Universidad Fermín Toro Vicerrectorado Académico Facultad de Ciencias Económicas y Sociales Escuela de Comunicación Social Barquisimeto, edo. Lara
Fabiana Acevedo CI:26.602.189
Análisis: Vidá y obrá de Ruben Dárío
Éste gran poeta, llamado Félix Rubén García Sarmiento, nace en el año 1867 en Matagalpa, Nicaragua. Es reconocido por su significativa forma de escribir sus versos, hace mezcla de todo tipo de corriente literaria, formando así el “modernismo”, aunque se ve mayormente influenciado por el romanticismo y la literatura francesa. Éste hombre desde pequeño tuvo gran intelecto, aprendiendo a leer desde los 3 años y ya para sus 10 años había leído grandes libros y escribía versos. En su adolescencia, su etapa de enamoramiento la plasmo a través de poemas románticos, y poco a poco se fue haciendo más reconocido a nivel nacional con cada una de sus letras, pero no es hasta los 18 años que escribe su primera gran obra literaria llamada “Azul”, la cual es publicada en el año 1888, recibiendo muy buenas críticas y marca los primeros pasos para el modernismo. Vivió mayor tiempo de su vida en otros países como Chile, España y Argentina. Fue nombrado en una oportunidad embajador y cónsul de Francia, viajando así por muchos países en Europa. A parte de hablar del amor, la tristeza, el entusiasmo y muchas otras emociones en sus obras, Rubén Darío demuestra preocupación por la cultura y la sociedad donde habitaba, además no sólo se dedicó a redactar poemas, también fue diplomático y periodista. Darío, vive sumergido en una vida escandalosa, donde el alcohol y depresión hacían acto de presencia en gran parte de su vida y de sus letras. Parte de su tristeza y su miedo a la muerte, se relaciona con la dura época en la que le tocó vivir, y con el fallecimiento de varias personas muy cercanas, una de ellas su primera esposa y luego varios de sus hijos. Sin duda alguna, fue un hombre revolucionario que miraba siempre más allá de las cosas, convirtiéndose en un ser analítico,
intelectual, el cual supo cómo sacar provecho de todas las cosas que sucedieron a su alrededor para poder llevar a cabo sus poemas y transmitir todo aquello que sentía con sus palabras.
En el momento de su muerte, en el año 1916, conmueve a gran parte de la población nicaragüense, apareciendo alrededor de 15.000 personas el día de su sepelio en la ciudad de León (Nicaragua), mostrando así cómo éste hombre supo ganarse al pueblo con sus increíbles escritos que dejaban siempre un mensaje, siendo su estilo algo notorio y diferente porque resaltaba junto a su léxico, su manera de transmitir la belleza de las cosas en una forma tan culta, con musicalidad y sonoridad, escapándose muchas veces de la realidad, digno de admirar. Tanto así, que después de su muerte se pretendió vender o subastar su cerebro, el cual al final fue robado y nunca apareció. Rubén Darío, le dio ese toque que necesitaba la literatura latinoamericana para surgir en una nueva Era como escritores y sobre todo como hombres.
Uno de sus mayores obras publicada en el año 1896