Alejandra Galarza Graciela García Isabel Guzmán Ana María Iriarte
Se ha observado que en la escuela Juanita Stevens los niños no logran desarrollar en proceso de Alfabetización Inicial al culminar el primer ciclo, ya sea por cuestiones personales o por no pautar la manera de enseñar la Lectoescritura, no se articula, por eso cada docente realiza su tarea de manera autónoma, sin acordar criterios de este proceso esencial para en la escuela, ya que es la base de la educación, la cual debe ser firme. La realidad cambio, en el mundo las nuevas tecnologías exigen a la educación realizar cambios,para no mostrar a un niño un mundo irreal de letra por letra o fagmentado.
Sostienen a esta propuesta las Leyes que se elaboraron,para darle a TODOS los niños la OPORTUNIDAD de tener mejores trayectorias escolares.
Pensar
institucionalmente cómo llevar adelante la Unidad pedagógica no implica solamente acotarla al desafío de que los niños/as pasen de 1° a 2° grado con la misma maestra. Por el contrario, debiera posibilitar experiencias que dejen “buenas huellas” y no “marcas indelebles” –“no sirvo”, “no puedo”, “no tengo condiciones para esto”– difíciles de borrar a lo largo de la escolaridad y en las
memorias familiares.
La
continuidad que implica la Unidad pedagógica requiere pensar en lo prioritario que es el aprendizaje de los niños/as, la construcción del conocimiento y la constitución de ellos en “ciudadanos plenos de la cultura letrada”, como sostiene Emilia Ferreiro. La Unidad pedagógica está pensada para mejorar la calidad de los aprendizajes y requiere un trabajo conjunto y articulado entre los niveles Inicial y Primario.
Contempla la complejidad en el tratamiento de los aprendizajes a enseñar, su selección, organización, secuenciación y complejización La unidad pedagógica modifica la organización institucional en la consideración de los tiempos para lograr la alfabetización inicial. No es sinónimo de no repitencia, ni tampoco significa bajar las expectativas y exigencias sobre el rendimiento académico de los alumnos/as. Es el reconocimiento de la igualdad de oportunidades –“todos pueden”– y en la confianza pedagógica, se amplía el tiempo educativo por sobre el calendario escolar para darle lugar al proceso educativo. Se diferencia sustancialmente de la promoción automática. Esta última es un acto por el que “todos pasan”, que homogeneiza, anula e invisibiliza los procesos de construcción de conocimientos de cada niño/a, las prácticas pedagógicas de cada docente, las decisiones institucionales de cada escuela.
Debe permitirnos pensar los procesos propios de todos los niños/as, pero a su vez el singular de cada uno de ellos. Requiere poner en juego los procesos de revisión de las prácticas de intervención pedagógica de cada docente y las decisiones y responsabilidades de la institución escolar. La unidad pedagógica rompe con lo dado, con lo que creemos que tiene que ser de una determinada forma o manera (“pasar a 2° grado” o su contracara “quedarse en 1°”); y con algunas naturalizaciones sobre nuestras prácticas pedagógicas: “algunos pasan”, “algunos se quedan”, “no está listo para…”, “si se queda va a poder madurar algunas cosas”, “le va a hacer bien quedarse…”. Detrás de estas expresiones y prácticas hay niños y niñas con diferentes procesos en la construcción y apropiación de conocimientos.
Partimos de la convicción de que el fracaso del estudiante puede superarse si se mejoran las condiciones que le ofrece la escuela en su trayectoria escolar. La confianza mutua, el fortalecimiento de la autoestima educativa y social del niño/a, el reconocimiento y respeto por la diversidad de los sujetos que configuran el mapa de la institución escolar, son algunas de las opciones que la escuela debe considerar. “Una relación pedagógica exitosa se apoya en un vínculo de confianza. Confiar en que nuestros estudiantes van a aprender es el primer paso para que puedan hacerlo y, a su vez, es apoyarlos en el proceso de constituirse en sujetos confiables y capaces de confiar en otros.” (Entre Docentes, Lecturas para compartir, 2010)
Sobre la Resolución 174 CFE “La educación debe ser común, única, gratuita, obligatoria, no dogmática, científica, coeducativa y asistencial y contar con los recursos necesarios, suficientes y permanentes para lograr en los distintos niveles una real igualdad de oportunidades para todos, la que sólo puede tener plena vigencia eliminándose las trabas sociales, económicas y culturales.
La resolución 174 /12 considera entre otros puntos: a- los dos primeros años de la escolaridad primaria como una unidad pedagógica, acompañada por acciones dirigidas a asegurar el aprendizaje de la lectura y la escritura de todos, lo que garantiza mayor justicia escolar al evitar que el destino escolar de muchos niños y niñas quede negativa e inexorablemente marcado desde el comienzo mismo de la escolaridad primaria. “Esta decisión se fundamenta en la concepción actual de la alfabetización, en las investigaciones sobre la adquisición y el aprendizaje escolar del sistema de escritura y en muchos estudios que han mostrado que la repitencia no es una solución sino que contribuye a la expulsión de los niños y las niñas de la escuela,. Algunas de las dificultades se encuentran asociadas a las propuestas de enseñanza y modos de evaluación puestos en juego, lo que nos obliga a revisar las situaciones de enseñanza que les proponemos a nuestros alumnos.
* Porque la alfabetización es universalmente reconocida como un derecho humano y, por consiguiente, es obligación de los Estados garantizarla. * Porque la resolución está basada en la concepción actual de la alfabetización y en las investigaciones sobre la adquisición y el aprendizaje escolar del sistema de escritura. * Porque alfabetizar es mucho más que “enseñar las primeras letras”, es formar lectores y escritores, es incorporar a todos los niños como ciudadanos de la cultura escrita. * Porque la escuela graduada no es “natural”, es sólo una de las formas posibles de organizar el dispositivo escolar, un dispositivo que corre el riesgo de ignorar o estigmatizar las diferencias. * Porque no todos los seres humanos aprendemos lo mismo al mismo tiempo y es imprescindible que la institución escolar se fortalezca para enseñar en la diversidad. * Porque muchos estudios han mostrado que la repitencia no es una solución: lejos de contribuir al aprendizaje, reiterar la misma experiencia lleva muchas veces a la repitencia reiterada y frecuentemente desemboca en la expulsión de los niños de la escuela.
Organizar cooperativamente el trabajo en la Unidad Pedagogica a través de capacitaciones que busquen generar los lineamientos para su ejecución. Mejorar y acompañar las trayectorias escolares de los niños a través de diferentes estrategias que se aborden y compartan en el marco de la capacitación. Desarrollar la Alfabetización Inicial desde un enfoque Equilibrado que permita la adquisición de la lectura y escritura de manera simultanea, con constante acompañamiento .
Organización
de la Unidad Pedagógica. Capacitación sobre la manera de abordar la Alfabetización Inicial. Lectura y análisis de los fundamentos teóricos y Marco legal de la Unidad pedagógica. Trabajo de secuencias didácticas en las diferentes áreas.