Alcoholismo El alcoholismo es un padecimiento que genera una fuerte necesidad de ingerir alcohol, de forma que existe una dependencia física del mismo, manifestándose a través de varias síntomas de abstinencia cuando no es posible su ingesta. El alcohólico no tiene control sobre los límites de su consumo, el cual va en aumento a medida que se desarrolla tolerancia a esta droga.1 Se considera como una enfermedad incurable, progresiva y mortal por la Asociación de Médicos de los EE. UU. (American Medical Association). Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo determina como «toda forma de embriaguez que excede el consumo alimenticio tradicional y corriente o que sobrepasa los linderos de costumbres sociales...» La dependencia al alcohol puede resultar de una predisposición genética, una enfermedad mental, el consumo de alcohol abundante, sostenido y abusivo o una combinación de estos factores. Esta enfermedad no solo afecta al adicto sino también la vida de todo aquel que se encuentra a su alrededor. Investigaciones recientes sobre genética y neurociencia han identificado ciertas características genéticas que se cree están relacionadas con la dependencia al alcohol. Los investigadores continúan indagando el vínculo entre la herencia genética y el alcoholismo. Actualmente no existe una posible cura para esta enfermedad, sin embargo muchos alcohólicos se mantienen sobrios por periodos de tiempo prolongados de acuerdo a su voluntad y compromiso para vencer esta enfermedad. Pero es innegable que para que un adicto al alcohol pueda recibir tratamiento y llegar a una posible recuperación, primero tiene que aceptar su condición de dependencia al licor.
Causas del alcoholismo Evasión: la bebida se puede usar como un medio para excluir de la mente problemas desagradables en vez de hacerles frente. Soledad: la bebida se puede usar para disminuir el dolor causado por tener pocas amistades, mudanzas frecuentes, no tener "raíces", separación de los seres queridos, etc.. Miedo: la bebida puede darle a las personas tímidas, inseguras o amenazadas, un falso sentido de confianza en sí mismos y seguridad. Falta de control emocional: puede parecer que la bebida problemas que uno sufre en sus relaciones con otras personas.
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Consecuencias del alcoholismo El alcohol, en cantidades toxicas, tiene diferentes efectos dentro del organismo, la mayoría de ellos negativos. Cerca de 200 mil defunciones al año pueden ser completamente o parcialmente atribuidas al beber. El alcoholismo puede matar en muchas maneras diferentes. En total, reduce la esperanza de vida por 10 a 12 años. Entre más temprano una persona empieza a beber gran cantidades de alcohol en gran medida, mayores serán sus perspectivas de desarrollar enfermedades graves más adelante. Además de causar numerosos daños físicos y psíquicos en la persona; por ello, el alcoholismo constituye un problema de tipo social. El alcohólico es una persona que no rinde en el trabajo por lo que acaba perdiéndolo y pasa a formar parte del numeroso grupo de vagabundos alcohólicos, desgraciadamente, sin hogar ni empleo. Es rechazado por los demás por resultar molesto y descuidado en su higiene personal, así como por la ausencia de un diálogo coherente ni razonable. Muchos alcohólicos acaban delinquiendo y terminan en la cárcel. En caso de personas más jóvenes, estos dejan de atender sus estudios o acaban siendo expulsados del centro educativo. Síntomas del alcoholismo Las primeras manifestaciones del alcoholismo son las respuestas físicas que aparecen durante la abstinencia (temblores, sudoración, dolor de cabeza, náuseas, ansiedad o aumento de la frecuencia cardiaca y de la presión sanguínea). Estos síntomas se acompañan por un fuerte deseo de consumir más alcohol. Sin embargo, no es frecuente que un alcohólico reconozca en un primer momento que tiene un problema con el alcohol. Este hecho dificulta enormemente el diagnóstico médico, mientras que el alcohólico continúa bebiendo y desarrollando una mayor tolerancia al alcohol. La evaluación psicológica será fundamental, junto al diagnóstico médico de los síntomas mencionados, para valorar el grado y el patrón de consumo de alcohol del paciente (uso, abuso, dependencia). El médico interrogará al paciente, o a un familiar en caso de que el afectado no quiera o no pueda responder a las preguntas, sobre sus hábitos en relación al consumo de alcohol. También se realiza un examen físico, y pruebas para detectar los problemas físicos o patologías que haya podido desarrollar a consecuencia del abuso de alcohol.
etapas del alcoholismo
Primera etapa:
Desde fuera parece ser solamente bebedores fuertes y gastan bastante en comprar bebidas. Consume diariamente un poco de alcohol y sólo ocasionalmente en grandes cantidades. Pueden aguantar de beber durante un corto plazo de tiempo y se sienten ofendidos cuando se le tildan de alcohólicos.
Segunda etapa:
En esta etapa le son imposibles controlar el consumo de alcohol y empiezan a darse cuenta de ello. Llegan a admitir pierden totalmente el control cuando beben, se sienten mal por ello aunque creen que la próxima vez si serán capaces de controlarlo. Intenta controlar el consumo de todas las maneras posibles, como beber únicamente los fines de semana o durante ciertas horas del día. En esta etapa no tienen problemas para cumplir con sus responsabilidades laborales y domésticos. No piensan que vaya empeorar su adición a la bebida, aunque se piensa en dejarlo.
Tercera etapa:
Son consientes de que no pueden beber como las demás personas, pero no saben los motivos de porque ocurre eso. Quieren dejar de beber, pero no lo consiguen. La desesperación aparece al no encontrar la solución al problema. Se ponen en contacto con algún médico, para ponerle remedio. Prueban algunos métodos para reducir el consumo a corto plazo, incluso mejoran, pero la adición no desaparece. Ya han perdido contacto con amistades, incapaces de mantenerse en un trabajo y pierde sus relaciones intimas. No tienen el interés de tener alguna relación sentimental o amistosa, incluso pierden las ganas de vivir. Sienten lastimas de ellos mismos.
Cuarta etapa:
Ya parecen desahuciados. Han pasado por varias instituciones. Suelen actuar violentamente, cuando beben parece incluso volverse locos. Llegan a sufrir alucinaciones, incluso los médicos instan que sean internados en centros. Ya parecen estar perdidos, que no se puede hacer nada por ellos.
Instituciones que brindan apoyo al alcohólico Alcohólicos anónimos Alcohólicos Anónimos (estilizado como AA)si es un movimiento internacional de ayuda contra el alcoholismo fundado en 1935 por William Griffith Wilson y Bob Smith en Akron, Ohio (EE.UU).1 2 Consiste en comunidades de hombres y mujeres que comparten su mutua experiencia, fortaleza y esperanza para resolver el problema común y ayudar a otros a recuperarse del alcoholismo. Para ser miembro el único requisito que se requiere es el deseo de dejar la bebida. Es una asociación sin ánimo de lucro y sin afiliaciones a religiones o partidos políticos.:3 Este movimiento se rige por 36 principios, los cuales se dividen en 12 pasos, 12 tradiciones y 12 conceptos para el servicio mundial.Otra de sus características descollantes es que tiene prohibido estatutariamente recibir cualquier tipo de ayuda económica pública o privada, ni subvenciones ni donaciones. Se sostiene con las contribuciones, de ordinario muy pequeñas, de sus miembros, lo que garantiza su independencia de cualquier organismo, tanto público como privado. Alcohólicos Anónimos surgió en Akron el 10 de junio de 1935, en una reunión entre Bill W., un corredor de bolsa de Nueva York, y el Dr. Bob Smith, un eminente cirujano de esa ciudad. Ambos tenían graves problemas con su manera de beber. Bill había permanecido sobrio por seis meses y ese día el Dr. Bob tomo su última copa. Ese día dos alcohólicos se reunieron para conseguir la sobriedad. En la actualidad se calcula que hay alrededor de 116 000 grupos y más de dos millones de miembros en el mundo que han logrado su recuperación a través de esta comunidad. Fundacion remar Remar inició su gestión en Guatemala en 1992. Sus siglas significan "Rehabilitación y Reinserción de Marginados", atiende a todo tipo de personas sin importar la edad, sexo, religión, estatus económico, raza, etc. Remar Guatemala brinda ayuda a quien la solicite, somos una entidad benéfica, no lucrativa que no se sostiene con ayuda del extranjero o del estado.
Acciones a tomar para evitar caer en el alcoholismo La prevención del alcoholismo debe iniciarse en la adolescencia o incluso antes. La recomendación es no beber nada de alcohol antes de la edad adulta. Para fomentar la abstención alcohólica es fundamental la actitud de la familia del menor; así, hay padres que no quieren que sus hijos beban pero consumen bebidas alcohólicas con frecuencia en presencia de sus hijos, o hacen comentarios sobre “cuánto bebían de jóvenes”. Esta conducta pro-alcohol puede hacer que el joven considere que el consumo de alcohol es algo normal y deseable en algunas ocasiones (por ejemplo cuando se está con amigos). En segundo lugar, es preciso informar al adolescente sobre las consecuencias reales del alcohol. Afortunadamente cada vez son más los jóvenes que conocen los efectos del alcohol y las graves consecuencias que puede tener sobre su salud y su calidad de vida, pero si no se acompaña de medidas efectivas de prevención, la información no es suficiente. Por eso, un tercer pilar fundamental para evitar la adicción, será dotar al adolescente de las estrategias necesarias para eliminar los factores de riesgo que le pueden inducir a consumir alcohol, como mejorar su autoestima y sus habilidades sociales. En este sentido, será fundamental también ayudar al joven a soportar la presión del grupo y mostrarle formas alternativas de diversión. En esta línea, la FAD (Prevención de Ayuda Contra la Drogadicción) ha desarrollado un programa de prevención del alcoholismo desde el ámbito familiar. Sus objetivos son desarrollar una visión adecuada del uso y abuso del alcohol, y proporcionar estrategias de intervención que ayuden a los padres a prevenir el consumo de alcohol en el ámbito familiar.