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La piel es un órgano complejo y heterogéneo que interviene en distintas actividades fisiológicas que tienden a mantener la homeostasis. La homeostasis es el estado de equilibrio del cuerpo respecto a diversas funciones y composiciones químicas de los líquidos y los tejidos (Langley, 1982). Cabe destacar los beneficios de una piel sana para poder entender la importancia de esta, ya que es la que protege a los órganos y tejidos del cuerpo de factores externos. Entre las principales funciones de la piel se distinguen las siguientes: •

Participa en la homeostasis al regular la temperatura corporal y la perdida de agua.

•

Protege contra la pérdida de agua por evaporación y contra rozamientos por medio de la capa córnea.

•

Excreción de diversas sustancias, por medio de glándulas sudoríparas, écrinas, apócrinas y de las glándulas sebáceas.

•

Función sensorial, recepción de mensajes del medio ambiente.

•

Acción protectora contra rayos ultravioleta, por medio de la melanina.

•

Síntesis de vitamina D, a partir de moléculas precursoras y por exposición a la luz ultravioleta.

•

Como defensa, siendo considerado un órgano inmune, ya que en él se inicia la respuesta inmune.

También es importante agregar que la coloración de la piel varía según las distintas razas y que esto se debe a la melanina o a algunas modificaciones en la circulación y a la presencia de hemoglobina en distintos grados de oxigenación.

Estructura microscópica de la piel

La estructura microscópica de la piel está integrada por: •

Epidermis

•

Dermis

•

Hipodermis.

Capas de la piel.

Epidermis

Es la capa que está en contacto con el exterior. Procede del ectodermo embrionario y está formada por tejido epitelial. La epidermis es un epitelio estratificado formado por una serie de estratos cuya misión principal es producir queratina. Esta sustancia es una proteína que confiere resistencia a la piel y permite protegernos frente a sustancias extrañas

Dermis La dermis es una capa profunda de tejido conjuntivo en la cual se tienen la peculiaridad de la abundancia de las fibras de colágeno y elásticas que se disponen de forma paralela y que le dan a la piel la consistencia y elasticidad característica del órgano. En la dermis se hallan los siguientes componentes: •

Folículo piloso.

•

Músculo piloerector.

•

Terminaciones nerviosas aferentes (que llevan información).

•

Glándulas sebáceas y Glándulas sudoríparas.

•

Vasos sanguíneos y linfáticos.

La dermis es 20-30 veces más gruesa que la epidermis. En ella se encuentran los anexos cutáneos córneos (pelos y uñas), y glandulares (glándulas sebáceas y sudoríparas).

Hipodermis Es la capa que más profunda de la piel que aparece cubierta por la epidermis. Es un estrato de la piel que está compuesto de tejido conjuntivo laxo y adiposo, lo cual le da funciones a la piel de regulación térmica y de movimiento a través del cuerpo. Representa la reserva energética más importante del organismo gracias al almacenamiento y a la liberación de ácidos grasos. Sus células grasas, los adipocitos, son células voluminosas. El núcleo aplanado de estas células está pegado en la periferia por una gota de lípido.

Los adipocitos se distribuyen de manera distinta en la mujer y en el hombre. En las mujeres, los adipocitos predominan en la zona de los glúteos y de los muslos. En los hombres, se encuentran más bien en la zona abdominal. En la hipodermis, se encuentran las glándulas sudoríparas y los folículos pilosos a los que están unidas las glándulas sebáceas.

3.1.1 Fototipos cutáneos.

El fototipo es la capacidad de adaptación al sol que tiene cada persona desde que nace, es decir, el conjunto de características que determinan si una piel se broncea o no, y cómo y en qué grado lo hace. Cuanto más baja sea esta capacidad, menos se contrarrestarán los efectos de las radiaciones solares en la piel

La forma más fácil de diagnosticar el fototipo de una persona es la determinación visual. Se trata de la observación del color de la piel en las partes sin exponer o expuestas mínimamente al sol (la parte inferior de las piernas justo sobre los tobillos, detrás de la rodilla o la zona interna del antebrazo). No se debe utilizar la parte expuesta de la piel de la cara, del cuello o de los brazos (o pecho, en el caso de los hombres), debido a que el color de estas zonas está alterado por una foto exposición repetida y prolongada

Fototipo determinado por la raza

Seis fototipos cutáneos

Fototipo I Muy sensible a la luz solar. Presenta intensas quemaduras solares, casi no se pigmenta nunca y se descama de forma ostensible. Individuos de piel muy clara, ojos azules, generalmente pelirrojos o con pecas en la piel. Su piel, habitualmente, no está expuesta al sol y es de color blanco-lechoso.

Fototipo II Muy sensible a la luz solar. Se quema fácil e intensamente, pigmenta ligeramente y descama de forma notoria. Individuos de piel clara, pelo rubio o rojizo, ojos claros y pecas.

Fototipo III Sensibilidad normal a la luz solar. Se quema moderadamente y se pigmenta correctamente. Razas caucásicas (europeas) de piel blanca cuando no está expuesta habitualmente al sol.

Fototipo IV La piel tiene tolerancia a la luz solar. Se quema moderada o mínimamente y pigmenta con bastante facilidad y de forma inmediata al exponerse al sol. Individuos de piel morena o ligeramente amarronada, con pelo y ojos oscuros (mediterráneos y orientales).

Fototipo V La piel es oscura y su tolerancia es alta. Raramente se quema, pigmenta con facilidad e intensidad, siempre presenta reacción de pigmentación inmediata. Individuos de piel morena (amerindios, árabes e hispanos).

Fototipo VI La piel es negra y su tolerancia es altísima. No se quema nunca, y su reacción de pigmentación es intensa e inmediata. Se trata de los individuos de raza negra.

Cuadro resumen de fototipos cutáneos

Tipos de piel.

Se pueden utilizar diferentes criterios para clasificar la piel. Una de las más aceptadas se basa en la naturaleza de la emulsión que se forma sobre la superficie corporal entre las moléculas lipídicas y acuosas cutáneas o externas, denominada manto hidrolipídico o emulsión epicutánea. Existen cuatro tipos de piel: piel normal, piel grasa, piel seca, y piel mixta. Todos los tipos de piel pueden llegar a presentar sensibilidad.

Piel normal

Es aquella cuyo manto hidrolipídico se halla correctamente formado, con una cantidad de lípidos idónea y constituyendo una emulsión de fase externa acuosa (O/W) o de fase externa oleosa (W/O), bien constituida. La función barrera no presenta ninguna alteración y la hidratación cutánea presenta una normalidad absoluta. Se caracteriza por su color rosado uniforme y el tacto suave y aterciopelado propio de pieles jóvenes. Fina, lisa, sin arrugas y elástica. Flexible, tónica y bien irrigada. Poros cerrados y pequeños, no hay presencia de aspectos poco estéticos como manchas, poros abiertos o líneas tirantes. No hay brillo grasiento y tiene una superficie lubricada y humedecida.

Piel grasa Este tipo de piel presenta una mayor actividad de las glándulas sebáceas. Tiende a constituir emulsiones con la fase continua formada por lípidos, dando lugar a una emulsión epicutánea de fase externa oleosa. Se distinguen varios tipos de piel grasa con distintas características: 

Piel grasa seborreica. Este tipo de piel se presenta, principalmente, en individuos de raza latina. En la seborrea, el aumento de la secreción de sebo da lugar a un desarrollo excesivo de la parte lipófila de la película hidrolipídica. La seborrea estimula la aparición de acné, eccema seborreico y rosácea, así como de infecciones bacterianas y fúngicas.



Piel grasa deshidratada. Se desarrolla cuando la secreción sebácea modifica su composición cualitativa, disminuyendo la proporción de lípidos hidrófilos. En estas condiciones la emulsión epicutánea no se forma o es insuficiente para proporcionar una adecuada protección, ya que disminuye el agua retenida al evaporarse ésta con más facilidad y por tanto, la piel se deshidrata.



Piel grasa asfíctica. Es una piel que ha alcanzado este estado por la utilización errónea de productos cosméticos. Por ejemplo, el empleo de productos demasiado astringentes que cierran los poros provoca una alteración en la composición de la secreción sebácea, originando la producción de grasa solidificada que, por la hipertrofia de la capa córnea, tiene dificultades en salir al exterior. Ello origina la aparición de quistes sebáceos o quistes de millium.

Piel seca La piel seca presenta una emulsión del manto epidérmico de fase externa acuosa (O/W). Una correcta función barrera presupone una superficie cutánea lisa, flexible, sin fisuras, sin grietas y con una descamación imperceptible. La sequedad cutánea se caracteriza entonces por presentar aspereza, descamación, pérdida de flexibilidad y elasticidad, grietas e hiperqueratosis. Las pieles secas se desarrollan como consecuencia de una disminución en el contenido de agua del estrato córneo, dificultando dicha función barrera. La sequedad cutánea puede ser ocasional o crónica. La piel seca constitucional o crónica se caracteriza por ser gruesa, áspera y rugosa al tacto, con una descamación anormal. Presentan poca tolerancia a los agentes externos y el síntoma acompañante más frecuente es el prurito, que se atribuye a una alteración en el umbral sensorial o la penetración de irritantes a través de un estrato córneo anormal. Es frecuente en personas ancianas o con dermatitis atópica.

Dentro de las pieles secas ocasionales o temporales se encuentran principalmente las pieles secas alipídicas y las pieles secas deshidratadas. 

Pieles secas alipídicas. Se caracterizan por una disminución del nivel lipídico en la secreción sebácea, ocasionando la deshidratación de la capa córnea por una menor protección de la emulsión epicutánea. Estas pieles suelen presentar color blanco rosado, espesor fino, aspecto mate y marchito, poros cerrados e imperceptibles a simple vista, tacto áspero, fácil descamación, tendencia a presentar arrugas, resiste muy mal los cambios climáticos. Las glándulas sebáceas y sudoríparas se encuentran disminuidas de volumen, toleran mal los jabones, se broncea con dificultad, no suele tener comedones, pérdida de elasticidad, la sensibilidad a los agentes externos favorece la

aparición de rojeces y descamaciones. 

Pieles secas deshidratadas. Deben su sequedad a un déficit de agua en el estrato córneo. Los agentes externos favorecen la eliminación del agua superficial conduciendo a un desecamiento y mayor descamación córnea. Sus características son, tacto áspero, piel con espesor fino, aspecto mate y sin brillo. Tienen una gran tendencia a las arrugas y a que se infecten los poros (granos), tolera muy mal los jabones, broncea difícilmente, se descama fácilmente, y se adapta mal a los cambios climáticos, es una piel muy sensible, que se irrita con facilidad y tiene sensación de tirantez, no suele presentar comedones.

Posibles afecciones de la piel.

Como se señala en el apartado de alcances y limitaciones, el maquillaje cosmético es una solución superficial para cubrir o disimular algunas afecciones de la piel sana, porque una piel enferma o con problemas la trata la medicina.

Algunas afecciones que se pueden mejorar con el uso adecuado de cosméticos y maquillajes son:

Sequedad. Es una condición que aparece como consecuencia de la falta de humectación en algunas zonas de la piel. Al mismo tiempo, con el paso del tiempo las ceramidas que son los factores que aportan humedad naturalmente a la piel, empiezan a decrecer. Además, influyen otras cuestiones, como el uso de jabones fuertes o la exposición al sol.

Exceso de grasa. Cuando la piel se pone exageradamente brillosa, grasosa o con rastros de acné, las causas pueden ser varias: desde factores hereditarios, estrés, mala

alimentación, falta de higiene, uso incorrecto de cremas u otras sustancias, etc. Es importante cambiar algunos hábitos y acudir a con un profesional para que nos recomiende alguna solución.

Ojeras. En inglés, se les dice ―círculos debajo de los ojos‖ y eso es exactamente lo que son las ojeras. Aparecen por falta de sueño, problemas de pigmentación debajo de los ojos, o por piel demasiado delgada o gruesa en esa zona. También, pueden aparecer como consecuencia de causas genéticas. Las ojeras aparecen por cansancio, la primera medida que hay que tomar es dormir más. También, se pueden utilizar cremas reparadoras para ojos.

Labios secos o agrietados. Sucede por lo general durante los meses de invierno o en zonas geográficas muy frías, que los labios se resecan e incluso pueden llegar a lastimarse. También, es común en los niños que respiran por la boca, ya sea por cuestiones alérgicas o por una cuestión de hábito, en las personas obesas y en aquellos que constantemente se lamen los labios. El tratamiento más efectivo es utilizar un bálsamo labial o un gel a base de petróleo (vaselina). Es conveniente humectar los labios por la noche, antes de ir a dormir, ya que pasarán varias horas sin comer o beber (al comer o beber, desaparece el bálsamo).

Imperfecciones del color. Algunas de ellas son hereditarias, se llaman entonces manchas de nacimiento. Pueden ser claras, despigmentadas, coloreadas ―tipo café con leche‖, rojizas (angiomas). Otras son por dermatosis adquiridas. Las manchas blancas del vitíligo (desaparición localizada de la pigmentación de la piel) son benignas pero antiestéticas, son sobretodo visible en las pieles mates. Las manchas oscuras son debidas a las exposiciones solares excesivas, son muy frecuentes en los embarazos, de ahí el nombre de manchas del embarazo, pero también aparecen

en mujeres no embarazadas y algunas veces en los hombres.

Lunares. Son crecimientos de la piel generalmente marrones o negros, que pueden crecer solos o en grupo. Los adultos tienen un promedio de 40 lunares en todo el cuerpo. Aparecen por causas naturales, aunque existe una predisposición genética y el daño del sol en la piel puede aumentar la pigmentación o el desarrollo de los lunares.

Verrugas. Son crecimientos de la piel causados por el papiloma humano (HPV), que genera la aparición de pequeñas capas sobresalientes de piel, principalmente en los dedos, en las manos o los pies. Las verrugas se contagian de persona a persona, a través del contacto directo con una persona que posee el HPV.

Acné. Es uno de los problemas de piel más comunes, es causado por cuatro factores: exceso de grasa, poros tapados, aparición de bacterias e inflamación. En los adolescentes, el acné aparece por un dramático aumento de la oleosidad en la piel, como consecuencia del incremento hormonal.

Vello facial excesivo (hirsutismo). En las mujeres, puede suceder que aparezca un exceso de vello en la cara, como consecuencia de una cuestión hormonal. Es muy común, también, en mujeres con síndrome ovárico ―policístico‖, que ocurre cuando los óvulos no son liberados de los

ovarios

y

en

su

lugar

se

forman

múltiples

quistes.

Eczema. Es una erupción cutánea que aparece en ocasiones con las alergias estacionales (al pasto, comidas, productos aromáticos, exposición al sol o factores hereditarios) en la cara, cuello, antebrazo y detrás de las rodillas. Se puede fortalecer la piel aplicándose una loción humectante después del baño, cuando la piel todavía está húmeda, para mantener la humedad en la piel.

Fundamentos morfológicos del rostro.

Es importante conocer y observar la morfología del rostro, ya que es el punto de partida a la hora de maquillarse. Identificar las proporciones y dimensiones del rostro nos ayuda a definir cuáles son las correcciones y el visagismo que debemos realizar.

es importante definir que el rostro o cara, es una estructura ósea aplicada a la parte anteroinferior del cráneo. Sus límites superior e inferior son la frente y el mentón, y los límites laterales son las orejas. El macizo facial está organizado en dos mandíbulas, una superior y otra inferior. La mandíbula superior se compone por trece huesos, pares todos ellos excepto uno, el vómer. En cambio, un solo hueso constituye la mandíbula inferior: el maxilar inferior.

Tipos de rostro.

El rostro humano guarda una simetría y una proporción en sus formas. Simetría, porque podemos dividir el rostro por una línea perpendicular y obtener dos partes con los mismos elementos en la misma posición. Cuanto más acusada es la simetría en un rostro, más sano y bello se considera de forma instintiva.

Conocer la forma del ovalo facial es importante para identificar los aspectos favorables. Lo primero es observar las partes que destacan del rostro, desde la implantación de los cabellos hasta la raíz de la nariz, de la raíz de la nariz a la base y desde la base de la nariz a la punta del mentón.

Para tener una visión más objetiva de las correcciones de rostro hay que imaginar la línea geométrica de los distintos óvalos faciales en relación a los contornos de algunas figuras geométricas.

Rostro ovalado. Es el rostro que ofrece una mayor belleza, también el que más se ajusta a los cañones clásicos de la belleza, permitiendo total libertad al maquillador, tanto en el trazo como en el color.

Para enfatizar los rasgos, tenemos que colocar un tono más obscuro debajo de los pómulos y con un tono más claro sobre ellos para resaltarlos, finalizamos con el rubor entre los dos colores y en la punta de la nariz y mentón para devolver los perfiles. Este tipo es considerado como el ―ideal‖.

Ovalo oblongo o alargado. El rostro alargado no tiene la suave pronunciación del ovalado, ni la rigidez de las líneas del rectangular. La forma de rostro perfecta es la oval y nuestro objetivo será conseguir ese efecto en el rostro.

Correcciones: 1- Aplica oscuridad en los extremos del rostro: frente y barbilla. 2- En la zona de los huesos del pómulo traza líneas rectas desde mitad de las orejas en dirección a las aletas de la nariz.

Rostro redondo. El rostro redondeado se caracteriza por su forma más bien circular. Es un rostro ancho y dilatado que resulta de la misma configuración cráneo facial, por el exceso de peso o de la suma de ambas características. Presenta la zona de las mejillas con bastante volumen, por lo cual

debes hacer hincapié en marcar pómulos y sienes para crear profundidad y de ésta manera conseguir ese aspecto de rostro ovalado que tanto favorece.

Correcciones: 1- La oscuridad partirá desde la mitad de las orejas en diagonal descendente hacia las comisuras de la boca. Puedes hacerlo con base de maquillaje dos tonos más oscura en tono marrón medio. 2- Ilumina los pómulos altos y la barbilla con iluminador, corrector o base de maquillaje un tono más claro que el tono de la piel para crear volumen y contraste. 3- Oscurece maxilar y sienes. 4- Para favorecer a que este tipo de rostros se vea más ovalado, cuando maquilles los ojos evita dibujar formas redondeadas, simplemente rásgalos. 5- Las cejas también son fundamentales, evita que las cejas se vean semicirculares, perfílalas rectas.

Rostro cuadrado. Las características más importantes es que sus tres zonas tienen aproximadamente la misma longitud, predominando ligeramente la zona inferior. Predominan las líneas rectas y angulosas.

Correcciones: 1- Emplea un tono oscuro en los laterales externos del rostro para modelarlo. Sienes, huesos de pómulos y zonas salientes de la mandíbula. 2- Para evitar las formas angulosas el color se aplica en la zona de las mejillas haciendo una forma levemente redondeada. 3- También evita marcar los ojos en forma rasgada para no acentuar ángulos y armonizar la morfología del rostro. 4- Es aconsejable que las personas con rostro cuadrado eviten los peinados con volumen en sus laterales.

Rostro rectangular. Se caracteriza por su frente generalmente larga y estrecha, mejillas alargadas y maxilares anchos y mentón amplio. Se debe corregir longitud sin alterar la armonía de su forma. Presenta pesadez en la línea de la mandíbula y pómulos con poco relieve.

Rostro triangular. Se trata de un rostro de frente ancha, mejillas alargadas y mentón largo y estrecho. Por lo general los pómulos están acentuados y la barbilla o mentón es prominente. El maquillaje debe contrarrestar la forma de triángulo, buscando un equilibrio a base suaves líneas ascendentes que redondeen los ángulos.

Correcciones: 1- Para compensar aplica en la zona del maxilar base de maquillaje, iluminador o un corrector un tomo más claro que el tono de la piel. 2- De las sienes para arriba y a los laterales aplicar tono marrón medio o base de maquillaje dos tonos más oscura que el tono de la piel. 3- Usaras el mismo tono oscuro para disimular la barbilla prominente. 4- Utiliza un tono claro para crear volumen en las mejillas, difuminándolo en el lugar sin llevar hacia las sienes. 5- Siempre fija las correcciones que hagas en crema o con productos fluidos con polvos compactos en tono claro para reforzar la sensación de volumen.

Tipos de ojos. Ojos normales o almendrados: Este tipo de ojos es la forma más común, su nombre se debe a la forma parecida que tiene con las ―almendras‖. Si tienes una

forma

como

esta,

eres

muy afortunada porque

cualquier estilo de maquillaje le sienta bien a tus ojos normales o almendrados. Otra característica especial es que los bordes externos de este tipo de ojos se inclinan ligeramente hacia arriba.

Ojos juntos o estrechos: Una característica para reconocer este tipo de ojos, es que tienen una distancia un tanto estrecha entre sí, cuando ésta es menor a la extensión de un ojo. Es decir, que los ojos son juntos. En pocas palabras es una cuestión de proporción.

Ojos apartados o separados: Se podría decir, que son fáciles de reconocer ya que son opuestos a los ojos estrechos o juntos. En pocas palabras son ojos que se ven pequeños con respecto al resto de los rasgos faciales ya que la distancia que los separa es mayor que la extensión de un ojo.

Ojos hundidos: Una característica súper sencilla de reconocer es que por lo general, el párpado tiene la tendencia de ser más prominente en el borde externo, que en el interno. Este tipo de ojos es lo opuesto a los ojos prominentes o ―saltones‖. En pocas palabras, presenta una sombra o ―bolsa‖ aparente en la esquina interior de los ojos, o un hueco debajo del hueso de la ceja.

Ojos saltones o prominentes: Son conocidos comúnmente como ojos saltones, por su prominencia es decir ―abultamiento o elevación‖ con respecto al nivel del rostro. Es muy fácil de identificar, la idea con lo maquillaje es hacer uso de técnicas que permitan que estos sean menos visibles y qué visualmente se puedan disimular.

Ojos asiáticos o alargados: Este tipo de ojos son más pequeños que los demás forma de ojos. La idea con el maquillaje es hacerlos lucir más grande y a su vez darle profundidad. Son fáciles de reconocer, en pocas palabras los pliegues de los párpados no son visibles, por lo que generalmente se ve un espacio mayor entre la ceja y los ojos.

s

Ojos caídos: Los ojos caídos, tienen esta apariencia cuando el párpado móvil parece ejercer peso sobre el ojo estando abierto. Tome en cuenta que algunos rostros asiáticos tienen este tipo de ojos.

Ojos pequeños: Si tienes este tipo de ojos te darás cuenta, porque son de un tamaño pequeño. Son ojos que se tienen un tamaño reducido o pequeño con respecto al resto de los rasgos faciales, la idea es hacerlo lucir más grande visualmente.

Ojos grandes: Si tienes este tipo de ojos te darás cuenta, porque son más grandes que el promedio. Son ojos que sobresalen con respecto al resto de los rasgos faciales, la idea es hacerlos lucir más equilibrados visualmente.

Tipos de cejas. Las cejas son el elemento expresivo por naturaleza, ya que pueden cambiar la expresión de los ojos y el rostro. Durante el desarrollo de nuestra evolución histórica el diseño de la ceja ha sido crucial y podemos identificar épocas, lugares y modas de acuerdo al estilo de cejas que utilizaban las mujeres. Por ello es importante aprender a diseñar un estilo que vaya de acuerdo a los rasgos de cada tipo, buscando lograr un equilibrio natural.

Diferentes formas de cejas:

Cejas planas: Son cejas en forma horizontal y hacen que la cara se vea más corta y más ovalada.

Forma de S: Da una apariencia profesional y va perfecto en rostros con forma ovalada o cuadrada.

Ángulo suave: El arco de la ceja es natural y suavizado. En su forma es similar al ángulo pronunciado.

Ángulo pronunciado: Levanta la mirada haciendo lucir el rostro muy bien tiende a proporcionar ―juventud‖.

Ceja redondeada: Suaviza visualmente el rostro y ayuda a bajar los rasgos más fuertes como barbilla puntiaguda o la estructura ósea angular o muy fuerte.

Trazo y depilación.

Es importante distinguir el inicio, el final y el vértice de las cejas. El comienzo de la ceja debe pasar por una línea vertical imaginaria que une la aleta de la nariz con el lagrimal, si la línea no encuentra el inicio de la ceja para estar muy alejado,

entonces

tenemos

unas

cejas

excesivamente depiladas o separadas entre sí, lo que no es recomendable. Por el contrario si el pelo de la ceja crece más hacia adentro del rostro entonces tenemos unas cejas muy juntas.

El final de la deja empieza desde la mitad hasta el extremo exterior de esta, en un rostro proporcionado debe ser más fina que al inicio y al trazar una línea horizontal el inicio y el fin debe estar apoyados sobre esta. El vértice corresponde a la zona donde la ceja presenta su punto más alto.

Tipos de nariz. Esta protuberancia fundamental para el sentido del olfato que se compone de huesos y cartílagos tanto duros como blandos no siempre tiene la misma apariencia ni características, por eso con el paso de los años se han extendido expresiones al respecto para identificar con facilidad a las distintas clases de narices que pueden distinguirse en la fisonomía del humano.

Técnicas para corregir la nariz.

Nariz corta. Un toque más claro en la punta y aletas de la nariz funciona bien.

Nariz larga. Aplica fondo de maquillaje más oscuro y un toque claro en la curvita de las alas de las narinas.

Nariz gruesa: Para corregir este tipo de nariz, se deben utilizar correcciones oscuras en los laterales y punta de la nariz, y claras en la parte media desde el entrecejo sin llegar a la punta. Los ojos deben aparecer bastante marcados. Las cejas deben maquillarse oscuras, espesas y separadas del entrecejo y el labio superior irá grueso y marcando poco el corazón, hay que usar tonos fuertes y nacarados.

Nariz fina: Para corregir la nariz fina hay que aclarar los laterales y oscurecer la parte media hasta la punta de la nariz. Los ojos deben maquillarse con tonos suaves, hay que dejar las cejas finas y lo más aproximadas posible al entrecejo, y el labio superior fino y bien marcado el corazón en triángulo. Para maquillar los labios se deben usar tonos suaves y mates.

Nariz aguileña: Las correcciones para la nariz aguileña deben ser las oscuras en el caballete y punta de la nariz, y en el espacio que queda en medio se debe utilizar una corrección clara. Los ojos deben estar muy definidos y bien marcados. Hay que acentuar lo más posible las cejas y maquillar prominentemente la boca.

Cuando hay una nariz grande sobre una cara larga la alarga más, y cuando hay una nariz pequeña sobre una cara grande la agranda más. Toma en cuenta que una nariz grande envejece la apariencia, mientras que la pequeña la rejuvenece.

Tipos de boca.

La boca es el conjunto de dos labios y comisuras que se encuentran entre la nariz y el mentón.

Boca grande. Se considera una boca grande cuando las proporciones estéticas parecen desequilibradas. Para disimular el tamaño el maquillista puede delinear el labio inferior con un trazo ancho para disminuir el volumen.

Boca pequeña. Si por el contrario el trazo de la boca y los labios es escaso para el equilibrio estético, ayuda trazar una línea en el labio superior con trazo normal, mientras el inferior se delinea con un trazo ancho por fuera de su línea natural. Usaremos barra de labios en tono lila fuerte para resaltarlos.

Los labios también juegan un papel muy importante en la configuración de la cara, son parte fundamental del maquillaje y no todos los tipos de labios, se maquillan igual.

Labios gruesos. Perfilar el contorno por debajo del borde natural de los labios. Si lo que se quiere es disimular el grosor, no se deben utilizar colores demasiado brillantes.

Labios finos. Perfilar el contorno por encima del borde natural, forzando levemente su anchura con tonos más claros y brillantes.

Labios desiguales. Tapar con el maquillaje claro todo el labio y perfilar rectificando sobre uno de los labios hasta conseguir la simetría deseada; si es demasiado grueso se hará más fino, y viceversa

Labios caídos. Disimular las comisuras con un maquillaje de fondo más claro que el utilizado para el cutis. Hacer un trazo normal en el corazón del labio superior, extendido hacia la comisura y acábalo 1mm antes de llegar a esta. Perfilar el labio inferior y alarga el trazo hasta que se junte con el superior.

Labio grueso arriba y fino abajo. Delinear el labio superior sobre su línea natural y el inferior con formas redondeadas por fuera de su forma natural.

Labio fino arriba y grueso abajo. Delinear el labio superior por fuero de su forma natural con formas redondeadas para dar sensación de volumen y el labio inferior sobre su línea natural.

Fundamentos teóricos del maquillaje.

En la industria cosmética existe una diversidad de marcas que ofrecen una gran variedad de pigmentos y maquillajes con diferentes texturas, pero debemos de tener en cuenta que no es importante tener una cantidad excesiva de cosméticos, si no tener solo los necesarios para sacarles provecho.

Para lograr un maquillaje de aspecto profesional, hay que seguir una rutina simple y a la vez elaborada. Además es importante hacer notar que para lograr los efectos deseados hay que utilizar productos de excelente calidad y adquirir la habilidad para aplicarlos mediante la práctica continua.

Cosméticos esenciales.

Correctores. Los correctores son productos en barra, lápiz, compactos o crema con cierta densidad que se diseñan específicamente para ser aplicados en pequeñas áreas o puntos concretos. Sirven para disimular imperfecciones tales como: las ojeras, pigmentaciones, cicatrices, telangiectasias, secuelas de acné o comedones, también funcionan para perfilar y contornear el rostro.

Como bien lo menciona Loccoco (2009) hay que tomar en cuenta que al hacer correcciones, el rostro cambia en su forma y volumen; esto se logra utilizando correctamente las distintas tonalidades de correctores existentes. Para aplicarlos es mejor la regla de oro ―menos es más‖, todo con medida. Los correctores cumplen la función de camuflaje pero si se aplica más de la cuenta, se obtiene un efecto equivocado. El corrector debe aplicarse antes de la base de maquillaje y difuminarse con ligeros golpecitos con el dedo anular o una brocha específica para este propósito.

Los correctores similares al tono de la piel sirven para dar luminosidad al rostro o para cubrir ojeras. Se pueden utilizar diariamente sobre las áreas oscuras del rostro.

Corrector verde: Sirve para disimular las zonas rojas del rostro o los comedones.

Corrector morado: Este tipo de corrector sirve para disimular pigmentaciones cafés como las cicatrices. Hay que usarlo con cuidado y difuminarlo muy bien.

Corrector azul: las mujeres con pieles oscuras o negras, utilizan los correctores azules para obtener una piel más pareja. También ayuda si por el uso de autobronceadores, la cara presenta manchas color naranja.

Corrector naranja: es lo contrario al corrector azul, debe aplicarse si la piel es tan blanca o transparente que hace que las venas azules sean más notorias.

Corrector amarillo: Se utiliza para cubrir las ojeras violáceas, los golpes, la zona alrededor de la nariz que tiende a oscurecerse y para algunas manchas de la edad.

Corrector rosa: Se recomienda cuando la piel blanca es opaca, un corrector rosa le dará vida como iluminador.

Corrector blanco o iluminador: Se utiliza para dar luz a la cara y crear volumen.

Corrector café: Se utiliza para perfilar y rectificar algunas zonas del rostro, tales como los pómulos, frente, nariz y mentón (Loccoco, 2009).

Figura 31. Correctores

Bases. Las bases de maquillaje son exactamente eso; la base de un rostro perfecto, son de naturaleza más fluida y sirven para fondear superficies completas, sugiriendo un color uniforme y primario.

El propósito es unificar el tono y cubrir ciertas imperfecciones, por lo tanto mejora el aspecto superficial de la piel del rostro. Existen de diferentes texturas, presentaciones y colores, de mínima o máxima cobertura la debes elegir conforme a tu tipo de piel y necesidades.

Cremosa: tiene una estructura más pesada y grasosa que la líquida y está indicada para las mujeres de piel seca. Cubre más pero también se nota más a simple vista.

Líquida: se esparce con mayor facilidad y otorga una textura muy suave y fina. Suele tener componentes que hidratan y nutren la piel.

Compacta: es la combinación de base en polvo y en crema. Es la menos traslucida de todas y hay que tener cuidado de no aplicarla en exceso pues se nota mucho (Casinni, 2010).

Figura 32. Bases

Polvos. Hay dos tipos de polvos los compactos y los polvos sueltos, pueden ser del color de tu piel o translucidos, sus dos funciones principales son controlar el brillo de la cara y sellar la base, este último es un procedimiento que sirve para prolongar el tiempo de estos productos sobre la piel (Loccoco, 2009).

Polvos compactos, vienen en una presentación compactada, que suele traer en su estuche una esponjita para su aplicación, se utilizan más que todo para retocar el maquillaje o reforzar la base para mayor cubrimiento. Para que cumplan su función el color debe ser del tono natural de la piel teniendo en cuenta que este no es igual durante todo el año. Se aplica con toques ligeros de manera uniforme por todo el rostro precisando con más producto en las zonas más grasosas de la cara.

Los polvos sueltos son de aspecto translúcido, se aplican con una brocha después del maquillaje. La forma correcta de aplicación, es con movimientos suaves de arriba hacia abajo, y por todo el rostro (párpados, cuello, nacimiento del pelo, y orejas). Además de fijar el maquillaje ayudan a la piel grasa, ya que también eliminan el brillo (Dahiana, 2011).

Figura 33. Polvos

Sombras. El objetivo de las sombras es acentuar la profundidad y dimensión de los ojos y a su vez aportan un efecto de luz y las podemos encontrar en diferentes presentaciones. Las sombras son las encargadas de aportar el color en el maquillaje, el uso apropiado de las armonías cromáticas utilizadas puede ser el éxito de un gran maquillaje. Las sombras vienen en una gran cantidad de colores y presentaciones:

En crema: son muy fáciles de aplicar, pero tienen una desventaja, con el calor de la piel se ―ablandan‖ y quedan acumuladas en los pliegues del párpado. Las mujeres con piel grasa deben descartarlas definitivamente.

En lápiz o crayón: se colocan haciendo varias pasadas suaves y luego se difumina con una brocha con pequeños golpecitos. Con ellas se logra una alta concentración del color. Suelen tener las misma desventajas que las que vienen en crema.

Compactas: son las más utilizadas, permanecen intactas por varias horas y tienen una excelente cobertura. Resultan ideales para todo tipo de piel.

Figura 34. Sombras

Delineadores para ojos. El delineador de ojos además de definir y profundizar el ojo, resaltando la mirada. Quizá la técnica de delineado es la que requiere más habilidad manual, pues se necesita seguridad y firmeza para hacer los trazos adecuados.

Existen diferentes tipos de delineadores, pero básicamente todos cumplen la misma función.

Liquido: Son perfectos para conseguir un impacto fuerte en la mirada. Son los más intensos del mercado, y le dan mucho dramatismo al ojo. Empieza siempre de adentro hacia afuera, y prueba con las diferentes puntas que existen en el mercado: pincel, plumón o brocha.

Lápiz: Son los más comunes. Sirven para delinear fácil y rápido todo el contorno del ojo, y pueden ser utilizados en la parte de adentro del párpado. Los hay de diferentes colores, grosores y texturas.

Gel: Son el punto intermedio entre los lápices y los líquidos. Se aplican con una brocha y puedes jugar con ellos para lograr una mirada muy intensa. Pintan menos fuerte que los líquidos, pero son más fáciles de manejar. Son ideales para las que buscan delinearse la parte de adentro de los ojos (Saracho, 2004).

Figura 35. Delineadores

Máscara de pestañas. La máscara de pestañas es una clave muy importante para un buen maquillaje, ya que oscurece, le da espesor y define a las pestañas. Existe una gran diversidad: a prueba de agua, de colores, con humectantes, etc. pero lo importante es saber para que funcionan los diferentes tipos de cepillos ya que cada uno ofrece un efecto diferente.

Cepillo curvo: este es ideal para obtener una curvatura perfecta ya que tiende a las levantar las pestañas.

Cepillo grueso: su función principal es dar volumen y espesor a las pestañas.

Cepillo delgado: su principal utilidad es alargar las pestañas.

Cepillo tipo peine: son recomendados para separar y definir las pestañas.

Cepillo con cerdas separadas: da longitud a las pestañas abundantes.

Cepillo con forma triangular: Al tener la punta más fina que el resto, el extremo exterior se alarga más que la zona del lagrimal.

Cepillo con forma de bola: Puedes pasarlo en cualquier ángulo y pintará las pestañas por igual (Belika, 2012).

Figura 36. Máscaras para pestañas

Labiales. El pintalabios, lápiz labial o lipstick, es un producto cosmético que contiene pigmentos, aceites, ceras y emolientes que dan color y textura a los labios. Los labiales son un sinónimo de lo femenino, son útiles para resaltar los labios con un toque de color y existen de larga o corta duración, mates o con brillos, con color, translucidos o en diferentes presentaciones.

En barra: es el clásico y tradicional. Resulta ideal para labios secos porque la barra es rica en nutrientes. Algunos de ellos son de larga duración.

En crema: proporcionan un acabado más cremoso y brillante, aunque generalmente son de poca duración.

Líquidos: es el menos utilizado ya que dura muy poco, y se aplican con un pincel. Los tonos pueden ser transparentes o bien colores plenos pero con mucho brillo. Este tipo de labial esta aconsejado para bocas pequeñas o de labios finos, ya que el brillo da volumen.

Delineadores: los delineadores son lápices de color muy fáciles de usar, vienen en una amplia gama y su función principal es delinear y perfilar los labios para disimular o corregir posibles asimetrías (Casinni, 2010).

Figura 37. Labiales

Blush o rubor. Antiguamente llamado colorete. Su función principal es dar color a las mejillas y sirve como complemento perfecto para el maquillaje. En la actualidad existen diferentes presentaciones.

Compacto: es el más común de todos ya que es el más fácil de utilizar, está especialmente indicado para piel grasa. Se aplica con una brocha especial y tiene larga duración.

Cremoso: por su textura es favorable para pieles secas. Se aplica con una esponja suave (latex) dando pequeños golpecitos en las mejillas o bien se puede aplicar con la ayuda de los dedos.

Gel: funciona excelente para todo tipo de piel ya que le dará un aspecto muy natural. Al igual que el rubor en crema se aplica con una esponja de látex o con la ayuda de los dedos.

Liquido: el blush líquido es el menos utilizado, ya que es el más difícil de manejar, una vez puesto sobre las mejillas hay que difuminarlo rápidamente para evitar dejar una mancha. Se aplica con una esponja de látex y es ideal para todo tipo de piel (Casinni, 2010).

Figura 38. Blush

3.1.2 Instrumentos y herramientas

Como bien ya se mencionó, en este ámbito existe un sinfín de productos e instrumentos, cada uno con características diferentes. Un maquillista profesional puede tener en su maletín, más de cincuenta tipos de brochas, pinceles y aplicadores. Cada pincel, según sea su forma, tiene una determinada función para aplicar el maquillaje.

Como aclaración, antes de explicaros los diferentes tipos de pinceles y brochas que existen en función de su aplicación, hay que hacer una diferenciación entre pinceles de pelo sintético y pinceles de pelo natural.

Los pinceles o brochas de pelo sintético son ideales para texturas grasas (bases de maquillaje, correctores, sombras de ojos en crema, etc…). Se lavan con cierta facilidad con detergentes y desengrasantes.

Los pinceles o brochas de pelo natural se utilizan con texturas en polvo (colorete, polvos sueltos, pigmento, etc…). Para que duren más y mantengan su calidad hay que utilizar solo jabones neutros o champú para que no pierdan su suavidad.

Figura 39. Pelo sintético o natural

Las brochas para maquillaje te ayudan a facilitar la aplicación de este en todo el rostro y las más importantes son las siguientes:

Brocha para correctores: es una brocha de cerdas sintéticas, se utiliza en lugar de los dedos para aplicar y difuminar los correctores de manera más precisa.

Brocha para base: brocha de cerdas sintéticas, facilita la aplicación de la base de maquillaje ya sea liquida o en crema, dejando un acabado uniforme y natural utilizando solo el producto necesario.

Brocha para polvos: brocha de pello natural, está es ideal para repartir por todo el rostro los polvos de maquillaje ya sean compactos o sueltos.

Brocha para blush: una brocha angular (corte biselado) de pelo natural, siempre es perfecta para la aplicación del blush de forma muy precisa marcando la parte inferior del pómulo, dando así más definición a tu rostro.

Brocha para sombras: existen una gran variedad para aplicar sombra, pero estas son las dos básicas:

Brocha ancha: es ideal para aplicar la sobra por todo el parpado móvil. Usualmente se utiliza con colores claros.

Brocha para difuminar: sirve para difuminar los tonos, con esta se aplica mejor las sombras oscuras en la cuenca de los ojos y es básica para los smokey eyes.

Brocha para cejas: pincel de pelo natural y biselado. Esta brocha es ideal tanto para aplicar el delineador en gel como para rellenar las cejas por su acabado biselado.

Cepillo para cejas: con este lograras dar forma a las cejas, antes de maquillarlas.

Rizador de pestañas. Es un dispositivo mecánico con la finalidad de darle forma a las pestañas. Hoy en día hay un sinfín de marcas, pero asegúrate que sea curvo por la parte de adentro y que se adapte bien a la forma de tu ojo.

Existen otros aplicadores que pueden ser de mucha utilidad en el proceso del maquillaje.

Esponjas: Se utilizan con mucha frecuencia para aplicar y extender la base de maquillaje, difuminar y corregir, pues al hacer esto con las manos no se conseguiría un resultado tan limpio y uniforme.

Puedes encontrarlas de distintos materiales como:

Esponja de látex: se usa para aplicar casi todos los productos de base de maquillaje, permitiendo una buena aplicación fija y uniforme. Si se desea un resultado más natural se puede humedecer la esponja. El único inconveniente que tienen es que absorben mucho producto.

Esponja sin látex: se puede utilizar tanto húmeda como seca para todo tipo de maquillajes. Su forma facilita llegar a las zonas más difíciles. Consigue un acabado uniforme. Es antialérgica e inodora.

Borla de polvos: generalmente son de algodón aterciopelado, y presentan una tira de raso en una de sus caras para mejor agarre. Las más grandes se usan para aplicar polvos traslúcidos y matizar brillos. Se deben usar sobre todo cuando queremos aplicar una capa más gruesa de producto para que el matizado nos dure más. Las más pequeñas se emplean para obtener precisión.

3.1.3 Técnicas de maquillaje.

Para realizar un maquillaje exitoso es necesario conocer y dominar cuatro técnicas básicas: la preparación de la piel, la corrección de la base, la aplicación del color y el terminado o fijación.

1. Limpiar y preparar la piel puede hacer la diferencia en el resultado final del maquillaje. Para ello es importante conocer y utilizar los cosméticos más adecuados al tipo de piel y las distintas circunstancias, se pueden utilizar exfoliantes que eliminen las células muertas e impurezas, desmaquillantes, cremas hidratantes y tónicos.

Este proceso se resume en tres pasos: Limpiar: para remover el maquillaje y las impurezas, utilizando los cosméticos recomendados según el tipo de piel (normal, seca, grasa o mixta). Tonificar: para balancear la acidez de la piel y remover residuos. Hidratar: para preparar la piel antes de la aplicación del maquillaje.

2. Las correcciones con claroscuro ayudan a establecer un fondo ideal para lograr los efectos del maquillaje. Se pueden realizar sobre todo el rostro y dependiendo del área que se trabaje se puede lograr elevar o contraer ciertos volúmenes para corregir las formas generales. Las técnicas correctivas deben enfocarse en buscar desde el principio la armonía y el balance.

Los correctores no deben aplicarse excesivamente, pues el hecho de que haya que corregir alguna facción no significa que se deban eliminar áreas del rostro tajantemente, los correctores no se deben notar, deben suavizar o resaltar elementos importantes de la fisonomía y estructura facial, o bien tan solo sugerirlos.

Hay diferentes tipos de correcciones, las que utilizamos para cubrir imperfecciones como disimular marcas de acné, rojeces, cicatrices, ojeras o bolsas y las que hacemos para perfilar y definir el rostro.

Con la técnica claroscuro se busca remodelar las facciones del rostro mediante la aplicación intencional de distintos tonos de maquillaje. Con los claros se logra dar volumen o luminosidad a las zonas que lo precisan y con los tonos más oscuros se resta volumen para desviar la atención de esa zona o dar profundidad a aquellas que lo requieran.

Figura 40. Técnica del claroscuro

Cabe destacar que esta técnica no solo se aplica en la piel del rostro sino también este efecto se crea mediante la aplicación de sombras de diferentes tonos, intensidades y saturaciones, que acaban estructurando los ojos y corrigiendo su forma o creando volúmenes en los labios.

Los rostros redondos, cuadrados o triangulares de base ancha tienen como característica común el excesivo volumen de su parte inferior. Por lo tanto, la corrección será la de disimular y disminuir el volumen de las mejillas y de la

mandíbula. Es muy importante difuminar bien los límites entre ambos colores para evitar que se vean líneas de separación. La separación tiene que notarse, pero no verse, pues de lo contrario pasaríamos de la armonía a la máscara.

Los rostros alargados, en diamante o triangulares invertidos tienen algo en común, presentan un estrechamiento lateral muy acusado. La corrección debe encaminarse a acentuar, ensanchar y hacer sobresalir esta zona hundida.

Figura 41. Armonía mediante el maquillaje

Para hacer las correcciones del rostro hay que tomar en cuenta que el rostro se divide en nueve puntos: cinco pasivos y cuatro activos. Los pasivos dan expresión al rostro y los activos son los móviles.

Activos: cejas, ojos, mejillas y boca. Pasivos: frente, nariz, barbilla, cuello y orejas.

A la hora de maquillar debemos corregir el defecto en sí, ayudándonos además con el resto de los puntos; por ejemplo, cuando nos encontramos con una nariz pequeña debemos aclarar las cejas, aplicar poco colorete y maquillar los labios en tonos suaves.

En el maquillaje hay dos puntos que van relacionados entre sí las cejas con el labio superior y el mentón con el labio inferior. Por ejemplo, en la cara cuadrada las cejas y el labio superior irán en triángulo y el mentón y el labio inferior en cuadrado.

3. La aplicación del color es uno de los aspectos más importantes del maquillaje. El conocimiento de los principios de iluminación y la teoría del color puede ser muy útil. Igualmente, hay que tener en cuenta la armonía y el contraste de las distintas tonalidades en relación al color de la piel, los ojos, el cabello, etc.

Para dar carácter a un rostro o endurecer las expresiones de una cara, es importante realizar un maquillaje muy estructurado y en ocasiones exagerado. Generalmente se utiliza para resaltar los rasgos, por ejemplo para algún evento nocturno, con luces fuertes o artificiales o bien para resaltar el efecto teatral.

Trazos que le van a dar carácter al rostro: •

Formas rasgadas, puntiagudas y colores con carácter, tonos obscuros o colores cargados de pigmento.

•

Modelado y perfilado muy marcado por unos pómulos de rubor oscuro.

•

Ojos fuertemente subrayados (a menudo con un lápiz negro o dentro del párpado o aún fuera).

•

Un contorno de boca dibujado en un matiz más oscuro que la barra de labios.

Figura 42. Rostros con carácter

Para suavizar un rostro hay que evitar acentuar demasiado los contrastes. Al no marcar las expresiones, predominarán las formas redondeadas que tienden a dulcificar los rasgos. Para acentuar el efecto los colores deben ser en tonos suaves y difuminados. Esta técnica se recomienda para lucir natural con luz de día y en general para lucir bien en cualquier ocasión.

Trazos que suavizan el rostro: •

Las formas deben ser redondeadas y deben predominar los degradados.

•

Los pómulos deben colorearse con tonos luminosos y para corregir el modelado hay que hacerlo de forma muy suave y natural.

Figura 43. Rostros suavizados

4. Para finalizar un maquillaje es importante no perder de vista los detalles. El terminado profesional también se caracteriza por la fijación y duración de los pigmentos sobre la piel. Para fijar la base del maquillaje se recomienda utilizar los polvos traslúcidos, para que la piel no quede demasiado mate y el acabado sea más natural, modelando el rostro, cuello y escote, además de esta manera el tono queda más uniforme con el resto del cuerpo. Conseguir que el maquillaje permanezca perfecto durante muchas horas, requerirá de productos especiales que sean de mayor duración y tengan más fijación. Se puede utilizar un spray sellante al finalizar el maquillaje para asegurar que tenga larga duración y garantice la fijación en las condiciones más adversas.

3.1.4 Teoría del color.

El color en sí no existe, no es una característica del objeto. El color es una apreciación subjetiva de nuestro cerebro, resultado de la sensación que se produce en respuesta a la estimulación del ojo y de sus mecanismos nerviosos, por la energía luminosa de ciertas longitudes de onda.

Cuando percibimos un objeto de un determinado color, es que la superficie de ese objeto refleja una parte del espectro de luz blanca que recibe y absorbe las demás. Por ejemplo, un objeto de color rojo absorbe el verde y el azul, y refleja el resto de la luz que es interpretado por nuestra retina como color rojo.

Figura 44. Física del color pigmento.

Isaac Newton descubrió éste fenómeno en 1966. Observó que cuando un haz de luz blanca traspasaba un prisma de cristal, dicho haz se dividía en un espectro de colores idéntico al del arco iris: rojo, naranja, amarillo, verde, azul, añil y violeta.

El ojo humano puede distinguir entre 10.000 colores. Además se pueden emplear tres dimensiones físicas del color para relacionar experiencias de percepción con propiedades materiales: saturación, brillantez y tono.

En 1810 Goethe publicó su propia Teoría de los Colores y se convirtió así en uno de los primeros investigadores modernos en interesarse por la función del ojo y su interpretación del color. Su célebre teoría del color, la cual consiste en un grupo de reglas fundamentales sobre la combinación de los colores y sus efectos.

El círculo cromático es la representación gráfica del espectro lumínico, y nos sirve para observar la organización básica y la interrelación de los distintos colores.

Figura 45. Círculo cromático

En el círculo cromático podemos encontrar la relación cromática de los colores primarios: rojo, azul y amarillo. Son pigmentos que se consideran absolutos y que no pueden crearse mediante la mezcla de los otros Los colores secundarios: verde, violeta y naranja, se obtienen al mezclar partes iguales de dos pigmentos primarios; mientras que los colores terciarios: rojo violáceo, rojo anaranjado, amarillo anaranjado, amarillo verdoso, azul verdoso y azul violáceo se consiguen al mezclar partes iguales de un tono primario y de un secundario adyacente (Itten, 1961).

Propiedades materiales del color.

El tono: es la cualidad que define la mezcla de un color con blanco o negro., Si este tiende al blanco se dice que es un tono más claro, mientras que si tiende al negro, se dice que el tono es más oscuro.

Figura 46. Ejemplos de escalas tonales

El matiz: es el color en sí mismo. Las armonías entre los matices facilitan su clasificación en gamas, por ejemplo podemos reconocer: La gama de colores cálidos (rojos, amarillos y anaranjados). Aquellos que asociamos con el calor, la luz solar, el fuego... La gama de colores fríos (azules, verdes y violetas). Los colores fríos son aquellos que asociamos con el frío, el agua o la noche.

Figura 47. Colores cálidos y fríos

La brillantez: tiene que ver con la intensidad o el nivel de energía. Es la luminosidad de un color (la capacidad de reflejar el blanco), es decir, el brillo. Generalmente, con los tonos puros que tienen un valor más luminoso (amarillo, naranja, verde), se consiguen las mejores variantes claras, mientras que los tonos puros que tienen normalmente un valor normalmente menos luminoso (rojo, azul, violeta) ofrecen las mejores variantes oscuras.

La saturación: está relacionada con la pureza cromática o falta de dilución con otros pigmentos, incluidos el blanco y el negro. Cuanto más saturado está un color, más puro es.

Figura 48. Escala de saturación y brillo

Formas compositivas del color.

Ningún color puede ser considerado un valor absoluto, de hecho los colores se influyen mutuamente si se acercan. Los colores tienen diferente realce según el contexto en el que se dispongan o se encuentren.

Existen dos formas compositivas del color, la armonía y el contraste.

Armonizar, significa coordinar los diferentes valores que el color adquiere en una composición. Cuando en una composición todos los colores tienen una parte común al resto de los colores componentes. Armónicas son las combinaciones en las que se utilizan modulaciones de un mismo tono, o también de diferentes tonos, pero que en su mezcla mantienen los unos parte de los mismos pigmentos de los restantes.

En todas las armonías cromáticas se pueden observar tres colores: uno dominante, otro tónico y por último otro de mediación.

Dominante: Es el más neutro y de mayor extensión, sirve para destacar los otros colores que conforman nuestra composición gráfica, especialmente al opuesto.

El tónico: Es el complementario del color de dominio, es el más potente en color y valor, y el que se utiliza como nota de animación o audacia en cualquier elemento.

El de mediación: Actúa como conciliador y modo de transición entre cada uno de los dos anteriores, suele tener una situación en el círculo cromático cercano a la de color tónico.

Por ejemplo: en una composición armónica cuyo color dominante sea el amarillo, y el violeta sea el tónico, el mediador puede ser el rojo si la sensación que queremos transmitir sea de calidez, o un azul si queremos que sea más bien fría

Figura 49. Armonías

El Contraste se produce cuando en una composición los colores no tienen nada en común no guardan ninguna similitud, pero que sin embargo funcionan juntos en una relación que produce energía en vibraciones interesantes. El contraste creado entre dos colores será mayor cuanto más alejados se encuentren del círculo cromático. Los colores opuestos contrastan mucho más, mientras que los análogos apenas lo hacen, perdiendo importancia visual ambos.

Existen diferentes tipos de contraste:

Contraste de tono: Cuando utilizamos diversos tonos es decir el mismo color de base pero en distinto nivel de luminosidad, se denomina también contraste de claro/oscuro. El punto extremo está representado por blanco y negro, observándose la proporción de cada uno.

Contraste de color: Se produce por la modulación de saturación, cantidad y ubicación de un matiz. Por ejemplo cuando resulta de poner mucha cantidad de un color y otra más pequeña de otro. Dos elementos con el mismo color producen el mismo contraste dependiendo del color que exista en su fondo.

Contraste entre complementarios: Se colocan un color primario y otro secundario opuesto en el triángulo de color. Para conseguir algo más armónico, se aconseja que uno de ellos sea un color puro y el otro esté modulado con blanco o con negro. Los complementarios se encuentran simétricos respecto del centro de la rueda. El matiz varía en 180° entre uno y otro. Estos colores se refuerzan mutuamente, de manera que un mismo color parece más vibrante e intenso cuando se halla asociado a su complementario. Estos contrastes son, pues, idóneos para llamar la atención y para proyectos donde se quiere un fuerte impacto a través del color.

Figura 50. Colores complementarios

3.1.5 Recomendaciones profesionales.

Un buen maquillaje luce mejor cuando la piel está previamente preparada ya que este se adhiere mejor.

Para lograr el efecto deseado se pueden seguir las siguientes recomendaciones.

1.

Limpiar el rostro con el Gel Limpiador Extra-Confort de Germaine de Capuccini.

Esta sedosa espuma en textura gel, libera a la piel de impurezas, maquillaje y los restos de la contaminación ambiental, ofrece una limpieza profunda sin resecar la piel y le confiere una gran pureza, frescor y confort duradero.

Contiene una combinación de plantas originarias de distintas partes del mundo como: Shikakai de la India, Extracto de Semillas del Dátil del Desierto en África tropical y Raíces de Gypsophila del Mediterráneo, rica en saponinas.

Se debe aplicar sobre el rostro, cuello y escote humedecido masajeando en círculos hasta conseguir espuma y retirar con abundante agua, evitando el contorno de ojos.

2.

Como paso siguiente aplicar Refiner Essence, Fluido Exfoliante piel normal y mixta

de Germaine de Capuccini. Esta esencia exfoliante que retira las células muertas de la superficie de la piel y aporta luminosidad y suavidad inmediatas. Exfolia, purifica, minimiza el aspecto de los poros, hidrata e ilumina.

Formulado con Ácido Salicílico y Alfa-Hidroxiácidos, activo innovador hidratante en forma de red de azúcares y Phytocomplejo Stress-Reduction, originario de las semillas de mijo y fruto de importantes investigaciones en neurocosmética, es capaz de disminuir el estrés emocional que puede ocasionar en la piel la acción exfoliante de este producto.

Se recomienda aplicarlo por la mañana y/o la noche, según necesidades y tolerancia de la piel, con un algodón friccionando sobre rostro, cuello y escote. Evitar el contorno de los ojos.

3.

Y para finalizar aplicar Crema Hidratante no- estrés que hidrata, ilumina y

reconforta de inmediato a las pieles normales. Ayuda, además, a equilibrar el impacto que las emociones pueden llegar a provocar en la piel. Este producto se compone de Phytocomplejo Stress-Reduction, originario de las semillas de mijo, y un innovador ingrediente hidratante que garantiza el equilibrio natural de la piel, y se aplica sobre la piel limpia y renovada de rostro, cuello y escote.

Otra recomendación profesional es sustituir la base de maquillaje común por la BB Cream Natural Cover de Germaine de Capuccini o la BB Cream Perfectionist (Blemish Balm Cream) que es un auténtico tratamiento facial enriquecido con activos que favorecen la recuperación del nivel óptimo de hidratación,

aportan

alivio

y confort a

las

pieles

que presentan

imperfecciones como poros abiertos, asperezas, rojeces, comezón, aportando los beneficios de una base de maquillaje más una excelente hidratación.

Además para lograr la naturalidad de un maquillaje para uso diario, se recomienda utilizar colores sencillos, mates y suaves en los ojos, mejillas y labios, de preferencia marrones, cobres, anaranjados, es decir, tonos cálidos.

No se debe olvidar que una técnica de difuminado perfecto puede lograr los efectos de suavidad necesarios, por eso es muy importante tener las herramientas adecuadas para aplicar y difuminar los cosméticos como harían los profesionales.

Una vez que el maquillaje está terminado lo más recomendable es finalizar utilizando un sellador de maquillaje existen productos profesionales de diversas marcas comerciales o si se prefiere algo más natural se recomienda colocar agua de rosas o agua mineral en un atomizador y rosear el rostro a unos 20 centímetros. Una ventaja del agua de rosas son sus propiedades hidratantes, astringentes, ayuda a cerrar poros, a tonificar la piel, a calmar irritaciones y es ideal para todo tipo de piel.

Leidy Mahecha