograr la participación eficaz de los interesados en las decisiones y en la ejecución del proyecto” (Project Management Institute, 2004).
Ing. Villegas Martínez Carlos Alberto
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