Buenas noches compañeros... Comparto algunas preguntas que se podrían plantear y la posible solución o respuesta, lo que correspondería a la hipótesis del trabajo.
Hipótesis de Trabajo 3 Fase: La posible solución o respuesta: ¿Cómo identificar si un niño está siendo víctima de algún tipo de maltrato?
Indicadores físicos: principalmente tienen relación con el maltrato físico. Dolor corporal, rasguños, moretones, quemaduras, heridas de dudosa procedencia, cortes, fracturas, dificultades para andar etc.
Indicadores conductuales: cambios bruscos en el comportamiento, cambios del apetito (aumento o disminución), agresividad, trastornos del sueño, aislamiento social, retraimiento, inhibición, llanto excesivo (muchas veces sin razón aparente), hiperactividad o hipoactividad, entre otros.
Indicadores psicológicos: bajo estado de ánimo, baja autoestima, irritabilidad, temor hacia los adultos, baja tolerancia a la frustración, vergüenza, culpa, etc. El indicador más confiable para determinar la existencia de estas vulneraciones de derecho es EL RELATO DEL NIÑO; Si ellos manifiestan haber sido maltratados de alguna forma, nunca hay que dudar de lo que dicen, y por ende se deben tomar medidas de forma inmediata, separándolo del agresor (para asegurar su protección) y luego de acuerdo a la gravedad, denunciando a las autoridades. Si bien, el maltrato físico es más fácil de detectar por que los indicadores son visibles, esto no quiere decir que provoque más daño en los niños. Ambos son igualmente dañinos, y en algunas ocasiones el maltrato psicológico es aquel que deja una huella emocional más profunda en ellos.
¿Qué situaciones de potencial maltrato y negligencia de menores se evidencian? Violencia intrafamiliar: La violencia intrafamiliar frecuentemente se presenta acompañada de casos de maltrato o negligencia de menores. Sin embargo, la exposición de un niño a la violencia intrafamiliar en sí misma no constituye maltrato y negligencia de menores. La violencia intrafamiliar se considera maltrato y negligencia de menores cuando causa daños o crea un peligro claro e inminente de daño a la salud, el bienestar o la seguridad del niño. Castigo corporal: “La disciplina física del niño, incluyendo el uso razonable de castigos corporales, no se considera maltrato cuando es razonable y moderada y es impuesta por un padre o tutor para el propósito de controlar o corregir al niño. Se considerarán la edad, el tamaño y el estado del niño, y el lugar de cualquier lesión causada para determinar si el daño corporal es razonable o moderado. Otros factores pueden incluir el nivel de desarrollo del niño o la naturaleza de la mala conducta del niño. La creencia del padre de que es necesario castigar a un niño no justifica ni permite el uso de fuerza excesiva, no moderada
o no razonable contra ese niño”. (WAC 388-15-009) “Los siguientes actos se consideran no razonables cuando se usan para corregir o controlar a un niño: (1) Tirar, patear, quemar o cortar a un niño; (2) golpear a un niño con el puño cerrado; (3) sacudir a un niño menor de tres años; (4) interferir con la respiración de un niño; (5) amenazar a un niño con un arma mortal; o (6) realizar cualquier otro acto que probablemente cause y que causa daños corporales mayores que un dolor transitorio o marcas menores. Se considerarán la edad, el tamaño y el estado del niño, y el lugar de la lesión para determinar si el daño corporal es razonable o moderado. Esta lista es ilustrativa de actos no razonables y no tiene intención de ser exclusiva”. (RCW 9A.16.100) No se permite el castigo corporal en las escuelas públicas, los hogares de acogida, los hogares de grupo u otras instituciones de cuidado de menores. Niños no supervisados o que pasan mucho tiempo solo: La edad en sí misma no es un indicador muy preciso del nivel de madurez de un niño. Algunos niños extremadamente maduros de 10 años pueden estar preparados para cuidarse solos, mientras que otros de 15 años tal vez no estén preparados aún por sufrir problemas emocionales o tener dificultades de comportamiento. Falta de obtención de atención médica: El hecho de que un padre o encargado de cuidar a un niño no obtenga para el niño el tratamiento médico apropiado para un problema de salud que si no se trata puede causar una enfermedad, atrasos de desarrollo o amenazar la seguridad del niño puede denunciarse a CPS como una sospecha de negligencia médica. Los niños diagnosticados con enfermedades o discapacidades o que están bajo el cuidado de un médico corren mayor riesgo de ser víctimas de negligencia médica. Abuso de drogas en la etapa prenatal los proveedores de atención médica tienen la obligación legal de denunciar estos casos y notificar cuando existe una causa razonable para creer que un niño ha sido maltratado o tratado con negligencia. Si se descubre que un recién nacido ha sido expuesto a las drogas o afectado por ellas, esto puede indicar la presencia de maltrato/ negligencia de menores y debe denunciarse. Es crucial que las personas que tienen la obligación legal de denunciar provean toda la información posible sobre los problemas/comportamientos, factores de riesgo o apoyos positivos que se hayan observado durante la interacción con la familia
¿Qué Factores de riesgo de maltrato infantil se relacionan con el alcohol? Se ha identificado una amplia gama de factores que incrementan el riesgo de que un niño sufra malos tratos. Como: tener unos padres jóvenes, pobres, desempleados o socialmente aislados; tener antecedentes de violencia doméstica en el hogar; vivir en una familia monoparental, y vivir en un hogar atestado. En el caso concreto del alcohol, se ha confirmado que tener un progenitor con antecedentes de consumo nocivo o peligroso
incrementa el riesgo de maltrato infantil, riesgo que es aún mayor si ambos padres tienen problemas con el alcohol. Los adolescentes cuyos padres participan poco en su crianza, o que refieren ser objeto de maltrato físico o abusos sexuales, tienen más probabilidades de verse inducidos a consumir alcohol por las presiones sociales, y corren mayor riesgo de hacerlo regularmente. El consumo frecuente de alcohol en la adolescencia está ligado a problemas como absentismo escolar, bajo rendimiento escolar y conductas delictivas, lo que puede incrementar aún más el riesgo de maltrato físico por parte de uno de los progenitores. También el hecho de haber sufrido malos tratos en la infancia puede contribuir a que se perpetren, ya que los niños maltratados tienen más probabilidades de consumir mucho alcohol en la edad adulta y de maltratar físicamente a sus propios hijos. Se ha comprobado que los barrios con mayor densidad de establecimientos de venta y consumo de alcohol tienen más problemas de maltrato infantil. En concreto, una mayor densidad de tiendas (que no permiten el consumo en su interior) se asociaba a mayores tasas de maltrato físico a niños, y una mayor densidad de bares lo era a mayores tasas de abandono infantil. Debe tenerse en cuenta, no obstante, que los barrios en los que abundan los puntos de venta de alcohol a menudo son más pobres y están superpoblados. Por tanto, disponer de menos recursos para ayudar a las familias puede incrementar las tensiones dentro de estas comunidades y limitar el desarrollo de redes sociales que pueden prevenir el maltrato infantil
Objetivos 5. Fase Tareas:
Objetivo general. Prevenir el maltrato infantil a través de una propuesta lúdica pedagógica en niños y niñas 2.
Objetivos específicos. • Construir un marco conceptual a través del estudio documentos sobre maltrato infantil, lúdico, construcción del yo y derechos del niño. • Diseñar e implementar la propuesta lúdica pedagógica • Analizar resultados y construcción de conocimiento.